Ago 05_2020 Tened cuidado pues, Mis pequeños, de no perder la Paz y, sobre todo, la seguridad del saber que sois cuidados por Nuestra Santísima Trinidad, que sois cuidados por Mí, vuestro Hermano y Dios Redentor.

Rosario matutino – Mensaje ÚNICO.

================================

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

================================

Segundo Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

 (Lenguas…)

¿A quién pertenecéis vosotros, Mis pequeños? ¿A Mí o a satanás? Si estáis conMigo, debéis vivir lo que es Mío, que es la Paz, el Amor; si no estáis conMigo, viviréis todo lo contrario porque no os estáis apoyando en lo que Yo os he dado, lo que os he enseñado, lo que he vivido, y lo viví para dároslo.

Se os ha dicho que todo lo que está escrito en las Sagradas Escrituras se ha de realizar tarde o temprano, esos son Mis Misterios. Ciertamente, se os anuncian cosas tremendas por venir ya en estos tiempos, que se os ha dicho que son tiempos de cambio, pero insisto, esos son Mis Misterios. Vosotros estáis llevando una realidad humana y espiritual y deberéis vivir paralelos a Mis Misterios que escritos están.

Mis Misterios se darán tarde o temprano y, el conocer lo que os estoy dando, os debe llevar a una Paz profunda, pero ahora Yo os pregunto: ¿Cómo vivís vuestra realidad humana y espiritual? Eso es lo que os debe importar a vosotros, Mis pequeños. ¿Vivís en Estado de Gracia? ¿Vivís como Yo viví, enseñando la vida del Cielo en la Tierra? ¿Vivís para salvar vuestra alma y la de vuestros hermanos? Pero, ¿vivís, sobre todo, para adorarMe y agradarMe con todo vuestro ser?

Cuando vosotros Me tenéis a Mí en vuestro corazón y Yo os dejo que Me gocéis, entonces Me presumís ante vuestros hermanos, habláis de Mí, Me gozáis, Me compartís, estáis enamorados de Mi Amor. Eso es lo bello de tenerMe a Mí, de haberMe encontrado después de haberMe buscado, porque Yo os he dicho que, si Me buscáis, Yo Me dejaré encontrar, pero ahora Yo os pregunto: ¿Estáis haciendo lo que Yo os pido para que Yo Me enamore de vuestra alma, de vuestros actos, del amor que Me dais? Somos Familia, somos hermanos, porque así lo ha querido Mi Padre, vuestro Padre. ¿Qué estáis haciendo para vuestra familia, para Nuestra Familia, tanto la del Cielo, la del Purgatorio, la de la Tierra?

La espiritualidad es la que os une, es la que Nos une a todos y, mediante la espiritualidad que se va acrecentando, precisamente en la vivencia de la Gracia, de las buenas obras, de la vida íntima conMigo, es que se va engrandeciendo Nuestra unión, y llega el momento en que se vuelve indestructible, y a esa es a la que quiero que lleguéis, Mis pequeños, a esa fuerza espiritual indestructible en donde Yo viva perfectamente con vosotros y vosotros conMigo, y así satanás ya no podrá hacer nada contra vosotros.

Escrito está que satanás, en estos tiempos, irá causando problemas en todas partes del mundo y con ello irá acrecentando el miedo, el temor, hasta que lleguéis al terror, al cual no debierais llegar porque, os repito, si vosotros estáis conMigo, no tenéis por qué llegar a ese momento en donde ya no hay Paz en vuestro corazón, pero vais caminando hacia allá, Mis pequeños.

Se están dando acontecimientos cada vez más sonados alrededor del mundo. Vuestra imaginación, manejada por satanás, empieza a hacer estragos en vosotros mismos; os empezáis a imaginar cosas que no conocéis porque son Mis Misterios y, perdón que os diga esto, a vosotros no os incumbe eso, a vosotros no se os ha dado el conocer Mis Misterios y, os repito, vosotros debéis llevar una vida espiritual paralela a Mis Misterios y vuestra obligación es manteneros en vida espiritual profunda en donde vosotros seáis ejemplo, seáis almas que están en perfecta unión conMigo.

Mientras vuestros hermanos estén atemorizados, vosotros deberéis vivir en Paz, en armonía, en vida espiritual profunda, que se note que vosotros realmente estáis viviendo lo que Yo os he enseñado, y no os dejéis llevar a donde satanás os quiere llevar, al terror, porque en ese momento perdéis totalmente vuestras defensas espirituales, y aún humanas, porque ya no hay Sabiduría en vuestros actos ni en vuestros pensamientos, os dejáis llevar por reacciones humanas y a veces fatales.

Tened cuidado pues, Mis pequeños, de no perder la Paz y, sobre todo, la seguridad del saber que sois cuidados por Nuestra Santísima Trinidad, que sois cuidados por Mí, vuestro Hermano y Dios Redentor, que os enseñé cómo se debe vivir en el mundo a pesar de que el mundo esté en vuestra contra, porque primero estuvo en contra Mía y, si me seguís, también estará en contra vuestra, pero Yo vencí al mundo, Yo y vosotros estamos llamados a ello: A vencer también al mundo, porque estáis conMigo.

Gracias, Mis pequeños.