Jun 12_08(vesp) Los errores más catastróficos de ésta actual generación.

Rosario Vespertino

Temas:

  • Vosotros estáis presentes para Mí las veinticuatro horas del día, ¿cuánto Me dais vosotros de un día?, poco, muy poco ó prácticamente nada.
  • En estos momentos, vivís en una pobreza total, no sois en nada la imagen de vuestros Primeros Padres antes del Pecado Original.
  • Uno de los errores más catastróficos de ésta actual generación, es que estáis buscando los poderes y capacidades a los que el hombre no puede ni debe aspirar.
  • Es lo que os pido, Mis pequeños, que actuéis de acuerdo a lo que Mi Hijo os dejó en las Escrituras, Él vino a actuar, Yo os había dado la Palabra.
  • Lo que hagáis en la Tierra, se multiplicará en los Cielos, ahora, pensad e imaginad cómo queréis ser vistos en el Reino de los Cielos eternamente.
 

 

Mensajes de Dios Padre a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros estáis presentes para Mí las veinticuatro horas del día, ¿cuánto Me dais vosotros de un día?, poco, muy poco ó prácticamente nada.
Mis pequeños, mucho habéis recibido, ciertamente mucho habéis recibido si os comparáis con vuestros hermanos que viven en otras partes del mundo ó aquellos que viven dentro de vuestro mismo país, estado ó región. Veréis que mucho habéis recibido y no Me refiero solamente a lo material, a lo humano, sino a lo espiritual. Siempre lo espiritual va a sobrepasar y por mucho a lo material.

Cuando Yo os he dado, Mis pequeños, os he dado a manos llenas, es el alma la que va haciendo que éstas capacidades, éstos dones, virtudes, bendiciones, vayan creciendo en vuestro ser.

Si mucho se os ha dado, mucho tenéis qué repartir y así cuanto vayáis repartiendo, más se irá acrecentando en vosotros de lo que vayáis dando. Pero todo esto, Mis pequeños, os lo digo porque el compromiso es grande para Conmigo, habéis hecho un compromiso de amor, el cual se os pagará infinitamente en el Reino de los Cielos, pero el compromiso, al ser de amor, es para transmitir Mi Amor.

¡Oh!, Mis pequeños, si pudierais ver los corazones, si pudierais oír sus pensamientos, si pudierais ver por dentro a vuestros hermanos, os daríais cuenta de Mi dolor, comprenderíais los llantos de Mi Hija, la Siempre Virgen María, escucharíais el clamor del Cielo. ¡Oh!, Mis pequeños, veríais corazones vacíos, mentes materializadas, pecado supremo, ése es el dolor que tengo y quiero compartirlo con vosotros, porque ya habéis sido enseñados en el Amor y esto, para El Amor, duele mucho.

Vosotros mismos, cuando criáis a vuestros hijos, los amáis, les dais todo lo que podéis, de acuerdo a vuestras capacidades económicas y también de acuerdo a vuestras capacidades anímicas. Dais, dais, todo lo que podéis, porque ese hijo vuestro para vosotros, es una creaturita a la que amáis grandemente y la queréis consentir, porque la sentís vuestra.

Sí, Mis pequeños, ciertamente, en parte es vuestra creaturita y queréis hacer y dar todo por ella, entendedMe ahora, Mis pequeños, cada uno de vosotros, sois Mi creaturita, a la que amo infinitamente y así como a vosotros os pasa que queréis que ésa creaturita, tan pronto hable, os pueda decir, ése tan anhelado “papá” ó “mamá!”, con ése corazoncito sencillo, naciente, con ésa vocecita, que vosotros escucháis angelical, con esa mente que apenas se abre y que empieza a reconocer más a sus benefactores, vosotros os alegráis con ello, queréis que ésa creaturita os dé muestras que os reconoce y os ama y así vosotros os sentís alagados y dais más, porque estáis viendo que ésta creaturita, vuestro hijo, vuestra hija, se están dando cuenta ya, de vuestro amor hacia ellos y os sentís pagados con ésas pequeñas muestras de amor.

Yo, que espero lo mismo de vosotros, prácticamente no encuentro la respuesta de vuestro corazón, ésa es la tristeza para Mí, vuestro Dios y vuestro Padre, vuestro Creador, prácticamente no encuentro respuesta de amor de una gran mayoría de Mis hijos y ni aún de aquellos que se dicen estar Conmigo. Es tanto el olvido hacia Mí, vuestro Dios, que Mi Corazón se duele, Mi Corazón llora, ¿por qué sois así, Mis hijos?, ¿por qué sois tan ingratos, cuando todo lo que tenéis viene de Mí?, Yo que estoy velando por vuestras horas de vida, por vuestro sueño, por vuestro descanso, por vuestro trabajo, por vuestros bienes, por vuestros problemas, estoy pendiente en todas vuestras necesidades, las trato de aliviar.

Vosotros estáis presentes para Mí las veinticuatro horas del día, ¿cuánto Me dais vosotros de un día?, poco, muy poco ó prácticamente nada ó nada en muchos casos. Estáis tan ensimismados en vuestras cosas, en vuestros problemas, en vuestras obligaciones, en el mundo, que no hay cabida para Mí en vuestra mente ni en vuestro corazón, ¡cuánto dolor tiene Mi Corazón, Mis pequeños!

Venís a la Tierra a transmitir amor, a llenar los corazones de vuestros hermanos de amor, a destruir el mal que satanás ha sembrado por todos lados y ¿qué pasa en vosotros?, simplemente, nada, no os mueve el amor en vuestra vida. Estáis distraídos en tantas cosas que no os servirán para vuestra salvación eterna ni para salvar a vuestros hermanos, estáis desperdiciando tiempo Divino, porque vuestra vida es Mi tiempo, ¿qué estáis haciendo para destruir la maldad en el mundo?, prácticamente nada.

Os repito y os repito la misma lección, Mis pequeños, os amo, grito alrededor del mundo que os amo y que necesito de vosotros y Mi llamado, prácticamente no tiene respuesta. Me debéis todo lo que tenéis, todo es Mío y de eso ni siquiera os dais cuenta, no os estoy pidiendo cuentas de lo que Yo os doy para que podáis vivir, Soy vuestro Padre y os lo doy porque os amo. Os digo y os repito que lo material no es lo que importa en vosotros, lo necesitáis, ciertamente y os lo doy porque lo necesitáis, porque quiero que vuestra alma pueda misionar fuertemente sobre la Tierra y por eso os doy de todo lo material, para que podáis proteger a vuestra alma y pueda seguir mucho tiempo aquí sobre la Tierra misionando.

Lo que Me importa, Mis pequeños, es vuestra alma, ¿qué hacéis con ella?, ¿cómo la educáis?, ¿de qué la llenáis?, ¿cómo la alimentáis?, ¿cuántos frutos puede dar?

Eso es lo que Me duele, Mis pequeños, que la parte que os toca a vosotros por hacer, no la estáis haciendo bien, os estáis distrayendo con las cosas del mundo. El tiempo se os va pasando, vais creciendo y seguís como si nada, haciendo lo vuestro y Yo, a un lado de vuestra vida, sin que Me toméis en cuenta. Viene el último suspiro de vuestra vida, os presentáis ante Mí y es entonces cuando os dais cuenta de la nulidad de vuestra vida, de la nulidad de vuestra existencia sobre la Tierra, pero la oportunidad, se os pasó, no quisisteis entender los Evangelios, no quisisteis entender Mis advertencias, no quisisteis entender a vuestros hermanos que os llamaban la atención, no quisisteis entender ni escuchar a vuestro corazón, en donde Yo habito.

Mis pequeños, os pido recapacitéis, vosotros tenéis todavía vida, poca ó mucha, aprovechadla, dadMe lo que necesito, cambiad de mentalidad y ya no os deis al mundo, no busquéis las banalidades del mundo, no busquéis aquello que os está distrayendo y no os está dejando crecer espiritualmente y no estáis dando fruto grande para el Cielo.

Venid a Mí cuando os deis cuenta de la nulidad de vuestra vida, venid a Mí y pedidMe lo necesario para que Me quitéis Mi sufrimiento por las almas, las almas que están tan distraídas en el mundo y no están dando lo que deben dar. Venid a Mí, para que Mis Bendiciones, regalos espirituales, Mi Vida, tenga cabida en vuestro corazón y pueda hacer mucho por vosotros y por vuestros hermanos.

Meditad, ¿qué Me traeréis al final de vuestra vida?, meditad ahora, ¿qué habéis hecho por vuestros hermanos? Imaginad en éstos momentos que estáis ante Mí, inmediatamente después de vuestra muerte, estáis ya ante vuestro Juicio Particular, Yo os estoy preguntando el ¿qué hicisteis por Mí en el mundo?, ¿cuánto amor dejasteis?, ¿cuántas almas salvasteis?, ¿qué dejasteis de bueno entre vuestros hermanos?, ¿cómo les ayudasteis a crecer en la Fe y en el Amor?, ¿dejasteis virtud ó vicio?, ¿salvasteis ó destruisteis almas?, ¿disteis buen ejemplo y lo siguieron vuestros hermanos y seguirá la cadena de buenas obras por ello ó hicisteis el mal y dejasteis mal ejemplo y muchas almas quizá hasta se puedan condenar por vuestro mal ejemplo?

Sed sinceros, tomaos unos minutos y preguntaos todo esto y lo que Mi Santo Espíritu os quiera dar, para que realmente os deis cuenta en qué situación estaréis ante Mí en vuestros últimos momentos.

Ciertamente, para muchos de vosotros, serán momentos difíciles, momentos que no quisierais tomar, porque la vergüenza llenará vuestro ser, os daréis cuenta de vuestro error, os daréis cuenta del valor que es el vivir para Mí, vuestro Dios, os daréis cuenta que ésta Gracia tan grande que le doy a las almas, el don de la vida, es un regalo grandísimo al que vosotros no le habéis hecho caso. Tenéis un tesoro en vuestras manos, que es el don de la vida y no lo estáis aprovechando debidamente, no le estáis dando el valor debido en vuestra vida, en vuestros actos, en la respuesta que Me debéis dar a Mí, vuestro Dios, en agradecimiento por haberos Yo dado el don de la vida.

Recapacitad, entended todo esto antes de que os alcance el último momento, el último suspiro, cuando tengáis ya que estar frente a vuestro Creador.

Meditad todo esto, porque podréis encontrar mucho castigo, antes que mucha Gracia y agradecimiento a vuestra alma.

Entrad a vuestro corazón, sed sinceros, si sois humildes, vendréis a Mí y Me pediréis ayuda, para que Yo rehaga vuestra vida y os ayude a cumplir con lo que os he encomendado. Pedid ayuda, Mis pequeños, no os sintáis autosuficientes, mucho tenéis que dar todavía, muchas almas esperan por vuestra ayuda hacia ellos, no les desamparéis, dad, dad en abundancia, porque así como deis por ellos, Yo os lo pagaré al ciento por uno.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: En estos momentos, vivís en una pobreza total, no sois en nada la imagen de vuestros Primeros Padres antes del Pecado Original.
Hijitos, ciertamente en la naturaleza he puesto un orden. En la naturaleza, con los animales, éstos se rigen por el instinto, el animal, el insecto, el ave, van a hacer siempre lo que les he ordenado por el instinto y lo harán bien, porque no tienen el libre albedrío.

Os he puesto un gran ejemplo de orden con las abejas y con las hormigas y así otros animales, pero quiero tomar éstos dos ejemplos y que conocéis perfectamente, porque conocéis el orden. Con ellas, cada una de ellas, haciendo lo que deben hacer, según lo que les tocó hacer dentro del orden del panal o del hormiguero, lo que hacen, lo hacen bien y lo hacen  hasta morir, si hay que defender lo suyo, también lo harán hasta la muerte. Ese es el orden del instinto, ése es el poder del instinto.

A vosotros, Mis pequeños, os he dado el libre albedrío y vosotros, si quisierais alcanzar la perfección en vuestra vida, os debierais regir por Mi Voluntad.

Os podría decir, que ése es el instinto Divino que vosotros debéis buscar, Mi Divina Voluntad, es la perfección, la perfección en vuestra vida, la perfección en vuestros actos, la perfección del universo entero.

Cuando vosotros os regís por lo que Yo pongo en vuestro corazón, después de que vosotros Me regaláis vuestra voluntad, como lo hizo Mi Hija, la Siempre Virgen María, en ese momento, adquirís el instinto Divino y sois guiados por Mí, vuestro Dios, por Mis Potencias Divinas, por Mi Perfección Divina, por el Amor Divino.

Cuando vosotros os regís bajo Mí Voluntad, aprendéis a hacer perfectamente lo que debéis hacer en vuestra vida, conocéis plenamente para qué vinisteis, qué es lo que debéis hacer, cómo deberéis luchar contra los ataques de satanás, cómo podéis crecer fuertemente en Vida, en Virtud y en Amor, cómo podréis dar vuestro máximo para agradarMe a Mí, vuestro Dios.

Cuando estáis en Mí, adquirís potencias inimaginables, porque Yo Me derramo en vosotros y así, estando vuestro interior en orden, en un orden Divino, vuestros actos también estarán en un orden Divino.

Cuando Yo os he pedido que viváis en Mi Divina Voluntad, que buscarais vivir en Mi Divina Voluntad, es para que todo volviera al Orden Primario, porque vuestros Primeros Padres se salieron de él, no quisieron vivir más bajo Mi Divina Voluntad.

Ciertamente les dí el libre albedrío, pero en el estado de santidad en el que vivían debieron haber tomado Mi Sabiduría Divina y debieron haber seguido bajo el Amparo y bajo la Guía perfecta de Mi Divina Voluntad, pero la soberbia entró en su corazón, satanás entró a su corazón y quisieron tomar las riendas de su vida y debéis entender, Mis pequeños, que sois imperfectos, aunque Mi Creación es perfecta, nunca una creatura podrá ser como Yo, vuestro Dios. Ciertamente os doy capacidades inmensas, inconmensurables cuando estáis Conmigo, pero la perfección solamente es Mía. Cuando Yo os consiento, porque preferís estar bajo Mi Amparo y bajo Mi Guía, os voy llevando hacia la perfección, ciertamente, nunca la tendréis en totalidad, porque es prerrogativa Mía, pero os comparto de Mi inmensidad y con esto gozáis infinitamente vosotros. Con lo que Yo os consiento, Mis pequeños, podéis gozar en una forma inconmensurable y eternamente.

Vosotros, en vuestro libre albedrío, no queréis vivir bajo Mi Voluntad Divina y os estáis perdiendo de mucho, Mis pequeños. Seguís queriendo tomar la riendas de vuestra vida y vosotros sois demasiados pequeños para poder alcanzar las Bendiciones, Gracias y Dones con que Yo os puedo consentir, tendréis cosas buenas, pero nunca en la inmensidad de las que Yo os puedo regalar.

Entended esto, Mis pequeños, porque os confundís cuando satanás entra en vuestro corazón y os hace creer que sois autosuficientes, que ya no necesitáis de Mí, vuestro Dios y así os va separando de Mi Gracia, como lo hizo con vuestros Primeros Padres. Los engañó, estaban dotados de capacidades inmensas, inconmensurables, que no se han dado todavía en ningún hombre creado hasta ahora, no habéis llegado a la perfección que ellos tenían. Ciertamente, estáis recuperado dones que ellos tenían, pero nadie ha llegado al regalo que Yo puse en ellos. Fue lo máximo de la Creación, su Creación. Yo Me deleité en ellos y ellos pagaron así, traicionando Mi Amor, traicionando Mi Voluntad.

Estáis llamados, Mis pequeños a recuperar lo que ellos tenían y para ello, simplemente os pido que os dejéis hacer en Mi Divina Voluntad, que volváis nuevamente al orden establecido desde el Principio, que volváis a entrar en ése panal, en ése hormiguero, donde todo es perfecto, porque están guiados por Mi Perfección, que ya no os dejéis guiar por vuestros humanos instintos, dejaos guiar por Mi Perfección Divina y de ésta forma, encontraréis la perfección en vuestra vida y mucho Me agradeceréis, Mis pequeños, porque entonces conoceréis el verdadero gozo para el que fuisteis creados.

En estos momentos, vivís en una pobreza total, no sois en nada la imagen de vuestros Primeros Padres antes del Pecado Original, os quiero llevar nuevamente ahí, a ésa perfección y para ello os mandé a Mi Hijo Jesucristo, para que Él os enseñara a regresar ahí.

Ved cómo os amo, Mis pequeños, ved cómo no os dejo abandonados, ved cómo Yo, vuestro Padre y vuestro Dios, vuestro Creador, no quiero que sufráis y os quiero ver gozando de Mis Bienes Infinitos. DejadMe Ser en vosotros, olvidaos de vosotros mismos, olvidad vuestro libre albedrío y dejadMe que Yo os encadene al Divino Amor, que os encadene a Mi Divina Voluntad, encontraréis ésa libertad que tienen las almas del Cielo, que tienen los Ángeles del Cielo, ellos no se quejan de estar encadenados a Mi Amor y a Mi Divina Voluntad. Yo quiero que gocéis desde la Tierra Mi Amor Infinito, pero dejadMe, Mis pequeños, dadMe todo vuestro ser, olvidad, olvidad vuestra libertad, que se ha vuelto pecaminosa por satanás y dejadMe que Yo obre plenamente en vosotros y os conceda la libertad Celestial.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Uno de los errores más catastróficos de ésta actual generación, es que estáis buscando los poderes y capacidades a los que el hombre no puede ni debe aspirar.
Hijitos Míos, uno de los errores más catastróficos de ésta actual generación, es que estáis buscando los poderes y capacidades a los que el hombre no puede ni debe aspirar, porque estáis buscando el amparo de satanás en vuestra vida. ¡Tanto que se os ha mostrado en las Sagradas Escrituras cómo los poderes satánicos siempre han sido vencidos por Mi Poder Divino!

Vosotros no fuisteis creados para estar en ese estado de negatividad en el que está satanás. Si fuisteis creados por Mi Amor, fuisteis creados para vivir en el Amor, fuisteis creados para ser hijos Míos y tener ésa dignidad de hijos de Rey. Cuando vosotros escogéis la negatividad satánica en vuestra vida, os estáis rebajando a niveles ínfimos, satanás es siervo y siervo malo, siervo negativo, después de haber sido un Ángel en su máxima expresión, esplendoroso, el más poderoso de los Arcángeles en el Cielo y él escogió negativamente y perdió esas capacidades bellísimas del Amor.

Sí, el Amor os da Mis capacidades grandísimas. Yo Soy el Amor y en Mi expresión de Amor, Me doy en diferentes capacidades, porque Mis Capacidades como Dios, son Infinitas. El Amor tiene muchísimas facetas de Poder, vosotros estáis invitados a todas ellas, a satanás se le quitó el Amor y con el infinidad de capacidades. Él prefirió la maldad, la obscuridad, el separarse de la Fuente Creadora y Vivificante y con ello perdió una inmensidad de capacidades que tenía, porque Mi Amor se derramaba fuertemente sobre él. Por eso os ataca tanto, Mis pequeños, porque estáis viviendo y buscando el Amor. Vosotros habéis preferido vivir en el Amor y él sabe que mientras viváis en el Amor, podéis tener capacidades fortísimas, inmensas, infinitas, superiores a sus capacidades, y en su envidia, no quiere que vosotros las tengáis.

Mi Hijo os mostró cómo podíais vencerlo, porque Él vive en Mi Amor y si vosotros vivís en el Amor, lo podéis vencer fácilmente. Vinisteis a la Tierra a vencer su maldad y a sembrar el Amor entre los hombres, como lo hizo Mi Hijo. Esa es vuestra tarea aquí en la Tierra, implantar Mi Amor, para que todo vuelva al orden en el cual fuisteis creados.

Todo era Amor en el Principio y a eso debéis volver, vendrá una época, pronto, de purificación de la maldad sobre la Tierra y se implantará el Amor, por un tiempo. Gozaréis grandemente del Amor, viviréis lo que no se ha vivido por siglos y a eso estáis llamados, Mis pequeños, a hacer que renazca el Amor entre vosotros y con ello, todas las capacidades y poderes que da el Amor a la Creación entera.

Por eso os vuelvo a repetir, cuando preferís el mal, cuando preferís seguir en sus potencias, os estáis rebajando, os estáis limitando, estáis buscando poderes y no estáis escogiendo los debidos, lo que os dará satanás, os desilusionará, os rebajará, os aplastará. En cambio, cuando escojáis los Poderes del Amor, entonces sí veréis cómo vosotros renaceréis a vuestra verdadera vida en la que fuisteis creados y vuestras potencias, que aún tenéis escondidas, limitadas por el Pecado Original, empezarán a salir, a crecer, a desarrollarse y las gozaréis infinitamente, porque el Amor, que es dinámico y nunca se detiene, siempre os dará más si lo buscáis, si vivís en él, si lo transmitís a vuestros hermanos.

Buscad pues, Mis pequeños, os aconsejo y os pido, las Potencias del Amor, entonces sí viviréis como verdaderos hijos Míos, hijos del Verdadero Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Es lo que os pido, Mis pequeños, que actuéis de acuerdo a lo que Mi Hijo os dejó en las Escrituras, Él vino a actuar, Yo os había dado la Palabra.
Hijitos Míos, vosotros sabéis que un acto, un ejemplo vuestro, vale mucho más que miles de palabras. Recordad lo que le reprochaba Mi Hijo a los fariseos, “aprended las palabras que os digan, pero no sigáis los actos que hacen”, no eran congruentes con lo que decían. Ciertamente, lo que decían estaba bien. Cuando ellos tomaban las Palabras de las Escrituras, enseñaban las Escrituras, se decían “maestros” de las Escrituras, pero ¿de qué les servían?, porque no actuaban las Escrituras, no daban buen ejemplo del Bien que Yo os he dado en las Escrituras.

Es lo que os pido, Mis pequeños, que actuéis de acuerdo a lo que Mi Hijo os dejó en las Escrituras, Él vino a actuar, Yo os había dado la Palabra, Él vino a actuar la Palabra y os vino a enseñar que sí se podían actuar las Palabras que Yo os di, que son Palabras de Vida, que son Palabras de santidad, Palabras que os llevan a la perfección.

Debéis vivir actuando Mis Palabras, actuando en el ejemplo que os dejó Mi Hijo, para eso habéis sido llamados a la vida, Mis pequeños, Mi Hijo, el Maestro entre vosotros, el Maestro de la Vida y del Amor, vosotros, sois los alumnos y tenéis el mejor Maestro.

Cuando entre vosotros, cuando vais a la escuela y tenéis un buen maestro que sabe enseñar y tiene capacidades óptimas, si vosotros seguís sus enseñanzas y aprendéis bien con él, al final tendréis una calificación alta, pero lo que más vale es el conocimiento que os dejó y no lo olvidaréis nunca, porque hará mucho bien en vuestra vida y a la vida de los vuestros.

Por eso os di a Mi Hijo como Maestro de Vida, con Sus Enseñanzas tenéis todo, Mis pequeños, para alcanzar la perfección a la que habéis sido llamados, ¿qué más queréis, Mis pequeños?, no tuvisteis solamente el Libro, tuvisteis al Maestro vivo entre vosotros.

Tomad pues ésta enseñanza, Mis pequeños, para que seáis perfectos actuando Mis Palabras de Vida y no seáis imperfectos como los fariseos y escribas, nada más hablando de las Palabras, pero sin vivirlas. Sed sabios, sed inteligentes y veréis lo que obtendréis al final, Mi Vida en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Lo que hagáis en la Tierra, se multiplicará en los Cielos, ahora, pensad e imaginad cómo queréis ser vistos en el Reino de los Cielos eternamente.
Hijitos Míos, Yo os he enseñado a ser misericordiosos, porque Yo Soy Misericordioso. Si Yo Mismo cuido al bueno y al malo y espero pacientemente la conversión del malo, porque lo amo, ¿por qué vosotros despreciáis a aquellos que se portan mal?, ya sea con vosotros ó con vuestros hermanos.

Sed misericordiosos para que podáis alcanzar Misericordia. Sed pacientes también, Mis pequeños y no juzguéis prematuramente. Orad por vuestros hermanos que están viviendo en el mal y que estén transmitiendo el mal, dadles la oportunidad de que Mi Misericordia se derrame sobre ellos a través de vuestra oración de intercesión. Dad, dad sin límites, Mis pequeños, en oración, en sacrificio, en penitencia, en todo lo que podáis, para que vuestros hermanos puedan cambiar. Dad, para que ellos puedan encontrarMe algún día y puedan gozar de Mis Bienes. Daos sin medida por vuestros hermanos necesitados, que aunque ellos no crean tener necesidad de Mí, vosotros sabéis que sí la tienen y por eso debéis orar por ellos, porque están ciegos a Mi Gracia y a Mi Amor.

Para eso estáis en la Tierra, Mis pequeños, para estar salvando almas, almas necesitadas, aún a aquellas que no se sientan necesitadas, porque según ellas gozan en el pecado y en las garras de satanás.

Estáis para arrebatarle a satanás las almas de vuestros hermanos que tontamente se han dejado seducir por sus engaños.

Estáis en la Tierra, Mis pequeños, para hacer crecer a vuestros hermanos en amor, por medio de vuestro ejemplo y de vuestras enseñanzas, como lo hizo Mi Hijo. Debéis ser ejemplo de vida, para que podáis después ser ejemplo en el Reino de los Cielos. Lo que hagáis en la Tierra, se multiplicará en los Cielos, ahora, pensad e imaginad cómo queréis ser vistos en el Reino de los Cielos eternamente. ¿Ser vistos y alabados porque disteis mucho y os acercasteis mucho a ser Presencia de Mi Hijo, o ser de aquellas almas que casi no dieron nada, almas que desperdiciaron su tiempo, Mi tiempo?

Meditad, porque ésta es una realidad y así, mientras más deis, vuestro regalo se multiplicará grandemente en el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.