Rosario – Mensaje 1 de 2.
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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
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Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Así como las plantitas necesitan la luz, así como el viento lleva vida de flor en flor, Mis pequeños, Yo necesito vuestro amor, necesito vuestra presencia ante Mí. ¡Os amo tanto! Vosotros sois tan pequeños y necesitáis tanto de Mi Amor, pero no lo buscáis.
¡Venid a Mí, que Soy Fuente, Fuente de Vida, Fuente de Amor! ¡Soy Dulzura para vuestros labios, Soy Dulzura para vuestra mente, Soy Dulzura para vuestro corazón! ¿Por qué Me dejáis abandonado?, ¿por qué no pasáis más tiempo junto a Mí? Yo Soy la Vida, estando Conmigo, tenéis todo, Mis pequeños, ¿por qué no buscáis esta Vida tan grande, tan Perfecta, tan Amorosa, tan Dulce? Buscáis cosas del mundo que nunca van a ser ni siquiera parecidas a tanto Amor que os tengo.
¡Ay!, Mis pequeños, estáis cegados, hay un velo que no permite que vosotros veáis, veáis Mi Realidad, que veáis Mi Ternura, que Me veáis a Mí, vuestro Dios. Ciertamente, todavía no estáis preparados, y si Me vierais, no podríais ya vivir en el mundo, ya nada os podría satisfacer, Soy el Todo, Soy la Perfección, Soy lo que vosotros añoráis, pero no sabéis cómo conseguirlo, por eso os llamo, por eso quiero que estéis vosotros Conmigo, para que os vaya enseñando a cómo llegar a Mí, poco a poquito, que vayáis probando esos minutos, esos segundos y os vayáis engrandeciendo en Mi Amor. Quiero que vayáis saboreando Mi Amor poco a poco, que se vaya engrandeciendo vuestra alma, que vaya habiendo una necesidad grande de vuestro corazón hacia Mí.
De esta forma, vosotros podréis gozar, poco a poco y en largo tiempo, lo que tendréis eternamente. Cuando lo conseguís de golpe, no lo sabéis apreciar, por eso, Mi Amor, os lo doy a gotas, Mis pequeños, para que lo vayáis saboreando y de esta forma, cuando lleguéis ante Mí, ya estaréis preparados para convivir Conmigo eternamente.
¡Es tanto Mi Amor por vosotros! ¡Es tanto Mi Amor!
J. V.: Gracias, Mi Señor. Ayúdanos a ir saboreando poco a poco Tu Amor para alcanzarte finalmente al terminar nuestra misión aquí en la Tierra.
Seguid Mis Pasos, seguid Mi Vida, Mis pequeños, Yo os enseñé cómo se va tomando, ese, Mi Amor, y es a través del bien que hagáis a vuestros hermanos, con vuestros buenos pensamientos, con vuestros buenos deseos, con vuestras buenas acciones, vais tomando de lo que Yo os enseñé.
El Amor, el Amor cuando lo dais se disfruta, el Amor cuando lo recibís, se disfruta y se añora, no dejéis nunca de dar, porque de esa forma, también recibiréis.
Yo estoy con vosotros, no Me escondo, estoy junto a vosotros, pero tenéis que aprender a estar Conmigo. BuscadMe en el silencio, dejadMe a Mí, platicar con vosotros, dejadMe vivir vuestra vida, dejadMe reeducaros en Mi Amor, dejad que Yo sea en vosotros y, así, iréis viviendo y degustando esas gotitas de Amor, que pronto se volverán un mar, en el cual, vosotros gozaréis inmensamente.
Mi Amor lo es todo, buscad Mi Amor en todo lo que se presente, en todos los momentos de vuestra existencia. No hay nada más bello que Mi Amor y éste, Mi Amor, os rodea, buscadlo y lo encontraréis y cuando no lo encontréis, hacedlo, creadlo, vividlo, para que, también, los que estén a vuestro alrededor, lo vivan, lo gocen y lo deseen.
Gracias, Mis pequeños.