Abr 30_2021 Me duele deciros esto, Mis pequeños, pero tenéis el libre albedrío, y si vais a actuar como satanás, no tendréis cabida en el Reino Eterno.

Rosario matutino – Mensaje ÚNICO.

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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

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Inicio del Rosario. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Hijito Mío, te voy a explicar la visión que tuviste ayer:

Viste, primeramente, a Mi Padre en lo alto de los Cielos. Entre nubes estaba Su Trono y Él de pie ante Su Trono, tenía una actitud soberana, pero también castigadora. Veías ese rayo que Le salía de Su Mano y caía sobre satanás, que estaba abajo en los Infiernos. Satanás no soportaba ese rayo y sabía que era su castigo y, mientras estaba en esa actitud de Poder contra satanás, entro Yo y Me ves a Mí en la Cruz. Quedo entre Mi Padre, Él atrás, y ante satanás, delante de Mí, abajo, y sale ahora de Mí ese rayo que, primeramente, viste que salía de la Mano de Mi Padre, y sigo doblegándolo.

Mi Padre arrojó a satanás del Cielo por soberbio, porque no respetó su misión; traicionó la Voluntad de Mi Padre, se rebeló contra Él y fue arrojado fuera de los Cielos, al Infierno.

Luego, al entrar Yo, Mi Padre Me cede Su Poder y, aunque estoy Yo crucificado, que podría parecer que estoy vencido, es todo lo contrario, ese mismo rayo de Poder Divino que sale de Mí contra satanás, Me está dando un Poderío Divino que Me concedió Mi Padre, porque Me di por vosotros, porque Yo, vuestro Dios, en Su Segunda Persona, bajé a estar entre vosotros. Os traje el Conocimiento del Cielo, fui crucificado, morí y resucité, pero, como estaba anunciado en el Antiguo Testamento, el Crucificado, Yo, vuestro Dios, tendría ese Poder Divino sobre la maldad de satanás y sería Yo Signo de Poderío, y todo aquel que Me acepte así, como Dios que se dio por vosotros, que murió y resucitó, salvado será.

Yo tengo el Poder que Me ha dado Mi Padre y Yo tengo el Poder igual de lanzar a los que no estén Conmigo, como Dios, al mismo lugar a donde cayó satanás; tengo también el Poder de resucitar, perdonar y llevar al Reino de los Cielos a todo aquel que Me acepte como su Dios, Salvador y Redentor.

No he sido vencido por la Muerte, Yo vencí a la Muerte y Soy vuestro Dios. Venid a Mí, pues, Mis pequeños; vuestros sufrimientos, vuestros dolores, ofrecédMelos, es vuestra cruz, pero al momento en que vosotros os unís a Mí, estáis venciendo a la maldad de satanás, estáis venciendo a vuestra muerte, que va a ser irremediable, pero tendréis vida en Mí, resucitaréis, y resucitaréis para el Reino de los Cielos.

Satanás despreció y traicionó su misión por su soberbia. Aprended esta lección, Mis pequeños: Los pequeños y los humildes entrarán fácilmente al Reino de los Cielos, pero ¡ay de aquellos que su soberbia los ciega y se alejan de la Verdad! Ellos serán arrojados al horno eterno.

Me duele deciros esto, Mis pequeños, pero tenéis el libre albedrío, y si vais a actuar como satanás, no tendréis cabida en el Reino Eterno.

Gracias, Mis pequeños.