Abr 09_03 Por Mí Misericordia y Amor, se le dará al hombre otro tiempo para reparar el pasado.

Mensaje.

 

Mensaje de Dios Padre a J.V.

 

Habla Dios Padre,
Sobre: Por Mí Misericordia y Amor, se le dará al hombre otro tiempo para reparar el pasado.
Sí, Mis pequeños, todo lo que empieza tarde ó temprano tiene su final; éste es el final de una época, éste es el final de una etapa de la Creación, es el final de un tiempo que el hombre desperdició en gran manera, pero, por Mi Misericordia y Mi Amor, se le dará al hombre otro tiempo para reparar el pasado.

Estos tiempos que el hombre ha tenido, si lo meditáis, han sido para que fuera buscando su perfeccionamiento.  Mi Hijo os enseñó Mi Voluntad y os dijo; “Sed perfectos como Mi Padre es Perfecto” y a esto quiso llevaros a todos vosotros, a recuperar la perfección perdida por el Pecado Original.

Desde la caída del hombre en el Pecado, éste ha ido recuperando poco a poco lo perdido, tanto en lo tecnológico como en lo espiritual.  Vuestros pasos han sido muy pequeños, porque no ha habido la confianza total de soltarse a Mi Voluntad.  Si el hombre hubiera confiado en Mi, vuestro Padre y Creador, desde los inicios, ahora vuestra generación estaría muy alta en conocimiento y perfección, pero sois un pueblo de cerviz dura, tercos, inseguros hasta de vosotros mismos, porque preferís confiar en el hombre y no en vuestro Dios. Este apartarse de vuestro Dios para hacer vuestra propia voluntad, ha ido atrasando vuestro desarrollo, especialmente en lo espiritual; por vivir haciéndole caso al maligno y a sus obras.

Como os he dicho antes, Mi Misericordia y Mi amor son tremendos, son infinitos y por ello quiero levantar a ésta nueva generación a altos niveles de perfección, pero para que no se Me impida llevar a cabo Mi Obra Nueva, he de hacer una limpia mundial y he de tomar solamente a aquélla “buena semilla” con la que podré contar para restablecer a Mi Pueblo amado.

Sí, desgraciadamente muchas almas de ésta generación prefirieron volcarse hacia el mal, su corazón se corrompió y por lo tanto no recibí el fruto que Yo esperaba de ellas y recordando las Palabras que os dio Mi Hijo sobre ésta actuación del hombre, así se llevará a cabo, “El árbol que no dé buenos frutos será arrancado de la tierra y arrojado al fuego”.

Muchas almas actuales merecen el fuego eterno por sus malas obras y por su mal proceder, pero Mi Misericordia se mueve en compasión por ellas gracias a la oración y a las buenas obras de muchas otras almas que habiéndose mantenido bajo Mi Voluntad y Mi Amor han intercedido por ellas como Mi Hijo os enseñó.

Mis hijitos, Mis pequeños, grandes cambios se avecinan, recibidlos por favor como un don divino y agradezcan desde ahora lo que le voy a dar a ésa nueva generación que iniciará un bello caminar hacia la perfección que Yo mismo le indicaré. Preparaos bien porque entre ellos posiblemente estaréis vosotros ó hermanos vuestros ó amigos íntimos ó gente muy cercana y querida por vosotros.  Apoyaos y apoyadlos en la oración, en la donación, en la vida en las virtudes que Mi Hijo os enseñó y   así Me ayudaréis en la formación de Mi Nuevo Pueblo de Amor.

Muchas Gracias, Bendiciones y Perdón recibirá ésta actual generación y grandes regalos de Mi Corazón recibirá la que sigue.  Confiad en Mi y gozad ya desde ahora Mi decisión del cambio porque con él os voy a liberar de las garras del mal y os voy a traer la salud espiritual y corporal por mucho tiempo por venir.

¡Alegraos, cantad de alegría, bailad al son del arpa y de la cítara, porque vuestro Dios ya viene y viene para hacer gozar infinitamente a los justos!

Yo os bendigo en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo y en el del Amor de Mi Santo Espíritu.