Rosario matutino – Mensaje ÚNICO.
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Mensaje de Dios Padre a J. V.
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Primer Misterio. Habla Dios Padre.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Mi Misericordia infinita cae sobre todos vosotros como rocío mañanero, que impregna… (Lenguas…) que rocía vuestras hojas con este rocío de Mi Amor. Soy como la suave brisa que acaricia vuestra cara, Soy como el murmullo del río que os lleva a una paz profunda, Soy el Amor que vivifica todo, que sana todo, que renueva todo.
Yo Soy el Dios al que vosotros buscáis para que Yo os dé descanso después de un día de trabajo, para que tome vuestras manos adoloridas y les dé descanso. Soy vuestro Dios que os lleva a la paz profunda de vuestro corazón…
(Me toma el Espíritu Santo y me hace sentir Su Amor a tal grado que me produce suspiros profundos porque siento que exploto por dentro por Su gran Amor)
…que incendia vuestro corazón de amor, de un amor puro, santo. Soy ese Fuego de Amor que limpia todo vuestro ser y lo deja transparente, purísimo. Soy esa música angelical que os hace recordar vuestra infancia espiritual, que os trae la paz del bebé pequeño que duerme tranquilo, con una paz que sus padres le dan, que se siente seguro en los brazos maternos y que se alimenta de esa leche que los pechos de su madre le dan.
Soy vuestro Dios que os cubre con Mi Amor, que os protege de todo mal, que os lleva por caminos de rectitud. Soy vuestro Dios que os enseña todas las maravillas creadas y el porqué de ellas, para consentiros, para amaros, para que entendáis Mi Amor de Padre, de Creador, de Redentor. Soy vuestro Dios que sólo busca vuestro bien y os quiere llevar de regreso a vuestro Hogar, Mi Reino Eterno. Soy vuestro Dios que ha creado todas las maravillas que veis y las que no veis, para que os recreéis en ellas, para que Me agradezcáis, para que gustéis de Mi Creación.
Soy el Alfa y el Omega, Soy el Bien Supremo, Soy el Único, el Amor Increado. Todo lo que gozáis, todo lo que os da paz, alegría y os produce amor, fue creado para vosotros porque os amo; la Creación entera fue hecha para consentiros. Os amo, Mis pequeños, os amo, Mis creaturitas, Mis desvelos de Amor; os cuido en todo momento, os llevo de la mano para daros Mi Sabiduría, para que entendáis Mi Amor, Mi Amor tan grande por vosotros.
¡Oh, Mis pequeños, cuánto os amo a cada uno de vosotros! Os creé en cada detalle fijándoMe en cada uno de vosotros. Sois Mis florecitas del campo, parecidas, pero no iguales, y con todas Me recreo porque puse todas Mis capacidades creadoras en cada uno de vosotros y os recuerdo a cada uno de vosotros al crearos. Me recreo en el Amor que puse en vuestro corazón, Mi Amor en vosotros para que gustarais de él, para que Me recordarais al ver Mi Creación que os rodea, para que en cada momento, en cada instante de vuestra existencia, Me agradezcáis Mis Bondades, Mis Perfecciones en vosotros y Mi Amor Infinito en vuestro corazón.
Cada uno de vosotros sois obra maestra de Mis manos. No veáis solamente vuestro exterior, la perfección la lleváis en vuestro corazón, en vuestro interior, en vuestra alma, que es parte de Mí. Dejaos llevar por Mis Susurros de Amor, dejaos llevar por Mis Encantos Divinos. Volad hacia Mí, Mis pequeños, que vuestra alma todo lo puede, porque vuestra alma Me reconoce como vuestro Creador y como fuente de todo Bien.
Dejad que vuestra alma goce de Mis Bienes que os comparto, que os regalo, porque sois Mis hijos, porque sois Mi Creación, porque os consiento, porque quiero todo Mi Bien para cada uno de vosotros.
Ved el alma de vuestros hermanos, Mis pequeños, aprended a ver el interior, el corazón de vuestros hermanos, porque ahí estoy Yo, vuestro Dios; no os fijéis en lo temporal, en lo pasajero, aprended a ver lo eterno que lleváis en vuestro ser.
Aprended a volar hacia Mí para que Yo os regale de Mis Bienes. BuscadMe, Mis pequeños, en todo momento, sois Míos y os consiento. Mi Amor es vuestro, Mi Amor es vuestra vida, es el motor de vuestra existencia, buscadMe en todo momento cuando alegría tengáis, cuando afligidos estéis. Estoy con vosotros, sois parte de Mí, y si Me dejáis transformaros, purificaros, un cambio grande tendréis y gozaréis infinitamente.
Yo Soy Fuente de todo Bien y el que se acerca a Mí goza de ese Bien, que es vuestro, porque sois Mis hijos. Bendiciones continuamente caen sobre vosotros, Yo alimento vuestra alma, cuando así Me lo pedís, y cuido de todo vuestro ser en todo momento de vuestra existencia. Las almas que a Mí se acercan, reciben Mi Alimento Divino, crecen, suben y vuelan hacia Mí por más de ese alimento y para agradecerMe Mis Bondades.
Estar conMigo, Mis pequeños, es vivir el Cielo aún en la Tierra, es gozar de Mis Misterios de Amor sin siquiera conocerlos. Venid, Mis pequeños, venid a Mí, vuestro Dios, purificaos, llenaos de Mi Amor, gozad de Mis Bienes, Yo Soy vuestro Dios y quiero lo mejor para todos vosotros, que sois Mis creaturitas a las que cuido y defiendo de todo mal, a las que ayudo a crecer y a perfeccionar, si así Me lo pedís. Os quiero santos, os quiero bellos, os quiero unidos a Mi Corazón, sois Míos, quiero ser Yo en vosotros.
DejadMe, Mis pequeños, que os transforme. DadMe ese gozo, Mis pequeños, dejadMe a Mí, vuestro Dios, que a vosotros, como florecitas, os riegue con Mi Amor, con Mis Bendiciones, con Virtudes y Carismas, con bellezas inigualables. Os amo a cada uno en lo particular, dejadMe pues, Mis pequeños, amaros más, dejadMe perfeccionaros, dejadMe recuperar para vosotros lo perdido por la falla del principio; dejadMe renovar todo vuestro ser, como fuisteis creados en un Principio, cuando Me gozaba Yo plenamente con vuestros Padres.
Quiero renovaros, quiero gozarMe en vosotros y ver nuevamente Mi Perfección Divina en cada uno de vosotros. DadMe ese regalo, Mis pequeños, soltaos a Mi Voluntad para que os perfeccione y os haga bellos, santos, y Me goce con vosotros, con cada uno de vosotros.
Mi Amor henchido está de Amor por vosotros, explota de Amor por cada uno de vosotros. Sois Mi obra, cada uno de vosotros sois Mi obra y os quiero perfectos, porque Yo Soy el Perfecto y no quiero ninguna imperfección en vosotros, os quiero bellos, santos. DejadMe, Mis pequeños, renovar Mi Obra en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.