Abr 22_09 La Luz del Espíritu Santo, ahora está fuertemente actuante, sobre la Tierra.

Rosario vespertino.

 

Temas:

• En la purificación, una buena parte de la humanidad será eliminada, pero por vuestra culpa, por vuestro error, por vuestra distracción.
• A todos los grupos de la Tierra, que reunidos en un solo Amor estáis, os bendigo, os protejo, os guío, os amo, sois benditos en Mi Amor.

• Conoceréis, como hijos de vuestros Primeros Padres, en vuestra propia persona, la perfección que Yo creé en ellos.
• Las potencias que se os darán, si vosotros os dais a Mí, es para que habitéis ya el universo entero.
• Se les develarán muchos misterios que no se os daban, porque no erais dignos para tenerlos.

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

 

Primer Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: En la purificación, una buena parte de la humanidad será eliminada, pero por vuestra culpa, por vuestro error, por vuestra distracción.

Hijitos Míos, cuando sois pequeños y cometéis una falta grave y, que vosotros sabéis que habéis cometido una falta grave, sabéis que atrás de eso vendrá un castigo y un castigo merecido. Todos vosotros estáis concientes de ésta situación, porque todos la habéis vivido, fuisteis pequeños, no sois perfectos, tenéis errores, pero vais creciendo y vais madurando a lo largo del tiempo.

En lo espiritual conocéis lo mismo, los que estáis realmente dentro de los valores de la Iglesia. Vosotros, los que seguís las Leyes que os he dado, todo lo que se os ha pedido para vuestra perfección cristiana, conocéis lo que debéis hacer y sabéis lo que está mal hecho. Los que realmente amáis lo que Yo os he dejado en el Antiguo Testamento y lo que os ha dejado Mi Hijo en el Nuevo Testamento, si lo respetáis, conocéis cuál es el valor de todo esto que se os ha dado y es para la perfección cristiana. Muchos de vuestros hermanos, a pesar de decirse Bautizados, no han querido aceptar lo que se os ha pedido para que os perfeccionéis, pero sobre todo, para que crezcáis todos.

Mis pequeños, mucho mal ha llegado a la Tierra, porque os habéis distraído con las cosas del mundo. Se os había avisado, en las Escrituras, que satanás es el ladrón que aprovecha el momento para introducirse en vuestro hogar. Vuestro hogar es el mundo y Yo os di el mundo para que lo habitarais y gozarais de la Creación. Ciertamente, el Pecado Original, afectó todo lo bello que se os había dado en un Principio, pero si vosotros hubierais acudido a Mí y hubierais tratado de proteger todo lo que Yo os había dado en la Creación, éste mundo sería muy distinto a lo que ahora estáis padeciendo. Y, digo padeciendo, porque estáis sufriendo, pero por vuestra distracción y porque no cuidasteis lo que Yo os pedí que cuidarais. La Creación os tenía que cuidar a vosotros, os tenía que consentir, pero vosotros no cuidasteis a la Creación que os iba a consentir y ahora se va a volcar en vuestra contra, porque descuidasteis lo que era bueno para vosotros.

Como os dije, el niño pequeño, al cometer un error, sabe que luego vendrá el castigo y bien merecido, a vosotros os pasará lo mismo. Se os ha anunciado en las Escrituras, conocéis esto desde los profetas antiguos y habéis llegado ya al tiempo en que esto sucederá, pero fue por vuestra distracción, por vuestra maldad y porque no quisisteis vivir en el Amor que Yo os había pedido.

Aceptad pues, Mis pequeños, lo que venga para vosotros, que será para bien vuestro, para vuestra purificación y para prepararos para los tiempos bellos que se darán. No es maldad de Mi parte, es distracción de vuestra parte, es vuestra maldad. No hay maldad en Mí, Mis pequeños, en Mí solamente hay Bondad. Vuestra maldad está propiciando todo lo que estáis padeciendo, dejasteis crecer ésa maldad entre vosotros, no limitasteis vosotros la maldad de vuestro corazón si hubierais hecho crecer el Amor que Yo os pedí y que además se os enseñó. Por vuestra distracción, padeceréis porque perdisteis cosas muy bellas que Yo os iba a dar y las recuperaréis, pero en base al dolor de la purificación que tendréis.

Agradeced pues, que se os da ésta oportunidad ya que, después del castigo que os merecéis, tendréis un regalo de vuestro Dios. Mi Amor siempre se manifestará ante los hombres, pero tendréis que presentaros primeramente arrepentidos y aceptando el castigo que se os dará, para que podáis obtener luego éste regalo los que quedéis en el mundo porque, en la purificación, una buena parte de la humanidad será eliminada, pero por vuestra culpa, por vuestro error, por vuestra distracción.

Mis hijos fieles, los que se mantuvieron Conmigo, los que aceptaron Mis Leyes, Decretos, Mi Amor, los que fueron fieles a las Enseñanzas de Mi Hijo, los que fueron fieles a las profecías que se os dieron en todos los tiempos, son los que gozarán Mis Promesas de Amor.

Os he amado y os sigo amando, sois Mi Creación y os sigo amando, Mis pequeños, todo esto servirá para que las almas, que quedarán para los Nuevos Tiempos, recuerden el error pasado y traten de enmendar, con sus acciones, en el futuro.

Os amo, Mis pequeños y siempre contaréis con Mi Amor de Padre. Os bendigo a todos y bendigo a aquellas almas que serán eliminadas de la Tierra, que no con esto os estoy diciendo que serán condenadas, pero sí, orad, orad por aquellas almas que no tendrán el paso para los Nuevos Tiempos porque no se lo merecieron, porque no fueron almas fieles, porque no buscaron la santidad en su vida, porque prefirieron la vida fácil y no tomaron su cruz. Prefirieron evitar el escarnio de sus hermanos, porque aquél que Me sigue, tiene una cruz pesada, pero a la larga, se le vuelve ligera y obtiene un premio y ése es el premio que tendrán éstas almas que se mantendrán en éste cambio, en los Cielos Nuevos y en las Tierras Nuevas.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: A todos los grupos de la Tierra, que reunidos en un solo Amor estáis, os bendigo, os protejo, os guío, os amo, sois benditos en Mi Amor.

(Lenguas…) Hijitos Míos, no os preocupéis cuando tengáis ésa sequedad espiritual, ya que Yo tomo el amor que soléis tenéis en vuestro corazón y lo reparto a aquellos que lo necesitan, pero Mis pequeños, lo que Me duele, no es la sequedad espiritual que vosotros tenéis, porque Yo la he tomado para repartirla, sino la que existe en millones de almas alrededor del mundo. Y es una tristeza, Mis pequeños, ver cuántos de vuestros hermanos viven en ésa sequedad espiritual y no les importa, viven en el mundo y para el mundo, viven en sus problemas y en sus logros humanos, todo lo han fincado en la carne, en el mundo, en lo que ven y tocan, para ellos no existe nada que sea espiritual ni sobrenatural.

¡Cuánta sequedad de almas!, por eso muchos de vuestros hermanos se quitan la vida ó pierden la vida eterna, por no tener un soporte espiritual perfecto, que es el estar Conmigo, con vuestro Dios y Señor, con vuestro Padre de los Cielos.

Satanás ha hecho su obra entre los hombres, ha eliminado el amor de los corazones, se vive un amor mundano, pero éste solamente de conveniencia y no de donación. Buscáis al hermano porque os conviene tener lo que él produce ó tiene, ó vende ó hace. Compartís, en compra-venta, lo que el hermano tiene, pero no, no os veis como hermanos. Simplemente usáis al hermano, al semejante, porque él tiene lo que vosotros no tenéis y no os importa el sentimiento interno, no os importa cómo le podréis afectar en su alma, porque no creéis que la tenga. Es una vaciedad espiritual la que una gran mayoría de los seres humanos está padeciendo, que por eso entran fácilmente en la desesperación y caen en enfermedades psicosomáticas graves. Para ellos solamente es mente y cuerpo y nada más, y no se acercan a Mí a pedir ayuda de ninguna especie.

Algunos de vosotros os habréis dado cuenta de éste problema que está padeciendo la humanidad, pero no lográis ver lo que Yo veo en la profundidad de los corazones y esto Me entristece, Mis pequeños, tanto que os he dado, tanto que os he consentido y el hombre no cambia y, al contrario, se va autodestruyendo día a día más. Por eso, a vosotros, los que os reunís a orar, a vivir momentos íntimos Conmigo, con vuestro Dios, os voy consintiendo y os voy cuidando como ovejas consentidas del redil. Sí, Mis pequeños, os lo tengo que decir, porque os amo y porque confío en vuestro amor, porque os he preparado y vosotros habéis aceptado la responsabilidad de estar Conmigo, a pesar de los ataques que tenéis de vuestros hermanos, que están vacíos en su corazón.

Sí, Mis pequeños, os consiento, pero sé que satanás también os ataca fuertemente, pero os cuido, os cuido como joyas preciosas y os amo infinitamente, porque aceptáis lo que Yo os pido, aceptáis los dolores que se os vienen a vuestra vida, dolores físicos, morales, espirituales. Sois Mis nuevos hijos, Mis nuevos cristos sobre la Tierra.

Mi Hijo se dio por toda la humanidad y por todos los tiempos y ahora le estáis ayudando a Él y vosotros a Mí, por medio de Él, para la salvación de las almas de estos tiempos. Vuestra misión es bella, vuestra misión es santa. A pesar de vuestra pequeñez y de vuestras caídas, hacéis un gran bien al Reino de los Cielos, por eso os cuido y os consiento.

Mis pequeños, mucho, todavía tendréis que padecer por la salvación de vuestros hermanos, aunque seáis pocos. Mi Potencia de Amor, en vosotros, logra mucho, mucho, mucho, Mis pequeños. No os dejo ver la potencia que sale de vuestras oraciones para que no os envanezcáis, pero os aseguro que Me dais un gran contento cuando os reunís para estar Conmigo, para orar desde vuestro corazón, para traerMe alegría a Mi Corazón, alegría que muchísimos de vuestros hermanos no Me dan. PedidMe lo que necesitéis, Mis pequeños, dejadMe que engrandezca vuestras potencias espirituales y vuestras potencias de amor. DejadMe que os consienta, para que vosotros podáis hacer la obra que muchos de vuestros hermanos, os debieran ayudar pero, que en su distracción, no lo hacen. Sois Mis oasis de amor, todos vosotros, los que en grupos estáis y que Me amáis de corazón.

A todos los grupos de la Tierra, que reunidos en un solo Amor estáis, os bendigo, os protejo, os guío, os amo, sois benditos en Mi Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Tercero Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: Conoceréis, como hijos de vuestros Primeros Padres, en vuestra propia persona, la perfección que Yo creé en ellos.

Hijitos Míos, desde el primer Pentecostés, la Luz del Espíritu Santo ha ido guiando al hombre con la Palabra de Mi Hijo, por la preparación que debe llevar la humanidad para el Segundo Pentecostés. Ahora está fuertemente actuante, sobre la Tierra, preparando ya Su Segunda Venida. Está entre vosotros, está en vosotros, los que le habéis abierto vuestro corazón, para que Él os cambie y os lleve a la perfección, a la que debéis llegar nuevamente.

Vuestros Primeros Padres, os he explicado, perdieron ésa perfección por el Pecado Original y vosotros la recuperaréis, siempre y cuando permitáis que Mi Divina Voluntad trabaje nuevamente en vosotros, como trabajó en vuestros Primeros Padres, Adán y Eva. Deberéis ser lo suficientemente humildes para reconoceros que sois incapaces de llegar a la perfección, a la que estáis llamados, por vuestras propias fuerzas y capacidades. Necesitáis de Mi Guía Paterna y la Luz del Espíritu Santo, que ahora se os está dando, para que todo lo que os enseñó Mi Hijo, se manifieste fuertemente en cada uno de vosotros. Tenéis que hacer vida todo lo que Mi Hijo os dio, que Sus Palabras, Sus acciones, los hechos que se le vieron hacer aquí en la Tierra, ahora sean los vuestros. Eso os llevará a la perfección, porque todo será inundado en el Amor.

Sed honestos, Mis pequeños, no os amáis, verdaderamente, los unos a los otros, como Él os pidió. Os atacáis, os arrebatáis, os matáis los unos a los otros. No hay amor realmente en vuestros corazones, no hay esa fraternidad cristiana que Él os vino a enseñar. No se está viviendo el Cielo en la Tierra y de eso estáis perfectamente consientes. Por eso, la acción del Espíritu Santo ahora entre vosotros, os va a llevar a eso, a la fraternidad humana. Pero deberéis ser dóciles a la acción de Mi Santo Espíritu, si vosotros os dais a su acción, Él os va a arrebatar todo lo malo que en vosotros existe, os va a arrancar de raíz todo aquello que os está afectando y que os está manteniendo en la maldad. Eso no viene de Mí, eso no viene de Mi Creación, vosotros dejasteis que se arraigara el pecado en vuestra alma, en vuestro corazón, en vuestra vida, pero ahora vengo Yo, a través de Mi Santo Espíritu, a purificar vuestro ser.

Mis pequeños, (Lenguas…,) Mis pequeños, os quiero poner un ejemplo de cómo va a ser vuestra transformación. Habréis visto esculturas de grandes artistas, escultores de la antigüedad, cómo algunas de ellas se quedaron a medio trabajo, ciertamente veis las formas, pero los detalles no están completos. No hay una verdadera belleza todavía en ésa escultura que quedó a medias. Así estáis vosotros, sois esculturas a medias y, ahora, Mi Santo Espíritu vendrá a dar los toques finales para que seáis como ésas bellezas que podéis ver ya terminadas de los artistas pasados, de los cuales, os encantáis con ellas.

Es un ejemplo que podéis entender, pero en Mi Sabiduría, en Mi Perfección y en Mi Omnipotencia, vuestra belleza, será muy superada, porque vuestra belleza se dará en lo físico y en lo espiritual. Seréis nuevamente la verdadera obra de Creación que Yo hice desde aquél tiempo. Conoceréis, como hijos de vuestros Primeros Padres, en vuestra propia persona, la perfección que Yo creé en ellos. Alabaréis Mi Santo Nombre, agradeceréis las bellezas que tendréis, porque Yo Soy el Perfecto, Yo soy vuestro Dios y todo lo que Yo hago, es perfecto. Dejad, pues, que Mi Amor os dé la perfección que os falta, que no habéis querido buscar, porque quisisteis manteneros en el mundo, en la maldad, en el engaño de satanás. DejadMe, pues, que ésa belleza que Yo tengo en Mi Mente, se manifieste en cada uno de vosotros. Sois bellos, Mis pequeños, sois Mis creaturas, sois la obra maestra de la creación. DejadMe, Mis pequeños, que Yo os dé los toques finales, para que gocéis, junto Conmigo, de vuestra hechura perfecta.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: Las potencias que se os darán, si vosotros os dais a Mí, es para que habitéis ya el universo entero.

Hijitos Míos, si en lo humano, llegar a una maestría ó a un doctorado, es el culmen de vuestros estudios y de vuestros deseos profesionales, llegar a la santidad, es el culmen de la perfección del alma. Mis pequeños, comparando las potencias humanas con las Potencias espirituales, las Potencias espirituales, son infinitamente mayores que las potencias humanas.

Os he dicho que vosotros vais a tener una transformación en cuerpo y alma, si así Me lo permitís, pero estáis imaginando ahora, solamente, un horizonte muy cercano de lo que vais a tener en lo futuro. Estáis en el mundo y estáis viendo solamente lo que el mundo os da.

Mis pequeños, con esto os estoy queriendo decir que estáis llamados al universo. Las potencias que se os darán, si vosotros os dais a Mí, es para que habitéis ya el universo entero, para que os podáis comunicar con el universo, porque el universo fue creado desde el Principio y Yo se lo dí a vuestros Primeros Padres.

La Creación comprendía al universo entero, estrellas, constelaciones, planetas, galaxias. Hay tantas bellezas que aún no conocéis y que Yo creé para vosotros, para consentiros. Eso y más es lo que se os dará cuando vengan estos Cielos Nuevos y Tierras Nuevas. Con Cielos Nuevos os voy a dar el universo entero, con Tierras Nuevas os voy a dar el cuidado de la Creación para vosotros, para vuestro cuerpo, para los hijos que Me daréis en estos nuevos tiempos.

Por eso os decía que son bellezas inimaginables las que tendréis, porque no os podéis imaginar lo que hay allá, en los cielos. Ciertamente, a través de la ciencia, habéis podido vislumbrar apenas un poco de lo que hay allá en los cielos, en el universo, pero hay una inmensidad que no os imagináis, porque está muy lejana a las capacidades humanas en éstos momentos.

La sabiduría humana está muy limitada, solamente aquellos que pasarán ésta prueba, que se os pondrá, podréis alcanzar una ciencia que ahora no tienen vuestros hermanos. Desgraciadamente, una gran mayoría de los científicos han caído en soberbia y Me han hecho a un lado, confían más en sus capacidades que en Mí, vuestro Dios. Ellos mismos han limitado sus capacidades por confiar en ellos y en lo que pueden producir y ganar con su sabiduría humana. Si la ciencia hubiera confiado en Mí, vuestro Dios, ya hubiera avanzado infinitamente más de lo que ahora tenéis. Estáis apenas vislumbrando los inicios del universo, hay tanto, tanto, que Yo os voy a dar, que vosotros gozaréis y que alabaréis Mi Santo Nombre por las bellezas que veréis.

DadMe desde ahora, Mis pequeños, las gracias por el Amor que os tengo y por los regalos que os daré, porque fuisteis dóciles y, sobre todo, fieles a Mis Palabras, a Mis Promesas y a Mi Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: Se les develarán muchos misterios que no se os daban, porque no erais dignos para tenerlos.

Hijitos Míos, por la acción del Espíritu Santo, a las almas escogidos de ésos tiempos, de los Nuevos Cielos y las Nuevas Tierras, se les develarán muchos misterios que no se os daban, porque no erais dignos para tenerlos.

Sí, Mis pequeños, es duro que Yo os diga esto, pero no se le pueden dar las perlas a los puercos, porque seréis transformados, ahora sí apreciaréis, de corazón, los regalos que se os darán. Ahora, transformados, tomaréis con alegría, con humildad y con mucho amor Mis regalos, mientras que si se os dieran en éstos tiempos, vuestra soberbia, vuestra maldad, crecerían grandemente y, además, en ningún momento, quizá, os acordaríais de agradecerMe lo que se os estuviera dando.

Todo tiene su tiempo y ahora entraréis en ése tiempo de los grandes regalos que quedaron truncados por el Pecado Original. Yo Soy Omnipotente y Yo tendré regalos por toda la eternidad para las almas que estarán en el Reino de los Cielos. Todavía habrá un tiempo en que habitará el hombre en la Tierra, que estará limitado, ciertamente, pero luego se le dará una total libertad, cuando se dé el Juicio Final y se cierre ya la historia del pecado.

Pero, por lo pronto, en éstos tiempos, conoceréis grandes maravillas de Mi Amor, conoceréis grandes Potencias que se os han prometido y que ahora las veréis realizadas en vuestra vida. Os estoy prometiendo un Bien casi inmediato, pero como os dije, todavía deberéis padecer una purificación.

Hace tiempo, al principio de ésta serie de Mensajes, se os dijo que pusierais vuestra mente, vuestro corazón y vuestra esperanza en los regalos que se os iban a dar después de la purificación, que no os preocuparais tanto del tiempo de la purificación y lo que se iba a padecer en ella, que os fijarais más bien, en los regalos que os estaba Yo prometiendo y, por eso, he querido ser más didáctico y explicar mejor lo que se os va a dar, para que pongáis vuestra mente y vuestro corazón, en estas bellezas inconmensurables que se les darán a las almas que pasarán la prueba de la purificación.

Tomad, pues, con alegría y con fortaleza, además de con gran esperanza, éstos momentos que os limpiarán de todos vuestros males pasados. AgradecedMe, de corazón, que Yo os vaya a permitir estos momentos, para que os podáis presentar ante Mí, aún en vida, con vuestra alma, totalmente donada a Mi Amor y dispuestos a gozar de Mis regalos. AgradecedMe que Yo Me haya fijado en vosotros, para que pudierais gozar lo que Yo os voy a dar y, orad por vuestros hermanos que serán eliminados, porque no quisieron ellos mantenerse Conmigo, porque quisieron hacer su voluntad en su vida, que quisieron mantenerse en el pecado y nunca quisieron pedir perdón. Orad por ellos, para que puedan ser perdonados, por vuestra intercesión y por vuestro amor hacia ellos, pero sobre todo, por el amor hacia Mí, vuestro Padre y vuestro Dios, que Me alegraréis grandemente. Que por el amor que nazca en vuestro corazón, puedan éstas almas regresar al Reino de los Cielos, porque habrá amor por ellos en vuestro corazón, a pesar de su maldad, a pesar de su traición.

El padre y la madre aman a los hijos, aún a pesar de sus errores, pero se necesita un alma buena que los regrese al redil y vosotros seréis ésas almas buenas que regresarán a muchas almas que viven en el error, a vivir eternamente Conmigo, con vuestro Dios y Creador.

Os amo, Mis pequeños, recibid Mis Bendiciones y esperad, con gran esperanza, con amor y con fortaleza, éstos momentos de purificación que, aunque sean dolorosos, os estarán preparando al momento grande y bello que se os dará.
Gracias, Mis pequeños.