Ene 26_10 Estaré junto a vosotros para cuidaros hasta donde Me lo permitáis.

Rosario vespertino

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Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Ofrecimiento, Habla Dios Padre,
Sobre: Buscad para vuestros hermanos Mi Reino y vosotros sabéis que lo demás se os dará por añadidura.
(Lenguas…) Hijitos Míos, debéis comprender la Maravilla de Mi Amor. Mis pequeños, así como os alimentáis de alimento para vuestro cuerpo, vuestra alma debe alimentarse con el Alimento de Vida que Soy Yo. No os imagináis, Mis pequeños, la belleza de las almas cuando van creciendo y, cuando llegáis a daros cuenta de éste misterio tan bello del crecimiento de las almas, empezáis a gozar de Mis Misterios y Mis Maravillas para con vosotros.

El alma se vuelve más bella, más santa, más pura, cuando Me estáis buscando y, cuando tratáis de manteneros en estado de Gracia y en crecimiento espiritual, vuestra alma empieza a tomar tonos bellísimos y así es como se van reconociendo en el Cielo. Las almas que en la Tierra van creciendo, el mismo satanás se va dando cuenta de ésa luminosidad que sale de vosotros que, aunque vosotros no os dais cuenta de ello, las almas del Cielo y aún las del Infierno, sí se dan cuenta de ése crecimiento grande y bello y ésa luminosidad que brota de vuestro ser. Ciertamente satanás os ataca más, porque no quiere que ésa luminosidad, que es Mía, se implante perfectamente en vosotros porque, si no, de ésa forma ya no os podrá vencer. Ciertamente, cuando ya tenéis ésa luminosidad, es señal de que habéis crecido y que satanás difícilmente os podrá vencer, pero él sigue tratando de destruiros, de quitaros ésa belleza espiritual que habéis adquirido con trabajo, pero con gusto también, porque el buscarMe es un gusto y, por ello, Yo Me dejo encontrar por vosotros y así es como vosotros también gozáis.

¡Oh!, cuán bellas son las almas, como las vuestras, Mis pequeños, que sobresalen de una gran multitud de las que habitan sobre la Tierra, pero no quiero que os quedéis aquí, en éste pensamiento, porque podría crecer la soberbia en vuestro corazón, lo que quiero de vosotros es que os deis cuenta de Mi Amor que se ha derramado sobre cada uno de vosotros, por ese deseo tan grande de buscarMe y de crecer con Mi Vida, en vosotros.

Os bendigo, Mis pequeños, y pedidMe, pedidMe ése crecimiento grande y bello, porque vosotros sé que lo apreciaréis y lo gozaréis, no así aquellos hermanos vuestros que no les interesa tenerMe en su corazón. Bendigo a los vuestros, bendigo a vuestros hijos, a vuestros familiares y amigos, a todos aquellos que entran continuamente en vuestro ambiente familiar, y con esto no Me refiero solamente a los que son realmente familiares de sangre, sino a aquellos con los que convivís continuamente y que llegan a ser, a veces,  hasta mejores hermanos que vuestros mismos hermanos de sangre.

PedidMe, en éste Santo Rosario, por todas las personas, por todas las almas, por todos aquellos seres queridos o seres necesitados, para que Yo Me derrame sobre ellos. Me habéis buscado, Mis pequeños y Me he dejado encontrar por vosotros y, al tenerMe, podéis pedirMe lo que queráis, porque sé que ahora habéis ya aprendido a pedir lo que más necesitan las almas sobre la Tierra, por eso ya no os puedo negar nada, porque sé que utilizaréis éstas Gracias, éstas Bendiciones, que Yo os concedo, para el bien de los demás, porque sé que ya en vuestro corazón están primero vuestros hermanos que vosotros mismos. Buscad para vuestros hermanos Mi Reino y vosotros sabéis que lo demás se os dará por añadidura. Salvad, salvad a tantas almas como podáis, Mis pequeños, muchas, muchas almas necesitan de vuestra oración, de vuestro deseo de que Yo las tenga de regreso en el Reino de los Cielos, que no se desperdicie mas Mi Amor entre vosotros, que Mi Amor, por vuestra petición de intercesión, cambie a muchas almas. Ése es Mi Deseo, y tiene que ser el vuestro. Muchas almas, os he dicho, dependen de vuestra oración de intercesión, Yo escucho vuestro corazón, escucho vuestros deseos y vuestros deseos, os quiero repetir, ahora son muy grandes y bellos para Mí, vuestro Dios, porque ya estáis empezando a actuar como Mi Hijo Jesucristo actuaba entre vosotros. El hecho de que os deis cuenta de las abominaciones de satanás a vuestro alrededor, ya eso es un paso avanzado para los que han crecido en Mi Amor, vosotros os dais cuenta ya de las necesidades espirituales de la sociedad y del mundo entero. Y es por eso que os pido, que actuéis como Mi Hijo, salvando almas continuamente, trayéndoMe almas a Mi Corazón, para que Yo las perdone y las salve, confiad en ello, Mis pequeños, confiad primero en Mí, en Mi Amor, en Mi Perdón y después en Mi Justicia.

Os amo, Mis pequeños, abrid vuestro corazón, para que Yo derrame grandes bendiciones en vosotros y para vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros perseverasteis e incrementasteis vuestra Fe y ésa es una Gracia muy especial que Yo le doy a las almas, pero que no todas aprovechan.
Hijitos Míos, vosotros, palpablemente conocéis y vivís Mi Promesa de que aquellos que Me buscan Me encuentran. Vosotros Me habéis buscado y Me habéis encontrado, porque queréis crecer espiritualmente, porque Me amáis y Me respetáis. Yo Soy ésa perla preciosa de la que se habla en la Parábola. ¿De qué sirve darle una perla preciosa a un niño, a una persona que ni siquiera sabe para qué sirve una perla, ni conoce su valor?, no va  apreciar el regalo, no va a apreciar su belleza ni su valor. Por eso Yo Me escondo ante las almas, las voy estudiando, voy esperando a ver qué tanto Me están buscando, si lo están haciendo de corazón o interés o curiosidad. Dejo que pase el tiempo, para que Me sigáis buscando y perseveréis, ahí es en donde Me doy cuenta de las almas que realmente Me están buscando y que quieren estar Conmigo, por la perseverancia. Las almas que no aman, tampoco perseveran.

Ciertamente, en el camino, cuando Me estáis buscando, tenéis tropiezos, entre ellos, las personas cercanas a vosotros. Os atacan de múltiples formas, os ridiculizan porque están viendo que vosotros sois diferentes a ellos. También os llaman de múltiples formas porque estáis buscándoMe, estáis embebidos en la oración, tenéis vuestro pensamiento en Mí. Ya que pasáis la prueba Me dejo encontrar y es cuando el alma goza plenamente, porque Soy el premio para ésa alma que perseveró, que luchó contra todo aquello y aquellos que no querían que Yo Me manifestara a ésa alma.

Ciertamente satanás está atrás de ésos ataques, pero cuando vosotros os dais cuenta realmente de Mi valor, de lo que Yo valgo como vuestro Padre y como Dios y vosotros, no importando los ataques que tengáis a vuestro alrededor, perseveráis, es cuando encontráis ya la perla preciosa, la tomáis, la besáis, la cuidáis y le dais un lugar muy importante en vuestra vida, y ése lugar es vuestro corazón. Habéis perseverado y Yo estoy con vosotros y si os mantenéis así, Mis pequeños, Me tendréis por toda la eternidad. Soy vuestro Dios, vosotros Mis creaturas, que amo infinitamente, pero tenéis que ser acrisolados en el Amor, vosotros perseverasteis e incrementasteis vuestra Fe y ésa es una Gracia muy especial que Yo le doy a las almas, pero que no todas aprovechan. La Fe, porque creéis sin haber visto y eso es muy difícil para muchas almas. Vosotros, estando en la obscuridad del mundo y habiendo oído de Mí, Me buscasteis afanosamente, incrementasteis vuestra Fe, a veces hasta grado heroico por tantos ataques que reciben las almas que Me buscan y al final, cuando Me encontráis y Me tenéis, gozáis infinitamente. Si Yo Soy vuestro regalo, vosotros también sois Mi regalo y Yo os lleno de Bendiciones, de regalos espirituales y materiales, porque Me buscasteis primero a Mí, y necesariamente lo demás se os da por añadidura.

Os amo infinitamente, Mis pequeños, porque os salís del promedio de la humanidad, estáis por encima de muchos, de muchísimos de vuestros hermanos, que no han sabido apreciar Mi Presencia en vosotros y alrededor de vosotros. Todos vuestros hermanos y aún vosotros mismos habéis tenido múltiples oportunidades, pero no todos quisieron perseverar y vosotros sí y, por eso, Mis Bendiciones se derraman y se derramarán abundantemente sobre vosotros y hasta eternamente, porque escogisteis la mejor parte, porque fuisteis como María, no os dejasteis llevar por el mundo, visteis al Cielo y ahora el Cielo se derramará sobre vosotros. Recibid Mis Bendiciones que Yo os cuidaré, Mis pequeños, de aquí en adelante abundantemente, hasta que tengamos el encuentro final y os invite a pasar al Reino de los Cielos eternamente.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Limitad vuestra humanidad y dejad que Mi Divinidad se trasluzca a través de vosotros.
Hijitos Míos, muchos de vuestros hermanos no han todavía aprendido a darse por los demás. El darse es una Gracia especial, en la cual interviene mucho la humildad.

Satanás ha logrado, en infinidad de vuestros hermanos, que sea la soberbia la que crezca en vuestros corazones. Ahora os creéis que merecéis todo y que vuestros hermanos os tienen que servir. Utilizáis el dinero y los bienes de éste mundo para aprovecharos de vuestros hermanos y comprarlos, para que hagan lo que vosotros debierais hacer.

Ciertamente algunos de vuestros hermanos trabajan para servir, por necesidad. Os ayudan con su servicio, ya sea en vuestro hogar, en la oficina, en la calle, en las tiendas, en infinidad de lugares, que se prestan para serviros, porque también tienen que ganar dinero para su familia, para su sostén, pero también hay muchos de vuestros hermanos que no respetan ésa situación y rebajan a vuestros hermanos a una posición de esclavos o aún peor, los atacan groseramente. No les guardan respeto, ni siquiera de hermanos y se aprovechan de su humildad, tanto espiritual como económica y eso Yo no lo quiero, Mis pequeños.

Primeramente dadMe las gracias, porque tenéis los bienes de éste mundo, para que podáis comprar lo necesario para vuestro sustento humano, pero debéis crecer espiritualmente, para reconocer ésta situación en vuestros hermanos necesitados y deberéis tratarles lo mejor posible, sin que ellos sientan en ningún momento que los estáis rebajando de posición, nada más porque escogieron o solamente pudieron escoger ésa posición para recibir de los bienes del mundo.

Cuando Mi Hijo os ha dicho que os amarais los unos a los otros, os debéis respetar todos vosotros, no importando la situación económica o social, seguís siendo hermanos y os debéis tratar como hermanos. Lo que tenéis ahora, quizá no lo tengáis después y si os aprovechasteis de vuestros hermanos, quizá después seáis los que tomaréis la posición de los que ahora estáis vosotros abusando.

Vosotros sabéis cómo dan vuelta las cosas. Yo, a veces, permito esto para que no os sigáis aprovechando de vuestros hermanos en múltiples formas, para que crezcáis en Caridad, en Humildad, en vida de amor con todos aquellos con los que entréis en contacto durante vuestra vida. Ésos son Mis verdaderos hijos, los que mantienen las Virtudes, el amor, siempre como bandera en su vida. Por ello es por lo que quiero que seáis conocidos, que seáis virtuosos, porque así deben ser Mis hijos, debéis ser ejemplo ante las naciones, ante vuestros hermanos, que seáis almas ejemplo, para que en lo futuro, aquellos que os conocieron, quieran ser como vosotros, porque Yo permito un reconocimiento santo y, así, otros sigan vuestros pasos. Es vuestra obligación, Mis pequeños, especialmente vosotros que ya habéis escogido la mejor parte, en donde estéis, debéis ser ejemplo, que ya no se os haga difícil portaros con categoría espiritual, que no seáis personas de dos caras, almas convenencieras, ésas no Me interesan, Mis pequeños, o sois o no sois, si Me escogisteis a Mí, aunque os cueste en un principio, debéis tratar de ser otros Cristos sobre la Tierra, deberéis limitar vuestra carnalidad, vuestros vicios y errores, para que de vosotros solamente salga virtud, que brote una nueva vida ante vuestros hermanos, pero que ésta sea una vida de corazón y no de apariencia.

Os deberéis sentir contentos con ésta nueva vida que habéis escogido, que seáis sencillos y alegres, que seáis puros de corazón, que seáis niños que os mováis libremente entre los hombres y que llevéis ésa alegría santa que solamente pueden tener las almas sencillas que están Conmigo.

Mi Hijo vino a renovar el mundo, os vino a enseñar cómo debéis ser, habéis escogido ésa parte y ahora os toca poner también vuestra parte en la renovación del mundo. Entendedlo así, Mis pequeños y dadMe ésa alegría en éstos tiempos, como la alegría que Me dio Mi Hijo en Su tiempo que estuvo entre vosotros y que sigue en vosotros.

Sois los Cristos de éste tiempo, sois ahora los que debéis dar el ejemplo a seguir.

Os repito, limitad vuestra humanidad y dejad que Mi Divinidad se trasluzca a través de vosotros, vinisteis para ser luz entre las naciones, no apaguéis ésa luz, no la disminuyáis, dejadla que brille en totalidad, Soy Yo a través de vosotros no Me limitéis ante los hombres.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Os cuidaré, Mis pequeños, porque ya padecisteis el ataque de vuestros hermanos que escogieron el mal, que os atacaron en múltiples formas.
(Lenguas…) ¡Oh!, Mis pequeños, ¡Cuánto dolor llega a Mi Corazón, por tantos de vosotros, hermanos Míos, que a pesar de que Yo Me di en totalidad por vosotros en Vida y al final, en la Cruz no habéis apreciado Mi obra de crecimiento y salvación para las almas!

¡Cuánto dolor causáis a Mí Corazón Sacratísimo, porque no reconocéis ya Mi Divinidad a pesar de Mi Humanidad! Muchos de Mis ministros no Me respetan, hacen Conmigo lo que quieren en la Sagrada Eucaristía y al no respetarMe, no Me transmiten a los demás. Mis ministros debieran ser almas santas, almas de vida espiritual, almas de ejemplo, ejemplo a seguir para los fieles, pero se han vuelto del mundo. Ya no hay diferencia entre ellos, los consagrados a Mí y los hombres, prefieren el mundo, hablan de política, prefieren asambleas humanas y no asambleas Divinas.

Los mismos fieles tampoco respetan Mi Presencia Sacratísima y porque no les han enseñado a respetarMe Mis propios ministros, los fieles han perdido ésa devoción y respeto hacia Mí. Las mismas familias, porque no han vivido ésa vida espiritual y el respeto hacia Mí, vuestro Dios entre vosotros, ya no Me buscan, ni en su vida, en sus problemas y menos en sus logros, para agradecerMe Mis Bendiciones.

Estáis viviendo una decadencia espiritual tremenda, en donde vosotros, los que estáis Conmigo, que todavía Me buscáis y que gozáis con Mi Presencia entre vosotros, os estáis dando cuenta como una gran cantidad de vuestros hermanos, ni les interesa buscarMe y menos respetarMe.

Para vosotros, los que estáis Conmigo, venir a Mí y buscar lo Mío, es un tesoro y lo apreciáis, en cambio, muchísimos de vuestros hermanos, para ellos es una imposición y un peso que ya no quieren tener, no quieren saber de religión y menos de Leyes y Preceptos, buscan, según ellos, libertad, cuando realmente su vida se vuelve libertinaje, no quieren buscarMe, pero sí quieren exigir el tener todo, cuando no se lo merecen. Por eso os insisto tanto, Mis pequeños, de vuestra oración, el pedir por todos vuestros hermanos que no quieren saber nada de Mí ni quieren tener un crecimiento espiritual.

Si estáis viviendo una decadencia espiritual, ¿cómo os queréis proteger contra la espiritualidad malvada con que os ataca satanás? Pudiendo tener todo, preferís el mundo y lo nefasto de satanás, que solamente os está llevando a una destrucción mundial.

¡Pobres de vosotros, Mis hermanos, Mis pequeños!, os vine a enseñar una vida de Cielo para que la reprodujerais aquí en la Tierra y así unierais el Cielo con la Tierra, pero no quisisteis hacer caso, dejasteis que satanás se apoderara de vuestra alma y ahora estáis viendo el resultado. Habéis hecho a un lado Mi Sacrificio, Mi Donación, Mis Enseñanzas, Mi Vida entera.

Este desperdicio lo padeceréis pronto, sí, Soy un desperdicio para vuestra vida y le habéis dado el primer lugar a satanás en vuestra vida, ahora veréis a dónde os va a llevar, él no es vida, es muerte y destrucción, Yo Soy Vida, pero no quisisteis tomar Mi Vida.

Daos cuenta, Mis pequeños, de que Yo no os estoy mandando la destrucción ni lo que padeceréis, es satanás el que os va a dar ése regalo, porque le preferisteis a él. Ese regalo va a ser vuestra destrucción y vuestro dolor.

Ciertamente los que Me habéis buscado y estáis Conmigo, no permitiré que satanás os ataque y os destruya, padecerán aquellos que dejaron entrar a satanás en su corazón y en su vida. Tuvisteis muchas oportunidades para aprender y para escoger. Gozaréis los que escogisteis bien y padeceréis los que escogisteis erróneamente, es lo justo y así será. Yo velaré por los Míos, os cuidaré, Mis pequeños, porque ya padecisteis el ataque de vuestros hermanos que escogieron el mal, que os atacaron en múltiples formas, habéis tenido ya vuestro calvario, habéis padecido fuertemente por defenderMe a Mí en vuestro corazón y en vuestra vida, ahora tendréis vuestra resurrección y vuestro regalo. Tarde se darán cuenta aquellos que no Me escogieron y hasta Me atacaron, pero tuvieron su oportunidad y supieron perfectamente lo que estaban escogiendo, ahora verán cómo satanás paga a los que lo eligen para vivir lo que él les da. Quisisteis vivir en el mundo y para el mundo, ahora veréis cómo el mundo os paga.

Venid benditos de Mi Padre a gozar de los bienes de vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo os creé y os amo, pero respeto vuestras decisiones, espero entendáis, Mis pequeños, antes que lo más grave empiece.
Hijitos Míos, la purificación es inminente (Lenguas…), las aguas se saldrán de sus cauces y acabarán con muchos pueblos, los niveles de los mares crecerán y las tierras quedarán bajo de ellas, los hielos aplastarán poblaciones. La vida se alterará sobre la Tierra, los desastres serán tremendos, porque vendrá el caos sobre la Tierra, todo entrará en un gran desorden porque vuestra oración ahora es insuficiente.

Todo lo creé bajo un orden y vosotros debisteis haber mantenido ése orden, porque así os lo ordené desde un Principio, vosotros os salisteis del orden y así mismo se salió la naturaleza, porque no la cuidasteis. Todo aquél que vive Conmigo y en Mí, se mantiene en un orden establecido y vosotros no quisisteis mantener ése orden. No quisisteis aceptar vuestras obligaciones, no quisisteis cuidar la naturaleza la cual os cuidaba a vosotros. No quisisteis mantener Mi Bondad y Mi Amor entre los hombres y así el mal se empezó a soltar, porque ya no lo dominasteis con vuestra vida en el amor y en la oración.

Dejasteis que se soltara la maldad en el mundo y ahora veréis lo que la maldad provoca.

Las tierras se abrirán y se tragarán a numerosos pueblos, incendios y derrumbes habrán por todos lados, terremotos destructivos por sobre toda la Tierra, la naturaleza ya no os dará de sus bienes y ella misma se volteará contra vosotros.

Buscasteis a satanás y él se burlará en estos momentos que tendréis de dolor porque, lejos de ayudaros, se burlará de vuestra desesperación y dolor. Veréis la maldad por todos lados, poco se ayudarán los unos a los otros mientras la maldad atacará a los buenos. Este es el caos que Yo no quería que llegara, que Mi Hija, la Siempre Virgen María evitaba con Su intercesión ante Mí, vuestro Dios, ¡Me ofrecía tanto a Mi Hijo para detener toda ésta maldad y vosotros no lo aprovechasteis!, vivíais en una falsa paz como la que estáis viviendo ahora. Estáis viviendo la calma chicha de los mares, pero sabed que pronto se viene la tormenta y destrucción.

Os digo esto, Mis pequeños, por si queréis todavía entender y poner un remedio para que la maldad de satanás no os aplaste como él lo quiere hacer. Solamente Yo conozco el futuro, satanás no. Os anuncio esto, Mis pequeños, para que vislumbréis algo de vuestro futuro inmediato, al que todavía podéis poner remedio y cambiarlo.

Entended, Mis pequeños, mucho dolor habrá, mucho padeceréis, ¿por qué no entendéis?, empezaréis a ver alrededor del mundo grandes desastres. Os he anunciado hace pocos meses que serían meses los que faltarían para que empezaran las grandes calamidades y aún así no entendéis. El dolor os hará cambiar, pero ya será demasiado tarde, pero de todo éste mal que se os vendrá, un bien resurgirá. Vuestra alma cambiará, pero que debió haber cambiado por el Amor y no en el dolor. Os envié a Mi Hijo para que vuestra alma cambiara por Sus Enseñanzas y el Amor que os dejó, de ésta forma vuestro cambio iba a ser bello y no doloroso si seguíais lo que Mi Hijo os vino a dar, pero no lo escogisteis a Él, escogisteis la maldad de satanás y la maldad os llevará a ése dolor, que ciertamente os llevará a un cambio profundo, benéfico, pero doloroso. Quise el bien para todos vosotros y no lo quisisteis aprovechar, ciertamente sufriré con vuestro dolor, os acompañaré, porque un padre sufre con los sufrimientos de los hijos, pero respeta el camino que los hijos eligen.

Ciertamente estaré junto a vosotros para cuidaros hasta donde Me lo permitáis, no os abandonaré, porque Yo os creé y os amo, pero respeto vuestras decisiones, espero entendáis, Mis pequeños, antes que lo más grave empiece.

Os bendigo y que Mi Bendición espero llegue hasta lo más profundo de vuestro ser, que le permitáis a Mi Bendición cambiar vuestra forma de ser y empecéis a buscar el amor entre los hombres.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: El mal será desechado, porque Yo no creé al mal y Mi Creación fue de vida, de alegría y de Amor.
Hijitos Míos, os pido que dejéis aflorar Mi Amor que está dentro de vosotros, aunque lo tengáis sin usar, en lo más profundo de vuestro corazón. Ahora es el tiempo en que debe aflorar para vuestro bien y el de vuestros hermanos. Contáis con un arma poderosísima contra satanás y contra toda la maldad que ha infundido por toda la Tierra, él no puede contra Mi Amor, él no puede contra aquellas almas que se han llenado de Mi Amor.

Amor es lo que os vino a enseñar Mi Hijo a la Tierra, por Amor Yo os di vida, Mi Amor creó todo lo que veis y lo que no veis, Amor Soy Yo, vuestro Dios, en Mi Santísima Trinidad.

Mi Amor tiene que renovar todo y vosotros entráis dentro de Mi Plan de transformación. Vosotros habéis sido transformados primeramente por Mi Amor, dejasteis que Mi Amor entrara en vosotros y ahora, a éstas alturas de vuestra vida ya os podéis dar cuenta cómo Mi Amor os fue transformando.

Ya no sentís ni vivís de la misma forma que antes vivíais, os habéis vuelto más sensibles, porque Mi Amor os sensibiliza a todo lo que sucede a vuestro alrededor. Sensibiliza vuestra alma y vuestros sentidos, ya os doléis con los que sufren, acompañáis en su dolor a aquellos que han sufrido tribulación, ahora intercedéis y oráis por aquellos que estáis viendo que sufren a vuestro alrededor o de los cuales tenéis noticia que están sufriendo. No tenéis ése corazón de piedra que muchos de vuestros hermanos tienen. Acompañáis a vuestros hermanos en sus dolores e intercedéis por ellos, para que Mi Presencia en ellos les dé Fortaleza y Sabiduría. Ya veis más por los vuestros que por vosotros mismos, porque Mi Amor os ha transformado. Ya os volvéis un bien para los demás, porque habéis dejado a un lado el egoísmo y ahora buscáis el bien del hermano antes que vuestro propio bien. Eso es amor, Mis pequeños, eso es donación, eso es vida para los demás.

Pero, por otro lado, podéis ver claramente el egoísmo y la maldad que se ha apoderado de muchas almas. Muchos buscan, solamente, su propio bien y se olvidan del hermano necesitado. Al pobre lo desprecian, al necesitado ni caso le hacen, al que requiere de un bien, voltean su cara para no verle y tapan sus oídos para no escucharle. A eso os ha llevado satanás, a tener un corazón de piedra, a no tener ya sentimientos Divinos en vosotros.

Al haber preferido el mundo, os habéis vuelto fríos como las cosas materiales son. Ya no hay ésa chispa de Mi Amor en vuestras obras y así vuestro entorno se vuelve gris. Ya no producís luz, todo es sombra en vosotros y a vuestro alrededor. Ya no hay alegría en vuestros labios y en vuestra vida, todo es grosería y destrucción. ¡Cuánto mal habéis hecho vosotros, los que escogisteis a satanás en vuestra vida!, habéis afectado la vida de los Míos, de los buenos, por eso el cambio se tiene que venir ya, para que los buenos gocen lo que ellos han protegido en su corazón y en su vida y el mal será desechado, porque Yo no creé al mal y Mi Creación fue de vida, de alegría y de Amor.

Los Míos crean, ríen, gozan, aman, producen vida y eso es lo que se os dará. Serán breves los momentos de purificación, entendedlo, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, dolor habrá, aún para vosotros, pero Yo estaré con vosotros y en vuestro corazón hay esperanza y confianza en lo que estoy haciendo para devolveros Mi Creación a vosotros, los que escogisteis el bien. Renovaré todo para los que Me buscasteis y quisisteis mantener lo creado desde el Principio y que es Mi Amor entre los hombres. Ese es el premio que tendréis primeramente, la renovación de vuestro ser y la renovación mundial. Todo será purificado, aún vuestro propio ser y será eliminado todo aquello que es maldad y destrucción.

Gozad pues Conmigo, Mis pequeños, por la renovación que se acerca y que gozaréis inmensamente.
Gracias, Mis pequeños.