Abr 30_19 Ahora vengo caminando hacia vosotros, vengo a encontrar Mi rebaño, el rebaño que se ha mantenido bajo Mis Leyes, bajo Mi Amor.

Rosario vespertino-Mensaje ÚNICO.

===============================

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

===============================

Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Sobre: Son tan pocas las almas que quieren acompañarMe eternamente. ¡Cuánto Dolor Me causáis! ¡Cuánto Dolor causáis al Cielo!, el Cielo entero ora por vosotros, los que estáis alejados, los que no queréis entender la gravedad de los momentos que estáis viviendo.

Estoy en la Cruz, pero he bajado de ella, Resucité para el bien de aquellos que Me aman, que quieren estar Conmigo, que han sufrido junto Conmigo, junto con Mi Madre.

Ahora vengo caminando hacia vosotros, vengo a encontrar Mi rebaño, el rebaño que se ha mantenido bajo Mis Leyes, bajo Mi Amor.

Estoy entre vosotros, Mi Santo Espíritu está entre vosotros, os conoceMos, y estáis marcados, ya, los que vendréis Conmigo, los que seréis preservados para iniciar un Nuevo Mundo con Nosotros.

Mi Paz, Mi Amor, está en vosotros, ciertamente, caéis, pero os levantáis, pero Mi Palabra habita en vosotros, os mueve, os dejáis mover por Mi Voluntad, porque sois Mis apóstoles de estos tiempos. Sois el rebaño que iniciará una nueva generación, sois el rebaño, ciertamente, escogido, pero escogido por vuestros méritos.

Estos son tiempos de una gran lucha espiritual, todos estáis sufriendo en mayor o en menor grado, los ataques de satanás, pero la forma en que vuestro corazón recibe estos ataques, o ve los ataques que se dan en el Mundo, mueven vuestro corazón en forma diferente. Algunos se conmueven más o menos, a otros no les importa. Aquellos que os doléis con lo que le pasa a Mi iglesia, con lo que le pasa a vuestros hermanos, con lo que veis de las injusticias de los hombres, de los gobiernos. Cuando lo tomáis, realmente, y os importa, lloráis por aquellos que sufren, a otros no les interesa, porque sienten que, al tener lo necesario, no os debéis meter en la vida de los demás, vuestro corazón no se duele en el dolor de vuestros hermanos. No hay bien en vosotros, no hay amor que queráis compartir, sólo os interesa tener lo suficiente de las riquezas del mundo y no pasar ningún tipo de desavenencia, ningún tipo de dolor y con eso os basta.

En cambio, los que estáis Conmigo, os doléis con dolor de vuestros hermanos, oráis, cuando esa es vuestra única opción para ayudar y ayudáis cuando podéis dar de lo que tenéis para alimentar al hermano, para aconsejarlo, para volverlo a bien, para apoyarlo en sus necesidades humanas y espirituales. Eso es lo que es un ser humano, un hermano Mío, que no solamente dais, sino que os dais, como Yo Me di todo el tiempo por vosotros.

Estáis viviendo momentos difíciles pero, especialmente, para aquellos que no tenéis Fe, para aquellos que no tenéis Esperanza, que no Me buscáis, porque no queréis estar Conmigo, porque no queréis luchar por el bien que Yo os traje a la Tierra, para que lo vivierais y lo compartierais.

Mi vida fue Vida de Ejemplo, para que la vivierais todos vosotros, Soy vuestro Hermano Mayor y os vine a poner el Ejemplo de cómo vivir una vida santa, para que os pudierais ganar, fácilmente, el Reino de los Cielos, pero más os preocupa el mundo; satanás ha desviado vuestra atención por las cosas del mundo y eso os ha gustado más. Pero no os dais cuenta que eso os lleva a sufrir más, porque os lleva, no solamente a desear sino a ambicionar las cosas del mundo, eso os causa mucho problema interior, queréis más, queréis conseguir más y se vuelve una enfermedad, que no podéis controlar.

Estoy entre vosotros para ir tocando corazones, y tratando de rescatar almas que no quieren estar Conmigo, que no Me buscan. ¡Me duele tanto que no respondáis a Mis llamados! Voy permitiendo desastres por un lado y por otro lado, causados por satanás, para que reaccionéis y os volváis a Mí.

Entended, Mis pequeños, que solamente hay dos fuerzas tremendas en el Universo, la Mía, que es el Amor, la más poderosa que existe, y la de satanás, que es el odio, la maldad, muy fuerte, pero no tan poderosa como el Amor, y la gran mayoría de vosotros, habéis escogido, erróneamente, la fuerza satánica, que os va a llevar a vuestra propia destrucción, ya desde la Tierra y luego eternamente.

Yo voy junto a las almas, las amo y, hasta el último momento de vuestra existencia, estoy con vosotros, y os pongo todas las posibilidades de arrepentimiento para que volváis a Mí, pero son tan pocas las que responden, y eso que Yo Me di en totalidad por vosotros. Fueron dolores increíblemente grandes, que ningún ser humano podría soportar, pero no valoráis todo lo que Yo, como Dios, he hecho por vosotros y sigo haciendo por vuestra salvación.

Los acontecimientos, negativos, dolorosos, se seguirán dando y aumentando en fuerza; le permito esto a satanás, para que de ese mal, Yo saque un Bien, que sea vuestro arrepentimiento, que os volváis a Mí, que Me pidáis perdón y Yo, con Mi Misericordia os perdonaré.

Pero insisto, son tan pocas las almas que quieren acompañarMe eternamente. ¡Cuánto Dolor Me causáis! ¡Cuánto Dolor causáis al Cielo!, el Cielo entero ora por vosotros, los que estáis alejados, los que no queréis entender la gravedad de los momentos que estáis viviendo.

¡Vendrá algo tan fuerte, que ya ni tiempo tendréis para arrepentiros! Esta generación necesita ser, ya, purificada, hay demasiada maldad entre vosotros.

Os he avisado, de múltiples formas alrededor del mundo, estáis avisados todos vosotros, pero seguís cerrando vuestros ojos y tapando vuestros oídos, para no querer ver ni escuchar lo que viene de Mí para vuestro bien, para vuestra salvación. Vuestro error, lo pagaréis muy caro y no Me podréis reprochar nada. Yo Me di completamente por vosotros y os sigo buscando, os lo repito, os seguiré buscando, hasta el último segundo de vuestra existencia aquí, después, viene vuestro Juicio y ya no tendréis oportunidad de arrepentimiento, cuando os encontraréis ante la Verdad Absoluta, ahí estaré Yo, ya no con Mi Misericordia, sino como Juez Severo, porque mucho os di y no respondisteis a Mi llamado.

Gracias, Mis pequeños.