Mzo 15_10 Es momento del Padre, para que conozcáis Su Misericordia, Su Amor Infinito.

Rosario vespertino.

Temas:

  • Son muy pocas las almas orantes alrededor del mundo y es una infinidad de almas a las que tenéis que salvar con vuestra oración.
  • Mi Hija dejó Bendiciones en cada lugar de Aparición y las almas que se acerquen ahí, puedan tener una fuerza espiritual grande contra las fuerzas de satanás.
  • Ni el ojo vio ni el oído oyó, lo que Yo tengo reservado para las almas que se mantengan en Mí, que busquen Mi Amor, que vivan en estado de Gracia.
  • Poco a poco iréis conociendo más de lo que Yo pensaba cuando vivía aquí en la Tierra.
  • Para eso estoy, en estos momentos de la humanidad, Mis pequeños, para llevaros hacia el Padre.
  • Os sigo pidiendo oración para estos hermanos vuestros que viven en el error, que han buscado la maldad y que sufrirán porque la maldad se volcará sobre ellos.

 

Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo, y la Santísima Virgen María a J. V.

Ofrecimiento, Habla Dios Padre,
Sobre: Son muy pocas las almas orantes alrededor del mundo y es una infinidad de almas a las que tenéis que salvar con vuestra oración.
(Lenguas…) Hijitos Míos, es tanto, tanto Amor el que Yo derramo diariamente, mañana, tarde, noche por toda la humanidad y son tan pocos los que aprecian éstos regalos que provienen de Mí, vuestro Dios.

Quiero, Mis pequeños, que vosotros os pongáis en el lugar de vuestros hermanos, que toméis en éstos momentos el lugar de la humanidad entera y que vosotros agradezcáis lo que ellos no agradecen, que vosotros reconozcáis lo que ellos no reconocen de todas las Bendiciones que se reciben de Mí; y que pidáis perdón por todos los pecados que se cometen en toda la humanidad, para que así la humanidad reciba Mis Bendiciones, gracias a vosotros, gracias a vuestra intercesión, gracias a la vida que vosotros tomaréis, como la tomó Mi Hijo por todos vosotros.

Alguna vez os hablaba de los hijos mayores y los hijos menores. Los hermanos en una familia, los hijos mayores, ayudan a los padres con los hijos menores y ésta es ahora vuestra posición, la de orar, interceder, cuidar por vuestros hermanos menores.

Sí, Mis pequeños, todos sois hermanos, todos sois hijos Míos, en diferentes familias, pero todos vosotros debéis sentir ya ésa fraternidad celestial y digo celestial, porque ya es tiempo en que se irá uniendo el Cielo con la Tierra y vosotros deberéis ayudar a eso, Mis pequeños, porque hay tantas almas distraídas alrededor del mundo, buscando otros intereses, que no los van a traer hacia Mí y vosotros, que ya estáis Conmigo, que Me habéis buscado, porque Mi Santo Espíritu tocó vuestro corazón y Le abristeis vuestro corazón, es ahora cuando ya debéis empezar a actuar como verdaderos hermanos y unidos como verdaderos hermanos, para que vuestra fuerza crezca y seáis ésos Cristos que tanto os he pedido que seáis, Mis pequeños.

PedidLe a Mi Hijo que os prepare, para que seáis ésos Cristos, que Él pueda tomar ésa Presencia Suya en vosotros y todos puedan ver a Mi Hijo a través de vosotros. Para esto, Mis pequeños, os he pedido que os olvidéis de vosotros mismos, pero solamente con Mi Gracia lo podréis lograr. El hombre es muy débil, distraído y busca las cosas del mundo antes que encontrar lo verdadero y santo que le puede ayudar más.

Pedid, Mis pequeños por la Fe del mundo, falla tanto la Fe en vosotros, que si falló en los Míos, vosotros, que estáis empezando, vuestras fallas pueden ser mayores. Necesitaréis la ayuda de Mi Santo Espíritu, para que vuestra Fe crezca y que con ésa Fe firme, podáis lograr grandes milagros para vuestros hermanos.

Daos, Mis pequeños, por vuestros hermanos, dad ya vuestra vida por la salvación de los vuestros. Vuestra oración cada vez debe ser más fuerte, más íntima, más amorosa, y con lo amoroso os quiero pedir lo que Yo os pedí, que oréis hasta por los enemigos, porque todos oran por los amigos, pero solamente aquellos que son Mis discípulos, que realmente han encontrado el valor del Amor, también saben amar a los enemigos, porque han aprendido que también son Mis hijos y los quiero tener Conmigo por toda la eternidad. Solamente la intercesión de hermanos que aman, como quiero que seáis vosotros, es como éstas almas se salvarán.

No desperdiciéis el tiempo ya, Mis pequeños, estáis viendo que ya los acontecimientos se están dando alrededor del mundo. Voy preparando poco a poco a la humanidad, para que se dé cuenta que Mis Advertencias se empiezan ya a dar y que no quiero que se venga lo más fuerte, porque espero todavía vuestro arrepentimiento de corazón. Pero vosotros, seguid orando e intercediendo por vuestros hermanos, mucha conversión se necesita, pero mucha oración de vosotros necesito Yo escuchar. Me tenéis a Mí, vuestro Dios y estando Yo en vuestro corazón, vuestra oración, os he explicado, que es poderosísima y eso es lo que necesito para éstos tiempos, porque son muy pocas las almas orantes alrededor del mundo y es una infinidad de almas a las que tenéis que salvar con vuestra oración.

Acudid a Mí, Mis pequeños, en Mi Santísima Trinidad, para que vuestra oración sea poderosa, sea santa, sea bella y así Me traigáis a muchas almas a su salvación eterna.
Gracias, Mis pequeños.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Mi Hija dejó Bendiciones en cada lugar de Aparición y las almas que se acerquen ahí, puedan tener una fuerza espiritual grande contra las fuerzas de satanás.
Hijitos Míos, os recuerdo que el príncipe de éste mundo es satanás. Os lo he dicho porque, cuando estuve en la Tierra, Me atacó a Mí, vuestro Dios y ataca a todos aquellos que están Conmigo, él siempre va a atacar a aquellas almas que Me buscan, que Me transmiten, que Me aman.

Son sus dominios, pero su poderío tiene que ser eliminado en base a Mi Amor y por eso Mi Evangelización fue en el Amor, para que se fuera destruyendo toda la maldad que satanás ha ido diseminando por toda la Tierra. Pero os he dicho también que satanás os conoce bien, conoce vuestras debilidades y por eso os presenta el mal disfrazado de un supuesto bien o de un agradable bien, para que vuestros sentidos gocen con el mal que estáis viviendo. De esta forma, como vuestros sentidos gozan y porque ya muchas almas ya no viven en la espiritualidad que Yo os di, y que Mi Santo Espíritu transmite, es de ésa forma como vais aceptando la maldad en vuestra vida, porque es agradable a vuestros sentidos, pero realmente aquellos que tienen cierta vida espiritual, luego ésta maldad se les hace amarga al corazón, como también se os ha dicho en las Escrituras.

Ciertamente, aquellas almas que actúan en el mal, sienten más tarde la maldad que cometieron, en su corazón, porque Mi Santo Espíritu les llama la atención por lo que hicieron. Si hay arrepentimiento de corazón, es cuando éstas almas pueden volver a Mí, pero desgraciadamente falta ya tanta espiritualidad en el mundo, que por eso satanás ahora ya camina libremente por las calles, como os dije, y nadie lo puede detener, porque el mismo hombre defiende ésa maldad que ha aceptado en su corazón.

Esto os lo digo en lo individual, Mis pequeños pero, también, hay países bendecidos, de una u otra forma,  por el Cielo y ésos países y pueblos son más atacados, porque satanás sabe que ésa Bendición del Cielo puede hacer que muchas, muchas almas vuelvan a Mí. Mi Hija dejó Bendiciones en cada lugar de Aparición y las almas que se acerquen ahí, puedan tener una fuerza espiritual grande contra las fuerzas de satanás y eso tampoco le gusta a satanás, y por eso empieza a corromper fuertemente a las almas de ésas poblaciones o países, para que no se dé lo que Yo quiero que se dé, que son conversiones por millares. Y vosotros conocéis de lugares así, donde ha habido Apariciones de Mi Madre últimamente, donde pueden darse muchas conversiones y, ¿qué hace satanás? De alguna forma ataca y ataca fuertemente, ya sea a través de la Iglesia, ya sea a través de los gobiernos, ya sea a través de la propia gente que se acerca a ése lugar bueno y santo, a ésos lugares escogidos del Cielo para transformar a las almas aquí en la Tierra.

Por eso os debéis alegrar, en cierta forma, que si vuestro país, pueblo, nación, es muy atacado, es porque hay grandes Bendiciones de parte del Cielo y eso lo sabéis, Mis pequeños y por eso debéis orar más fuertemente por vuestro país, pueblo o nación, en donde veis que tanto los gobiernos, la Iglesia y aún vuestros hermanos que viven ahí, atacan fuertemente las Apariciones, que permitimos, en Nuestra Santísima Trinidad, que se den para bien de todos vosotros.

Siempre, Mis pequeños, vais a tener grandes resultados con la oración, no la deberéis dejar nunca de vuestra vida, con ella tenéis soportes muy poderosos contra los ataques de satanás, es un escudo fuerte para vuestra Fe y para el Amor que ya ha crecido en vuestro corazón. No os dejéis vencer por los ataques de satanás, al contrario, alegraos por ellos, porque os tiene envidia, porque vosotros tenéis el Amor que él ya no puede tener.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Ni el ojo vio ni el oído oyó, lo que Yo tengo reservado para las almas que se mantengan en Mí, que busquen Mi Amor, que vivan en estado de Gracia.
Hijitos Míos, en las Sagradas Escrituras, podéis leer Mi Promesa para las almas que llegan al Reino de los Cielos y os lo dice un apóstol Mío: ni el ojo vio ni el oído oyó, lo que Yo tengo reservado para las almas que se mantengan en Mí, que busquen Mi Amor, que vivan en estado de Gracia.

Mis pequeños, lo mismo os puedo decir y prometer para éstos tiempos que se han de dar, para éstos tiempos ya purificados y santificados, para éstos tiempos en que se deberá vivir ya Mi Amor en pleno sobre la Tierra, pero Mi Amor aceptado, no obligado, Mis Leyes vividas con gusto, por amor a Mí, sabiendo que vosotros, cuando os dejáis guiar por ellas, Me hacéis feliz a Mí, vuestro Dios, cuando realmente en vuestra vida viviréis como verdaderos hermanos, cuidándoos unos a otros en el amor y en el crecimiento espiritual y aún intelectual.

Al vivir así, Mis pequeños, estaréis gozando de Mis Bendiciones y de Mi Promesa, porque serán tiempos grandes, serán tiempos bellos, serán tiempos que vosotros no os imagináis. Vosotros, podéis elucubrar, pero elucubraréis con lo que conocéis, ya os he dicho que sois demasiado pequeños para conocer Mis Potencias de Amor.

Hay tanto, tanto que os quiero dar, Mis pequeños y lo único que pido de vosotros, es docilidad, humildad, sencillez y vivir en el amor, pero en el amor que se os ha enseñado y que tenéis plasmado en las Sagradas Escrituras. Enseñanzas de Amor, bellísimas y os pido que vosotros, que seáis almas sencillas y deseosas de servirMe, deseosas de gozar de Mis delicias en el Amor.

Vuestras potencias en éstos momentos, Mis pequeños, están muy limitadas por el Pecado Original y, por eso, os pido que ni siquiera elucubréis en lo que Yo os puedo dar, porque no os podéis imaginar siquiera hasta dónde os puedo Yo elevar y qué regalos tan grandes os puedo dar.

Lo que para vosotros ahora es normal ver, edificios inmensos, aviones, coches, tantas maravillas que tenéis a través de la computación, si vosotros le hablarais de esto a un hermano vuestro de hace dos mil años, lo dejaríais asombrado, es más, sus capacidades no podrían ni siquiera imaginar lo que estáis viviendo y que para vosotros ahora es normal. Lo mismo os ha de suceder en estos tiempos a donde os voy a llevar si os mantenéis Conmigo. Va a haber otro salto inmenso, inimaginable para el ser humano, en donde ni siquiera podéis elucubrar, porque vuestras capacidades no pueden entender lo que Yo os voy a dar, como aquellos hermanos vuestros de hace dos mil años, simplemente, agradecedMe de corazón lo que Yo os quiero dar porque, ahorita, en éstos momentos de vuestra existencia, no os lo podéis ni siquiera imaginar.

Por eso os pido tanto que seáis como niños. Os voy a dar un regalo muy grande, como cuando era vuestro cumpleaños, recibíais un regalo muy grande y vosotros, simplemente al verlo, al ver ésa caja inmensa ya con eso gozabais.

Ved pues, como ésa caja inmensa, Mi Promesa y que poco a poco iréis abriendo, así como se vayan dando los acontecimientos y no veáis lo feo de los acontecimientos, sino seguid abriendo poco a poco ésa caja, en donde va Mi Promesa adentro, de vuestro gozo futuro, y cuando terminen los acontecimientos, ahí estará el premio, el regalo, Mi Promesa, Mi Amor en pleno ante vosotros y lo gozaréis, os lo prometo, lo gozaréis inmensamente porque lo habréis ganado con vuestra donación y con vuestra docilidad hacia Mí, vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Poco a poco iréis conociendo más de lo que Yo pensaba cuando vivía aquí en la Tierra.
Hijitos Míos, por muy versados que os consideréis en el conocimiento de Mi Vida y de la forma en que vosotros os debéis desarrollar dentro de Mis Enseñanzas, siempre os faltará conocer más, pero vosotros que ya estáis Conmigo, el saber más siempre os va a llevar a un gozo, un gozo íntimo, un gozo muy bello y estoy hablando de las Enseñanzas de Mi Vida pública.

Poco a poco iréis conociendo más de lo que Yo pensaba cuando vivía aquí en la Tierra. Mis apóstoles vieron lo que hacía, pero no sabían lo que Yo pensaba. Es ésa intimidad con Mi Padre lo que iréis conociendo poco a poco más y lo gozaréis, Mis pequeños, porque es una plática de Padre a Hijo, de Hijo a Padre, pero en niveles espirituales muy altos, puros, santísimos y amorosísimos.

Os he dicho que el alma tiene potencias infinitas, tanto en gozo, como en aprendizaje y vosotros, por el Pecado Original, quedasteis truncos en ésas capacidades, en ése avance de vuestra alma, tanto en conocimiento, como en el gozo de Mi Amor y todo eso se tiene que desarrollar grandemente para que Me conozcáis más y, al conocerMe más, gocéis más, tanto por tenerMe como Dios como por tenerMe como Hermano vuestro.

Estos son otros de los gozos íntimos que Yo tengo como regalo para las almas fieles, para las almas dóciles, para las almas que buscan su santificación. Y he ahí la santificación del hombre, es el llenarse de Mí, es el llenarse de Mi Vida, es el gozar como Yo gocé y, para poder gozar, por eso os voy a dar el regalo de irMe conociendo cada vez más en lo profundo de Mi Corazón, en ésos coloquios íntimos con Mi Padre. Y es ahí donde os quiero llevar.

Vosotros, porque sois Míos, porque os he preparado, como preparé a Mis apóstoles, gozáis cuando leéis algo acerca de Mí, gozáis porque vais aprendiendo y las fibras de vuestra alma se impregnan de Mi Amor.

Sois almas escogidas, sois almas buenas, sois almas que habéis trabajado para crecer en las bellezas de Mi Amor, en base a Mis Enseñanzas que os dejé aquí en la Tierra y que vosotros las habéis aceptado con vuestro libre albedrío.

Pues bien, Mis pequeños, ése es otro de los regalos que os tengo preparados, os repito, gozaréis infinitamente con lo que aprenderéis dentro de poco tiempo de Mis coloquios de Amor.

Ayudaréis a vuestros hermanos a que también se vayan adentrando a ése Amor, ahora desconocido, pero que vosotros gozaréis primero, vosotros tendréis éstas primicias de Mi Amor, porque las primicias se les dan a aquellos que están más interesados, a aquellos que buscan, a aquellos que desean encontrar y vosotros sois ésas almas escogidas y os lo agradezco, Mis pequeños, agradezco vuestra fidelidad, agradezco vuestro amor.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Para eso estoy, en estos momentos de la humanidad, Mis pequeños, para llevaros hacia el Padre.
Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María, y os digo, Mis pequeños, que una madre que ama, que una esposa que ama, siempre va a llevar el amor de los hijos hacia su padre. Para eso estoy, en estos momentos de la humanidad, Mis pequeños, para llevaros hacia el Padre. Mi Hijo os ha enseñado cómo amar al Padre, Yo, vuestra Madre, tomo el Amor del Hijo y os lo enseño, para que Yo pueda llevar vuestro amor al Padre y pido a Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor, para que toque vuestros corazones y quite todo aquello de vuestra mente que pueda afectar el que vosotros lleguéis fácilmente hasta el Padre.

Nuestro Padre y Nuestro Dios Me ha dado éste momento, en la historia de la humanidad, para que Yo actúe para la salvación de todos vosotros, pero éste también es momento del Padre, Mis pequeños, para que conozcáis Su Misericordia, Su Amor Infinito sobre todos vosotros. Es un Amor inigualable, es un Amor inmenso, bellísimo, Infinito que vosotros debéis conocer y del cual os vais a enamorar fácilmente.

Esto es otro de los grandes regalos que tendréis las almas fieles en el Amor Divino.

Venid, Mis pequeños, venid con la Madre, para que os ayude a entender más el Amor que viene del Reino de los Cielos y que éste Amor bajará a la Tierra como regalo para todas las almas fieles.

Así la Madre, como cuando lleva a los hijos a una fiesta, los arregla, los peina, los perfuma para llevarlos con los otros niños y además para presumirlos ante los demás, porque su gozo es el gozo de una madre, para que vean lo que ha hecho con sus hijos, así Yo también, Mis pequeños, os quiero reeducar en el Amor de Nuestro Dios, os quiero llenar de bienes, viviendo en el Amor y viviendo en las Virtudes, pero sobre todo, os quiero llevar a Mi Padre, para que Él os Bendiga, para que Le conozcáis, para que Lo busquéis, para que reconozcáis en Él a vuestro Creador, al que todo os da. Para que conozcáis lo que es el Amor Infinito de un Dios y Creador que os ha amado antes de que vosotros vivierais en el mundo.

DejadMe pues, Mis pequeños, que Yo, como Madre orgullosa, os presente ante el Padre, ante Mi Padre, ante vuestro Padre, ante vuestro Dios, para que Lo améis como Yo lo amo y gocéis en amarLo, porque el Amor, el Verdadero Amor, proviene de Él y es un regalo para todos vosotros.

Os quiero ir apartando del mundo para que os vayáis llenando cada vez más del gozo de Mi Padre y vuestro Padre.

Sed pequeñitos, dóciles y obedientes, sed pacientes con lo que Yo os quiera enseñar, porque no todos sois iguales. Algunos aprenden más rápido que otros y vosotros deberéis ser pacientes, para que se vayan dando los acontecimientos en la vida de cada uno de vosotros poco a poco pero, que al final, cada uno de vosotros gozaréis éstas bellezas a donde os quiero llevar.

Mi Padre, vuestro Padre, lo ha permitido así y para eso estoy, Mis pequeños, para preparar a los hijos fieles de ésta humanidad a llegar ante vuestro Padre y Nuestro Dios y lo gocéis como los hijos buenos, dóciles y verdaderos pueden gozar, porque para eso fuisteis escogidos, para gozar las bellezas del Verdadero Amor de Nuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Os sigo pidiendo oración para estos hermanos vuestros que viven en el error, que han buscado la maldad y que sufrirán porque la maldad se volcará sobre ellos.
Hijitos Míos, la diferencia en estos tiempos de las almas crecidas en Mi Amor y en Mis Enseñanzas, a las almas no crecidas, estriba en que vosotros estáis viendo ya el futuro y las grandezas con las que os voy a regalar en los tiempos venideros y prometidos y estáis gozando lo que ya os he estado explicando, que vislumbréis y que mantengáis ahí vuestra esperanza, que van a ser momentos bellísimos para las almas, momentos indescriptibles, momentos de regalo para las almas dóciles y buenas.

En cambio, las almas no crecidas, las almas que no confían, las almas que no quieren llenarse de Mi Amor, ellas están viendo los acontecimientos como dolor, de cambio, de horror que tendrán las almas, pero ellas lo están viendo nada más en lo físico, en lo material y vosotros ya estáis más introducidos a lo espiritual, porque habéis entendido Mis Enseñanzas y Mi Amor hacia vosotros.

Vosotros, en estos momentos gozáis, ellos, en estos momentos sufren y sufrirán cuando todo se vaya dando cada vez más seguido y cuando vaya siendo más doloroso para la humanidad.

Os pido os mantengáis ahí, como os he ido pidiendo a través de estos años, que tengáis vuestra vista, vuestra esperanza, vuestros deseos, en lo que os he prometido y os he explicado que se vendrá. Porque las almas buenas tienen que gozar lo bueno. Si estáis viviendo y buscando el Amor, también estaréis esperando lo mismo, en cambio aquellas almas que no han vivido en el amor, que no lo han buscado, que están viviendo solamente para el mundo y en la maldad del mundo, también estarán sufriendo por las maldades que se están dando y todo lo que está haciendo satanás, para desviar a la humanidad hacia la maldad. Estas almas se irán desesperando cada vez más, porque el mal se irá incrementando, el dolor también se volcará sobre los hombres y estas almas que están buscando dolor, porque eso es lo que han vivido, sufrirán inmensamente.

De cualquier manera, Mis pequeños, os sigo pidiendo oración para estos hermanos vuestros que viven en el error, que han buscado la maldad y que sufrirán porque la maldad se volcará sobre ellos.

Vosotros, en vuestro interior, manteneos en paz, manteneos en el Amor y traedMe a ésas almas, para que en algún error no se vayan a quitar la vida o vayan a debilitarse tanto, que no sientan que Yo estoy con ellas y puedan perderse eternamente. Vuestra oración será grande y benéfica para éstas almas que viven en error y en la maldad y ahí es donde las quiere satanás, quiere que sufran demasiado, para que su mente se nuble y no puedan pensar en Mí. Que vuestra oración las haga discernir y las haga encontrar un camino de Luz que las traiga hacia Mí.
Gracias, Mis pequeños.