Ago 04_00 Este es el tiempo en que el error invade al Mundo con más poder.

Mensaje.

Mensaje de Dios Padre a J.V.

Habla Dios Padre,
Sobre: Este es el tiempo en que el error invade al Mundo con más poder.
Hijitos Míos, éste es el tiempo en el que el error invade al Mundo con más poder. El error, viniendo del maligno, siempre ha atacado a la Verdad, a Mi Palabra, pero ahora se ha vuelto sutil y descarado, difunde el error entre las familias, entre la sociedad, y también en Mi Iglesia.

El error ha contaminado todo. Ahora, en éstos tiempos, ya ni vosotros mismos estáis seguros de lo que es bueno y de lo que es malo, de lo que sí está permitido y de lo que no. Mi Hijo Jesucristo os lo indicó:”Un reino dividido un puede subsistir”, y así estáis ahora vosotros, divididos.

Los mismos padres, en una familia, no se entienden. Luego, los padres con los hijos, tampoco, hay una gran barrera de comprensión. Entre la sociedad, tampoco se está de acuerdo, a veces, ni en cosas básicas y necesarias que se viven todos los días.

Vosotros sabéis lo que pasa cuando, en una fábrica, una máquina empieza a funcionar mal o empieza a ir diferente a las otras máquinas o lo que pasa en el cuerpo humano., cuando un grupo de células empiezan a proliferar en forma inusual. En la fábrica se dice que la máquina “enloquece” y detiene toda la producción, en el cuerpo, cuando esto sucede se llama cáncer y puede detener toda la vida del organismo.

Ahora, vuestra vida espiritual, en muchos de vosotros, se ha detenido. Escucháis por aquí, escucháis por allá, hacéis caso a todos pero no os dejáis llevar por la Verdad de Mi Pensamiento y de Mis Palabra, sino que a veces, os llaman más la atención el seguir pensamientos o culturas religiosas extrañas, creadas por hombres, en lugar de seguir lo que Yo, vuestro Dios, os dí a través de Mi Hijo Jesucristo.

No hacéis caso de Mis Enseñanzas ni de Mis Palabras y buscáis por diferentes caminos, “experiencias” que os hagan sentir mejor y así caéis en el error cada vez más profundamente.

Vuestra falta en la búsqueda de la Verdad os hace presa fácil del maligno y de sus secuaces, quienes quieren aprovecharse de Mi rebaño. Os he dado al Pastor, al verdadero Pastor, a Mi Hijo y no queréis seguirlo.

En la antigüedad no tenían al Gran Pastor, pero cuando Mi Hijo llegó, Él mismo les dijo que ya había llegado para guiar, personalmente, a Mi rebaño, que Él era el Pastor Eterno y además se los demostró.

Ahora vosotros habéis caído, nuevamente, en la incredulidad y en la obstinación que padeció Mi pueblo escogido. Tenéis ya la Verdad a vuestro alcance, pero vuestro corazón no desea aceptarla. ¿Qué más queréis de Mí, vuestro Dios, pueblo infiel y testarudo? Tenéis ahora las Enseñanzas y Preceptos que Os di a través de Mi Hijo. Os mostré Mi Amor de Padre, enviando a Mi Hijo Único. Se sacrificó Mi Hijo por todos vosotros y os dejó Su Vida misma en la sagrada Eucaristía. Su Vida llena de Milagros se siguen dando hasta éstos momentos de la humanidad y ¿ni aún así entendéis?

Divide y vencerás, ha sido el grito de batalla del maligno entre vosotros y lo va logrando. Yo os he explicado que somos la Trinidad, Tres Personas Divinas en un solo Dios Verdadero y esto es la Unidad, que si existe en vuestro Dios, debe existir en Sus hijos, en todos vosotros. Si cada quien se la pasa pensando en sus propios intereses y no en los Míos, nunca se logrará la unidad, tan necesaria, para que podáis progresar y vivir como pueblo unido, pero, sobre todo, para que podáis vivir como verdaderos hermanos.

Si en una supuesta familia sus miembros se la pasan atacándose unos a otros o no se ayudan mutuamente para crecer, en todos sentidos, eso no se puede llamar familia y en lugar de permanecer como tal, tan pronto se puedan independizar, lo harán. Además no defenderán el vínculo familiar por diferir en ideales, gustos y hasta de educación, porque no supieron escuchar y seguir la “educación” dada por los padres y en especial, la del padre, quien debe ser la cabeza del hogar.

Esto sucede muy comúnmente entre vosotros, porque la “cabeza” del hogar, no suele estar en sintonía con la “Cabeza”, que Soy Yo, vuestro Dios. Cuando no aprendéis a escucharMe, transmitís a los vuestros sólo vida humana y no espiritual y si no tomáis de Mi Vida, vivís en el error y en la muerte del alma, o, ¿acaso un muerto puede dar vida a alguien?

Un muerto, espiritualmente hablando, sólo transmitirá lo que éI tiene y ello es error, porque se está basando sólo en la vida del mundo, de aquí se desprende que, por la necesidad del alma por tomar de su alimento vital espiritual, busca de donde obtenerlo y cae en cualquiera de las sectas “religiosas”, que las hay por cientos y que los secuaces del maligno han creado para aprovecharse de esa necesidad de alimento espiritual. De aquí que muchos “guías” religiosos se aprovechan de vosotros creándoos culturas religiosas a vuestro antojo, las cuáles, tarde ó temprano, se destruirán, porque no tienen enraizamiento en la Verdad, en Mis Verdades.

Bien sabéis que una gran mayoría de éstas sectas, tienen “guías” que se aprovechan de la incredulidad de sus seguidores y, si no se aprovechan sexualmente de ellos, se aprovechan económicamente y, aún peor, se aprovechan de su alma, para llevarlos a ritos satánicos ó aún al propio suicidio, arguyendo que “su dios’ así lo manda.

Hijitos Míos, os dí a Mi hijo. Os di a vuestro Dios Verdadero como holocausto, para que os diera Vida y se diera como expiación por vuestros pecados y, ¿vuestra indiferencia así nos paga?

Seguís siendo un pueblo testarudo e infiel, pero como Padre de todo el género humano, os sigo amando y sigo insistiendo en reunir a Mi rebaño, para que,
por fin, podamos ser un sólo rebaño bajo un sólo Pastor.
 
No permitáis más, hijitos Míos, que el mal, que se ha introducido a todos niveles de vuestra existencia, os siga llevando a la muerte espiritual, la cuál os llevará a la muerto eterna. La Verdad es una, salida de Mi Trinidad Divina, Mi Hijo Jesucristo, vuestro Pastor Eterno, ha sido el portavoz de ella, quien no se deje guiar por Mis Enseñanzas dadas por Él, seguirá deambulando por las tinieblas del error.

Vuestra necedad y vuestra soberbia traicionan a vuestra alma y le impiden crecer. Llenaos de Mi Amor y de Mi Humildad y así pronto encontraréis el Camino de Luz que os ha marcado Mi Hijo Jesucristo.

Tratad de vivir en la Verdad, cueste lo que cueste, porque el premio que obtendréis será inmensamente grande en el Reino de los Cielos.

Hijitos Míos, sigo esperándoos. Muchas grandes cosas aún veréis y se os darán para que podáis entender el Amor que vuestro Dios Padre os tiene y que os quiere de regreso al Redil Celestial. Los de corazón sencillo regresarán a Mí por la Fe verdadera que existe en su corazón; los obstinados, muchos de ellos regresarán a Mí, gracias a los grandes prodigios que Yo, vuestro Dios, os mostrare.

Acrecentad vuestra oración para que fortifiquéis vuestra Fé, la cuál os dará la llave con la cuál abriréis la puerta de vuestra salvación eterna.

Yo os amo y os bendigo en Mi Santo Nombre y en Nombre de Mi Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo.