Oct 27_01 El anticristo ya tiene sus instrumentos, Yo tengo los míos.

Mensaje

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

 

Habla Dios Padre,
Hijitos Míos, Yo, como Padre de todo el género humano, siempre estoy viendo por las necesidades de todos vosotros. Todos sois Mis hijos y a todos os quiero de regreso al Seno Eterno.

Os he explicado el actuar de nuestro enemigo común, el demonio y os he dicho que desde que fué desterrado de Mi Presencia en el Cielo, él juró destruir toda Mi Obra de Creación, en dónde, todos vosotros, Mis hijos, sois el principal objetivo, ya que por su gran envidia, os quiere evitar gozar de lo que él perdió.

Así como Yo tengo a Mis instrumentos entre vosotros, hermanos vuestros, quienes tomando Mis Palabras, Mis Enseñanzas y el Ejemplo que os dio Mi Hijo Jesucristo, para ayudaros a crecer en el Amor, él, el enemigo de todo lo bueno, de todo lo que es Mío, de todo lo que Me pertenece, también tiene sus instrumentos, sus secuaces, quienes a pesar de ser hermanos vuestros, también, Me han traicionado y sólo buscan el cómo haceros el mal.

Este mal va cubriendo poco a poco a la Tierra entera, ha ido poco a poco minando la espiritualidad de todos vosotros, os ha manipulado a tal grado que os ha hecho aceptar y vivir el error y el pecado, que ya no los tomáis como tales. Se os ha hecho normal el vivir fuera de Mis Leyes y preceptos.

La juventud y la niñez han sido profanadas. Estas almitas que debieron haber sido formadas por sus padres para que aprendieran a amar y a conocer a Su Padre Celestial, al haberlas olvidado, al haberse distraído, con las cosas del mundo, ellas tomaron caminos erróneos y muchos de ellos, ahora, a ésa temprana edad, se han vuelto adoradores de satanás y enemigos acérrimos contra Mí, Su Dios, contra lo Mío y contra todo, lo que hable de Mi Amor.

Con todo éste error difundido, el maligno ha preparado ya el escenario, el campo favorable para que aparezca ya, entre vosotros, el hijo de la perdición, el anticristo. El no vendrá a enseñaros su maldad, la maldad ya está en el corazón de una gran cantidad de Mis hijos por todo el Mundo.

El ya os dió su doctrina y ahora viene a reinar sobre los suyos, quienes lo aceptarán y lo adorarán. Es la Bestia, es el pecado en toda su expresión, es el mal encarnado, quién trae el poder de Mi enemigo.

El, primero, aparecerá, como ángel de luz, o sea, como un personaje salvador y apaciguador de los males que aquejan al género humano, de los males que os aquejan todos los días. El os prometerá evitar todo tipo de mal, tanto de guerras, como de enfermedades, como de la falta de bienes terrenos.

Aquellas almas que no han sabido apreciar y sacar el provecho espiritual, por no querer entender el valor del sufrimiento, fácilmente caerán en sus redes. En cambio, aquellas almas, que, reconociéndolo, porque sabrán escuchar a Mi Santo Espíritu en su corazón, no lo sigan, serán duramente tratadas por él y por sus secuaces.

Yo, como Padre providente y Protector, nunca os abandonaré y por ello os he insistentemente pedido que os comportéis como verdaderos hermanos. ¿Por qué os he pedido esto? Algunos de vosotros seréis protegidos fuertemente, a pesar de sus intensos ataques, para que podáis tener de sobra de lo que humanamente necesitaréis. Cuando vivís comoverdaderos hermanos y os comportáis como tales, véis por las necesidades de los que están en apuros. Los que tengan de más, en vez de almacenar, deberán repartir porque se os presionará a aceptar los errores del malo, a cambio de los alimentos y de los bienes de la Tierra. No tendréis lujos en éste tiempo próximo por venir, pero no os faltará lo necesario para alimentaros, tanto en vuestro cuerpo como en vuestra alma.

El dolor y la persecución unirán a los Míos. Seréis un solo corazón con Mi Hijo Jesucristo y juntos levantareis a este género humano caído en el error y en el pecado que tanto Me daña.

El tiempo de la prueba será corto porque se ha orado para ello. Mi Hija, la siempre Virgen María, ha intercedido por todos vosotros y ha allanado el camino para que la prueba no sea mortal para muchas almas débiles que podrían caer fácilmente en las promesas del enemigo.

La lucha ya la estáis viviendo, no penséis a futuro, ya estáis combatiendo ahora. La lucha es espiritual, porque espiritual será el premio o el castigo eternos. Debéis luchar contra la mentalidad destructiva del mal.

No son los desastres naturales, ni las guerras, ni las pestes las que os podrán matar, sino el ir en contra de Mis Leyes de Amor es lo que realmente os puede matar.

Mi Hijo os dijo: “No temáis a los que quieran matar el cuerpo, temed a los que os puedan matar el alma”.

Todo el error, las ideologías, doctrinas y pensamientos contrarios a Mi Amor, son los que ya mataron y están matando el alma de muchos de Mis hijos. Por eso os digo, estáis esperando a la persona real del anticristo, esperando a ver cómo os ataca para protegeros contra él, creyendo que tendréis la fuerza suficiente para combatirlo, cuando ya habéis aceptado con anterioridad su error y ya lo vivís, de tal forma que vuestra fuerza espiritual se ha debilitado como para poder hacerle frente. Ya no tenéis la fuerza espiritual total como para hacerle frente, ya minó vuestras capacidades. Ya no os podéis considerar combatientes de primer orden, porque vuestro corazón alberga ya algo de sus enseñanzas.

Pocos, muy pocos, son los que se han dado cuenta de su ataque previo y han tratado de protegerse con la oración intensa, con el ayuno y con el sacrificio, los demás le han “sacado provecho”, a las facilidades que su doctrina diseminó, dándole gusto al cuerpo y al bolsillo, éstos son la gran mayoría entre vosotros.

Por eso os digo, el terreno ya es propicio para que el que se pondrá como persona que blasfemará libremente Mi Santo Nombre y que lo apoyarán millones, se presente.

También muchos de vosotros creéis que él aparecerá yque por los portentos que hará, por ellos, muchos lo seguirán. No, Mis pequeños, él ya se atrajo a sus seguidores y son los que lo alabarán y adoraran.

Os vuelvo a prevenir, el tiempo que ya estáis viviendo, ya es tiempo que precede a la presencia real del anticristo, pero también el tiempo en el que Mi Hijo aparecerá con gran esplendor sobre la Tierra entera.

El trigo y la cizaña se han de separar. El maligno, con su representante, sus secuaces y sus seguidores, serán vencidos y eliminados de la Tierra para que Mi Hijo, como Rey, que es del Universo entero, venga a reinar sobre los que perseveraron en la prueba y que ganarán el premio de vivir con Mi Hijo en los Cielos Nuevos y en la Tierra Nueva que os darán.

Perseverad y confiad plenamente, Mis pequeños. Aunque la prueba sea fuerte, Mi Gracia y Mis Bendiciones lo son más y todo aquel que se apoye en Mi Amor y en Mi Poder, no tendrá porqué temer. Sólo os pido os soltéis a Mi Voluntad para que Mi Poder salvífico pueda fluir libremente a través de vosotros y, así como Padre e hijos, logremos vencer plenamente al mal. Yoestaré con vosotros hasta el final.

Mío es todo él Poder y la Gloria por siempre él ,Yo os bendigo en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo Jesucristo y en el del Amor del Amor de Mi Santo Espíritu.