Nov 18_2022 Cuando obtenéis de una manera injusta lo que tenéis, esos bienes quedan marcados y serán malditos y vuestros descendientes quedan también, marcados.

Rosario Mensaje ÚNICO

.

====================

Mensaje de Dios Padre a J. V.

====================

.

Habla Dios Padre.

Ahora os vuelvo a hablar a vosotros, los poderosos de la Tierra, los que habéis buscado los tesoros del Mundo, que os habéis llenado de ellos, en una forma honrada o normalmente gravosa para vuestra alma.

¿Cómo os presentaréis ante Mí? Ante los hombres, os presentáis respaldados por vuestro dinero, por vuestro poder económico, por vuestro nombre que habéis elevado ante los hombres, para que os conocieran y os respetaran, y que, muchas veces, vuestro nombre debiera ser pisoteado, porque no os habéis comportado como Yo os pedí a vosotros.

¿Cómo os presentaréis ante Mí?, porque no estáis, la gran mayoría de vosotros, o pudiera decir, todos, Conmigo, vuestro Dios. Dejáis mucho qué desear, muchos de vosotros tenéis las riquezas del Mundo, porque os volvisteis aliados de satanás. Pedisteis sus consejos y su guía para obtener lo que tanto anhelabais: dinero, bienes mundanos, fama, grandes fortunas, cosas, cosas inútiles para la vida espiritual, para la vida futura a la que habéis sido llamados todos vosotros, porque bajasteis a la Tierra con Mi Permiso, con Mis Órdenes para cumplir una misión y os unisteis a aquél que os traiciona. En un principio, os consiente para ganar vuestra alma, y cuando ya no tenéis escapatoria, se presenta tal como es para burlarse de vosotros, que, tontamente, caísteis en sus redes. Sufrís en la Tierra, ciertamente, no con vuestras riquezas, sino por el odio que os ganáis por los que os rodean, por todos aquellos a quienes dañasteis de una u otra forma para quitarles sus bienes.

No ganasteis bienes espirituales, para que cuando os vieran vuestros hermanos en la Tierra, con los que convivisteis, porque os burlasteis de ellos, pudieran orar, interceder por vosotros para vuestra salvación eterna. Mucho mal causasteis y tendréis que pagar por ello.

¿De qué os sirven tantos bienes materiales, el tener tantas riquezas, que la polilla luego se comerá? ¿De qué os sirve haber obtenido esos bienes que solamente os causarán problemas y dolores?, porque solamente veis el presente, pero no veis el futuro, tanto como para vosotros como para vuestros descendientes, porque cuando obtenéis de una manera injusta lo que tenéis, esos bienes quedan marcados y serán malditos y vuestros descendientes quedan también, marcados por vuestro mal proceder.

No os disteis cuenta o no os quisisteis dar cuenta de la pobreza del Mundo, no quisisteis compartir, lo que no os vais a terminar en toda vuestra existencia. Pudisteis haber ayudado a tantos de vuestros hermanos, pero no lo hicisteis, y mientras vivías cómodamente, que despilfarrabas vuestro dinero en múltiples formas, los pobres, a vuestro alrededor, no recibían ni las migajas de lo que teníais.

Tenéis en las Escrituras ejemplos como lo que es vuestra vida actual, y si, realmente, hubierais estudiado y tomado en cuenta lo que ahí tenéis presente, os daríais cuenta cómo terminaría, también, vuestra existencia, pero no os importó, y tendréis que pagar vuestras injusticias, vuestra maldad, vuestros errores, vuestra avaricia, y a veces, hasta la sangre que corrió por quitarle a algunos de vuestros hermanos sus pertenencias.

Os doy tantas oportunidades para arrepentiros, pero no las queréis tomar. Os sentís tan protegidos con vuestros bienes, con vuestras riquezas, que no creéis que Yo, vuestro Dios, con Mi Poder Divino os pueda castigar. Os sentís protegidos por el poder de satanás, y eso nubla vuestra conciencia y no os hace ver la realidad.

¡Cuántos errores cometéis vosotros que os creéis millonarios! ¿Qué haréis cuando os presentéis ante Mí, sin nada, nada, de lo que creéis que os defiende? No llevaréis con vosotros, ante Mi Presencia, vuestras monedad de oro. No llevaréis ante Mi Presencia a aquellos que os protegen, a quienes les pagáis para que os protejan de aquellos, que quizá, sean tan malos como vosotros. Ante Mí, conoceréis vuestro destino eterno, y en esos momentos, ya nada podréis hacer por vuestra salvación. Pudisteis haberos ganado el Cielo, compartiendo de lo vuestro, pero no, entráis en competencia con otros tan ricos como vosotros y, tontamente, lo único que hacéis, es llegar más pronto a vuestra cita ante Mí. Momento doloroso, momento de Verdad, en donde, vuestras palabras, llenas de mentira, no podrán ayudaros a convencerMe de que cambie Mi parecer ante vuestro Juicio Personal.

¡Cuánto dolor Me causáis!, os ayudé a que ganarais ese dinero de buena forma, y si lo hubierais compartido con vuestros hermanos, os ganaríais el Reino de los Cielos, ciertamente, gozaríais de esos bienes en vuestra vida terrena y ellas mismas os llevarían al Cielo, cuando hubierais utilizado bien esas riquezas, para el bien, también, de vuestros hermanos. Atesorasteis y obtuvisteis esos bienes, porque os di capacidades superiores a muchos otros de vuestros hermanos, pero con la finalidad de que vosotros hicierais algo por ellos, no para que atesorarais, avariciosamente, como lo habéis hecho.

Ciertamente, Yo ayudo y velo por los bienes de aquellos que los tienen, que los han hecho con honradez, con trabajo, con dedicación y que fueron, también, justos en el pago del salario a cada uno de sus trabajadores y que les ayudasteis a salir adelante, sin que tuvieran problemas mayores, porque ellos, también, han trabajado duro para obtener sus bienes para poder vivir con sus familias.

No habéis agradecido las capacidades que se os dieron para que tuvierais esas riquezas. Son tan pocos, tan pocos los que están Conmigo, como Mi amigo Lázaro, que teniendo, también, muchos bienes, compartía de ellos con los que trabajaban para él, con la gente pobre, con los necesitados. Os he dicho que Yo no estoy peleado con los bienes que obtenéis, estoy peleado con vuestra avaricia, con los dolores que causáis a los que trabajan para vosotros, por todos los errores que causáis a vuestro alrededor, creyéndoos superiores a ellos.

Tenéis un poco de tiempo más, para que entendáis esto, para que reparéis y podáis salvaros, pero estáis tan equivocados con lo que tenéis, porque no deseáis, de ningún modo compartir ni dejar el poderío que os dan las capacidades exorbitantes que habéis juntado, y de esa forma, vosotros mismos cerráis las puertas para obtener Mi Ayuda y Mi Perdón.

Orad, orad por ellos, Mis pequeños, orad, también, son Mis hijos, ayudadles a que cambien de parecer y se salven.

Gracias, Mis pequeños.