Jul 27_10 Habéis apartado el Cielo de la Tierra, ¿qué os queda entonces?, el Infierno.

Rosario vespertino

Temas:

  • Me acepten o no Me acepten, hijos Míos, los que estáis separados, apartados de lo que Mi Hijo os dio, Yo Soy Madre de todo el género humano.
  • A veces estáis en el mundo, a veces estáis Conmigo y eso hace que vosotros no tengáis ésa fuerza espiritual que Yo quisiera que tuvierais.
  • Vosotros no habéis crecido, vuestra Fe todavía sigue siendo insignificante, ni siquiera llega al tamaño de la semilla de mostaza.
  • Ya no estáis produciendo amor y por eso, ahora viviréis lo que satanás vive.
  • Yo quisiera que tuvierais más tiempo para Mí, vuestro Dios, Yo Soy todo Amor, Ternura, Cariño sobre las almas.

 

Mensajes de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J.V.

 

Primer Misterio, Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Me acepten o no Me acepten, hijos Míos, los que estáis separados, apartados de lo que Mi Hijo os dio, Yo Soy Madre de todo el género humano.
Hijitos Míos, es Mi deseo santo, como Madre vuestra, que vosotros os unáis como corderitos, siguiendo al Pastor, que es Mi Hijo.

Mis pequeños, Mi Hijo os dio toda una lección de vida, que no solamente os la vino a dictar, sino que Él la vivió. Tenéis el ejemplo de todo un Dios entre vosotros y Me ha dejado a Mí, vuestra Madre, para que Yo os vaya guiando, Mis pequeños, a que seáis otros hijitos Míos, otros Cristos aquí en la Tierra y, por eso, Mi deseo es que os acerquéis más a Mí, Mis pequeños, porque éstos son tiempos que Nuestro Padre Dios Me dio para que Yo guiara a la humanidad hacia su salvación.

Sí, Soy vuestra Madre la que viene a enseñaros, la que viene a guiaros, la que viene a llevaros hacia la salvación que Mi Hijo os vino a dar. Yo vengo como tutora, voy repitiendo las Palabras de Mi Hijo, vengo como Salvadora, porque llevo también ésa Sangre, que Yo le di a Mi Hijo, Sangre Salvadora, que también es la Mía. Vengo a traer el Amor de Mi Hijo, porque Él Me enseñó a amar con el Amor que derramó sobre todos vosotros.

Estos son Mis tiempos, Mis pequeños, vengo a unir a la humanidad entera en un solo Corazón, el de Mi Hijo. Vengo a uniros y llevaros con Mi Corazón al Corazón de Mi Hijo.

Soy vuestra Madre y una madre se da por completo por los hijos, pero Yo Soy La Madre, la Gran Madre de toda la humanidad, Me acepten o no Me acepten, hijos Míos, los que estáis separados, apartados de lo que Mi Hijo os dio, Yo Soy Madre de todo el género humano y a todos os he de reunir.

Es el Amor de Mi Hijo, en Mi Corazón, lo que va a hacer éste gran bien para todos vosotros, un bien que más tarde agradeceréis, especialmente aquellos que han sido tomados por satanás y que atacan Mi Santo Nombre, que atacan Mi Presencia muy especial en éste Misterio de la salvación de la humanidad. Satanás Me ha querido hacer a un lado a Mí, vuestra Madre, porque sabe que son Mis tiempos, porque sabe que una madre lucha también con fiereza cuando ve que sus hijos son atacados, y estoy luchando por quitarle almas a satanás, porque éstos son tiempos también en que satanás iba a tratar de destruir a toda la humanidad, si fuera posible, y Yo vengo a salvaros de sus garras, por eso él ha provocado, alrededor del mundo, que a través de sectas, a través de ideologías falsas, que se Me haga a un lado, porque sabe que Soy muy importante en éstos tiempos de la salvación porque Yo puedo llevaros a todos vosotros hacia Mi Hijo.

Por eso os pido, Mis pequeños, os acerquéis más a Mí, que Me tengáis confianza de Madre, que Me tengáis ése amor de Madre para que, tomados de Mi Mano, Yo os lleve a Mi Hijo y así alcancéis la salvación eterna.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: A veces estáis en el mundo, a veces estáis Conmigo y eso hace que vosotros no tengáis ésa fuerza espiritual que Yo quisiera que tuvierais.
Hijitos Míos, Yo he venido para la salvación de todos vosotros, he venido para que todos vosotros tuvierais vida, vida en el Amor, pero en el Amor Divino.

Satanás os desvía y os muestra un amor que es un amorío pecaminoso que, ciertamente, satisface vuestros sentidos, pero no llena vuestra alma.

Os he dicho que es vuestra alma la que va a vivir eternamente, y a ella no le estáis dando el alimento debido, os estáis desviando con lo que satanás os da como supuesto alimento para vosotros, pero si vosotros os ponéis realmente a meditar lo que estáis recibiendo y lo que estáis dando, veréis que estáis viviendo solamente para el mundo, no estáis viviendo para Mí, para vuestro Dios.

Os he venido a dar ése Alimento  Divino, Mi Cuerpo, Mi Sangre, la vida espiritual, la oración, todo aquello que se relaciona con el crecimiento espiritual y que todos vosotros debéis seguir. Vosotros, como decís, debéis ser buenos de corazón, porque aquél que es bueno solamente para las cosas del mundo, no puede decir que está actuando de corazón con sus hermanos. Aquél que vive para el mundo, generalmente, se aprovecha de sus hermanos en múltiples formas. No hay respeto por la vida de los demás, él se aprovecha de lo que puede, sin importarle que sus hermanos queden afectados por su mal proceder.

Vosotros, Mis pequeños, los que ya alimentáis a vuestra alma, dad ejemplo de vida espiritual a vuestros hermanos, y esto es, obrando en el amor, obrando con virtudes, porque la virtud es una manifestación del amor. Vosotros tratáis a los demás con las virtudes, porque estáis tratando que los demás también tengan lo bueno que vosotros tenéis y estáis tratando de vivir en la virtud, para que todo lo que está afectado por satanás, que son los vicios y maldades, queden destruidos por la virtud y el amor que vosotros produzcáis en vuestra vida. No os debéis vosotros dejar llevar por lo que satanás os da todos lo días, lo veis a través de los medios de comunicación, lo veis en las revistas, lo veis en el trato de vuestros hermanos alrededor del día y veis como unos se comportan, como si trajeran realmente a satanás en su corazón y otros, tratan de mantener ésa vida espiritual que Yo os vine a dar, personalmente, a todos vosotros.

Ciertamente es difícil la lucha y, sobre todo, por vosotros, porque no vivís plenamente en Mi Amor: a veces estáis en el mundo, a veces estáis Conmigo y eso hace que vosotros no tengáis ésa fuerza espiritual que Yo quisiera que tuvierais todos y que Yo os vine a enseñar. Debéis empezar a vivir más en lo espiritual para que os podáis defender contra el mundo, contra todo aquello que satanás os viene a dar como tentación y que Yo no quiero que caigáis para que no desperdiciéis todo lo que Yo os viene a dar y que tanto Me costó.

Os Bendigo, Mis pequeños y que Mi Sangre Preciosa os purifique a todos vosotros y a todos aquellos que estén en vuestro corazón y en vuestra mente, para que los ayudéis a crecer y se puedan salvar.
Gracias, Mis pequeños.
 
Tercer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Vosotros no habéis crecido, vuestra Fe todavía sigue siendo insignificante, ni siquiera llega al tamaño de la semilla de mostaza.
(Lenguas…) Hijitos Míos, vosotros aún no os queréis dar cuenta de lo que realmente es un Milagro. Ciertamente los Milagros que Yo realizaba, cuando estuve sobre la Tierra, se realizaban por la Fe de quien estaba pidiendo el favor pero, detrás de ésa Fe, está también siempre el amor, Mis pequeños.

El amor es el que va a realizar todas ésas manifestaciones grandes para vosotros. Los milagros que, realmente son un regalo Celestial para vosotros, se dan en la Fe y en el amor.

Vosotros habéis perdido ambas cosas. Yo os ejemplificaba, desde ése tiempo, a través de la Parábola del tamaño de la semilla de mostaza que vosotros no habéis crecido, vuestra Fe todavía sigue siendo insignificante, ni siquiera llega al tamaño de la semilla de mostaza.

Habéis crecido muy poco, Mis pequeños, después de éstos dos mil años de Mi Evangelización sobre la Tierra. La gran mayoría de vosotros, los que Me seguís, no habéis crecido ni en Fe ni en amor. Me duele decirlo, pero así es, apenas empiezan las pruebas, y que van a ser cada vez más grandes, e inmediatamente vuestra Fe, que en sí es muy débil, os hace caer. Caéis porque no tenéis confianza, no os estáis respaldando realmente en la Fe que ya deberíais tener fuerte, firme. No confiáis en Mi Amor, sabiendo que Yo siempre voy a actuar con Amor hacia vosotros y que si Yo permito que algo suceda en vuestra vida o en vuestro mundo, siempre va a estar protegido por Mi Amor. Vuestra vida continuamente está siendo protegida por Mi Amor, Yo nunca os abandono, Mis pequeños, y menos en estos momentos difíciles y en los que se vendrán todavía.

Os falta ésa confianza plena en Mí, vuestro Dios. Si Yo Soy todo Amor, Yo no puedo permitir que a vosotros os pueda suceder algo grave que os pueda llevar a vuestra perdición eterna, vosotros sois los que tenéis una Fe muy débil y vosotros sois los que tomáis otro camino y es cuando vais con el enemigo a pedir sus favores y, tontamente, vais con el enemigo a pedir por un bien, cuando de él nunca saldrá un bien, tendréis un bien aparente, que será dentro del ámbito de lo material, pero en lo espiritual, si ya estabais vacíos, él os va a vaciar todavía más, él siempre os llevará a una destrucción espiritual, a un vaciamiento de la vida espiritual, porque él no puede dar lo que no tiene y esto, debéis meditarlo bien, Mis pequeños, porque estáis ya viviendo una lucha espiritual tremenda, o estáis Conmigo, con vuestro Dios, o estáis con satanás y estaréis contra de lo Mío y si sois veletas, que son los mediocres, los tibios, también estáis en contra Mía. Tened cuidado, Mis pequeños, porque éstos son tiempos decisivos, en donde estaréis poniendo ya vuestra alma en tela de juicio.

Buscad pues, Mis pequeños, vivir lo más cercano a Mi Amor y a todo lo que os he pedido, porque son tiempos en donde satanás os podrá engañar, de tal forma, que os pondrá pruebas tan fuertes que si no estáis Conmigo, sentiréis que son insalvables, pero si estáis Conmigo, sentiréis que fácilmente las podréis sobrellevar y aún vencer. Toda prueba, recordad, que os hace madurar, que os hace alcanzar un bien mayor, no tengáis miedo a la prueba ni tengáis miedo a lo que pueda venir, porque si estáis Conmigo saldréis más beneficiados de lo que ahora estáis. La prueba os lleva a la santificación, el acercaros a satanás y pedir que os ayude con la prueba que tengáis en vuestra vida, él solo os va a engañar y a traicionar y luego os llevará a una destrucción espiritual, como os dije y en consecuencia os llevaría a una condenación eterna.

Tened mucho cuidado, Mis pequeños, pedid Sabiduría Santa para estos tiempos, porque la vais a necesitar. Pedid, pedid el don del Discernimiento para que podáis entender en dónde está el Bien y en dónde está el mal en éstos momentos de vuestra vida. Satanás, os he dicho, que es muy sutil y él os puede engañar de tal forma que ni siquiera os imaginéis que estáis en el mal, por eso os pido que os acerquéis a vivir en el Amor y en las virtudes, que os acerquéis a la oración y a los Sacramentos, para que de ésa forma estéis seguros que lo que venga a vuestra vida, y cómo actuéis, esté siempre bajo las Enseñanzas y las peticiones que Yo os he dado y que pido de cada uno de vosotros para vuestra santificación, para vuestra salvación, para que llevéis una vida espiritual correcta, que os abrirá las Puertas del Reino de los Cielos eternamente.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Ya no estáis produciendo amor y por eso, ahora viviréis lo que satanás vive.
Hijitos Míos, llevar una vida fácil, una vida regalada, sin compromisos, se os hace muy fácil, divertido, no tenéis preocupaciones, pero estáis viviendo en el mal, y lo estáis viendo ahora alrededor de vosotros, en vuestra sociedad, en vuestra vida. Estáis viendo cómo satanás os ha llevado a una pérdida de valores en totalidad y lo peor de todo es que lo estáis ya aceptando como una forma de vida para vosotros mismos y lo aceptáis también de vuestros hermanos, os lo platican y lo veis normal, cuando debierais poner un “hasta aquí a todo ello”.

Ya os he dicho que ser un hijo de Dios, un hermano Mío, es difícil, porque tenéis que ir contra el mundo, tenéis que ir contra todo aquello que satanás os ha dado y que vosotros habéis tomado fácilmente, porque lleváis una vida, como os dije, regalada, fácil, divertida, pero para vuestros sentidos, para vuestra carne. No os dais cuenta que estáis viviendo para el mundo, os llenáis de bienes del mundo, os llenáis de diversiones del mundo, afectáis a vuestros hermanos, tenéis relaciones pecaminosas y no os importa en qué terminen ellas. Destrozáis almas, destrozáis cuerpos y no os importa, porque no queréis tomar ningún tipo de compromiso.

Estáis afectando lo Mío, estáis afectando la vida, estáis afectando lo Sagrado, os burláis de los Míos, de todo aquello que viene de Mí, ¿cómo queréis pues, Mis pequeños, que Yo os ayude cuando vosotros Me habéis dado la espalda?

Si está sucediendo todo esto que está pasando a vuestro alrededor, desastres, maldades, enfermedades, destrucción, es porque habéis aceptado a otros ídolos en vuestra vida, tal y como lo hizo el pueblo judío en aquél tiempo, que Me daban la espalda, que aceptaban otro tipo de creencias, que eran contrarias a lo que Yo os pedía y que os sigo pidiendo. Ellos se apartaban de Mí y sufrían, y ahora es el momento que os toca a vosotros, porque os habéis apartado de Mí y también tendréis ésos sufrimientos, ésos castigos que satanás mismo os va a dar, porque cuando vosotros estáis Conmigo Yo os defiendo de los ataques de satanás.

Yo os dije que satanás es el príncipe de éste mundo, que él no quiere que haya amor en sus dominios y, ciertamente, ya no estáis produciendo amor y por eso, ahora viviréis lo que satanás vive, o ¿apoco creéis que el Infierno es un lugar bello, un lugar atractivo, un lugar divertido?, no Mis pequeños, estáis muy equivocados, si vais a convivir con satanás, si vais a convivir con lo que es su vida real, vais a sufrir, porque el Infierno es un lugar de sufrimiento.

Os habéis apartado de Mí, de vuestro Dios, os habéis apartado de Mis Leyes, habéis hecho a un lado el Amor Verdadero que Yo os he dado, habéis hecho a un lado Mis Mandamientos, todo lo que el Padre Me dijo que os diera a vosotros. Me habéis hecho a un lado, habéis apartado el Cielo de la Tierra, ¿qué os queda entonces?, el Infierno, y eso es lo que vais a padecer, porque el príncipe de éste mundo, que es satanás, lo único que os puede dar es el Infierno y eso es lo que estáis padeciendo y padeceréis más gravemente si no entendéis y regresáis a Mí.
Gracias, Mis pequeños. 

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo quisiera que tuvierais más tiempo para Mí, vuestro Dios, Yo Soy todo Amor, Ternura, Cariño sobre las almas.
Hijitos Míos, Mi Gracia siempre está pronta a derramarse por vosotros, Mi Misericordia Infinita siempre está pronta para darse a aquellos que con amor y humildad Me pidan que les dé el perdón de sus pecados. Mis dones, Virtudes, Bendiciones, siempre están prontas a derramarse sobre aquellas almas ansiosas de crecer en lo espiritual y de agradarMe, Mis pequeños.

¡Cómo quisiera que entendierais esto bien, Mis pequeños! Mi Amor continuamente se está dando por vosotros, Yo quisiera que tuvierais más tiempo para Mí, vuestro Dios, Yo Soy todo Amor, Ternura, Cariño sobre las almas, Yo os quiero perfectos, os quiero santos, quisiera que esto entrara en vuestro corazón y que vosotros Me pidierais ésa total unión Conmigo, con vuestro Dios, para que fuerais ésas almas consentidas, ésas almas que Me procuran lo que muchas almas no Me procuran, que es el estar continuamente Conmigo. Un padre ama grandemente a sus hijos, pero más a aquél que le conoce más, que está junto a él, que le sirve, porque sabe cómo piensa, cómo ama, sabe cuáles son sus necesidades y sus deseos, porque ha puesto más empeño en observar al padre, a la madre y se acerca más a ellos porque les ama y quiere tenerlos de la mejor forma posible, consintiéndoles, porque sabe que el padre y la madre le han consentido a él primero, le han ayudado a ser, le han ayudado a crecer, le han dado todo y como respuesta de amor, ése hijo agradecido también quiere dar todo por el padre y por la madre que le han dado todo.

Mis pequeños, os amo infinitamente, quiero que seáis ésas almas amorosas, porque vuestro amor, lo que deis, será grandemente recompensado en el Reino de los Cielos. Quiero que seáis como ésa semillita, que cuando es plantada, está ahí, aparentemente abandonada, no se sabe de ella, pero algo interno, algo grande dentro de ella está sucediendo, está en tierra fértil y empiezan a haber cambios fuertes en su interior y empieza a nacer de ahí una raíz y un tallo y se va afianzando en ésa nueva vida, luego sale hacia el exterior, brota, se da a conocer al mundo y tarde o temprano, va a dar flores y fruto. Quiero que seáis ésas semillitas, ya habéis sido plantadas, ya os habéis arraigado, porque estáis Conmigo, pero pronto saldréis al mundo, ahora estáis aquí Conmigo, os reunís en pequeños grupos alrededor del mundo, pequeñas semillitas de amor, pero vais a salir al mundo, vais a salir adornadas con Mis dones, Virtudes, con Mi Amor, y vais a dar fruto, fruto abundante que será el salvar almas para el Reino de los Cielos.

Yo estaré con vosotros, Yo os iré alimentando, iré regando vuestras raíces para que de ahí toméis vida para todo vuestro ser. No os dejaré abandonados y estaré en todo momento con vosotros, Mis pequeñas semillitas, semillitas de Amor.

Mis Bendiciones sean derramadas sobre vosotros, Mi Amor se derrame sobre vosotros y todo lo que Me pidáis en vuestro corazón se derrame sobre vosotros. Cada uno de vosotros llevará una misión diferente, pero al final será una, salvación de almas y con cada uno de vosotros estaré. ServidMe ahora, Mis pequeños, porque Yo os serviré eternamente en el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.