Abr 06_2022 Todos pertenecéis a Mi Cuerpo Místico, pero no todos estáis llevando a cabo vuestra misión para darLe vida a Mi Cuerpo.

Rosario – Mensaje ÚNICO.

.

===============================

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

===============================

.

Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Hijitos Míos, Mi Gracia siempre está pronta para derramarse sobre todos vosotros, sin distinción de raza, credo. Todos vosotros, si estáis Conmigo, si venís a Mí, tenéis esa posibilidad de ganar, también, el Reino de los Cielos. Yo Me di por todos vosotros, y dentro de unos días, vosotros recordaréis Mi Pasión, Mi Muerte y Mi Resurrección. Tomad, Mis pequeños, todos estos actos religiosos como un recuerdo de Mi Donación por vosotros, por vuestra salvación.

Son tan pocos días, en un año, en los que vosotros tenéis estos momentos para recordarMe, pero debieran ser todo el año, en que, día a día, recordarais Mi Donación y escuchara Yo, vuestro agradecimiento por vuestra salvación.

Mi Padre os creó a todos, a todos vosotros, y Mi Redención fue también, para todos vosotros. Vuestro lugar está en el Reino de los Cielos. Habéis bajado a la Tierra a una misión, como las células de un cuerpo, que cada una tiene una misión que llevar a cabo. Y con la misión de cada una de las células del cuerpo, se le da vida a todo el cuerpo.

Vosotros sois celulitas de Mi Cuerpo Místico, o sea, que vosotros tenéis vida en la Tierra, para dar vida a todo el Cuerpo Místico, a Mi Cuerpo Místico, para que vosotros, al uniros con vuestros hermanos, podáis dar vida a toda la humanidad. Todos pertenecéis a Mi Cuerpo Místico, pero no todos estáis llevando a cabo vuestra misión para darLe vida a Mi Cuerpo. Algunos, están extraviados en otros pensamientos, otros, sois como celulitas cancerosas, tratando de destruir a las celulitas buenas, otros no queréis trabajar, y así va menguando la vida, la vida de Mi Cuerpo Místico, o sea, la transmisión de Mis Enseñanzas para toda la humanidad.

Esta es una realidad, Mis pequeños, y os la explico en una forma entendible, para que os deis cuenta que no estáis actuando en la realidad espiritual para la que fuisteis creados. Debierais trabajar al unísono y cada quien, llevando a cabo, de la mejor forma, vuestra misión en la Tierra, y siempre dejándoos llevar por Nuestra Voluntad Divina, que es la Perfección.

Estáis haciendo mucho mal cuando no estáis llevando a cabo, de la mejor forma, vuestra misión: distraéis a algunos, a otros, les quitáis el derecho a actuar, y así, equiparando el actuar humano con el actuar de las células del organismo humano, os vais dando cuenta que vuestro actuar, es muy erróneo. Por eso es tiempo de que Yo, como Médico de cuerpos y almas, venga a eliminar todas esas células que están causando mucho mal a mi Cuerpo Místico. Vengo a unificar en salud, espiritual, en Verdad, a todas las almas, a todas las celulitas que están Conmigo, que están en Nuestra Santísima Trinidad, y eliminaré a todos aquellos que no han querido trabajar para lograr esa unificación, y sobre todo, para obedecer Nuestra Voluntad Divina, que es, actuar en la Perfección.

Lo estáis viendo a vuestro alrededor: cómo unos están trabajando de una forma, otros, destruyendo de otra, otros, eliminando a sus hermanos, otros, destruyendo con venenos a sus hermanos, etc.

Nos da tanta tristeza, que después de haber hecho tanto por vosotros, y después de todo este tiempo, un poco más de dos mil años, no os hayáis unificado. Seguís más a vuestro enemigo y le permitís que os destruya, y por eso teneMos que detener esa maldad que ya habéis aceptado y estáis viviendo, la gran mayoría de vosotros.

Aprovechad, pues, estos días, recordando Mi Pasión, Mi Muerte y Mi Resurrección por todos vosotros, para abriros, nuevamente, las Puertas del Reino de los Cielos. Aprovechad estos días de Gracia, de arrepentimiento, para que volváis a Nuestra Santísima Voluntad, detened ya el mal, no solamente el que está a vuestro alrededor, sino el que lleváis en vuestro interior. Dejad que Mi Gracia os purifique internamente, y ya que hayáis entendido la maldad que traéis en vosotros, cayendo Mi Gracia sobre vosotros, podáis ir destruyendo la maldad que está a vuestro alrededor.

En vosotros está el vivir como Nosotros, en Nuestra Santísima Trinidad quereMos, si vosotros detenéis todo el mal que hay en vosotros y a vuestro alrededor, Nuestra Gracia podrá imponerse en vuestro ser, y de esa forma, el mal, ya no podrá hacer nada contra vosotros. Tendréis Nuestra Presencia en vosotros y el mal no os podrá mover, no os podrá llevar, nuevamente, al error, en el que habéis vivido por tanto tiempo.

DenNos la oportunidad de purificar esta humanidad, soltaos a Nuestra Voluntad, dejad que podaMos Nosotros, Vivir en vosotros y alimentaros, para que seáis, nuevamente, esas celulitas de bien, para que renovéis el Cuerpo Místico que debe Vivir sobre la Tierra. Y así, ayudándoos unos a otros, podáis renovar la Creación que fue creada para vuestro bien.

Os bendigo, Mis pequeños, y dejaos mover por Nuestra Gracia, que os llevará a vuestra perfección.

Gracias, Mis pequeños.