Ene 12_05 ¿De qué serviría que enseñéis una cosa y que hagáis otra?

Rosario.

Mensajes de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Temas:

  • Tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior… Vosotros sois Mis soldados y en vosotros he puesto Mi Esperanza y Mi Confianza.
  • ¿De qué serviría que enseñéis una cosa y que hagáis otra?
  • Llevadle a vuestros hermanos éstas Verdades, pero llevádselas con Paz.
Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: “Tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior… Vosotros sois Mis soldados y en vosotros he puesto Mi Esperanza y Mi Confianza.”

 (Lenguas) Hijitos Míos, bajé del Cielo por orden de Mi Padre. Bajé del Cielo en donación, para servir al género humano, para levantarlo a niveles nuevamente de Gracia. Bajé del Cielo para vencer al mal, al demonio, que se había posesionado de las almas, que se había posesionado de Mi Creación en la Tierra. Bajé del Cielo para enseñaros la Verdad y el Amor.

Yo, como Dios, como Creador, pude haber llegado así: sentado en un Trono. Los de Mi  pueblo, los Judíos, ellos esperaban eso, el Mesías Rey, el Mesías Salvador, el Mesías Vencedor de todos los pueblos para encumbrarlos a ellos a una realeza que se habían imaginado. 

Estaban en el error, se desviaron y buscaban solamente los bienes materiales, se aprovechaban de las palabras de los Profetas, palabras Divinas que ellos materializaban para su propio bien, se aprovechaban de su propio Pueblo. Las palabras de Verdad, dadas por los Profetas, las enseñaban al pueblo, las obligaban al pueblo, pero ellos seguían sentados, encumbrados en sus tronos, intocables, no daban nada de sí, todo era para ellos.

Yo puede haber venido en Mi Trono y ponerMe sobre ellos; pero no, quise hacerMe pequeño, ellos estaban en la soberbia y la soberbia solamente  puede ser pisoteada, destruida con la Humildad.

Vine a destruir al demonio, a sus planes, a la maldad diseminada por el Mundo y por eso vine Humilde, porque es la única forma de vencerlo, con la Humildad y el Amor.

Me pude haber quedado como ellos, también sentado en Mi Trono y enseñar como en cátedra a discípulos que Yo escogiera y enviarlos. Pero no, Mis pequeños, la Palabra da Vida, la Vida da enseñanza, la Palabra se tiene que poner en práctica. Yo Me puse en práctica, caminé, llevé Mi Predicación personalmente a todos aquellos que la necesitaban. Sufrí, fui pisoteado por ellos, por éstos fariseos, por éstos falsos sacerdotes, fui pisoteado por la maldad del Mundo.

Pero la Humildad y el Amor siempre van a vencer y la Predicación dio fruto, porque Yo Mismo la enseñé, porque Yo Mismo la Prediqué y es lo que os pido a todos vosotros que seáis misioneros del Amor, misioneros de la Verdad. Todos vosotros, hermanos Míos que habéis acogido Mi Presencia en vuestro corazón, debéis llevarMe a vuestros hermanos en lo poco ó en lo mucho que podáis dar, en lo que podáis hacer alrededor vuestro.

Yo no os pido que salgáis de vuestros hogares, solamente a algunos que tienen que salir a predicar  en otros países, en otras tierras, pero cada uno de vosotros tiene la obligación de predicar a su alrededor, en su familia, con todos los que entréis en contacto cada día.
Debéis dar esa Luz, debéis comportaros en las Virtudes, debéis tener respeto por la vida de los demás, debéis amarlos como Yo os he Amado, a pesar de vuestro pecado y de vuestra maldad. Yo no cerré Mi Corazón a los pecadores, al contrario, vine a levantar al enfermo, al necesitado, que eran los más pecadores. Debéis dejar esa bondad, que es Mi Bondad, debéis dejar esa misericordia que es Mi Misericordia, debéis amor, que es Mi Amor, debéis dejar Mi Presencia en vuestros hermanos con respeto, sin imposiciones, simplemente dejad a vuestro Dios en el corazón de vuestros hermanos.

Dejar a Dios en el corazón de los demás es el mayor regalo que le podéis dar a vuestros hermanos y el mayor regalo que le podáis dar a vuestro Dios. Yo no os estoy pidiendo cosas imposibles, lo imposible es el cambio del corazón del hombre. El hombre se aferra a sus ideas, a sus necedades, a su pecado y por eso no quiere salir de ahí, por eso Mi Predicación se vuelve imposible, porque el mismo hombre la limita, la coarta, le quita libertad. Por eso pido a aquellos que realmente quieran darse a Mi Voluntad, que prediquen, que prediquen a su alrededor, y así al enseñar lo que Yo os he enseñado, irá cambiando todo a vuestro alrededor. Tenéis la obligación de hacer a vuestro alrededor un pequeño cielo y así las almas que se sientan tocadas por éste cambio, ellas mismas irán transmitiendo éstas bellezas que vosotros habréis transmitido y poco a poco el cambio se dará.

Así, debéis poner vuestro pequeño granito de arena, para que vayáis edificando el edificio, el Santuario de vuestro Dios, para que pongáis los cimientos de las Nuevas Tierras que se darán. DadMe alegría, dadMe contento con vuestro cambio, con vuestra predicación, con vuestro amor, sed predicadores de Mi Amor.
Gracias, Mis pequeños.

 
Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: ¿De qué serviría que enseñéis una cosa y que hagáis otra?

Hijitos Míos, la sinceridad, la honestidad debe vivir en vuestro corazón. No podéis ser de dos caras, ó sois ó no sois, quizá podríais engañar al Mundo, como lo hace el demonio, pero a Mí, vuestro Dios, nunca Me podréis engañar.

Si estáis Conmigo, deberéis vivir Mis Mandamientos, deberéis vivir Mi Vida, deberéis transmitir los valores que Yo os di, deberéis dar vida real, porque ¿de qué serviría que enseñéis una cosa y que hagáis otra?. No hay congruencia espiritual, no hay vida real del alma con su Dios, actuáis solamente por conveniencia, quizá para bienes terrenos, más que Divinos, porque vuestra alma sabe perfectamente que a Mí, no se Me puede engañar.

Pase lo que pase, debe de haber siempre esa honestidad en vuestro corazón, ciertamente esa honestidad os va a traer problemas, porque vivís en el Mundo, pero esos problemas, que son realmente ataques, es la ira del demonio contra el alma buena, es la que os irá indicando que estáis bien, que estáis actuando en la Verdad, que estáis viviendo y actuando para vuestro Dios.

El hombre es muy dado a las conveniencias, ahora se porta bien porque le conviene y ahora goza del Mundo porque le conviene.

Mis pequeños, solamente hay un Cielo, un Reino, un Premio y ese lo obtendrán aquellos que viven en sinceridad y en honestidad con Mi Vida, con Mi Espíritu.

Mi Hijo os dijo que un Reino no puede estar dividido porque pronto se destruye y así le pasa a las almas que están viviendo en esa dualidad. Hay Gracia cuando quieren y hay pecado, también cuando lo quieren.

No, Mis pequeños, no podéis ser así si realmente queréis seguirMe.

Ser un verdadero hijo de Dios, requiere trabajo, requiere donación, requiere sufrimiento y eso es lo que muchos de vosotros no queréis, que se os persiga, que haya problemas en vuestra vida, queréis solamente las cosas fáciles y los que están Conmigo se les dificulta su vida, pero Me la ofrecen, como Mi Hijo Me la ofreció. Él siendo Dios, sufrió, sufrió en su Predicación, sufrió por transmitirMe a vosotros.

No temáis Mis pequeños, no temáis a los ataques, porque Yo sé premiar fuertemente a aquellos que sufren,  a aquellos que están Conmigo, a  aquellos que transmiten y viven Mis Palabras, Mis Leyes y Mi Santo Espíritu.

Así como sufrís, también gozáis, y gozáis de una forma Divina, vosotros lo sabéis, seguid adelante, Mis pequeños, que pase lo que pase, Yo estaré con vosotros, os levantaré, os alentaré, os daré nueva Vida, estaré en vuestros sufrimientos y podréis tomar de Mí esa Agua que os quitará la sed, ese Alimento que os alimentará.

Yo Soy vuestro Dios, vosotros, Mis pequeños hijitos, ¡Cuánto os Amo!, Yo os Consiento, Yo os busco y voy hacia aquellos que Me tienden sus brazos.

Yo Soy el Padre Tierno y Amoroso, que levanto a los afligidos, que comprendo al caído, que perdono a aquél que con humildad se quiere regresar a Mí.

Yo Soy Fuente de Vida, Soy Fuente de recreación espiritual. Sí, aquellos que están Conmigo, gozan, gozan, se recrean, viven una vida que la mayoría no se percata de ello y que creen que no se pueda vivir así estando aún sobre la Tierra. A aquél que se ha donado a Mí, vive Cielo en la Tierra. DadMe más, Mis pequeños, y Yo Me derramaré en Mis Dones y en Mis Alegrías sobre vosotros.

Os Amo, Mis pequeños y os llevo en Mi Corazón.
Gracias, por estar Conmigo.


 

Tercer Misterio, Habla Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Llevadle a vuestros hermanos éstas Verdades, pero llevádselas con Paz.

Hijitos Míos, el pastor siempre va a apacentar a su rebaño. Pero el apacentarle quiere decir, llevarle por el buen camino, llevarlo con paz, alimentarlo.

A Mis Discípulos les dije eso, les di esa orden. A vosotros os pido lo mismo, pero sobre todo en éstos tiempos de tribulación, en éstos tiempos en donde el hombre ya no puede tener paz en su corazón por tantos desvíos espirituales y tantas carencias espirituales que tienen en su alma, ya no viven esa paz que solamente pueden vivir los hijos de Dios.

Vosotros mismos deberéis llevar esa paz en vuestro corazón, que vuestra presencia produzca paz, que vuestras palabras produzcan paz, que vuestras enseñanzas den paz.

Yo iba llevando esa Paz por donde predicaba y así se lo decía a todos aquellos que entraban en contacto Conmigo ó a donde Yo iba, “Que la Paz sea con vosotros” “Que éste hogar tenga Paz” “Vivid la Paz”, pero no se puede vivir la paz si en vosotros mismos hay tribulación, hay duda, hay resentimientos, hay maldad ó no estáis de acordes a Mis Mandamientos, a Mis Verdades. La Paz en vuestro corazón, la Paz en vuestra alma, dará Paz a vuestros hermanos y así podréis actuar mejor, podréis predicar mejor.

Ya os había dicho, que a donde fuerais, fuerais proclamando esa Paz, que dierais la Paz. Llevadla siempre en vuestro corazón y así alimentaréis profusamente a vuestros hermanos. Ellos se darán cuenta inmediatamente cómo puede un alma vivir en Paz aún a pesar de que hay tribulación a su alrededor.

Yo Soy el Único que puede llevar Paz a los corazones y así lo haréis ver a vuestros hermanos.  Si Yo Vivo en vosotros, estaréis seguros de tener todo con vosotros.

Todo, significa que al Ser Yo Fuente de Vida, Fuente de Salud, todo os lo daré, porque también os dijo Mi Hijo que al buscarMe y al encontrarMe, todo lo demás lo tendríais por añadidura.

Si vivís en Mi Paz, todo lo demás se os dará por añadidura.

Llevadle a vuestros hermanos éstas Verdades, pero llevádselas con Paz.
Gracias, Mis pequeños.