Jun 16_08 Manteneos alegres, felices ante los acontecimientos.

Mensaje.

Mensaje de Dios Padre, a J. V.

 

Sobre: Seréis vosotros los que Me ayudaréis a poner ésas bases, y por eso, en vosotros Me confío.
Hijitos Míos, os pido Me concedáis vuestra vida, Me concedáis vuestro corazón, Me concedáis vuestros pensamientos, para que Yo pueda purificar todo aquello que esté en vosotros ó que salga de vosotros.

Vosotros, al haber abierto vuestro corazón a Mis Palabras, a Mis necesidades, al haber comprendido el por qué de vuestra estancia sobre la Tierra, al estar trabajando para que Mi Reino se difunda entre los hombres, habéis entendido las necesidades de Mi Corazón y las obligaciones de vuestra misión.

Os dais cuenta de lo mucho que hay que hacer todavía, para que se pueda consumar Mi Reino sobre la Tierra. Entendéis que el trabajo es mucho y los operarios van disminuyendo, se va acabando la Fe en el mundo, se va acabando el amor hacia Mí, vuestro Dios. Satanás sigue invadiendo todo lo creado y llegará a un punto en el que se creerá que él ha vencido, pero la Fe en corazones como los vuestros, es lo que hará ése resurgimiento de Mi Amor sobre la Tierra y es lo que va a hacer que Mi Amor y Mi Poder se manifieste ante todos los hombres.

Este tiempo de prueba en el que ya estáis, en el que veis que vuestros hermanos van abandonando sus obligaciones cristianas, os está llevando a que realmente valoréis de corazón todo lo que viene de Mí y lejos de apartaros de vuestras obligaciones y de Mi Amor, los que estáis Conmigo, os arraigaréis más y vuestra Fe crecerá.

Ciertamente serán momentos difíciles pero, Yo estaré con vosotros, os levantaré cuando caigáis, os daré lo necesario para que vuestro cuerpo se pueda mantener sano y podáis trabajar para Mí, vuestro Dios y para vuestros hermanos. Vuestra vida querrá ser arrebatada por los poderes del mal pero Yo, vuestro Dios, os estaré protegiendo y guiando en todo momento. Mucho amor habrá en vuestro corazón y ése amor será el que os protegerá contra las fuerzas de satanás, será una coraza fortísima contra sus acechanzas, él no puede hacer nada contra el Amor, por eso, éste es el tiempo del Amor, Mis pequeños, porque es el Amor en pleno, Mi Amor, el que luchará contra el odio de satanás y será vencido, como ya ha sido vencido tantas veces por Mi Amor.

El Amor transmitido por vosotros, los que estáis Conmigo, será un ejemplo valiosísimo, con el que muchas almas, al veros, regresarán a Mí. Aquellos que se habían apartado de Mis Leyes y de Mi Amor, al ver la fortaleza de Mis discípulos de éstos tiempos, de Mis apóstoles santos, harán que muchos, muchos regresen a Mí, porque sabrán valorar en ése momento lo que es la virtud y el amor de aquellos que Me siguen y querrán tener ésas características santas para poder salir adelante y sobre todo, para poderse soltar de las cadenas con que satanás los estará aprisionando.

Sí, Mis pequeños, seréis ejemplo grande ante vuestros hermanos de éstos tiempos, pero entended, que se tiene que mostrar el poderío de satanás en pleno, para que luego, Mi Amor y Mi Poder, lo aplasten. Confiad en Mí, vuestro Dios, no os desesperéis porque, si estáis Conmigo, seréis ésos instrumentos de salvación, no solamente para vosotros, sino para muchos de vuestros hermanos.

Mi Amor os irá guiando, Mi Amor, os irá protegiendo, Mi Amor irá purificando. Tened Fe, tened Fe en Mí, vuestro Dios y no caigáis en los errores de satanás, recordad que él es el maestro de la mentira y así, como ha envuelto a muchos de vuestros hermanos, os querrá envolver también a vosotros.

En Mí está la vida y la muerte, Yo puedo levantar aún a aquellos que hayan muerto y vosotros lo sabéis. Tened esto muy firme en vuestra mente y en vuestro corazón, ésta Verdad, así que no os preocupéis por vuestros seres queridos, si son llamados al sacrificio, Yo los podré resucitar y podrán tener la vida posteriormente.

Manteneos alegres, felices ante los acontecimientos, no lo veáis como algo triste y difícil, éste es solamente el preámbulo de una nueva vida y tomadlo así, no como destrucción, sino principio de una gran reconstrucción. Así como un edificio necesita unas bases firmes para que no se caiga, vosotros, los que estáis Conmigo, seréis las bases firmes del Nuevo Reino, de Mi Reino sobre la Tierra.

La sangre de los mártires, la lucha de aquellos que tienen Fe en Mí, las Verdades que Yo os he transmitido y que tenéis en vuestro corazón, pero sobre todo, Mi Amor, siempre han sido bases poderosísimas para el porvenir.

Así que, nuevamente os pido, alegraos, alegraos, Mis pequeños, de estar viviendo en éstos tiempos, tiempos de cambio, pero tiempos de poner las bases para los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas y ésas bases, serán vuestra Fe y vuestro Amor, vuestra fortaleza y vuestro afán de lucha por mantener lo Mío sobre la Tierra. Seréis vosotros los que Me ayudaréis a poner ésas bases, y por eso, en vosotros Me confío.
Gracias, Mis pequeños.