Oct 25_01 Os explico el significado de: “Yo Soy, tanto como me dejéis ser en vosotros”

Mensaje.

 

Mensaje dado por Dios Padre a J. V.

 

Habla Dios Padre,
Queridos hijitos Míos, Yo Soy, tanto como vosotros Me dejéis ser en vosotros. Os explico. Yo, a pesar de ser Vuestro Dios, Omnipotente y Todopoderoso, al respetar vuestra voluntad, vosotros decidís libremente el dejarMe ó no vivir en vuestro interior, el transmitirMe ó no a vuestros hermanos, el darMe ó no a conocer a todo el Mundo.

En la Tierra estáis acostumbrados a enaltecer a hombres y mujeres cuando en algo sobresalen. Así, puede tratarse de literatos, políticos, hombres de ciencia, artistas, etc. y ya sea que a través de la publicidad pagada ó a través de la publicidad personal que les hagáis, éso es lo que hace que conozcáis más el nombre y la personalidad de algunos de vuestros hermanos.

Realmente sois vosotros mismos, con vuestro esfuerzo, quienes hacéis a tal ó a cuál persona “famosa'” entre vosotros. A pesar que de ellos no conozcáis, probablemente, toda su vida y mucho menos su interior, los tomáis como ejemplo a seguir. Yo, vuestro Dios, que Soy vuestro Padre y Creador y que Me he dado a conocer, en totalidad, a través de Mi Hijo Jesucristo, Soy, para muchos, el perfecto desconocido ó del que no vale la pena hablar de él.

Yo, a pesar de que vivo en vuestro interior, no se Me permite salir al exterior. Yo, que a diario os colmo de Mis Milagros de Amor, regalos muchísimo más grandes que cualquier regalo humano, norecibo ni un “gracias”, ni una mirada de amor de parte vuestra. Yo, que os voy protegiendo y guiando a través de toda vuestra vida y que os protejo de los ataques continuos del mal, no apreciáis Mi Trabajo. ¿Qué clase de hijos tengo?

Vosotros decís, amor con amor se paga y es verdad. Si alguien dá amor, lo más normal y lógico es que se le pague con la misma moneda. A veces buscáis dar “amor” sólo por conveniencia, como el unir riquezas familiares ó para buscar algún negocio fructífero, aunque sí, hay otras ocasiones en que el verdadero amor es el que une y es lo que se busca.

Pero, ¿qué pasa entonces Conmigo, Mis pequeños? Soy vuestro Padre, Soy vuestro Creador, tanto de vosotros como de todo cuanto os rodea. Soy Aquel que vela por vuestras necesidades, tanto materiales como espirituales. Soy el que os ama a pesar de vuestra indiferencia. Soy el que os va guiando a cumplir satisfactoriamente vuestra misión. Soy el que os levanta cuando caéis en la desgracia del pecado. Soy el que os acompaña en vuestras alegrías y aflicciones, a pesar de que no os deis cuenta de ello. Soy el compañero fiel, a pesar de vuestro olvido y de vuestra indiferencia. Y, ¿qué recibo de la mayoría de vosotros por todo esto que os doy y más?

En el mundo mantenéis “contentos”” a todos aquellos a los que os pueden agradar con un bien, no por amor, sino por pura conveniencia y siempre existe la posibilidad de qué no se os pague con la misma moneda.

Os la pasáis viviendo pensando en la forma de “sacarle” el mayor provecho a vuestros hermanos y no actuáis con verdadero amor fraternal, compartiendo de todo lo que tenéis con el necesitado, tanto de lo que tenéis en lo material como en lo espiritual. Vivís y buscáis solo los bienes materiales y los intercambiáis, comprando y vendiendo, pero los bienes espirituales que os he dado, ya casi no son visibles entre vosotros.

Habéis construido un Mundo de error y por vuestra falta de Fé, a la cuál no habéis hecho crecer, lo único que vale es lo que véis y tocáis. Habéis cerrado vuestros ojos del alma, que podrían llevaros a conocer de Mis Maravillas eternas y os habéis conformado con usar sólo los ojos del mundo, que os llevan a vivir una vida efímera y sin valores reales.

Como os dije al principio, vosotros mismos hacéis vivir y dais a conocer al que queréis, al que vive en vuestro corazón. Por la forma en que ahora estáis viviendo, es claro que no es a Mí al que traéis en vuestro corazón. Me habéis olvidado, Me habéis hecho a un lado, no Me “presumís”, como presumís de vuestro ídolo ó amigo famoso. Este olvido hacia Mí os está causando la caída y pérdida de valores, os estáis vaciando de la vida real que debe tener el alma, la vida espiritual y todo ésto os está llevando a una destrucción real, en lo material y en lo espiritual a nivel mundial.

Las tinieblas ya cubren la Tierra entera, Mi Luz ya no es apreciada ni buscada. El caos total se avecina, porque, si ya no estáis buscando al Rey de la Luz, el príncipe de las sombras se hace notar y crece su poder.

De vosotros depende el futuro inmediato de vuestra alma y de vuestro Mundo. ¡Abrid ya los ojos, porque su fuerza se ha hecho inmensa y os quiere destruir!

Yo os bendigo en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo y en el del Amor de Mi Santo Espíritu.