Rosario.
Mensajes de Dios Padre, de Nuestro Señor Jesucristo y Dios Espíritu Santo a J. V.
Temas:
- Mi acción de purificación se tiene que dar a todos niveles de la vida humana y aún de la vida espiritual.
- Padres, muchos de vosotros estáis destruyendo la vida espiritual en vuestros hijos, la vida espiritual de la Iglesia.
- Los mismos padres permiten que los niños, desde pequeñitos, se contaminen a través de los medios de comunicación.
- Dejad que Yo vuestro Dios os perfeccione y veréis con otros ojos lo que Yo he hecho para vosotros.
- Vuestros pensamientos y vuestros deseos en oración se unen a los Míos y ellos llegan al Padre.
- Cuidad, cuidad de aquellas almas que están en el mal, traédmelas, orad por ellas, pedid, pedid por su salvación.
Habla Dios Espíritu Santo,
Sobre: Mi acción de purificación se tiene que dar a todos niveles de la vida humana y aún de la vida espiritual. (Lenguas…) Hijitos Míos, Mi acción de purificación se tiene que dar a todos niveles de la vida humana y aún de la vida espiritual. Tiene que ser todo purificado, santificado, para que todos vosotros reconozcáis que Dios es lo único y lo primero que debe haber en vuestra vida. Os habéis desviado demasiado, el pecado ha tomado posesión de vuestra alma y de todo lo que os rodea. Yo, vuestro Dios Espíritu Santo tengo que venir a purificar todo y a todos, para que vosotros apreciéis la obra que el Padre ha hecho por vosotros y para vosotros, obra bellísima, la vida. Vosotros no apreciáis todavía la vida que se os ha dado, la vida que existe para el alma, la vida que os lleva a alabar toda la Creación. Mis pequeños, vosotros fuisteis llamados a la vida para vivir en la Creación que el Padre había preparado para vosotros, todo bellísimo, todo perfecto, todo en orden, el Pecado llevó todo al desorden. Vuestra misión, Mis pequeños, es regresar todo al orden, buscando primero vuestra propia perfección, para que luego llevéis todo lo que está a vuestro alrededor a la perfección. Pero estáis tan embebidos en el mundo, que ya no sabéis qué es lo bueno y qué es lo malo, a ése grado os ha llevado satanás, a no saber discernir entre lo que es bueno, lo que ha sido creado bueno y lo que es malo, todo aquello que satanás ha contaminado. Dejaos, Mis pequeños, dejaos purificar por Mi actuación en vuestra alma, en todo vuestro ser y en todo lo que os rodea. Sí, sí será difícil ésta purificación, porque deberéis pasar del plano humano al plano Divino y esto es difícil para el hombre, porque se arraiga demasiado al plano humano, al plano material. Cuando estéis ya en el plano Divino entonces es cuando veréis la Verdad, la realidad y el Amor que el Padre puso en vosotros y en toda la Creación y es cuando agradeceréis de corazón la vida, la vida que tenéis y la vida que puso en cada cosa. Agradeced desde ahora, Mis pequeños, que el Padre os esté viendo, esté viendo vuestra vida, aunque vosotros mismos no estéis de acuerdo con lo que Él quiera hacer con ella porque Él siempre quiere lo mejor para Sus hijos. Vuestro sufrimiento, que ahora serán lágrimas, se volverán después en lágrimas de alegría y agradecimientos de amor al Padre.
Confiad, confiad en el cambio, confiad en la nueva vida que os traerá en Su Amor.
Gracias, Mis pequeños. Primer Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: Padres, muchos de vosotros estáis destruyendo la vida espiritual en vuestros hijos, la vida espiritual de la Iglesia. Hijitos Míos, el amor no se puede obligar, el amor debe salir de lo más profundo del corazón del hombre, pero porque Yo ahí habito, en la profundidad de vuestro ser. Os quejáis de que faltan vocaciones sacerdotales y religiosas, pero eso es culpa del mismo hombre, os preguntaréis el por qué. Cuando va creciendo el ser humano, va tomando de sus padres el amor hacia las cosas, hacia las personas, los hombres van inculcando el amor a lo que ellos aman, a lo que ellos siguen o en lo que trabajan. Los hijos se van contagiando de ése amor a lo que sea, principalmente a los intereses de los padres. Si en los padres no existe Mi Amor, si no hay ése interés por buscarMe, si no hay ése respeto a todo lo Divino, si no hay ése gusto por los Sacramentos, por la vida religiosa, por la vida espiritual, ¿qué podréis inculcar a vuestros hijos? Todo es una cadena, Mis pequeños, el Amor va uniendo todo y sí falta Vida en Mi Iglesia, porque los hijos no absorbieron ése amor a lo Divino, ése amor a Mí desde que eran pequeñitos. Ciertamente las almas bajan ya con una misión, pero si ésa misión no es apoyada, se pierde. Otros van creciendo y encuentran apoyo, no en los padres, sino en alguna otra alma que Yo envío para que los guíe y los proteja en su misión, porque la Vida de la Iglesia se debe mantener, pero debiera darse desde el seno de la familia, inculcando ése amor, ésa vida espiritual. Padres, muchos de vosotros estáis destruyendo la vida espiritual en vuestros hijos, la vida espiritual de la Iglesia, porque no estáis guiando a vuestros hijos correctamente, porque vosotros mismos os habéis desviado, estáis buscando solamente lo del mundo, satanás os ha llevado a buscar los bienes materiales solamente, poco os acordáis de Mí, poco os acordáis de la Iglesia y luego os quejáis de que falten sacerdotes, ministros y religiosas. Sí, vosotros mismos estáis destruyendo ésa vida espiritual, muchas veces, cuando es pequeño todavía vuestro hijo y os habla de seguir una vida religiosa ó sacerdotal, vosotros lo sentís como una maldición, como un desperdicio de que vuestro hijo se vaya como sacerdote, cuando pudiera tener una profesión productiva en lo material. Tratáis a toda costa de evitarle seguir con ésa idea y así se destruyen muchas, muchas vocaciones que se debieran dar entre vosotros, vocaciones religiosas que debieran mantener la santidad de la Iglesia entre vosotros. Hay mucha tribulación dentro de la Iglesia y la estáis viendo ahora, pero vosotros mismos, padres, padres de familia, la estáis causando, porque si hubierais guiado a vuestros hijos por el camino del Bien, si les hubierais inculcado valores y virtudes y un amor profundo a Mí, vuestro Dios, tendríais lo que Yo os prometí, pero vosotros mismos estáis evitando todo ello y ahora os quejáis. No os dais cuenta de la Bendición tan grande que significa un alma sacerdotal en una familia, son raudales de Bendiciones y de Gracias en ésas familias en las cuales hay un alma sacerdotal y aún religiosa, os estáis perdiendo de Mis Bendiciones, y por otro lado, vosotros estáis destruyendo Mi Voluntad, porque son almas que ya traían una misión y vosotros no aceptasteis Mi Voluntad en ésas almas, no las apoyasteis y las sacasteis totalmente fuera de donde ellas debieran actuar, ésa alma no se va a manifestar plenamente en la Tierra, porque ya traía una misión definida y en donde esté no va a estar a gusto, no va a ser su campo de acción, vosotros destruiréis ésa alma y la pondréis en problemas por no haberla dejado desarrollarse en el ámbito para la cual ella estaba llamada a actuar. Meditad esto, Mis pequeños y ved vuestro error y tratad de remediar, en lo futuro, lo que Yo necesito para la Tierra, para todos vosotros, para vuestra protección, para vuestra salvación y para vuestra guía espiritual. Dejad que las almas sacerdotales, que Yo envío, se den en pleno para que esto vaya cambiando la faz de la Tierra.
Gracias, Mis pequeños. Segundo Misterio,
Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Los mismos padres permiten que los niños, desde pequeñitos, se contaminen a través de los medios de comunicación. Hijitos Míos, cuando Yo le pedía a los apóstoles, “dejad que los niños se acerquen a Mí, porque de ellos es el Reino de los Cielos”, hay un detalle que Yo veía grandísimo en los niños, que quisiera ver en cada uno de vosotros, su mirada pura, su mirada limpia, su mirada en Mí, porque los niños, los pequeñitos, en su inocencia, todavía Me están viendo en su corazón. Satanás ha ido quitando ésta mirada pura, ésta mirada limpia, ésta inocencia espiritual en los niños, ha contaminado tanto al mundo que se podría decir que ya prácticamente no hay niños en el mundo. Los mismos padres permiten que los niños, desde pequeñitos, se contaminen a través de los medios de comunicación. El daño que os ha hecho la televisión, el cine, os ha destruido y ha destruido ésa pureza espiritual en los niños. Ya no hay pureza que dure muchos años, los niños ahora pierden su inocencia desde muy temprana edad y todo esto está provocando un caos espiritual entre vosotros, alrededor del mundo, porque vosotros mismos, padres de familia, no habéis cuidado ésa inocencia, ésa pureza, ésa santidad en las almas de Mis pequeñitos. Rápidamente entran al mundo y me refiero como mundo a todo aquello que destruye la inocencia y Me saca de su corazón. Les empezáis a enseñar cosas muy diferentes a lo que debieran tener en su corazón. En ellos Yo, vuestro Dios, Me gozo solamente unos cuantos años, si es que vosotros todavía transmitisteis ésa espiritualidad que se les enseña de pequeñitos, pero por la contaminación que existe, éstos niños Me hacen a un lado y empiezan a tener en su corazón otros intereses, poderes satánicos disfrazados, disfrazados de un aparente bien. Entran éstos personajes con magia, con poderes, con superpoderes, que hacen que el niño se desvíe prontamente, ya no se busca la virtud, ya no se buscan los dones del Espíritu Santo, se buscan los poderes espirituales, en donde se busca el ser superior a los demás, no se busca el cuidar y proteger a los demás, y así, con engañosas realizaciones caricaturescas, van destruyendo la espiritualidad de vuestros hijos. Con éstas bases satánicas, los niños y luego jóvenes o adultos, no van a recurrir a Mí para tratar de sacar adelante sus problemas o para resolver lo que la vida les traiga, sino tratarán de recurrir a estos poderes satánicos a través de la magia, de la adivinación, de la superstición y de otras desviaciones satánicas que el mismo satanás se ha encargado de difundir entre vosotros y desde la niñez. Vosotros padres, padres de familia, que no habéis cuidado las bases en vuestros niños, las bases espirituales que les deben dar a ellos un soporte espiritual para toda su vida, las descuidáis y ésas almas, ésas almitas, que luego crecerán, no vendrán a Mí a buscar su ayuda, más bien se van a desviar, porque así es satanás, corrompe el alma y luego la destroza. Tened cuidado, hijos Míos, padres de familia y aún aquellos que todavía no lo son, para que podáis dar bases firmes en Mis pequeños hijos que os doy para que Me los cuidéis, para que los llenéis de valores, para que los llenéis de Mi Vida, para que les deis a ellos ésa ancla espiritual que se va a sostener en Mí y no solamente por un momento de su vida, sino para toda su vida durante su misión en la Tierra. Dadles bases fuertes para poder vencer a satanás en todos los ataques que tendrán durante su vida. Vosotros mismos estáis viendo cómo la juventud se ha corrompido, no hay valores, no hay virtud, no se busca el Bien y solamente se vive en la carne y en el mundo, pero los autores de todo eso sois vosotros, padres de familia. No Me echéis la culpa a Mí, porque soléis hacerlo, ved lo que hicisteis con vuestros hijos y más que eso, ved lo que ellos harán con sus hijos. El Juicio de sus acciones también caerá sobre vosotros, porque fuisteis autores de una mala educación espiritual, no alimentasteis bien a vuestros hijos y ellos no alimentarán bien a sus hijos por vuestra culpa. Un alma vale mucho, Mis pequeños, es un regalo grandísimo, es una joya de incalculable valor, es como un diamante en bruto, cuando vosotros la educáis en el Bien y la llenáis de valores, será un brillante que dará luz entre los hombres con un valor infinito, porque un alma que está llena de Mí, que produce Luz, hace que otras almas sean atraídas y alcancen su salvación. Pero si vuestra alma se queda solamente, como diamante en bruto es como una piedra opaca, que no brilla y que no atrae a nadie, que no se da cuenta del valor interno que tiene ése diamante. Las virtudes y el amor son los que hacen que vuestra alma valga, y vosotros, padres, padres de familia, sois aquellos que harán que ése diamante en bruto se llene de valores, de virtudes y de amor y por vuestra guía, el alma de vuestros hijos brillará y ellos darán mucho fruto y también vosotros mismos obtendréis grandes Bendiciones en la Tierra y en Mi Reino, por haber hecho brillar las almitas que Yo os concedí y que permití cuidarais y guiarais aquí en la Tierra.
Gracias, Mis pequeños. Tercer Misterio,
Habla Dios Padre
Sobre: Dejad que Yo vuestro Dios os perfeccione y veréis con otros ojos lo que Yo he hecho para vosotros. Hijitos Míos, vosotros mismos, con los estudios que tenéis y con los que os preparáis, mientras más vais avanzando en ellos, más os vais dando cuenta de los errores que se comenten dentro del área en la que estáis. Cuando vosotros no conocéis bien el tema todo se os hace bien, todo lo que os platican se os hace bien, porque no sabéis discernir ó diferenciar las sutilezas para hacer, no bien las cosas, sino para hacerlas perfectas. Podréis ver un coche, cómo lo fabrican, pero vosotros cuando no conocéis el tema, si no sois ingenieros para conocer bien su construcción, veis la generalidad, veis el todo, pero no veis las sutilezas que se necesitan para que funcione bien y así sucede en la vida espiritual. Cuando no estáis adentrados en lo espiritual, cuando no os habéis tomado el tiempo de buscarMe, de leer sobre Mí, de conocer Mi Amor, de conocer Mi Espiritualidad y llevarla a vuestro corazón, habláis del Amor de Dios como algo superficial y general, pero cuando os adentráis a la profundidad de Mi Ser y Me conocéis mejor, lleváis Mi Amor a vuestro corazón. Cuando vivís en las virtudes, cuando buscáis la perfección, os vais dando cuenta que lo que antes se os hacía superficial y general, por dar un ejemplo, un pecado venial, que lo tomáis como cualquier cosa, cuando vais conociendo Mi Amor, luego veréis que ése al que decíais “un pecadito”, realmente es una ofensa grande también a Mi Corazón, es algo que Mi Amor, en su santidad inmensa, tampoco acepta, porque Yo os quiero perfectos. Cuando seguís buscando ésa perfección, os vais dando cuenta de la realidad de vuestra vida, todo aquello que era superficial, que no tenía valor, se vuelve ahora profundo y con una razón de ser y así vais apreciando mejor lo que Yo he hecho por cada uno de vosotros y en cada uno de vosotros. Cuando ya veis todo a través de Mis Ojos y no a través de los ojos humanos, es cuando os vais dando cuenta de la magnificencia de Mi Amor hacia vosotros y de la magnificencia de Mi Corazón para con vosotros. Yo Soy el Perfecto, Yo Soy vuestro Dios y todo lo que hago va en éste tenor, en la perfección. Por eso estáis llamados a la perfección, Mis pequeños, para que al buscarla, os deis cuenta que todo lo que es Mío abarca grandes cosas, que todo lo que viene de Mí lleva muchísima más profundidad de lo que vosotros veis en la superficie. Todo lo Mío conlleva una gran profundidad, de aquí que los grandes santos han encontrado Mi Amor en todas las cosas y se han quedado asombrados, cosas que para vosotros, que veis solamente en la superficie e insignificantes, ellos se deleitan en el Bien que Yo os di y como lo hice para agradaros. Buscad, buscad la perfección, Mis pequeños, dejad que Yo vuestro Dios os perfeccione y veréis con otros ojos lo que Yo he hecho para vosotros y gozaréis inmensamente Mi Presencia en todo, Me encontraréis en todo, Me buscaréis en todos lados y Yo responderé, Yo, el Creador de todo, para vosotros, vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños. Cuarto Misterio,
Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Vuestros pensamientos y vuestros deseos en oración se unen a los Míos y ellos llegan al Padre. Hijitos Míos, Yo os decía que no es malo lo que entra en el corazón del hombre, sino lo que sale de él. Siempre estaréis atacados por satanás y veréis cosas feas, pecaminosas, malas a vuestro alrededor, pero ya que entran en vuestro corazón Mi Amor, Mi Pureza, Mi Santidad, Mi Vida en vosotros destruirán todo aquello que no sirva, para que de vosotros no salga nada de aquello que visteis u oísteis. Sí, Mis pequeños, dentro de vuestro corazón podréis hacer grandes cosas por los demás o también destruir a muchos por lo que hagáis. De aquí se deriva el poder de la oración y el poder de vuestros pensamientos y de vuestros deseos. Es una realidad el que vuestros pensamientos, vuestros deseos trasmiten una fuerza, una bendición sobre aquellos por los que pedís, por los que intercedéis. Vuestros pensamientos mueven a aquellos o aquello por lo que vosotros estáis pidiendo o intercediendo. Vuestros pensamientos y vuestros deseos en oración se unen a los Míos y ellos llegan al Padre. Mi oración era continua durante Mi tiempo aquí en la Tierra, por eso os pido que estéis muy pendientes de lo que deseáis por los demás, porque si es malo, todo ése pensamiento maléfico realmente llegará a la persona o a las personas que están en vuestra mente y en vuestro corazón. Si vuestro pensamiento es benéfico, también llegará a aquellas personas por las que estás pidiendo o intercediendo. Pero tened cuidado, porque si estáis pidiendo un mal para vuestros semejantes, ése mal se revertirá contra vosotros también, porque el mal siempre cosechará un mal y si es bien el que deseáis para los demás, también se revertirá hacia vosotros, porque el Bien también produce Bien. Si vuestros pensamientos van en la línea del Bien, siempre os irá bien. Ved el mundo cómo está, viviendo en el mal. Os están llevando a desear el mal en diferentes formas, como el codiciar lo que los demás tienen y vosotros no tenéis, a desear el mal hacia las cabezas que os gobiernan, porque están actuando en el mal. Así vosotros deseáis el mal y no os dais cuenta que al estar solamente deseando el mal, ése mal va a ir reinando en el mundo, porque el mal se regresa a vosotros y al regresarse a vosotros haréis crecer más ése mal y desear más ése mal para los demás, y será un círculo vicioso de desear el mal, recibir el mal y desear más mal para los demás. Vosotros deberéis romper ése círculo vicioso deseando el Bien a aún aquellos por los cuales estáis recibiendo un mal porque Yo, vuestro Hermano Jesucristo fue lo que os enseñé, a amar a aquellos que desean el mal para vosotros. Ved por el Bien de aquellos que viven en el mal y así el Bien irá rompiendo toda ésta cadena de maldad que se ha ya desarrollado entre vosotros. Vuestros deseos, os vuelvo a repetir, y vuestros pensamientos, tienen un poder muy grande, cuidad pues, lo que estáis pensando y deseando para vuestros hermanos, porque de ésta forma es como viviréis, si deseáis el mal, el mal reinará, si deseáis el Bien, el Bien reinará.
Gracias, Mis pequeños. Quinto Misterio,
Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Cuidad, cuidad de aquellas almas que están en el mal, traédmelas, orad por ellas, pedid, pedid por su salvación. Hijitos Míos, cuidad, cuidad de las almas, orad, orad por todas, porque todas Me pertenecen. Pero hay almas que Me han traicionado, se han vuelto satánicas y hacen que las almas de sus hijos o de otros hermanos vuestros, se satanicen también y por eso vienen las posesiones satánicas, que no han acabado nunca, pero que ahora veréis mas fuertemente entre vosotros. Así como hay almas que se consagran a Mí, que Yo las cuido, las guío, las lleno de Gracias y de dones, son Luz para el mundo que hacen mucho Bien y producen mucho fruto, también es una realidad que hay almas poseídas, que satanás ha tomado a su servicio, son almas que producen mucho mal en el mundo. Pero os vuelvo a repetir, las almas Me pertenecen y Mi Amor es mucho más poderoso que todo el mal que pueda desatar satanás. Orad por estas almas que han sido poseídas, que están destruyendo el Bien en la humanidad, que son almas que están al servicio del enemigo y que os están causando problemas, tanto materiales como espirituales, en el mundo. Orad por ellas, orad por todas las almas satanizadas, porque quieren adueñarse del mundo, adueñarse de todo aquello que Yo creé para vuestro bien. Éstas almas son las que están atrayendo al mal al mundo y que ahora estáis viviendo ya y se aprovechan de vuestra falta de oración, de vuestra falta en la vida en la Gracia y en la virtud, por vuestra falta de amor en vuestros corazones. Satanás ha difundido su mal y desgraciadamente el hombre lo ha aceptado. Os ha enamorado de ése mal, os ha presentado la maldad en forma agradable y vosotros habéis caído en sus trampas. Ahora ha implantado su reino sobre la Tierra, lo estáis viviendo, estáis ya viendo la maldad a vuestro alrededor, estáis viendo ya casi la imposibilidad de vivir en el Bien, porque el Bien es atacado. Si vivís en el Bien se os hace a un lado, si vivís en la virtud, la maldad os destroza, os hace a un lado, no os deja avanzar. Pero todavía queda Bien en el mundo, todavía queda amor en el mundo y éste amor vencerá, Mis pequeños, pero en vosotros está en que éste mal se vaya disipando, se vaya alejando del mundo para que venga a Reinar Mi Hijo entre vosotros. Vosotros, los que estáis Conmigo, que habéis dejado que se implante Mi Amor en vuestros corazones, debéis ir alejando la maldad viviendo en el Bien, viviendo en el buen ejemplo, viviendo en la oración, viviendo en la virtud y en el Amor, solamente así haréis que el mal se disipe sobre la Tierra. Yo estaré con vosotros, pero cuidad, cuidad de aquellas almas que están en el mal, traédmelas, orad por ellas, pedid, pedid por su salvación, porque Me pertenecen, ciertamente han cometido un error, el error es perdonable. Vosotros también habéis caído en errores y se os perdonó. Obrad con ellas como Yo he obrado con vosotros, siempre en el Amor.
Gracias, Mis pequeños.