Rosario – Mensaje ÚNICO
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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
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Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Hijitos Míos, la vida en el Amor es una vida de donación, y fue lo que Yo hice, Mis pequeños, donarMe para vosotros, para vuestra salvación.
Ciertamente, el dar y el darse, son acciones loables para el hombre, pero Yo preferí, daros una lección de Amor inmensa, grande: Yo, siendo Dios, que pude dar, como Mis Bendiciones os doy, como Mis Cuidados os doy, como todo lo que os doy en Mi Providencia Divina, Me quise dar a vosotros.
Vosotros sabéis la acción de dar de los reyes o de aquellos que, ciertamente, os pueden ayudar, y como os dije, es acción loable el dar, pero el darse es más loable, porque estáis conviviendo con aquellos a los que estáis ayudando de múltiples formas.
Yo estuve entre los hombres, fui enseñándoos a vivir en la Gracia, en la perfección, a la que estáis llamados todos vosotros; Me di por los enfermos, Me di por los que querían crecer más espiritualmente, Me di más personalmente para los muertos, al revivirlos, para que regresaran a esta vida.
Caminé entre los hombres, sufrí, gocé. Los mismos climas Me afectaron igual en Mi Cuerpo Humano a como os afectan a vosotros, que eso, en la gran mayoría de aquellos que os ayudan, no lo sufren, como os dije: dan, y es loable, pero, caminar entre los hombres, darse, conocerlos, reír, llorar con ellos, caminar juntos, eso solamente, lo hace un Corazón grande, y ¿qué más grande que el Mío?, que os tenía Yo que enseñar lo que debéis hacer.
Los acontecimientos que se están dando actualmente, y que, como os he dicho, los está manipulando satanás. Yo lo permito, para que vosotros podáis conocer estas dos situaciones del dar y el darse. Como os digo, lo permito, no lo causo Yo, porque de Mí no puede salir ningún mal, satanás siempre os va a estar atacando, pero, de un mal, como os he dicho tantas veces, Yo permito, también, que surja un bien. Se darán estas dos situaciones, el dar y el darse.
Aquellos que tomen esa segunda opción del darse, como la tomé Yo, son los que tendrán más oportunidad de estar Conmigo, ya sea, en un lugar especial en el Reino de los Cielos, o serán, también, aquellos que conocerán los Nuevos Cielos, las Nuevas Tierras que se os darán como premio, por proteger y vivir el Amor, el poderlo dar y convivir con vuestros hermanos, tomando Mi posición de Dios en vosotros.
Os he dicho que aquel que quisiera seguir en pos de Mí, debiera tomar su cruz y seguirMe, el darse, conlleva, también, la Cruz. Vais a dar amor, vais a ayudar a vuestros hermanos, pero también, podréis ser perseguidos, odiados, envidiados, no comprendidos, como Me pasó a Mí, vuestro Dios.
Pero, seguid adelante, Mis pequeños, atended a lo que Yo ponga en vuestro corazón, y llevadlo a cabo, Mi Santo Espíritu os guiará, para que vosotros deis ejemplo Mío, ante los hombres.
Mi Bendición queda con vosotros y os repito: atended lo que sintáis en vuestro corazón y vividlo entre los hombres, como Yo lo hice.
Gracias, Mis pequeños.