Rosario matutino – Mensaje ÚNICO
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Mensaje Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
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Inicio del Rosario. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
(Lenguas…) Hijitos Míos, estáis a poco tiempo de perder la paz, la gran mayoría de vosotros, por los acontecimientos que se han de venir de la purificación. No todos estáis preparados para este gran evento, evento que traerá muchas lágrimas, muchos dolores, muertes, desesperación.
El lobo os acecha, el lobo os persigue de un lado a otro, el lobo os quiere destruir, satanás es ese lobo que quiere dispersar al rebaño que Yo he tratado de reunir por tanto tiempo. Pero como vosotros no os habéis querido unir y no habéis querido escuchar Mi Voz, del Pastor, y Mis Consejos, entonces el lobo fácilmente Me está quitando a muchas ovejas. La desesperación vendrá porque no sabréis a dónde ir, a quién acudir, cómo orar, porque no os habéis preparado cuando debisteis haberos preparado. La maldad ha corroído vuestro corazón, os ha quitado la paz, os ha llevado a incursionar por el lado obscuro de vuestro ser.
Todos tenéis la Luz en vosotros, que es Mi Presencia continua, pero la gran mayoría habéis opacado o prácticamente anulado esa Luz, o sea, Mi Presencia en vosotros, y habéis preferido que las tinieblas os hayan guiado, os hayan llevado a donde ahora estáis; y la desesperación es tremenda y no sabéis qué hacer. Tantas veces os he dicho que os arrodillarais, que pidierais perdón, que Yo estaré ahí, pronto, para acompañaros, para protegeros, para guiaros, para reeducaros, pero no entendéis y de ahí ha tomado su fuerza satanás, porque vosotros no habéis orado. Tantas veces os he dicho que la oración, la penitencia, el ayuno, os iban a dar una fuerza tremenda contra los ataques de satanás, y vosotros no entendéis. ¿Qué hace la oveja cuando es atacada por el lobo?, por más que grite, por más que pida ayuda, no es escuchada, y así estáis vosotros. Los que están a vuestro alrededor tampoco se han preparado, y ni unos ni otros saben cómo salir de este atolladero a donde os ha llevado satanás.
Me duele tanto veros a vosotros desesperados, sin saber qué hacer por todo lo que se vendrá. Estáis todavía a momentos de que pidáis perdón y os arrodilléis. Os lo digo de Corazón, hacedlo, Mis pequeños, para que Yo pueda renacer en vuestro corazón y os lleve por caminos seguros, al menos para apartaros de este lobo rapaz que quiere destruiros. ¡HacedMe caso, Mis pequeños, os amo! Me pertenecéis, Soy vuestro Dios, Yo morí por vosotros, os conozco a cada uno de vosotros, conozco vuestros defectos y cualidades, os conozco en el Bien y en el mal. HacedMe caso, Mis pequeños, los dolores a donde os quiere llevar satanás son tremendos y pocos, muy pocos, podrán salir adelante de esa prueba tan fuerte.
¡No echéis en saco roto estas Palabras, estos Deseos, estas Mis Intenciones de un Dios que os ama tanto! Entended ya, Mis pequeños, entended.
Gracias, Mis pequeños.