Mayo 29_08 No quiero que Me veáis como Profeta de calamidades.

Rosario

Temas:

  • Me duele deciros todo esto, Mis pequeños, porque os amo, porque Me di en totalidad por todos vosotros para que no padecierais ésta purificación tan dolorosa.
  • No todo se ha perdido, volved a Mí, sed de ésos hijos pródigos que ya no buscan el mundo, sed pródigos en Mi Amor en buscar los bienes del Cielo. 
  • Os amo, os amo infinitamente y os recuperaré por el Amor que vosotros, Mis hijos, pongáis sobre vuestros hermanos.
  • Nuevamente, Mis pequeños, os pido mucha oración por vuestros hermanos, por su falta de espiritualidad, por su olvido al Amor. 
  • Hijitos Míos, no quiero que Me veáis como Profeta de calamidades, Yo Soy vuestro Padre y vuestro Dios y os he dicho que os creé para el Bien.
  • Mi Gracia permanece inundando la Tierra, tomadla, Mis pequeños, es para todos.
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    Mensajes de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

    Ofrecimiento, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
    Sobre: Me duele deciros todo esto, Mis pequeños, porque os amo, porque Me di en totalidad por todos vosotros para que no padecierais ésta purificación tan dolorosa.
    (Lenguas…) Mi Paz y Mi Amor quede con vosotros, Mis pequeño, Yo, Cristo Jesús, vuestro Hermano, el Amor Divino Encarnado, el Amor que bajó para estar entre los hombres, os traigo Mi Paz y Mi Amor, Mis pequeños.

    ¡Oh!, ¡la tribulación del mundo!, seguís, seguís en el pecado, seguís escogiendo los caminos equivocados, seguís desaprovechando Mi Gracia y Mi Misericordia.

    ¡Oh!, ¡Os amo tanto!, intercedo tanto por vosotros y vosotros, seguís estáticos, impávidos, no os mueve Mi Gracia, no os mueve Mi dolor, Mi Misericordia Infinita se desperdicia, ¿qué necesitáis pues, para cambiar, Mis pequeños?, ¿no os ha bastado Mi donación total por vosotros, para obtener de ella vuestro cambio?, ¿no os ha bastado que todo un Dios viniera a enseñaros cómo crecer y alcanzar los bienes eternos?, ¿no os ha bastado que Yo, vuestro Dios, Hijo del Padre, viniera a convivir entre los hombres y os enseñara el camino de la perfección?, ¿qué queréis pues, Mis pequeños?

    Me tuvisteis desde pequeñito, pudisteis ver Mi Pequeñez, Mi Inocencia, como niño, ¿no os tocó esto vuestra sensibilidad?, ¿no tenéis sensibilidad en Mi Amor?

    Tenéis Mi Ejemplo cuando empiezo, ante los hombres, a transmitir las Verdades del Cielo, ¿no os mueve esto al cambio, con la Sabiduría Divina que os he dejado, con los ejemplos de Amor hacia vuestros hermanos, Mi Donación en la Evangelización?, ¿no os mueve esto al cambio?

    Tenéis Mi Ejemplo ante los ataques de Mis enemigos y aún de los ataques satánicos y Mi Mansedumbre y Humildad siempre triunfante ante ellos, ¿no os mueve esto a vuestro cambio?

    Veis también la traición de uno de los Míos, el ataque de Mi mismo pueblo, apoyado por los romanos, cómo Soy azotado, desangrado, Crucificado, asesinado por ellos, pero Mi Amor perdonando a todos y ofreciendo todo Mi Ser, Mi Dolor pero, Mi Amor por su salvación y ¿no os mueve esto al cambio?

    Tenéis Mi Promesa realizada con Mi Resurrección, promesa también para vosotros, para que a pesar de vuestra vida inútil y pecadora, en arrepentimiento de corazón, podáis obtener vuestra salvación y ¿no os mueve esto al cambio?

    Sois de corazón duro, Mis pequeños, mente difícil, estáis cegados por el pecado, os habéis comprometido con el mal, os queréis mantener apartados de la Luz y viviendo en las tinieblas con el enemigo, a pesar de que Yo os he traído la Luz, no la queréis ver ni la queréis seguir.

    Se os ha permitido la presencia de Mi Madre, la Siempre Virgen María, en Apariciones, para mover vuestro corazón y Ella pidiendo que regresarais a Mí y vuestro corazón, obstinado, no quiere.

    ¿Qué esperáis pues, Mis pequeños, si he derramado Mi Misericordia sobre vosotros y no queréis cambiar? No entendéis que vais por caminos de perdición y de dolor, se os ha profetizado y anunciado en múltiples formas y os mantenéis impávidos, no queréis mover ni un solo dedo, no queréis escuchar Mis peticiones, que son favorables para vuestra vida y para vuestra espiritualidad.

    ¿Qué esperáis pues, Mis pequeños, si habéis dado la espalda a las Leyes de Dios y habéis creado vuestras propias leyes, basadas en el pecado y en la maldad?

    Fuisteis creados para vivir en el Amor y lo habéis despreciado, ¿qué esperáis pues, Mis pequeños, cómo queréis que responda vuestro Creador?

    Vuestra vida está sostenida por un hilo muy débil ya, la Espada de la Justicia está por caer sobre la humanidad, Mi Misericordia Infinita era vuestra última oportunidad para reconciliaros con el Padre, vuestro Dios y Creador, el Amor Infinito, y habéis desaprovechado la oportunidad. Pocas, muy pocas almas han entendido el Amor y lo han seguido. Se os han dado grandes oportunidades de cambio y no las habéis tomado, insistís en hacer vuestra propia vida, apartados de las Leyes de vuestro Dios. No acudís más a Mí, vuestro Dios, para pedir Mi Protección y cuidados y así, habéis preferido estar bajo las fuerzas de satanás, que ahora guían los destinos de la Tierra.

    Os prevengo, pronto, muy pronto, en menos tiempo del que os imagináis, grandes calamidades cursarán por toda la Tierra. El dolor no se apartará ya… (Lenguas…), de entre los hombres, Me duele deciros todo esto, Mis pequeños, porque os amo, porque Me di en totalidad por todos vosotros para que no padecierais ésta purificación tan dolorosa, que padeceréis en breve, pero no quisisteis entender ni atender a Mi llamado. Soy el Dios del Amor, Soy todo Bondad, Bondad Infinita, pero Me habéis hecho a un lado de vuestra vida, no queréis ser consentidos por el Amor y habéis preferido habitar con satanás.

    ¡Cuánto Me duele, Mis pequeños, el dolor que tendréis!, pero será un dolor de purificación. El dolor os hará entender lo que despreciasteis, pero también os digo que cuando queráis volver a Mí, allí estaré, aliviaré vuestro dolor y vuestras penas en base a vuestro arrepentimiento y será el arrepentimiento mundial el que logre, después de vuestro dolor, recuperar Mi Gracia y Mi Presencia entre vosotros. Mi Sangre Preciosa se derramará sobre vosotros y os dará nueva vida, vida espiritual, como no ha habido sobre la Tierra, después de la que tuvieron vuestros Primeros Padres.

    Se renovará todo en el Amor y Yo conviviré entre vosotros, enjugaré vuestras lágrimas y la risa saldrá nuevamente de vuestros labios, el dolor será olvidado por un tiempo y gozaréis los bienes del Cielo, aún aquí en la Tierra. Mi Amor triunfará sobre el mal, al cual le habéis abierto ya las puertas y que ha omnibulado vuestro corazón y vuestra mente. Mi amor purificará todo, Mi Amor volverá transparente todo aquello que está opaco y obscuro por el poder de satanás. Mi Amor os dará la libertad, libertad que habéis perdido ahora, porque os habéis encadenado a satanás y a sus obras. Vendréis a Mí, regresaréis al rebaño, regresaréis a la familia esperada por Mí, desde antaño, seréis Mi pueblo nuevamente y Yo, vuestro Dios, gozando entre vosotros. ¡Cuánta alegría habrá, Mis pequeños!, Mi Presencia cicatrizará vuestras heridas, éstas se mantendrán como recuerdo de vuestra traición y de vuestro olvido a Mi Amor y a Mis Leyes. Por un tiempo habrá paz infinita en la Tierra y el Amor reinando os hará crecer a grandes niveles espirituales, los cuales gozaréis infinitamente.

    Cuanto os amo, Mis pequeños, éstas serán las Gracias y Bendiciones que ésas almas humildes, sencillas y donadas obtendrán. Las almas fieles que se mantendrán hasta el final, a pesar de la prueba, ¡benditas ésas almas!, ¡bendita la Gloria que caerá sobre ellas!, ¡bendito Mi Amor que gozarán ésas almas, que gozosas aclamarán en himnos su alegría hacia Mí, vuestro Dios! Gozad pues con ellas desde ahora, que si no os toca vivir ésos momentos, tomadlos para vosotros en éstos momentos y agradecedMe a Mí, vuestro Dios, que Mi Misericordia es Infinita y nunca se acabará. Os amo, Mis pequeños, os amo con todo Mi Corazón.
    Gracias Mis pequeños.

     

    Primer Misterio, Habla Dios Padre,
    Sobre: No todo se ha perdido, volved a Mí, sed de ésos hijos pródigos que ya no buscan el mundo, sed pródigos en Mi Amor en buscar los bienes del Cielo.
    Hijitos Míos, el hombre vive en la conveniencia, conveniencia humana. Exige bienes, exige cuidados sin merecerlos, sin merecerlos por su comportamiento, sin merecerlos por su falta de donación.

    Yo os cuido por ser Mis hijos, os cuido porque os amo, pero Me exigís como si fuerais verdaderos hijos de familia. Ciertamente lo sois, pero sois ésos hijos pródigos, esos hijos que se han apartado de la familia, ésos hijos que rechazaron el estar con Su Padre, con Su Dios, el mantenerse bajo Sus Leyes y Preceptos.

    Sí, quisiera Yo que fuerais ésos hijos pródigos pidiendo regresar, pero ahora sois hijos pródigos del mundo. Estáis pidiendo llenarse de mundo, llenarse de maldad, vivir en la corrupción y en el pecado. Y Me duele tanto ver cómo pedís, imploráis entrar al mundo, convivir entre vuestros hermanos que se han dado ya por el mundo y su pecado, en lugar de venir como hijos pródigos a Mí, vuestro Dios y pedir que os acepte nuevamente bajo Mi tutela, Mi Gracia y Mi Misericordia.

    Observad a vuestro alrededor y ved cómo se ha desviado el mundo, la juventud se ha dado por el mal, buscan el mal, imploran poder entrar a ésos caminos de mal y cuando tenéis todo en vuestra contra, que ya habéis caído peor que animales, no os acordáis de Mí, vuestro Dios, quedáis aprisionados con las cadenas del vicio, del sexo, del pecado, deshacéis vuestra vida. ¿Por qué no os dais cuenta de esto? desde muy temprana edad quedáis destruidos. ¿Qué habrá de vuestro futuro?, ¿qué haréis para reparar el mal que le hicisteis a vuestra alma y a vuestro cuerpo?, ¿en dónde está vuestra inteligencia de la que tanto presumís? Utilizáis las capacidades que Yo os he dado para poder adentraros más en el mal y no para evitarlo.

    Cuando ya caísteis y estáis destrozados por el mal, ¿quién os ayuda a levantaros? El medio que habéis escogido, es corrupto, sin espiritualidad, sin Dios, no hay entre ellos alguien que se acerque a Mí y pida Mi ayuda y por eso vuestro mal perdura por mucho tiempo. Estáis escogiendo mal vuestro camino y vuestra vida, estáis destrozando todo aquello que Yo os di con Amor. Os he dado cualidades, capacidades inmensas y las despreciáis, las hacéis a un lado de vuestra vida y os comprometéis con el mal y lo peor de todo es que lo ayudáis a que éste crezca, en lugar de quitarle vida para que no afecte a vuestros hermanos.

    Habéis potencializado el mal sobre la Tierra, en lugar de cumplir con la misión por la que vinisteis y que es, que con Mi Amor, le fuerais quitando ése poder y el trono con el que se había enseñoreado. Vinisteis a la Tierra a ponerMe a Mí, vuestro Dios como Dueño sobre todas las cosas, como el Primero a quien debíais seguir y servir, a encumbrarMe en lo más alto en la vida del hombre. A eso vinisteis Mis pequeños, a luchar contra el mal y ha sido todo lo contrario, para muchos de vosotros. Os envolvisteis con el mal, aceptasteis, lo que en un principio fueron sutilezas y que luego os llevó a la degradación total de todo vuestro ser.

    Mis pequeños, el hombre no nace malo, el alma baja con Mi Amor, el alma es protegida por Mi Amor, pero es el alma la que se va llenando de maldad poco a poco, empezáis a convivir con el mal y lo vais haciendo crecer en vuestro corazón y él va tomando las riendas de vuestra vida. En el libre albedrío del hombre, así como hacéis crecer el mal en vuestro corazón poco a poco, debierais haber hecho crecer el bien, Mi Amor, también en vuestro corazón, poco a poco, para que el bien y Mi Amor os tomaran completamente y fuerais ésa Luz entre las tinieblas en las que ya estaba el mundo, pero es el vicio en la maldad y en el error, que os lleva a que perdáis lo más grande que os di, Mi Amor en vosotros.

    Satanás no soporta ver un alma llena de Mi Amor, las ataca y si no estáis Conmigo, las acaba venciendo, como lo ha hecho con tantas y tantas almas en todo el mundo.

    Sí, Mis pequeños, en lugar de haber tomado el bien para alimentar vuestra alma, preferisteis el mal que os lleva a vuestra destrucción y así veis ahora miles y millones de almas destruidas, por haber preferido el mal en su vida, que comenzó muy pequeño, pero le disteis fuerza y os tomó en totalidad.

    Por eso, ahora vuestro mundo está aprisionado por las fuerzas de satanás, porque no queréis luchar contra ésas fuerzas.

    Yo continuamente derramo Mi Amor sobre los hombres y espero, con Paciencia Divina, que en algún momento veáis Mi Luz en vuestro camino y queráis regresar a Mí, vuestro Dios. Mi Misericordia se sigue derramando por todos los hombres, sea cual fuera vuestra condición y vuestro pensamiento, todos vosotros sois Mis hijos y todos vosotros tenéis derecho a la salvación eterna. Aún a pesar de que hayáis sido afectados fuertemente por el mal, buscadMe, buscadMe, Mis pequeños, que Mi Luz de Amor y de Sabiduría llegará a vosotros y os dará los medios para que os apartéis del mal, de Mi obtendréis Fortaleza para luchar contra las fuerzas satánicas y con vuestra humildad, os recuperaré. No todo se ha perdido, volved a Mí, sed de ésos hijos pródigos que ya no buscan el mundo, sed pródigos en Mi Amor en buscar los bienes del Cielo, venid arrepentidos y os perdonaré, Mis pequeños, os quiero recuperar a todos, a todos vosotros.
    Gracias, Mis pequeños.

    Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
    Sobre: Os amo, os amo infinitamente y os recuperaré por el Amor que vosotros, Mis hijos, pongáis sobre vuestros hermanos.

    En la Nueva Vida, podréis vivir muy bien, bajo Mi Amparo y bajo Mi Amor, porque Yo Soy el Amor. Os rescataré de las fuerzas de satanás, su poderío quedará menguado por el Amor y volveréis a ver la Luz, que hace tanto no se daba, porque las tinieblas obscurecían todo.

    Agradeceréis nuevamente, Mis pequeños, porque la Naturaleza quedará restaurada y nuevamente gozaréis de sus beneficios, cuidaréis vuestro hogar y cuidaréis la Nueva Vida que se os dará.

    ¿Por qué?, ¿por qué os esperáis a sufrir tanto, cuando todo eso se podría haber evitado?, vuestro corazón se vuelve muy duro cuando os desviáis hacia el pecado. Vuestra soberbia crece y no permite la entrada de Mi Luz a vuestra mente y a vuestro corazón y así la dureza, en vuestro corazón y la obscuridad de vuestra mente, os llevan hacia el error. Esto es lo que se gana el hombre cuando se aparta de Mí, de Mis Leyes y de Mi Amor.

    Vosotros escogisteis y escogisteis el error, ahora tendréis tiempo de meditar bajo el dolor que no debisteis de haber preferido ése camino y, en Sabiduría Santa, escogeréis nuevamente el seguir Mis Leyes y Mi Amor y eso os salvará.

    Mis pequeños, os vuelvo a repetir, no fuisteis creados para el dolor, sino para el Amor. Vuestro dolor Me duele, pero a veces es necesario y el dolor educa.

    Orad, orad fuertemente por aquellas almas a las que sabéis que Mi Gracia no puede entrar, porque están embebidas en el mundo. Orad, para que la roca que cubre su corazón, se fracture y pueda entrar Mi Luz y empiece su recuperación. Orad, para que quedéis bañados en Mi Gracia y así, al empezar a gozar de Mis delicias, os acostumbréis a ellas, las deseéis y no os queráis apartar nunca más de ellas.

    AgradecedMe, Mis pequeños, el bien que os traigo. Agradeced, Mis pequeños, que Yo Soy un Dios de amor y no hay venganza en Mí, aún contra aquellos que Me atacaron y que vivieron alejados de Mis Leyes y de Mi Amor, en Mi siempre habrá compasión hacia aquellas almas que escogieron el mal.

    Compasión, porque sois pequeños y no sabéis lo que hacéis y Mi Misericordia siempre estará presente para levantar aún al más pecador, Soy todo Amor.

    Os amo, os amo infinitamente y os recuperaré por el Amor que vosotros, Mis hijos, pongáis sobre vuestros hermanos. Vuestra oración por ellos salvarán a muchas, muchas almas, quisiera que fueran todas, pero hay almas tan afectadas por satanás, que se perderán, como aquél que traicionó a Mi Hijo Jesucristo, pero vosotros no escojáis por quien orar, orad por todos, para que Mi Misericordia se derrame sobre todos vosotros.

    En breve una Luz inmensa descenderá sobre toda la Tierra, y ésta beneficiará a todas las almas que se abran a ella.

    En breve conoceréis Mi Voluntad, la Voluntad de vuestro Dios Amor, que os ha dado grandes regalos y que no ha recibido el amor que debiera recibir de vosotros.

    En breve conoceréis vuestro error y vuestro pecado, el cual debisteis haber desechado de vuestra vida y no quisisteis.

    En breve todo se convulsionará y aún aquellos que dejaron entrar la maldad y el pecado en su corazón, se arrepentirán de ello. Conocerán su pecado y el mal que hicieron, será su oportunidad de arrepentimiento y si esto no les lleva a su arrepentimiento, sufrirán un mal eterno.

    En breve Mi Misericordia Infinita se derramará sobre todos vosotros, la humanidad entera quedará inundada por ésta Luz resplandeciente.

    En breve conoceréis lo que Yo tenía para el hombre, cómo Mi Creación iba a ser un deleite para todos vosotros y conoceréis cómo el hombre destruyó su hogar Terreno.

    Llorad, llorad vuestros pecados. Llorad, llorad vuestros desvíos. Llorad, llorad vuestra traición, para que todo esto os lleve al arrepentimiento de corazón.

    Fuerzas obscuras están sobre vosotros. Fuerzas obscuras manipulan la Tierra entera, la maldad creció por vuestra culpa, vuestro error está costando caro.

    Tendréis vuestra resurrección, tendréis oportunidad de una Nueva Vida, podréis vivir bajo Mi Amparo y bajo el Amor, porque Yo Soy el Amor, os rescataré de las fuerzas de satanás.

    Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
    Sobre: Nuevamente, Mis pequeños, os pido mucha oración por vuestros hermanos, por su falta de espiritualidad, por su olvido al Amor.
    Hijitos Míos, alguna vez y algunos de vosotros, los que tenéis buen corazón, habréis querido repartir muchos bienes entre vuestros hermanos, habréis tenido el deseo de tener mucho para repartir a todos. Ciertamente, ése es Mi deseo, de repartir a todos y en abundancia.

    Cuando os pido Mis pequeños oración, oración por vuestros hermanos, porque vosotros, en vuestra misión sobre la Tierra, al ser corredentores con Mi Hijo Jesucristo, vuestra oración y donación llegan a vuestros hermanos, así como os limita a vosotros vuestra economía el no poder repartir a vuestros hermanos, en la economía del Cielo, al no recibir suficientes oraciones de vosotros, también quedan muchos de vuestros hermanos sin recibir Mis Bendiciones como debieran recibirlas.

    Esto es una realidad que quiero que conozcáis bien y que meditéis. Si Yo os he dado la Gracia tan grande de ser corredentores con Mi Hijo, es para que vuestro actuar sobre la Tierra se dirigiera a la salvación de las almas. Si vuestro actuar es bueno, si vuestra oración es abundante, ésta llega a muchos de vuestros hermanos, pero si vuestro actuar en la Tierra es pobre y vuestra oración, nula ó prácticamente nula, habrá muchas almas que se quedarán sin Mi ayuda. Vosotros sois intercesores ante vuestros hermanos, vuestra oración es intercesora y donadora, vuestro amor, se une al Mío, Mis pequeños, a través de Mi Hijo Jesucristo y si no hay oración suficiente, muchas almas se quedan ausentes de Mi Bien.

    Sí, Yo Soy un Dios Omnipotente, Todopoderoso, pero Yo os he pedido a vosotros vuestra corredención, para que como hermanos os ayudarais los unos a los otros, para que os dierais cuenta de la importancia de vuestra misión sobre la Tierra, que no es cualquier cosa. Os necesito realmente Yo, vuestro Dios y si no hay suficiente oración de vosotros, si no hay suficiente donación, si no tomáis el compromiso en la salvación de vuestros hermanos, Yo no Me puedo derramar sobre vosotros. Mi Gracia es inmensa, Mi Misericordia Infinita, pero vosotros debéis hacer vuestra parte, debéis arrancarMe todas ésas Bendiciones mediante vuestra donación, mediante vuestra oración, mediante vuestros sacrificios y penitencias.

    Daos, daos, Mis pequeños, por Mí, vuestro Dios, daos por vuestros hermanos y Yo Me derramaré en Bendiciones. ¡Tanto es lo que os tengo que dar!, ¡tantas riquezas que se quedan en el Cielo porque no Me las pedís!, porque no intercedéis por vuestros hermanos, porque pasáis por el mundo sin ver por sus necesidades y las Mías. No habéis realmente hecho un compromiso de vida, no os habéis donado como Mi Hijo lo hizo, veis solamente por vuestro propio beneficio y no por la Comunión de los Santos. Vivís alejados de la Familia, vivís solamente para vosotros mismos, sin preocuparos de cómo estarán vuestros hermanos y sus necesidades particulares. Sois egoístas y si algún hermano vuestro necesita más de vosotros, os hacéis a un lado, no queréis tomar compromisos, porque os quitan libertad y os llenan de preocupaciones. Queréis tener solamente una preocupación, el gozar, el gozar para vosotros mismos, buscar los bienes que os harán sentir mejor. Todo aquello que os quite vuestros bienes y os quite esa paz, vuestra paz humana, interior, no queréis tomarlo. Os llenáis de mundo y Me hacéis a un lado en vuestra vida. El dolor que ahora tengo, lo tendréis vosotros en breve, conoceréis Mi dolor y vuestro error, entonces sabréis lo que un Padre sufre por los hijos, conoceréis el dolor de ver a un alma que se condena eternamente, porque no hubo suficiente oración por la salvación de ellas.

    Vosotros, algunos de vosotros, habréis tenido ya el dolor de haber perdido algún hijo ó a un ser querido, pero el perder un alma eternamente en la condenación, es un dolor inmenso, infinito.

    Nuevamente, Mis pequeños, os pido mucha oración por vuestros hermanos, por su falta de espiritualidad, por su olvido al Amor.
    Gracias, Mis pequeños.

    Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
    Sobre: Hijitos Míos, no quiero que Me veáis como Profeta de calamidades, Yo Soy vuestro Padre y vuestro Dios y os he dicho que os creé para el Bien.
    Hijitos Míos, no quiero que Me veáis como Profeta de calamidades, Yo Soy vuestro Padre y vuestro Dios y os he dicho que os creé para el Bien. Yo no Soy el Dios del Antiguo Testamento, a quien se Me veía con temor. Yo no Soy ése Dios Terrible a quien debéis temer, Soy todo Amor, Sencillo, que Me pongo hasta el nivel del hombre y eso os lo di con Mi Hijo.

    Ciertamente al Ser vuestro Padre, vuestro Dios, vuestro Creador, exijo respeto, pero el amor que debe salir de vuestro corazón hacia Mí, tiene que ser ése amor sencillo, humilde, agradecido, amistoso.

    El amor no se puede obligar, Mis pequeños, el amor nace desde lo más profundo del corazón del hombre y nace en el trato, en el agradecimiento por tantas Bendiciones y regalos que el alma recibe.

    Vosotros lo tenéis en el trato humano, vosotros agradecéis cuando recibís un bien, cuando se os trata bien, se os consiente, se busca vuestra alegría, vosotros respondéis con agradecimiento y, así, vuestro amor va creciendo por aquella persona que solamente busca vuestro bien.

    Ved, a lo largo de vuestra vida, meditad vuestra existencia y veréis que de Mí habéis obtenido infinidad de regalos, de Bendiciones, de cuidados. Sed sinceros y honestos con vosotros mismos, que si mal ha habido en vuestra vida, no ha sido por Mi causa, ha sido por aquellos momentos en que vosotros tuvisteis rompimiento Conmigo, con vuestro Dios, os apartasteis de Mí y el mal sobrevino sobre vosotros, porque le abristeis vuestro corazón al mal, lo consentisteis en vuestra vida y os apartasteis de Mi protección, pero Mi Misericordia Infinita y la comprensión por las almas, que siempre os está buscando y perdonando, os acercan a Mí y volvéis a recibir Mis Bendiciones cuando estáis Conmigo. Todo esto, Mis pequeños, lo tenéis ejemplificado en el pueblo judío que tomé, que prometí Mi ayuda, que Me di por ellos.

    ¿Por qué hacéis de vuestra vida, la vida de ése pueblo rebelde y traidor?, que a pesar de todos los bienes con que Yo los consentí, Me rechazaban, Me atacaban, Me daban la espalda. Luego les doy el Cielo, con Mi Hijo Jesucristo entre ellos y lo rechazan, lo destruyen y lo atacan hasta el día de hoy. Sois vosotros también ése pueblo rebelde que, aún a pesar de tener todo Mí Bien, no quiere saber de el, no quiere vivir bajo Mi amparo, el cual tendréis siempre y cuando Me consintáis a Mí, cumpliendo Mis Leyes y Decretos. Si hay mal en vuestra vida, os vuelvo a repetir, es porque os apartáis de Mí. Todo Mi Bien es vuestro, luchad contra todo aquello que os aparte de Mi Bien y entonces gozaréis plenamente de los bienes que os pertenecen.
    Gracias, Mis pequeños.

    Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
    Sobre: Mi Gracia permanece inundando la Tierra, tomadla, Mis pequeños, es para todos.
    Hijitos Míos, debéis estar plenamente concientes de que las almas, todas ellas, se salvan por Mi Gracia.

    Esto lo sabéis, Mi Gracia se está derramando continuamente sobre todas las almas, pero aquellas que la toman y quieren mantenerse en ella, son las almas que se salvan. Mi Gracia continuamente está lloviendo sobre la Tierra, sobre todas las almas, pero hay algunas de ellas que se dejan empapar por ella y otras la rechazan.

    Todos vosotros tenéis ataques del enemigo, caéis innumerables veces a lo largo de vuestra vida, en pecados graves y leves, pero aquellas que han tomado Mi Gracia, se levantan y quieren mantenerse en ella. En cambio, las otras almas, que a pesar también de ser atacadas por las tentaciones y no se toman de Mi Gracia, son las que sucumben.

    Mi Gracia salvífica es para todos. En vosotros está la opción, en vuestro libre albedrío, de tomarse de Mi Gracia para vuestra salvación ó dejarla a un lado y preparar su alma a la perdición eterna. Es vuestra decisión libre y dolorosa para Mi Corazón.

    Mi Gracia permanece inundando la Tierra, tomadla, Mis pequeños, es para todos.

    ¡Cuánta!, ¡cuánta se desperdicia y es vuestro error! Orad, Mis pequeños, para que Mi Gracia toque ésos corazones rebeldes, obstinados, traidores y puedan ellos salvarse. Confiad, Mis pequeños, en Mí, vuestro Dios y en Mi Amor, que continuamente está velando por todas las almas. Confiad en que Yo os salvaré si vosotros persistís en ése afán de lucha contra los ataques de satanás. Por eso ganáis el Cielo, Mis pequeños, por ese afán de lucha, porque os levantáis a pesar de que caéis porque, a pesar de que el pecado llega a vuestra vida y trata de evitar que Mi Gracia crezca en vosotros, vosotros os dais cuenta de que Yo valgo más que cualquier tentación que os ponga satanás y así, a pesar de las tentaciones que sobrevienen a todos, siempre os levantáis y Me escogéis a Mí.

    Ese afán de lucha por tenerMe a Mí, por escogerMe a Mí, es lo que alcanza vuestra salvación eterna. Seguid adelante, Mis pequeños, no os dejéis vencer nunca por la tentación, Mi Gracia os dará la fuerza necesaria para poder vencer cualquier tipo de tentación.
    Gracias, Mis pequeños.