Rosario.
Mensajes de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo, a J. V.
Temas:
- Vuestro perdón debe de ser infinito.
- Estáis recuperando los bienes de vuestros primeros Padres, ya os he dicho que no es evolución.
- Vuestra oración tiene que ser confiada para que sea poderosa.
- El estado de Gracia os asegura que todas Mis Potencias pueden trabajar en vosotros.
- Lo que os está esperando, muchos de vuestros antepasados, quisieron haberlo visto y vivido.
Sobre: Vuestro perdón debe de ser infinito.
Hijitos Míos, cuando estuve sobre la Tierra, se Me preguntó un día si debieran perdonar hasta siete veces y Yo respondí: Hasta setenta veces siete. Vuestro perdón debe de ser infinito, Mis pequeños, como Infinita es Mi Misericordia para con cada uno de vosotros.
¿Por qué juzgáis si vosotros no tenéis esa capacidad? Debéis perdonar, porque si no tuvierais culpa, como Yo, entonces, podrías juzgar. Vosotros habéis caído en el mismo pecado en el que vuestros hermanos han caído y quizá muchas veces más que ellos.¿Por qué no perdonáis de la culpa que vosotros habéis padecido? Vuestro corazón tiene que ser un corazón amante, respetuoso, sensible al error de vuestros hermanos. Debéis saber perdonar y levantar a vuestros hermanos, no les señaléis su mal proceder, animadlos a mejorarse, ésa es vuestra tarea. Mejorar el Mundo que Yo os he dado. Sois familia, sois hijos de los mismos Padres de toda la humanidad, Mis hijos, Adán y Eva así que, vosotros como hermanos, deberéis levantar a vuestros hermanos a esos niveles de espiritualidad infinita, porque si así lo deseáis, Yo estaré con vosotros y como Mi Poder es infinito, os daré esa Sabiduría infinita, ese Amor infinito, capacidades infinitas, porque es cuando el alma vivirá para Mí, estará bajo Mi Divina Voluntad y estando así unidos, gozaréis de lo que Yo, vuestro Dios, en Mi Santísima Trinidad, Soy. Así que, Mis pequeños, amad, respetad, animad a vuestros hermanos a la perfección y sed perfectos como Yo, vuestro Dios, lo Soy.
Gracias, Mis pequeños. Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Estáis recuperando los bienes de vuestros primeros Padres, ya os he dicho que no es evolución. El liderazgo, Mis pequeños, voy escogiendo y buscando almas alrededor del Mundo para llevar a cabo Mi Obra de Redención y de Renovación. Estáis recuperando los bienes de vuestros primeros Padres, ya os he dicho que no es evolución. p>Algunos de vosotros seréis líderes ante vuestros hermanos. Pero recordad las Palabras que Yo os he dicho: que aquél al que más se le dé será servidor de sus hermanos. Aquél al que se le ha dado sabiduría, al que se le ha dado ése liderazgo, que se vuelve maestro de sus hermanos, tiene por misión trabajar más para ellos, darse por ellos y su posición, no es para que se le rindan los demás a ellos, sino él tiene que estar buscando a cada uno de sus discípulos, -si pudiéramos así decirlo- a sus hermanos, para que comprendan bien las Palabras que Yo transmito a través de ellos. El líder tiene que darse a sus hermanos siempre, dejándose guiar por la Luz del Espíritu Santo, nunca debe de actuar bajo sus propias leyes, ni bajo su propio beneficio, el líder, a cualquier nivel debe de estar sometido al Espíritu Santo y la Humildad y el Amor tienen que ser su bandera. Es servicio total para sacar adelante a sus hermanos, enseñar lo que Yo le he enseñado ó transmitir lo que en ése momento Yo quiera transmitir, siempre debe de estar dispuesto a servir a su Dios. Se perderá en Mí, pero Yo le levantaré en Mí, será grande a Mis Ojos, pero pequeño ante sus hermanos. Recordadlo, pequeño ante sus hermanos. Mucha sabiduría saldrá a través de sus labios, Mi Sabiduría, no la de él ó la de ella, se rendirá totalmente a Mí, su Dios, serán servidores de Mí, vuestro Dios. Amadles, apoyadles y orad fuertemente por ellos, porque la soberbia los puede hacer caer, se perderán ante Mis Ojos y perderéis a un vocero tan necesario para vuestro crecimiento. Todos vosotros debéis ayudaros unos a otros, proteged Mi Obra, proteged todo lo que Yo os doy. Y así unidos, reconstruiremos Mi Nuevo Reino, ese Reino que se dará con Mi Sabiduría, con Mi Amor, con vuestra donación, con vuestro deseo de crecer y de perfeccionarse. Nueva Vida os está esperando, os lo he dicho, pero deberéis ser vosotros mismos receptáculos divinos de toda esa sabiduría y de esa vida y para ello debéis quitaros todo el lastre que es todo pecado que pueda detener Mi Obra en vosotros. Empezad el cambio en vosotros mismos, no lo busquéis tanto en vuestros hermanos, sino en vosotros mismos primero y ya vosotros respaldados por vuestro proceder perfecto, podréis educar a vuestros hermanos apoyándolos, animándolos, pero nunca presionándolos, respetad su libertad, como Yo respeto la vuestra. Reprendedlos cuando veáis en ellos, error, inmundicia, impureza, maldad, soberbia. Ayudadles, son hermanos vuestros, hijos Míos y así como los ayudéis, también Mis Ojos estarán sobre vosotros para soportaros y levantaros también en vuestras caídas. Amaos los unos a los otros y Yo estaré en medio de vosotros cuando así sea.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vuestra oración tiene que ser confiada para que sea poderosa. Hijitos Míos, el aliento fétido de satanás está dañando toda Mi Obra, la ha venido dañando a través de los siglos, pero Mi Promesa se mantiene, que Mi Iglesia iba a permanecer hasta el fin de los siglos. Aunque veis vosotros cómo falta afluencia al Santo Sacramento del altar, cómo ya no se acercan vuestros hermanos a orar, cómo parezco olvidado en los altares y en la oración; aún así, Mis pequeños, Mi Promesa triunfará, porque Soy vuestro Dios y Mi Poder es Infinitamente superior al del mal y aunque él quiera dañar todo lo que Me pertenece, especialmente cada uno de vosotros, Mi Poder os protege, Mi Gracia está en aquellos que se han apartado del Mundo y Me han puesto en primer lugar en sus vidas. Muchos, muchos de vuestros hermanos han caído, pero no quiere decir Mis pequeños, que se mantendrán en el error. Os insisto tanto en la oración, en vuestra donación, para que os deis cuenta de que a través de la oración, podéis hacer grandes cosas. El hombre es como un niño, que se distrae fácilmente con las tonterías que le rodean y se olvida de hacer su tarea. Por eso os tengo que estar insistiendo Mis pequeños, en hacer vuestra tarea, porque son muchas las almas que viven en el error y muchas también se condenan porque no tuvieron el apoyo de oración de sus hermanos. Uníos en todo momento en la oración Conmigo, con la Comunión de los Santos, con la Vida Íntima de Mi Madre, La Siempre Virgen María, de Su esposo, San José, de los Apóstoles, de todos los Santos, de los Ángeles. Unios, perfectamente, Mis pequeños y con la Luz del Espíritu Santo, Yo os guiaré. Vuestra oración tiene que ser confiada para que sea poderosa. Estad confiados en que si estáis así, unidos en perfección, obtendréis grandes cosas. Que esa esperanza nunca se pierda en vosotros, aunque todo se vuelva obscuro y adverso, si os mantenéis en la oración, así unidos con todos Nosotros, vuestra esperanza no debe desfallecer, se debe mantener firme pues ella os dirá que estáis haciendo bien vuestra tarea y muchas almas, muchas, infinidad de ellas, podrán recuperar la Gracia y obtener su salvación eterna por vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: El estado de Gracia os asegura que todas Mis Potencias pueden trabajar en vosotros.
Hijitos Míos, los Reyes Magos, dócilmente se dejaron guiar por la luz de una estrella, siempre es Mi Sencillez, siempre en Mi libertad. Yo le doy al hombre muchas señales a lo largo de su vida, para que encuentren tarde ó temprano ese Regalo, que Soy Yo. Y así como los Reyes Magos encontraron el Gran Regalo de toda la eternidad, vosotros mismos estáis llamados a ello, a seguir con docilidad ésos mensajes, esas señales, esa guía que, de una forma u otra, Yo os voy poniendo para que entendáis vuestro camino y sigáis por el, para que encontréis la Verdad, Mi Verdad.
Muchas señales de confusión también tenéis a lo largo de vuestra vida, porque el malo, siempre se va a interponer, por eso es muy importante que viváis en estado de Gracia, que ese es el primer paso que debe de hacer el alma para buscar la Verdad.
El estado de Gracia del alma os va a poner en afinidad Conmigo, os va a abrir las puertas del alma, para que podáis, con el Discernimiento de vuestro Dios Espíritu Santo en vuestro corazón, escoger entre en Bien y el mal, seguir por el buen camino, saberlo reconocer, que eso es lo más importante. Mis pequeños, que entre todos los caminos que se os pongan a vuestra disposición, el único que os indicará que viene de Mí y que debéis seguir, es la Luz del Espíritu Santo. La sencillez, la humildad os abrirán el camino, os llevarán a esa rectitud.
El estado de Gracia os asegura que todas Mis Potencias pueden trabajar en vosotros, pero por otro lado, como os he dicho, el vivir en estado de Gracia, es una lucha continua, a la que deberéis poner todo vuestro esfuerzo negándoos a vosotros mismos y viviendo para
Mi Divina Voluntad.
Toda lucha, todo esfuerzo, al final tendrá un regalo y ese Regalo voy a Ser Yo, como con los Reyes Magos, el tener contacto con la Divinidad, vivir en la Divinidad, trabajar para la Divinidad. Es un Regalo inconmensurable, infinito, incomprensible para el hombre, pero que le dará un gozo también infinito que saciará su alma completamente.
Así como vosotros haréis el esfuerzo de manteneros puros, santos y fieles, Yo también haré el esfuerzo de agradeceros, con creces, todo lo que haréis por Mí, con vuestros hermanos, con el acrecentamiento de Mi Gloria en la Tierra.
Gracias por vuestro esfuerzo, gracias por vuestro amor, gracias por querer entender Mis Palabras y ponerlas en práctica.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Lo que os está esperando, muchos de vuestros antepasados, quisieron haberlo visto y vivido.
Hijitos Míos, os he pedido que viváis en la alegría, que viváis en Santa Paz, que viváis en el Amor y que a pesar de que veáis los acontecimientos confusos alrededor vuestro y alrededor del mundo y porque éstos acontecimientos de la purificación se tienen que dar para bien de Mis hijos, deberéis manteneros así, alegres.
Eso querrá decir que confiáis en Mis Palabras, que confiáis en Mi Obra, que confiáis en Mi Regalo que Yo os voy a dar en Mi Segunda Venida.
Todo tiene que estar preparado, purificado, santificado para recibir al Santo de los Santos nuevamente en la Tierra.
Entended esto, Mis pequeños, no puede haber una pizca de maldad, de suciedad, de falta de amor en los corazones. Si el Rey de Reyes estará entre vosotros, que Mi Segunda Venida, Mi pronta Segunda Venida, os alegre vuestro corazón y que esa esperanza os llene de esa santa alegría, en donde muchos de vosotros estaréis ya transformados para ver Mi Gloria bajar a la Tierra.
Serán momentos en que las almas serán invadidas de un amor infinito, de una alegría infinita, de un gozo Divino.
Las almas estarán preparadas para ver a su Dios. Júbilo inmenso habrá entre los hombres, que se les unirá a ése júbilo con los Ángeles y con las almas que ya gozan de Mi Presencia.
Lo que os está esperando, muchos de vuestros antepasados, quisieron haberlo visto y vivido y ése es Mi Regalo para las almas nobles, para las almas puras, para las almas sencillas como niños, que confiadas y esperanzadas en Mi Promesa, tendrán.
Orad y pedid, para que muchos de vuestros hermanos que no quieren entender todas éstas bellezas y dudan de ello, cambien, para que también ellos gocen. Es un regalo para todos los hombres, pero que sabemos que muchos de ellos no quieren aceptarlos.
Mi Amor, Mi Misericordia, que es Santa y Perfecta, hará todo lo posible por vuestra intercesión, para atraer a infinidad de almas que no quieren aceptar ésta realidad.
Gozad, gozad inmensamente de éstas Promesas que os estoy anunciando y recordando, para que con ellas, ayudéis a vuestros hermanos a que ésta Santa Alegría y ésta Santa Esperanza también invada su corazón.
Alegraos, alegraos y dejaos invadir por el gozo Celestial que ya se está dando, que ya se está preparando.
No os mortifiquéis con las cosas de la Tierra, tened vuestra mira solamente en las cosas Celestiales y al deciros que estéis pendientes solamente en las cosas Celestiales, los intereses del Cielo son los intereses hacia la Tierra de unión y salvación. Así que, nunca estaréis separados en los intereses de la Tierra si tenéis vuestros ojos en las intenciones del Cielo.
Gracias, Mis pequeños.