Rosario – Mensaje ÚNICO
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Mensaje de Dios Espíritu Santo a J. V.
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Habla Dios Espíritu Santo.
Visión: Veo primeramente, cómo se abren los Cielos entre las nubes que se separan en forma circular, y veo cómo empieza a descender el Espíritu Santo y muchísima gente que está viendo este milagro, se arrodilla, viendo hacia arriba, viendo cómo se acerca el Espíritu Santo a la Tierra. Se va acercando, pero luego, más atrás, se ve la figura de Nuestro Señor Jesucristo. La gente se alegra, pero siguen arrodillados, adorándoLo, respetando Su Presencia entre los hombres. Nos habla el Espíritu Santo:
Hijitos Míos, vengo preparando el camino, el camino para Jesús, vuestro Salvador. Os vengo tocando a todos, como el Pentecostés que tuvieron los Apóstoles en aquél tiempo, para que sepáis apreciar el Amor que os tiene vuestro Dios Salvador y que os teneMos en Nuestra Santísima Trinidad.
Ciertamente, los que están viendo bajar a Mis pequeños, ya son las almas escogidas, son las almas que han pasado la tribulación, son las almas que iniciarán una nueva Obra en la Tierra, un Nuevo renacer para la humanidad, un Verdadero Amor entre los hombres, vida de Paz y Amor, vida de (Lenguas…) vida de Sabiduría Divina, que apreciaréis, que gozaréis como nunca antes.
Sois dados, ciertamente, a leer las Sagradas Escrituras, pero cuando no Me pedís Mi ayuda, para que comprendáis las Palabras Divinas que escritas están ahí, no le sacáis todo el jugo, todo el sabor, toda esa Vida que está ahí presente, pero que no sabéis apreciarla.
Ya desde ahora, Mis pequeños, pedidMe, que os dé la Luz, la Sabiduría, la forma de apreciar la lectura en las Sagradas Escrituras; gozad éstas, tomad unas cuantas palabras, una línea, dos líneas, y entrad en vuestro corazón, para que Yo os las explique, para que gocéis el momento en que fueron dichas, para qué fueron dichas, y para quiénes fueron dichas.
Tenéis pasajes hermosos, tenéis pasajes, ciertamente, difíciles de entender y sólo a la Luz Mía, del Espíritu Santo, podréis entender el tesoro que hay en las Escrituras.
Todo se ha escrito para vuestro Bien, para vuestro crecimiento espiritual, para que tengáis un panorama Divino de la Creación, de su Redención y del Nuevo Renacer que viviréis.
Todo es bello y hermoso, porque está escrito para vosotros, que necesitáis de ese crecimiento, para que vosotros gocéis de la Sabiduría Divina, porque fuisteis creados para ello, para servirLe a Nuestra Santísima Trinidad, pero servirLa con el Entendimiento, de las Sagradas Escrituras. Mientras más os adentréis a las Palabras Divinas, al Pensamiento Divino, a la Vida Divina de vuestro Redentor, es cuando gozaréis más lo que escrito está.
PedidMe, pues, Mis pequeños, que os ayude a entender, a gozar, a vivir lo que escrito está, para que no desperdiciéis vuestro tiempo.
Muchos hablan de que han leído las Sagradas Escrituras, dos, tres, cuatro veces, o más y Yo os pregunto, ciertamente, las leísteis, pero ¿cuánto comprendisteis y cuánto habéis puesto en vuestra vida, para vivir de acuerdo a la Voluntad del Padre, vuestro Padre Dios?
Por eso se os ha dicho que Yo os voy a transformar, os voy a transfigurar y al hacerlo, entenderéis mucho, en muchas cosas, que hasta este momento, no habéis entendido la gran mayoría de vosotros.
En este nuevo renacer, se os dará un Conocimiento más elevado, que poco a poco se irá incrementando y entenderéis el Conocimiento que tenían vuestros Primeros Padres, Adán y Eva. Conoceréis buena parte de su vida, lo que vivieron desde su creación, su estancia en el Paraíso, la tarea de darle nombre a todo lo creado, el gozo de la Creación antes del Pecado Original.
Todo eso, Mis pequeños, es bellísimo, lo conoceréis y lo gozaréis y así conoceréis más el Amor que el Padre tiene por vosotros. Lo adoraréis de corazón, Le daréis un lugar predominante en vuestra vida, sabréis que Él os ama en una forma tan grande, que buenamente, no comprendéis.
Dejaos pues, mover por Mí, Mis pequeños, para que Yo os vaya llevando por estos caminos de predilección que Me ha pedido el Padre que os lleve.
DejadMe, pues, que Yo, vuestro Dios Espíritu Santo, os vaya llevando a conocer los Misterios Divinos, lo que todavía no se ha develado a los hombres, y que tendréis, porque vosotros, los escogidos, los que os mantuvisteis fieles a la Palabra, al orden, a Sus Leyes, al Amor Divino; sois los verdaderos hijos, los descendientes de Adán y Eva, que se levantaron, que han vivido más en Virtud que en el error, y que deseáis gozar la Creación que empezó con vuestros Primeros Padres y que se detuvo por el error que cometieron.
Se cerrará éste párrafo de la Vida y seguirá una Vida como la que tenían vuestros Primeros Padres y gozaréis infinitamente la Creación con todo lo que el Padre había creado para Bien vuestro y para que gozarais de Sus regalos Divinos.
AgradecedLe de corazón, lo que Él pensó para cada uno de vosotros, y vosotros, que os mantuvisteis fieles a Su Palabra, a Sus Leyes y Su Amor, sois los escogidos para seguir gozando lo que vuestros Padres primeramente tuvieron.
Recibid, pues, Mi Bendición, Mis pequeños y manteneos fieles a Nuestra Santísima Trinidad, sencillos, humildes y sed como niños, sed como niños, para que gocéis de los regalos infinitos que gozaréis eternamente, si os seguís manteniendo fieles y obedientes al Mandato Divino.
Gracias, Mis pequeños.