Mar 23_2023 Me he cansado de avisaros esto, ¡no quiero la muerte eterna de vosotros, entendedlo! Yo morí para que vosotros vivierais y ni Me agradecéis y Me seguís traicionando.

Rosario – Mensaje ÚNICO.

.

==============================

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

==============================

.

Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Hijitos Míos, la Cruz Gloriosa, decís bien, la Cruz que para algunos era castigo, muerte, pero, para vosotros, al verMe ahí crucificado, es salvación.

¡Qué pocos entienden este regalo tan grande del Cielo! ¡Qué pocos viven lo que Mi Padre Me pidió hacer por vosotros! No os fijéis solamente en la Cruz, porque, al final de Mi Misión en la Tierra, os dejé muchas Revelaciones, mucho Conocimiento, mucha Vida espiritual, para que vosotros alcanzarais esa Vida de Cielo que tanto necesitáis, porque debéis entender que el Pecado de Adán y Eva, os destrozó espiritualmente. 

Cuando vosotros compráis algo bello, hermoso, lo gozáis, pero después de un tiempo, de algunos años, lo que antes era bello y hermoso, ya no lo queréis, porque ya está feo, inservible. Así pasó el hombre de ser alguien bello y hermoso, Adán y Eva y después del Pecado, sus almas, todo su ser, se veían horrendos.

No fuisteis creados para vivir así, horripilantes ante los Ojos de la Santísima Trinidad, ante los ojos del Cielo, de los Ángeles, fuisteis creados para ser bellos. Mi Padre se deleitaba con la presencia de Adán y Eva que obedecían en un principio, que gozaban con la Creación Universal, pero llega satanás, le dan la espalda a Mi Padre, Lo traicionan y destrozan todo lo bello que había creado Mi Padre, vuestro Padre para vuestro bien.

Todo el mal vino por una traición, Yo vine a reparar esa traición, os dejé todo lo necesario para que volvierais, prácticamente, a ser como vuestros Primeros Padres, pero no entendisteis, no habéis querido regresar a esos momentos bellos, Puros, Santos y de un gran gozo espiritual. No entendéis todavía: ¡Estáis en el estiércol! Se os traen aguas limpias, perfumadas, que son Mi Palabra, Mi Ejemplo, Mi Donación y vosotros, en lugar de limpiaros con ellas, preferís seguir en la inmundicia, en el estiércol y no queréis entender, que vuestra necedad, os va a costar, a la gran mayoría de vosotros, la condenación eterna.

Os he dado muchas oportunidades de salvación, pero el mal sigue creciendo, seguís viviendo en la inmundicia y ésta va aumentando entre vosotros. Las luchas fraternas aumentan, la mentira, el error, los robos, asesinatos van aumentando, ya no os amáis los unos a los otros como os pedí, sólo veis a vuestros hermanos con ojos de avaricia, quitarles lo que tienen, robar, matar para aumentar vuestros tesoros, que ciertamente os llevarán al fuego eterno.

¿Os dais cuenta, Mis pequeños, que la gran mayoría de vosotros que no sois aptos para entrar al  Reino de los Cielos?, que ciertamente, ni os importa eso ni pensáis en ello. Vivís al día, vivís para el Mundo, ya no hay amor en vosotros y el poco que os queda, lo despreciáis, porque os sentís tontos cuando amáis.

Ya no tenéis tiempo, se os ha avisado por todos lados, que vienen los acontecimientos fuertes, vienen ya, y no estáis preparados. Me he cansado de avisaros esto, ¡no quiero la muerte eterna de vosotros, entendedlo! Yo morí para que vosotros vivierais y ni Me agradecéis y Me seguís traicionando. Me despreciasteis por todo lo que he hecho por vosotros, no os importan Mis Palabras, Mi Ejemplo, Mis Milagros, Mis Enseñanzas para vuestro crecimiento espiritual.

Sois como el pueblo judío, terco, tonto, estáis viendo lo que está a vuestro alrededor y no queréis entender que ya la espada está sobre vosotros.

Los que estáis Conmigo, los que entendéis, os vuelvo a pedir: orad por vuestros hermanos, por los que no están preparados, hay algunos, que por el temor, cuando se vengan los acontecimientos, entenderán y se arrepentirán, ciertamente, se salvarán, tendrán que pasar un periodo largo de purificación, pero al final se salvarán, pero la gran mayoría no entenderá y se condenarán.

¡Me duele tanto esto, Mis pequeños, Me duele tanto!, porque os di todo, hasta la última gota de Mi Sangre y no Me habéis agradecido ni os ha tocado el corazón Mi Amor por cada uno de vosotros.

Gracias, Mis pequeños.