Sep 01_08(vesp) Sabréis cómo protegeros de éstas nubes obscuras.

Rosario vespertino.

Temas:

  • Estáis a momentitos ya del gran cambio y esto lo sabe satanás, sabe todas las bellezas que podréis obtener si os mantenéis Conmigo.
  • Vosotros los que buscáis a Mi Dios, ¡Oh!, Mis pequeñitos, alegraos, alegraos, porque vuestra Fe será recompensada infinitamente.
  • Manteneos, Mis pequeños, en el Amor, que ésta sea una coraza muy poderosa contra todo mal con que os ataque satanás.
  • ¡Tantos, tantos hijos que tengo y tan pocos son los que se acercan!, traédMelos, Mis pequeños.
  • Haced lo que os pido y veréis cómo después Me agradeceréis eternamente lo que he hecho en vosotros.
  • Poned vuestra mente en Mi Presencia en vuestro corazón, pedidMe que os ayude a que Me podáis visualizar en vuestro corazón.
  • Nubes de borrasca se acercan, grandes nubes obscuras que cubrirán todos los pueblos de la Tierra.

Mensaje de Dios Padre, a J. V.

Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Estáis a momentitos ya del gran cambio y esto lo sabe satanás, sabe todas las bellezas que podréis obtener si os mantenéis Conmigo.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Mi Corazón reboza de alegría cuando os veo reunidos, cuando os veo así, hablando de Mí, de Mis Maravillas, de Mi Santo Nombre, cuando os reunís para hablar del Cielo y de todo lo que Yo os doy a través de Mi Trinidad Santísima, a través de Mi Hija, la Siempre Virgen María, del Señor San José, de los Ángeles, de los Santos, del Cielo entero. Cuando os veo a todos así reunidos hablando de todo ello, os digo, que Mi Alegría es tanta, que Mis Bendiciones se derraman profusamente sobre vosotros. ¡Cómo quisiera que la humanidad entera hiciera lo que estáis haciendo!, Mis pequeños y el Amor viviría entre vosotros, el Amor os colmaría de tantas Bendiciones, viviríais ya el Cielo sobre la Tierra, la maldad estaría ya erradicada de todos los pueblos de la Tierra.

¡Oh!, Mis pequeños, os he dicho tantas veces que lo único que necesita el hombre, es el Amor, lo único que necesitáis para destruir toda maldad, es el Amor, lo único que necesitáis para alcanzar vuestra perfección, es el Amor, lo único que necesitáis para que os comportéis como verdaderos hermanos, es el Amor. Pero, ¡cómo se desvía el hombre en buscar otras cosas que no son buenas ni necesarias para el crecimiento de vuestra alma, sois todavía como niños pequeñitos, que os distraéis con tantas cosas a vuestro alrededor y no ponéis atención a lo que verdaderamente os traerá lo que es bueno para vosotros, para vuestro crecimiento espiritual y aún para vuestro crecimiento humano.

¡Oh!, Mis pequeños, ¿por qué no entendéis ya todo lo que os pido que hagáis para vuestro Bien, para los Bienes del Cielo, para que Mi Obra se dé ya entre todos los hombres.

Ciertamente estáis a momentitos ya del gran cambio y esto lo sabe satanás, sabe todas las bellezas que podréis obtener si os mantenéis Conmigo y por eso son tantos los ataques alrededor del mundo (Lenguas…) estáis tan distraídos con las cosas del mundo y os vais atrás de sus mentiras, os pone tantas distracciones satanás, que vosotros las tomáis como si fuera lo bueno para vuestra vida y seguirlo. ¡No!, Mis pequeños, cuántos habéis caído en sus errores y en su maldad, caéis y no os podéis levantar, porque os falta Fe y Amor.

Sí, Mis pequeños, a vosotros os ataca fuertemente, pero no todos reaccionan igual, aquellos que están Conmigo, fácilmente salen de la tentación y de los ataques de satanás y salen fácilmente, no por sus capacidades, sino porque piden Mi ayuda para ser levantados y protegidos. En cambio aquellos de que de los que se burlan, de los que oran, de los que están Conmigo, de aquellos que buscan realmente el Amor en su vida para vivirlo y para transmitirlo, ellos son los que salen adelante, aún a pesar de las burlas de sus semejantes.

Mis pequeños, debéis buscar con más ahínco los Bienes que vienen de Mí y hacer a un lado toda la maldad de satanás. Con Mi ayuda, con Mi Discernimiento Santo que Me pidáis y sobre todo con la vida en la Gracia que os propongáis vivir, vosotros mismos podréis salir adelante fácilmente. Ciertamente en un principio será más difícil que vosotros podáis luchar contra las fuerzas de satanás, pero lo lograréis poco a poco. Y por eso os quiero así, unidos. Poco a poco os debéis de llenar de las mismas oraciones de vuestros semejantes, de la ayuda espiritual que os deis los unos a los otros, del crecimiento espiritual por la experiencia que a cada uno de vosotros os permito tener.

Por eso es tan importante que os reunáis, que viváis en ésta armonía espiritual, porque así os vais alimentando los unos a los otros y de ésta forma os volvéis muy fuertes, para que las fuerzas de satanás no puedan nada contra vosotros.

Ciertamente, satanás se acerca como el huracán, arrastrando todo a su paso, choca contra vosotros, os trata de hacer caer, pero vosotros, cuando estáis Conmigo, estáis cimentados en tierra firme, con raíces profundas, no os puede hacer caer satanás.

Os pido, Mis pequeños, que sigáis adelante, perseverando, aún a pesar de los golpes de satanás, de sus mentiras, de su maldad. Seguid adelante, que Yo estaré con vosotros en todo momento.

Os amo, Mis pequeños, Mis Bendiciones quedan en vosotros, cuando estéis así reunidos, pedidMe, pedidMe en Mi Nombre, al Padre, para que os dé lo que necesitéis, estamos en la pelea, vosotros, en el nivel humano, Yo, vuestro Dios, en el nivel Divino. Yo voy controlando todo, no os preocupéis, vosotros venceréis junto Conmigo a los poderes de satanás, de eso debéis estar seguros, os lo he dicho mucho, Mis pequeños, pero vosotros sois como niños y necesitáis que os repita todo hasta que aprendáis la lección.

Os Bendigo y derramo Mis Bendiciones también sobre los vuestros y sobre todos aquellos que tengáis en vuestro corazón.
Gracias, Mis pequeños.

Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Vosotros los que buscáis a Mi Dios, ¡Oh!, Mis pequeñitos, alegraos, alegraos, porque vuestra Fe será recompensada infinitamente.
(Lenguas…) Mis pequeñitos, Yo, vuestra Madre, La Siempre Virgen María, os digo que solamente un velo muy delgado os separa de Nosotros, os falta tan poco, tan poquito, Mis pequeños para que podáis verNos, para que podáis compartir plenamente con Nosotros.

¡Oh!, Mis pequeñitos, vosotros, los escogidos, vosotros, los que estáis a Mi alrededor, vosotros los que buscáis a Mi Dios, ¡Oh!, Mis pequeñitos, alegraos, alegraos, porque vuestra Fe será recompensada infinitamente, (Lenguas…), es tanto el Amor que se va a derramar sobre vosotros y sobre todos aquellos que se han mantenido fieles en éstos tiempos de tribulación y de gran tentación, tiempos en donde vosotros preferisteis ser encadenados al Amor, mientras que otros prefirieron el libertinaje en el pecado. Vosotros realmente tenéis la libertad ellos, que se sienten libres, son los que se han encadenado al pecado a la maldad, a la corrupción y a la muerte.

Mi Corazón está con vosotros, Mi Hijo, Jesucristo, alegre está con vosotros, Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor, tan alegre está que derrama Sus Bendiciones sobre vosotros, Nuestro Padre Dios derrama Sus Bendiciones sobre vosotros y sobre todos aquellos que viven como vosotros y, también, por todos aquellos que no están viviendo en el Bien, pero que vuestra oración y vuestros deseos les alcanzan a todos ellos. ¡Qué importante, Mis pequeños, es hacer vivir el Amor en el corazón! Cuando vosotros vivís en el Amor, cuando vuestro corazón está lleno del Amor Divino, vosotros hacéis tantas, tantas cosas en el Bien de vuestros hermanos, especialmente por aquellos que separados están de Nuestro Dios.

Vosotros, los que vivís en la oración, os podéis dar cuenta de tantas cosas que el Santo Espíritu de Amor, Mi Esposo, al que tanto amo, os deja ver. Él os permite ver cosas que vuestros hermanos, que alejados están de la Gracia, no se les es permitido ver. Aquellos que viven para el mundo, solamente ven cosas del mundo, los que vivís para Nuestro Dios, se os es permitido ver las cosas “escondidas”, las cosas espirituales que no pueden ver vuestros hermanos que viven en el mundo.

Sí, ciertamente veis también lo que ven vuestros hermanos que viven en el mundo, pero lo veis de diferente forma, lo veis para ayudar y aquellos lo ven para recrearse, recrearse en el pecado, en la maldad, en la impureza. Vosotros veis el alma, ellos ven el cuerpo, vosotros veis su necesidad, ellos solamente ven diversión y su propio bienestar, con egoísmo y con maldad, y vosotros tratáis de ver santidad y necesidad en las almas de vuestros hermanos que viven alejados de Nuestro Dios.

Mis pequeños, sois como un oasis de Amor, en donde Nuestro Dios y Yo Misma Nos recreamos.

Cómo quisiéramos que hubiera familias que se reunieran, como antiguo, y que pudiéramos platicar, como lo estamos haciendo ahora con vosotros. ¿Qué más, que tener instrucción Divina, directa con Nosotros, Mis pequeños?, ¡y a tantos de vuestros hermanos que se les hace imposible esto! No hay Fe en los corazones, no hay confianza plena en los corazones. Piensan en un Dios lejano, al cual es difícil alcanzar, cuando Lo tenéis realmente en vuestro corazón. Ese es el error del hombre, que ha aceptado la mentira de satanás. Para alejaros de Nuestro Dios, os ha llevado a eso satanás, a que veáis a vuestro Padre y a Mí, vuestra Madre, alejados de Nosotros y casi con la imposibilidad de que el hombre tenga interacción con el Cielo.

Nuevamente os agradezco, Mis pequeños, éstas reuniones de Bien y de Amor y por eso, Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, os colmarán de Bienes y Bendiciones para vosotros y vuestras familias, porque habéis escogido la mejor parte, porque estáis buscando el Bien del Cielo entre vosotros y no el pecado del mundo, que está acabando con el mismo.

Os doy Mi Corazón, Mis pequeños, Mi Corazón de Madre quede con vosotros, os pido que os acerquéis a Mí, vuestra Madre, en todo momento que necesitéis, que Yo llevaré vuestra petición a Mi Hijo y recibiréis, de regreso, grandes Bendiciones. No dudéis, Mis pequeños, es una Gracia muy grande que se os da, pero es por el Bien que vosotros dais a Nuestro Padre Dios. Vosotros habéis aprendido a amar y Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, derrama Su Amor, porque aprendisteis a amar con Su Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Primer Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: Manteneos, Mis pequeños, en el Amor, que ésta sea una coraza muy poderosa contra todo mal con que os ataque satanás.
Hijitos Míos, Yo conozco vuestro corazón, conozco vuestros pensamientos, conozco vuestra intención y, porque os conozco perfectamente, así seréis juzgados. Si habéis vivido buscando el Bien, buscando el Amor, buscando la perfección, seréis juzgados en el Amor que disteis, que buscasteis y que mantuvisteis en vuestro ser. Pero ¡ay! de aquellos que hayan vivido buscando la destrucción y el desamor, la venganza y la maldad, porque para ellos Mi Juicio será severo.

Os he dicho que todos vosotros, a lo largo de vuestra vida, tenéis la oportunidad del arrepentimiento y de regresar a Mí, tan es Justo Mi actuar con vosotros y siempre buscando vuestra salvación, que por eso Mi Hijo os dio la Parábola de aquél buen hombre que les da trabajo a esos hombres que no tenían trabajo, que unos trabajaron varias horas al día, otros menos y al final, algunos, que quizá fue solo alguna hora ó minutos. Así es Mi Benevolencia, os podéis arrepentir en el último segundo de vuestra vida y vendréis Conmigo al Reino de los Cielos, otros Me habrán buscado a lo largo de su vida, habrán vivido para Mí, habrán trabajado mucho para Mi Reino y también tendrán el gozo del Reino. No Soy injusto, Mis pequeños, Soy un Dios Justo, porque a todos os amo, pero ciertamente, aquél que trabajó más por Mí y por Mi Amor tendrá, en el Reino de los Cielos, un premio más grande. Ciertamente aquel que vivió más para los placeres del mundo y no trabajó para los Bienes de Mi Reino, también se le dará la oportunidad del goce eterno si se arrepiente en el último segundo de su vida pero, Mi Justicia, también le alcanzará a él y su gozo no será tanto como aquel que sí trabajó para Mí.

Yo quiero la salvación para todos, pero seréis juzgados en el Amor y en el trabajo que disteis para que Mi Reino se esparciera sobre la Tierra.

Mucho tendréis, si mucho disteis para Mi Reino, poco tendréis, si poco trabajasteis para Mi Reino, gozaréis cada uno a vuestro nivel, pero gozaréis. Esa es Mi Promesa y ése es Mi Amor para con todos vosotros.

Yo continuamente voy buscando a todas las almas que se han apartado, que no buscan el Bien, que viven para el mundo, que gozan en la maldad. Es grave esto, Mis pequeños, gozar en la maldad, es traicionar al Amor, pero aún así, Mis pequeños, el Amor siempre vencerá, porque el Amor Soy Yo y satanás es la maldad. Yo Soy Omnipotente, Infinito, satanás es una creatura creada por Mí y está limitada pero, ahora, está mucho más limitada por el pecado que cometió contra Mí; así pues, la maldad, nunca, nunca podrá vencer a la Bondad, nunca estará sobre lo Mío ni sobre aquellos que están Conmigo, y esto entendedlo bien, Mis pequeños, porque os asustáis continuamente con los ataques de satanás y eso es lo único que puede hacer con vosotros, aquellos que estáis Conmigo, solamente os puede asustar, pero no os tocará. Si estáis buscando el Amor, si vivís el Amor, si transmitís el Amor, nunca os podrá hacer daño satanás, no os vencerá nunca, porque Yo estoy con vosotros y aunque llegara a provocar, en un momento dado, vuestra muerte, no sería muerte eterna, tendríais vida Conmigo, porque si vivisteis para el Amor, moriréis en el Amor, dejaréis éste mundo, sí, en eso sí os podrá vencer, pero no será muerte, os repito, será vida. Él, a toda costa, trata en las almas buenas de sacarlas de su misión, porque tenéis una misión importante, porque amáis y él no quiere amor en su reino de odio y de maldad.

Manteneos, Mis pequeños, en el Amor, que ésta sea una coraza muy poderosa contra todo mal con que os ataque satanás. No temáis, Yo estoy con vosotros, Yo Soy vuestro Dios y venceréis toda maldad que se acerque a vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: ¡Tantos, tantos hijos que tengo y tan pocos son los que se acercan!, traédMelos, Mis pequeños.
Hijitos Míos, vosotros sabéis que Yo Me muestro en los más pequeños, en aquellos que no tienen cultura, en aquellos que, a ojos humanos, no podrían hablar con sabiduría. Yo Me muestro en general en aquellos que son nada a los ojos humanos, para que así se muestre que Mi Obra se está dando entre los hombres.

Mis pequeños, os pido que no busquéis la vanagloria del mundo, que busquéis los Bienes Celestiales, que busquéis el ser servidores antes que ser servidos. Que busquéis la privacía de Nuestros Corazones en la oración, en la intimidad, en ése intercambio que el alma debe tener para Conmigo, con vuestro Dios y al tenerlo, no lo digáis a los cuatro vientos, que no vayáis con soberbia con vuestros hermanos y así echar a perder todo lo que se os dio en la intimidad y que debéis guardar con humildad.

Yo busco almas de oración, porque esto significa intimidad Conmigo, con vuestro Dios. Me gusta el coloquio humano, que viene con confianza a Mí, que sabe que Me puede encontrar en cualquier momento, que sabe que estoy pendiente a la necesidad humana, pero sobre todo a la amistad del hombre. Vosotros mismos conocéis la diferencia entre alguien que se acerca a vosotros continuamente a pedir por un bien, que aquél que se acerca, simplemente por acompañaros y platicaros de sus experiencias. ¿A cuál de éstas dos personas vosotros aceptáis mejor en vuestra vida?, la respuesta es obvia, preferís a aquél que tiene el corazón de amigo, que se acerca para compartir, que da su tiempo, que da su amor y no a aquel que solamente se acerca a pedir, que no hay amistad, que tan pronto obtiene lo material o el consejo, se aleja y a veces, ni agradecimiento hay. Por eso os repito, que Me gustan mucho las almas amigas, la intimidad de esas almas amigas, de ésas almas hijas, de ésas almas hermanas, de ésas almas compañeras, de ésas almas que quieren estar con su Padre y con Su Dios, que quieren acompañarMe, porque Me saben solo, solo de la amistad del hombre. ¡Tantos, tantos hijos que tengo y tan pocos son los que se acercan!, traédMelos, Mis pequeños, habladles a ellos de la amistad que tengo con vosotros, de la confianza que Me tenéis vosotros a Mí, vuestro Dios, que no Soy el Dios que no os escucha, que está alejado, que no os ve. Platicadles que Yo, realmente sí platico con Mi creatura, que escucho vuestro corazón y vuestros pensamientos, que os comparto Mis alegrías y, que de Mí, recibís todo lo que tenéis. Habladles de Mi Amor para con vosotros, enamoradles como vosotros enamorados debéis estar de Mí, vuestro Dios y de Mi Amor.

Compartidles vuestras experiencias de Amor que habéis tenido Conmigo, con Mi Hija, con el Cielo entero. Llevadles el Cielo a vuestros hermanos, decidles que realmente existe y que está entre vosotros. Llevadles a gozar lo que vosotros gozáis al estar Conmigo, cuando oráis, cuando necesitáis algo y que de repente se os da, cuando tenéis experiencias bellas y que sabéis que se os dan ésas cosas bellas porque Yo las permito.

Hacedles entender que no estáis alejados del Cielo, que el mismo Cielo os protege, os llena de Bendiciones. Hacedles conocer que estando Conmigo, también tendrán las mismas Gracias y Bendiciones que vosotros tenéis y que podrán tener aún más si tienen más dedicación en buscarMe y buscar Mi Reino para vuestros hermanos

En las Escrituras se os dice que el trabajador tiene derecho a una paga por su trabajo, tiene derecho a un premio grande. Trabajáis para Mí, para vuestro Dios y tendréis derecho a una recompensa de acuerdo a vuestro trabajo y al resultado de vuestro trabajo. Tendréis derecho a una recompensa grande de acuerdo a lo que trabajáis para Mí, para vuestro Dios en vuestros hermanos. Esto quiero que se los hagáis ver a vuestros hermanos que viven más para el mundo, hacedles ver que el mundo no es la finalidad de la vida del ser humano, que estáis de paso y que tenéis una misión excelsa, Divina para el Bien de vuestros hermanos.

Gozad pues, Mis pequeños, gozad en hacer el Bien y gozad mucho más cuando veáis que aquellos a los que enseñasteis, ya están haciendo el Bien, porque vuestro triunfo será grande, vuestra paga inmensa pero, Mi Amor sobre vosotros, será infinito.

 

Tercer Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: Haced lo que os pido y veréis cómo después Me agradeceréis eternamente lo que he hecho en vosotros.
Hijitos Míos, así como tenéis que poner atención a un hermano vuestro cuando os habla, o contestar un teléfono, o al recibir una carta en donde vengan vuestras ordenes por hacer, así también tenéis que tener puesta vuestra atención en vuestro corazón, para escuchar lo que Yo necesito de vosotros.

Tantas voces que escucho y os quejáis de Mí, de vuestro Dios, habláis de que Yo os tengo abandonados, de que no os hago caso, de que solamente escucho a algunos y eso no es verdad, Mis pequeños, el problema real, es que vosotros no sabéis escucharMe a Mí, vuestro Dios.

Si queréis escuchar las cosas del hombre, escucharéis a través de lo que el hombre ha creado, si queréis escucharMe a Mí, vuestro Dios, tendréis que aprender Mis vías de comunicación, debéis aprender a escuchar como Yo Me doy a entender al hombre y os lo he dicho y es a través de la oración íntima, de la oración de corazón, en el silencio, apartados del ruido del mundo. ¿Cómo queréis escuchar a vuestro corazón con el radio encendido a todo volumen, o viendo la televisión, o en los ruidos de la calle y de la gran ciudad? Si Me queréis escuchar a Mí buscad, primeramente, la soledad, donde no haya sonido alguno que disturbe vuestra mente y vuestro corazón y así, poco a poco, con práctica y con total confianza, empezaréis a escucharMe.

Si el alma Me busca, Yo Me dejaré encontrar, os lo he dicho, a veces Me escondo, para que pongáis más ahínco en vuestra búsqueda, las cosas fáciles a veces no se aprecian mucho, aquello que os cuesta trabajo lo apreciáis más.

Utilizo a veces éstos trucos para que vosotros perseveréis en la búsqueda, y cuando Me tengáis, Me apreciéis más y Me cuidéis más, en vuestra mente y en vuestro corazón. Cuánto os amo, Mis pequeñitos, conozco vuestra fragilidad, os conozco tan bien y por eso os voy enseñando, para que al conocerMe y al encontrarMe, Me apreciéis de corazón.

Haced lo que os pido y veréis cómo después Me agradeceréis eternamente lo que he hecho en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

 

Cuarto Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: Poned vuestra mente en Mi Presencia en vuestro corazón, pedidMe que os ayude a que Me podáis visualizar en vuestro corazón.
Hijitos Míos, os quiero llevar a esa oración íntima. Cuando vosotros estáis platicando con un amigo al que queréis ó a un ser querido que amáis mucho, le ponéis toda la atención posible, lo veis de frente, veis sus gestos, apreciáis sus palabras, no se os escapa nada de ése ser al que amáis mucho.

Cuando vosotros estáis orando, que sea así, Mis pequeños. Si os he dicho que Yo vivo en vosotros, que estoy realmente en vuestro corazón, poned toda vuestra atención en procuradMe buenos pensamientos, en procurarMe toda la atención debida que Me merezco por ser vuestro Dios, vuestro Padre, vuestro Creador, el Amor de los Amores.

Poned vuestra mente en Mi Presencia en vuestro corazón, pedidMe que os ayude a que Me podáis visualizar en vuestro corazón. No os distraigáis, Mis pequeños, si os distraéis, es porque no Me amáis, es porque estáis pensando en otras cosas o porque no tenéis la confianza plena en lo que os estoy diciendo de que realmente habito en vuestro corazón, y visualizadMe ahí en vuestro interior.

EntronizadMe en vuestro corazón, tomadMe de la mano, vedMe con vuestros ojos, gozadMe, porque Yo habito en vuestro interior, decidMe palabras dulces y amorosas, consentidMe como al Ser más amado y así, Mis pequeños, poco a poco Me daréis el lugar debido que merezco en vuestro corazón y en todo vuestro ser y de ahí en adelante, a vuestra vida entera.

Quiero que Me améis con todo vuestro corazón como Yo os amo, Mis pequeños. Quiero que Me améis con un corazón sincero, Quiero que Me améis como a nadie podríais amar, porque así os amo Yo.

DejadMe que Yo os enseñe, Mis pequeños, pero poned todo vuestro empeño en ello, dad el primer paso y dejadMe, dejadMe que Yo os lleve por esos caminos de Amor que vosotros no conocéis aún. Os amo, Mis pequeños, dejadMe que os enamore.
Gracias, Mis pequeños.

 

Quinto Misterio,
Habla Dios Padre,
Sobre: Nubes de borrasca se acercan, grandes nubes obscuras que cubrirán todos los pueblos de la Tierra.
Hijitos Míos, nubes de borrasca se acercan, grandes nubes obscuras que cubrirán todos los pueblos de la Tierra. La maldad ha obscurecido las mentes y los corazones de Mis hijos. Todos habéis sido afectados por la maldad de satanás, en mayor ó en menor grado.

Vosotros, los que estáis Conmigo, los que Me buscáis, sabréis cómo protegeros de éstas nubes obscuras que van cubriendo la Tierra entera y sabréis proteger a vuestros hermanos.

Vosotros sabéis que cuando éstas nubes de tormenta se acercan, necesariamente, causarán problema a los habitantes de la Tierra, pero los que están Conmigo, sufrirán mucho menos que aquellos que no se han protegido con Mis Bienes, por no buscarMe, por no amarMe, por no respetarMe.

Los que estáis Conmigo, sabéis que después de la tormenta, saldrá el sol y por eso no os preocupáis tanto. Cuando veis que vienen las nubes, tomáis vuestras providencias y os protegéis y protegéis a los vuestros, pero os repito, os alegráis, porque sabéis que luego saldrá el sol, pero los que no están Conmigo, solamente ven nubes de destrucción, se desesperan y aún, hasta su vida se pueden quitar por temor y porque no saben enfrentar éstas tormentas. Orad por ellos, Mis pequeños, dadles lo que Yo os he dado, dadles confianza y llevadles a Mi Amor, para que puedan ser fuertes en los momentos de prueba y decidles que el sol saldrá después, dadles ésa alegría, aún a pesar de que estén viendo solamente las nubes obscuras.
Gracias, Mis pequeños.