Jul 31_2020 La Cruz es como una escalera que os va llevando poco a poco al Reino de los Cielos. La Fe, la Fe os abre todas las puertas.

Rosario matutino – Mensaje ÚNICO.

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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

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Segundo Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

(Lenguas…) Hijitos Míos, la Cruz es como una escalera que os va llevando poco a poco al Reino de los Cielos. La Fe, la Fe os abre todas las puertas.

Mis pequeños, un alma sin Fe es un alma vacía, es un alma muerta, es un alma que no tiene futuro. Un alma con Fe puede hacer grandes milagros, porque Yo estoy con esas almas. Vosotros debéis aprender a hacer milagros, Mis pequeños, porque por la Fe vosotros Me llamáis; ciertamente vosotros no haréis el milagro, es la Fe en que Yo estoy en vosotros la que va a hacer el milagro.

La Fe lo hace todo posible, en la Fe hay amor intenso. Vosotros movéis Mi Corazón al llevar a cabo el milagro porque hay Fe en vosotros, hay un deseo grande de hacer un bien a un hermano vuestro. Vosotros actuaréis, en estos tiempos nuevos por venir, con una gran Fe; Yo estaré entre vosotros, caminaré nuevamente entre los hombres. El amor os unirá fuertemente a Mi Corazón, volveréis a sentir lo que sentían vuestros Primeros Padres, Adán y Eva, que caminaban conMigo, hablaban conMigo, todo lo hacían conMigo.

Ese es el regalo grande que os tengo preparado para aquellos que por Fe y por amor Me han seguido, que han soportado persecución, que han soportado blasfemias, porque Me habéis defendido. El mundo está contra vosotros porque Me amáis, porque tenéis Fe en que existo, en que vivo entre vosotros, en que os asisto en todo lo que necesitáis.

El hombre ha perdido la Fe, no confía en que Yo estoy entre vosotros y en vosotros. ¿Acaso no observáis vuestro alrededor? Cómo la Naturaleza se mueve, actúa, cómo vosotros mismos buscáis con Fe cosas que no entendéis que existen, pero que no entendéis por no tener Fe y no tener confianza en Mí. Veis los astros en el firmamento, ¿por qué no se caen?, ¿por qué no chocan entre ellos? Todo tiene un principio y un fin, ¿quién mueve todo eso? Soy Yo, vuestro Dios, todo lleva un orden y Yo estoy atrás de todo ese orden; ciertamente, el Pecado Original llevó todo al desorden, pero lo creado lleva un orden porque Yo os protejo. Satanás quisiera destruir todo lo creado, pero no puede porque Yo estoy muy por encima de él.

Todo esto que vendrá, esta purificación que ya estáis viviendo, llevará nuevamente a la Naturaleza, a todo lo creado, visible e invisible, a un orden perfecto, al Primer Orden. Vosotros manteneos en Fe, Mis pequeños, y en una confianza plena en que, si estáis conMigo, podréis pasar a ese Nuevo Mundo que os tengo preparado.

El desorden está alrededor vuestro, satanás ha llevado todo al desorden y lo estáis viviendo; desgraciadamente, muchos de vosotros os habéis acostumbrado a ese desorden. Todo volverá a la sencillez, a la humildad, al Amor Verdadero.

Venid conMigo, Mis pequeños, venid conMigo, acompañadMe a la Cruz, ésta os lleva a la perfección de vida. Os he dicho al principio que la Cruz es como una escalera para llegar al Cielo, mientras más meditéis en ella, amándola, porque fue la Cruz la que os ha dado la Redención y con ella vuestra salvación, así iréis subiendo de niveles espirituales hasta alcanzar la perfección en vuestra santidad.

Tenéis que poner de vuestra parte, Yo os doy el principio de las cosas, pongo en vuestro corazón ese deseo de mejoraros y queda en vosotros buscar vuestra perfección. Solamente satanás es el que os presiona para vivir en el mal, Yo os tengo siempre asegurado el Bien y no presiono, a pesar de que Yo quisiera que todos actuarais en el Bien, pero es vuestro libre albedrío el que escoge. Os he dicho que, ciertamente, el actuar en el bien y en estos tiempos de gran tribulación, os lleva a ataques de vuestros mismos hermanos.

Yo os voy dando las Verdades de la Fe. Escrito está que, siempre que va a haber un cambio en la historia de la humanidad, Yo os preparo a través de videntes y profetas para que podáis entender los momentos que vais viviendo, pero queda en vosotros el aceptar o el rechazar esas ayudas. Si aceptáis la ayuda, ahorraréis mucho tiempo y dolores; si no aceptáis esa ayuda, erraréis el camino y probablemente tarde os daréis cuenta de vuestro error de haber escogido un camino incorrecto.

Entended que Yo, vuestro Dios, siempre quiero lo mejor para vosotros, pero seguís siendo esos niños tercos, como el pueblo judío, que por más que Yo quería ayudarles, Me negaban, Me daban la espalda, Me traicionaban, adoraban a otros dioses, Me hacían a un lado. Es el hombre que ha abierto su corazón a satanás y satanás os desvía, os lleva por caminos incorrectos, os lleva a la negación del Bien, que Soy Yo, y sufrís, y sufrís mucho y no queréis entender que podéis llegar hasta la muerte eterna si os mantenéis en vuestras necedades de seguir abriéndoos hacia el mal a donde satanás os lleva.

Hay un Bien y un mal, vosotros escogéis, tenéis vuestro libre albedrío, vosotros escogéis hacia dónde queréis ir. Vuestra decisión os va a llevar hacia el camino correcto, que es la salvación eterna, u os va a llevar por el camino incorrecto y la condenación eterna, y va a ser vuestra decisión, y esto os lo digo porque luego Me echáis la culpa de vuestros males y vosotros sois los que escogéis.

Tened cuidado, pues, con lo que decís y, sobre todo, cómo os referís a Mí, vuestro Dios, que Soy la Bondad absoluta; Yo nunca os voy a llevar hacia un mal, el mal lo escogisteis vosotros. Tened, pues, cuidado con lo que decís porque eso os puede llevar un castigo, un castigo fuerte, porque Yo Soy vuestro Dios.

Mis pequeños, el tiempo se acerca, el tiempo de la gran liberación. No entendáis estos momentos como de dolor y de tristeza, mejor entendedlos como de liberación en donde satanás os dejará de molestar, dejará de causaros tanto mal, como lo ha venido haciendo por siglos. Dejad que Yo mueva vuestra vida, que os lleve hacia la perfección de vuestros actos, de vuestros pensamientos, de vuestro futuro, vosotros no sois lo suficientemente sabios para escoger el camino correcto.

Si realmente el hombre hubiera entendido, desde un principio cuando Yo Me di por vosotros, y hubiera ascendido por la Cruz, como os dije, como escalera creciendo en Virtudes, en amor, porque eso es la ascensión del alma, ir creciendo en perfección, en este tiempo debiera estar ya gozando en la Tierra lo que se goza en el Cielo, pero el hombre continuamente Me da la espalda, cae y tarda un tiempo en reconocer su error y tarda en levantarse también por su soberbia.

Hasta que no lleguéis a una humildad verdadera y profunda, hasta que no reconozcáis ante Mi Presencia que Me necesitáis y que os queréis apartar del mal, hasta que no os deis cuenta de que no podéis caminar solos, que Me necesitáis a Mí para mejoraros y perfeccionaros, es cuando avanzaréis en ascensión rápida hacia Mí.

Estar ante la Cruz, meditar todo lo que Yo hice por vosotros, os va llevando a esa escalera ascensional de perfección. Estar ante la Cruz y dejarMe a Mí tomaros de la mano, explicaros lo que es Mi Amor y hacia dónde os lleva Mi Amor, es cuando vosotros entenderéis que no perdéis vuestro tiempo estando ante Mí y escuchándoMe en vuestro corazón.

La perfección se logra en la sencillez, en la humildad y en el agradecimiento que Me debéis por haberMe dado por vosotros. Pocos, muy pocos son los que Me agradecen las Bendiciones que Yo derramo a diario para vuestra vida, para vuestro ser, para vuestra alma, para todo lo que necesitáis. Falta mucha gratitud de parte vuestra; debéis aprender, Mis pequeños, a agradecer porque en el agradecimiento reconocéis lo que Yo he hecho por vosotros.

Sed más sencillos, sed humildes, sed servidores Míos, y así es como escalaréis más rápidamente esta Cruz de salvación que os llevará a vuestra santidad y hacia vuestra perfección eterna.

Gracias, Mis pequeños.