Ene 21_00 Divinizar Vuestros Actos Humanos.

MENSAJE DE DIOS PADRE A J.V.

Habla Dios Padre,

Sobre: Divinizar Vuestros Actos Humanos.

Hijitos Míos, hoy os quiero hablar sobre un tema que deberéis poner en práctica de inmediato, el divinizar vuestros actos humanos.


Yo Soy vuestro Dios, Señor y Creador de todo cuanto existe. Vosotros sois Mis hijos, hijos creados por Mi Amor y que os habéis puesto a MI servicio voluntariamente, para la salvación de vuestros hermanos. Mi Vida es Divina y también lo fue la humana, en la presencia de Mi Hijo Jesucristo. Tenéis Mi Vida por Mi Santo Espíritu que habita en cada uno de vosotros desde vuestra concepción. Con esto que es explico, os podéis dar perfectamente cuenta de que estáis envueltos de la vida de vuestro Dios. Toda vuestra vida debiera ser servicio en amor a vuestro Dios.


Yo os he creado porque os amo. Os cuido durante toda vuestra vida, porque os amo. Os doy todo lo que necesitáis, y muchas veces hasta cosas superfluas, porque os amo y consiento. Os pongo un sin número de ocasiones, durante vuestra vida sobre la Tierra, para que reflexionéis y regreséis a Mí, a pesar de que muchísimos de vosotros Me traicionáis continuamente, porque os amo. Tomo los Méritos de Mi Hijo Jesucristo y los de Mi Hija, la Siempre Virgen María, como reparación a vuestros actos humanos negativos, porque os amo y os trato de atraer nuevamente a vuestra Casa, Mi Reino Celestial, al final de vuestra vida, porque OS AMO.


Mi Amor es muy diferente a lo que vosotros llamáis amor. Yo no veo Mis Intereses antes que a los vuestros, aunque Mis Intereses sois vosotros mismos. Vosotros, en una gran mayoría, dais “amor” con la idea de obtener algo de regreso y ése algo, muchas veces, consiste de actos pecaminosos, deseos egoístas, bienestar material y pocas veces lo hacéis para buscar el bienestar simple del ser amado. Envolvéis todos vuestros actos de “amor”, en situaciones en donde el AMOR real no existe. Vuestros actos, así, se vuelven mundanos, pecaminosos, egoístas y no estáis actuando con el Amor divino de vuestro Dios, quién habita en vosotros.


Ya os he explicado que el tiempo que vivís sobre la Tierra, es tiempo de vuestro Dios, a El le pertenece y que lo debéis de usar para llevar Mi Amor, el Amor que se vive en Mi Reino, a los vuestros. Y también estáis para que, con vuestra intercesión, Yo pueda devolver la Gracia a las almas que han bajado y están en la lucha y muchas de ellas en el gran peligro de su perdición eterna.


Vosotros debéis hacer vida divina para llevar a cabo vuestra misión en la Tierra. Deberéis olvidaros de vuestro egoísmo, de vuestros deseos mundanos, los cuales os pone y aviva el maligno en vuestros corazones. Vivís para vosotros mismos y en una gran mayoría, hasta para hacer a vuestros semejantes.


¡Cuánto tiempo desperdiciado y cuántas almas perdidas! Como acto de Fe y lo cuál Mi Hijo os confirmó, existe un Infierno real y eterno que será lugar de castigo para todas aquellas almas que Me han negado y Me atacan, ya sea directamente, ya sea a través de buscar el mal en sus hermanos. Vosotros sois, muchas veces, la causa, por un mal consejo o por un mal ejemplo, de destruir la belleza, pureza, vida espiritual, de un alma. Debéis saber que un alma es como un niño pequeño al que guiáis, enseñáis, hacéis crecer, para que se baste, en lo futuro, a sí mismo. Al alma la debéis guiar, alimentar de amor; la debéis hacer crecer en el Amor hacia Mí y hacia vuestros hermanos, dándoles ejemplo y ayuda. Debéis llevarlas a un crecimiento tal en el cuál ésas almas Me vean a Mí como lo que Soy, vuestro Padre, en quién deben confiar plenamente y hacerles saber que sin Mí, no pueden vivir.


Vuestra alma depende totalmente de Mí, del único alimento que Yo, vuestro Dios, puedo dar. El alimento que Yo puedo dar es para hacer crecer verdaderamente, a un alma; no se puede conseguir fuera de Mí, porque Mi alimento es Divino, no humano. Quién se alimenta de lo humano tenderá, necesariamente, a la perdición de su alma. Quién se alimenta de lo Divino, necesariamente encontrará la vida de su Vida Eterna.


Todos vuestros actos deberán divinizarse para así llevar a todos los vuestros al Reino Eterno. Vuestra vida ya envuelta de Dios, debéis dejarla ser habitada y ser movida libremente en vosotros.


Hijitos Míos, vuestra misión en la Tierra es una misión Divina, el mal lo sabe y os ataca en forma descomunal. No alcanzáis a ver sus ataques y su fuerza porque ya os habéis acostumbrado a vivir bajo su influencia, pero para que os deis cuenta, ligeramente, de la fuerza de¡ mal en vosotros, ved a vuestros hermanos caídos en cualquier vicio, El que no está en el vicio se pregunta, ¿cómo es posible que no pueda salir de él? El vicio arraiga, encadena, corta la Gracia, destruye la espiritualidad, entibia el amor, doblega y aprisiona al alma y la va destruyendo poco a poco, ahogándola en la desesperación y llevándola a una falta de confianza hacia Mí, quitándole toda ilusión en la creencia de que su alma sí pueda ser salvada, sin importar el grado de pecado ó de vicio en que se encuentre.


Las fuerzas del mal son muy poderosas contra aquellas almas que no quieren vivir a nivel divino. Cuando os volcáis en Mí, Yo os tomo, os alimento con Mi Vida Divina y os doy una fuerza mucha más poderosa que la descomunal del maligno. Yo Soy el Omnipotente, Yo tengo todo el poder y la Gloria, el maligno es un vasallo entre Mis creaturas. Nunca el sirviente va a ser más que su Señor. Os dejáis trabajar y guiar por el mal sirviente y no os acercáis a pedir ayuda y crecimiento a vuestro Señor y PADRE. Mi Hijo os lo mencionó: “Ya no sois siervos, ahora sois hijos”, y si sois hijos del Dios Divino, vuestros actos deberán ser iguales, divinos, porque todos vuestros actos deberán ir unidos a la Divinidad de vuestro Dios, en Sus Tres Divinas Personas.


Cuando habláis de vuestro Dios y movéis almas a salvación y a crecimiento espiritual, estáis actuando dentro del plan divino. Cuando dais buen ejemplo, actuando como Mi Hijo actuaría, estáis actuando a nivel divino. Cuando transmitís Mi Amor, tanto con ayuda material como espiritual, sin ver vuestros mezquinos intereses, estáis actuando como actuaría Mi Hijo y así estaréis llevando vida divina.


Vuestros actos deben de divinizarse al hacer la voluntad del Cielo, en la Tierra.


El Amor Divino deberá vencer al amor mundano mal llamado amor, por que éste “amor” mundano está lleno de pecado y de egoísmo, situación que no se vive en el Cielo, en vuestra Casa Eterna, de la cuál salisteis y a la cual deseo que regreséis todos vosotros.


Vuestra vida, de ahora en adelante, deberá ir revestida del sello divino, Mi vida en vosotras, para la difusión de Mi Amar para con todos vuestros hermanos, Amor comprensivo, Amor lleno de perdón, Amar para hacer crecer a vuestros hermanas, Amor de salvación, Amor para todos en el AMOR.


La divinización de vuestros actos los podréis lograr cuando queráis verMe en los demás y cuando respetéis Mis Deseos de salvación para con todos. No importa la gravedad del pecado realizado por algún hermano vuestro, Mi Omnipotencia y Misericordia puede perdonarlo, siempre y cuando la humildad y el arrepentimiento acerque el alma su Creador.


Al actuar can Amor Divino empezaréis a vivir vida de redentores, porque así comprenderéis mejor la debilidad de vuestros hermanos e intercederéis por ellos, ya sea con consejos, oración, penitencia, compañía comprensiva y con apoyo sincero para su renacimiento espiritual a la Gracia Divina. Cuando así actuéis, muchísimas almas, prácticamente perdidas, encontrarán cause segura para obtener raudales de bendiciones de Mi parte, por vuestra ayuda.


Divinizad todos vuestros actos ganando, con Amor, para vuestro Dios, multitudes de almas. Son tantas las que necesitan ayuda vuestra y tan pocos los que han permitido que Yo viva en ellos, que por ello muchas almas se siguen perdiendo y Mi dolor se vuelve muy intenso.


¡Entended hijitas Míos, os amo! Y cada alma que se pierde, se vuelve un dolor muy grande a Mi Corazón.


¡AyudadMe, por favor! Necesito de Mis hijos verdaderos para la salvación de todos Mis demás hijos. DejadMe vivir plenamente en vosotros para que Yo divinice vuestros actos humanos y podamos salvar a vuestros hermanos de todo el Mundo. Mi Reino pronto vendrá, el tiempo es corto, pero suficiente para salvar infinidad de almas si Me dejáis actuar ya, en vosotros. Yo puedo lograr en minutos lo que vosotros no habéis logrado en años, probad y veréis Mi Poder de Amor en vosotros y las delicias espirituales que gozaréis por ello no las podréis comparar a ninguna delicia humana que hayáis tenido, ni que pudiérais tener. Yo Soy el Alfa y la Omega, en Mí está todo y todo llega a Mí si se deja atraer por Mi Amor. Dejad que Mi Amor crezca en vuestros corazones y dé fruto Divino para la salvación y sanación de toda la Tierra y así Mi Reino pronto se dará entre vosotros, ya que de ésta forma estaréis uniendo al Cielo con la Tierra.


Yo os bendigo en Mi Santísimo Nombre, en el de Mi Hijo Jesucristo y en el de Mi Amor, difundido por Mi Santo Espíritu.