Mensajes de la Virgen María y N. S. Jesucristo a J.V.
Temas:
- Pedid bien por los Ministros de Mi Iglesia.
- La vida en el espíritu, es la vida que debéis seguir, ésa es la verdadera vida.
- Pedidme una Fe fuerte. El demonio sabe que si os arrebata la Fe no podéis hacer nada.
- Insistid en la vida en el amor.
- Que vuestros deberes cotidianos no suspendan la oración de intercesión.
Sobre: Pedid bien por los Ministros de Mi Iglesia. Hijitos Míos, Mis pequeños, pedís bien al orar por los Míos, los Ministros de Mi Iglesia, la Iglesia de la cuál Yo fui fundadora, la Iglesia que recibió el Espíritu Santo en sus inicios para dar Gloria, Santidad, Belleza al Pueblo de Dios, al Nuevo Pueblo de Dios, a aquellos que iban a seguir con la Evangelización, con la Vida que Mi Hijo les había dado. Mis pequeños, pedid, pedid mucho por Mis Ministros, por Mis hijos predilectos; mucho mal se ha introducido dentro de la Iglesia, a grado tal que se está dando el mal ejemplo a altos niveles, a altas esferas de la comunidad religiosa de Mi Iglesia. Profetizado está que aún antes de que llegara nuevamente Mi Hijo en Su Segunda Venida, que si no se cortaba el tiempo de la prueba, hasta los elegidos caerían. Mis Ministros son los elegidos, son la cabeza de Mi Iglesia… y están cayendo. El Mundo, el Mundo los ha hecho caer y no se quieren dar cuenta. Orad intensamente por ellos, necesitan mucho apoyo, necesitan oración.
Recordad, Mis pequeños, que con Nosotros, vuestra oración se vuelve muy poderosa y especialmente cuando el Amor está cubriendo ésa oración, está acompañando ésa oración, que vuestra oración vaya directamente al corazón de vuestros hermanos sacerdotes, los Ministros de Mi Iglesia. Se tendrá que dar la renovación, la purificación dolorosa dentro de Mi Iglesia; pero ésa Perla Preciosa no puede ser manchada, tiene que dar el fruto para lo cual fue creada. Seguid, Mis pequeños, con vuestra oración, unidos a las necesidades de Mi Corazón, estrechando en vuestro corazón a Mis Ministros, como Yo los tengo también, no dejéis que se os escapen de vuestros brazos, mantenedlos en vuestro corazón, en donde Yo también habito.
Gracias, Mis pequeños. Habla La Virgen María,
Sobre: La vida en el espíritu, es la vida que debéis seguir, ésa es la verdadera vida. Hijitos Míos, la vida en el espíritu, es la vida que debéis seguir, ésa es la Verdadera Vida. Estáis en el Mundo para transmitir ésa vida espiritual que debe ser plena en vuestro corazón. Se os ha dicho que no podéis dar lo que no tenéis, por eso se os ha insistido en que llevéis fuertemente en vuestro corazón las Palabras de Mi Hijo; que le hagáis caso fuertemente a las mociones de Mi Esposo, El Santo Espíritu de Amor dentro de vuestro corazón. Vuestra vida interior es lo que va a dar los actos exteriores en cada uno de vosotros. No podéis dar lo que no lleváis dentro; si vivís en vuestro Dios, transmitiréis a vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños. Habla N. S. Jesucristo,
Sobre: Pedidme una Fe fuerte. El demonio sabe que si os arrebata la Fe no podéis hacer nada. Hijitos Míos, ciertamente un gran porcentaje de la humanidad se ha desviado, ha tomado caminos equivocados, está dando mal ejemplo, viven para el mal. Pero recordad, Mis pequeños, que Mi Vida fue para todos, Mi Sangre, se derramó para todos, Mi Amor es para todos; y que mientras estéis en el Mundo podéis hacer grandes cosas, simplemente con el amor que nazca en vuestro corazón, con ésos deseos amorosos. Muchos de vuestros hermanos desconfían de Mis Palabras, de Mi Vida, de Mi Acción Poderosa a través de la oración, por falta de Fe. Mis pequeños, pedidme Fe, una Fe fuerte, una Fe a prueba de todo. El demonio sabe que si os arrebata la Fe no podéis hacer nada, porque un alma sin Fe es un alma perdida. Pedidme pues ésa Fe inquebrantable, esa Fe que se mantenga a toda prueba. Los embates del enemigo son fuertes, pero con la Fe y el Amor lo podéis vencer fácilmente. Mi Amor logrará todo, logrará los grandes milagros; pero por la Fe que tengáis vosotros y por la Fe que dejéis en vuestros hermanos. La Fe ésa Virtud Teologal que os hará grandes, que os hace fuertes en el Mundo, no debéis perderla, mantenedla en todo momento, orad por ella y pedidme por ella en todo momento, que las pruebas fuertes no os hagan desfallecer, no os hagan dudar de Mi, de Mi Presencia, y de Mi Cuidado en vosotros y para vosotros en todo momento. Si Yo permito algo en vuestra vida, será para aumentar ésa Fe; aceptad Mi Voluntad en vosotros, si Me habéis aceptado en vuestro corazón y Me dejáis actuar en vuestro corazón todo lo que suceda en vosotros, será porque Yo lo permito y será para vuestro bien. Recordadlo Mis pequeños y si algo se os viene mal o que lo veáis mal, confiad, alegraos y sin entended, agradeced.
Gracias Mis pequeños. Habla La Virgen María,
Sobre: Insistid en la vida en el amor. Hijitos Míos, la renovación espiritual se está dando, estáis viendo a vuestro alrededor cosas grandes en el Mundo, en el Mundo entero. Estáis viendo también cambios físicos en el Mundo entero; todo se está dando ya. Agradeced a vuestro Dios que ha escuchado la súplica de Su Pueblo alrededor del Mundo, súplicas sencillas, súplicas honestas, salidas de corazones como los vuestros, que no buscáis vuestros propios intereses sino los de vuestros hermanos. Súplicas de un Pueblo fiel, que siguiendo las Palabras de Mi Hijo, Su ejemplo, Su Vida, quiere preparar el terreno para Su Segunda Venida. Pueblo fiel, que está queriendo darse completamente con tal de que aparezca ya Su Salvador. Insistid, Mis pequeños, el tiempo es corto ya, insistid, Mis pequeños en que ya la humanidad entera reciba éstas gracias de Salvación, reciba éste cambio que logrará Mi Esposo, El Santo Espíritu de Amor. Insistid Mis pequeños en la vida en el Amor, que es el Regalo que os traerá Mi Hijo en Su Segunda Venida, el Amor Puro, el Amor Santo, el Amor que se Vive en el Reino de los Cielos. Luchad, luchad por ello Mis pequeños, a través de la oración, a través del ejemplo, a través de la donación de vosotros mismos, ved, ved más por vuestro prójimo y menos por vosotros, daos en todo momento en todo lo que podáis, daos, daos con Amor.
Gracias, Mis pequeños Habla La Virgen María,
Sobre: Que vuestros deberes cotidianos no suspendan la oración de intercesión. Hijitos Míos, Mis pequeños, se os ha dado la Gracia, el Don de la Oración, de la intercesión, así pues que vuestros deberes cotidianos, no suspendan ésta oración. Es un Don donde debéis estar siempre en íntimo contacto con vuestro Dios, Conmigo, vuestra Madre, es un Don muy grande, es un Don muy bello, porque es Caridad hacia el prójimo.
Lo mismo que dio Mi Hijo, Caridad en todo momento, Donación, el pensar por los demás antes que por uno mismo. Sois dichosos, Mis pequeños, por el bien que hacéis para el Cielo y esto se os recompensará ampliamente, pero gozad, gozad desde ahora en lo que se os dice, en lo que se os da, en lo que hacéis por vuestros hermanos, sabiendo que vuestra oración es bien escuchada en el Cielo y mucho bien estáis haciendo para vuestros hermanos. Seguid orando, Mis pequeños junto Conmigo, vuestra Madre, aprended de Mí, que Yo Me di en todo momento por Mi Hijo; Yo oraba intensamente, mientras Él llevaba Su Vida Pública. Respaldaréis Mis pequeños con la oración a vuestros hermanos que están haciendo el bien en el Mundo, y también respaldaréis a aquellos que no lo están haciendo, para que obtengan Sabiduría, obtengan la Verdad, obtengan su perdón, orad, orad día y noche. Mucho bien estáis haciendo, Mis pequeños, porque como se os dijo estáis en la Comunión de los Santos, estáis logrando mucho bien para todos vuestros hermanos y para vosotros mismos, porque con ello también estáis acrecentando vuestra Fe, al orar por los demás aumenta vuestra Fe, porque aceptáis con esto que vuestro Padre os escucha y que la oración puede obtener todo.
Gracias Mis pequeños.