Feb 21_06 Vinisteis a la Tierra a amar y regresaréis para ser amados por toda la eternidad.

Rosario

Temas:

  • Vinisteis a la Tierra a amar y regresaréis para ser amados por toda la eternidad.
  • Son las almas las que Me interesan, son las almas las que vivirán eternamente, ya sea, con gozo ó con dolor.
  • No hagáis las cosas rápido, hacedlas bien y con gusto, porque Me las estaréis ofreciendo a Mí.
  • Mensajes de Dios Padre a J. V.

    Primer Misterio,
    Habla Dios Padre,
    Sobre: Vinisteis a la Tierra a amar y regresaréis para ser amados por toda la eternidad.

    Hijitos Míos, lo que no sirve, lo que ya es viejo, lo que no se usa, se desecha, se tira a la basura ó se quema, aquello que ya no cumple su función de ser, también se elimina, uno no guarda lo que no sirve.

    Mis pequeños, así estaré Yo en el Juicio, que pronto se dará a toda la Tierra. Separaré lo que es bueno de lo que es malo, lo que sirve para el Cielo y lo que sirve para el Infierno. El trigo y la cizaña se separarán.

    Ciertamente, Yo busco a las almas y trato de que ellas vuelvan a Mí por múltiples formas. Voy luchando contra toda maldad que entra en el corazón del hombre, voy dándoos muchas oportunidades para entender el mal que estáis haciendo y el mal que estáis buscando para vuestra alma. No os queréis dar cuenta de ello, pero estáis acarreando para vuestra alma destrucción y muerte eterna por no cumplir vuestra misión ó por atacar todo lo que es Mío al destruir la espiritualidad de vuestros hermanos.

    Aquellos que Me han dado la espalda y que se han vuelto instrumentos de satanás, es la mala hierba, es la hierba que será separada y arrojada al fuego, no sirve para nada, porque no solamente Me negaron, sino negaron todas las oportunidades que durante toda su vida Yo puse a su alcance para que entendieran el mal que estaban causando a Mi obra y al hablar de Mi obra estoy hablando de la creación y de todas las almas que les rodean. Las almas que se condenan se han ganado ésa condenación, se apartan de Mí completamente durante su vida y al momento de su muerte ellas escogen la condenación, no pueden estar ante el Amor, porque lo han negado toda su vida. Yo estoy frente a ellas en el momento de su muerte, todavía esperando su arrepentimiento y Me niegan, se apartan, no quieren estar ante la Luz, han preferido las tinieblas, con ellas se sienten bien, aunque traen un dolor interno muy fuerte, pero aún ésa maldad les impide el arrepentimiento.

    Cómo es el hombre de desagradecido, teniendo a su Dios, teniéndoMe a Mí, que Soy todo Bondad, que Soy todo Amor, que Soy todo Perdón y ni aún así se arrepienten.

    Mis pequeños, la maldad tiene que terminar, os he dicho que no fuisteis creados para la maldad, sino para el Bien Eterno, el Bien sublime, el Bien Infinito que Yo os doy. Vuestra misión es amar, vinisteis a la Tierra a amar y regresaréis para ser amados por toda la eternidad. Dad Mis pequeños, lo que Yo os he dado.

    “Amaos los unos a los otros”, os pidió Mi Hijo y ésa es la hermandad en el Amor que debéis de transmitir a vuestros hermanos y lograr en el mundo, para que podáis entrar a la Hermandad Celestial sin ninguna traba, sin ningún problema.
    Abro Mis Brazos y os enseño Mi Corazón, ardiendo está por todos vosotros, acercaos a Él, Mis pequeños, purificad vuestros pecados con vuestro arrepentimiento, tomad de Mi que Soy Fuente de Amor y de Pureza Santa y venid, venid Mis pequeños, como corderitos, llenos de confianza, llenos de paz, para que Yo os acaricie, para que Yo os ponga cerca de Mi Corazón y os consienta, os alimente y crezcáis según Mi Voluntad.
    Gracias, Mis pequeños.
     
    Segundo Misterio.
    Habla Dios Padre,
    Sobre: Son las almas las que Me interesan, son las almas las que vivirán eternamente, ya sea, con gozo ó con dolor.

    Hijitos Míos, vosotros queréis ver grandes desastres, como inundaciones que destruyen pueblos enteros, colinas que se deslaven, erupciones volcánicas que destruyan pueblos enteros, epidemias que azoten a ciudades, terremotos que no dejen piedra sobre piedra. Esto es lo que queréis ver para decir: “qué desastre está cayendo sobre nosotros, la desgracia nos ha cubierto”.

    Mis pequeños, qué ciegos y tontos sois, ésos no son los grandes desastres, el gran desastre que estáis viviendo ahora, es la falta de Fe y la falta de amor entre los hombres, eso es un gran desastre, porque no os amáis los unos a los otros, sois enemigos los unos de los otros, pueblos contra pueblos, ciudades contra ciudades.

    Amor, ya no hay en vuestro corazón, es odio contra el hermano, y qué decir de vuestra espiritualidad hacia Mí, vuestro Dios, Me negáis, no acudís a Mí, no existo en vuestra vida, no transmitís lo que se os dio con Sacrificio, con Dolor y con Amor y no estáis viendo el desastre de todas las almas que continuamente están cayendo en la condenación eterna ó en el Purgatorio, en donde estarán por un gran tiempo, porque no han vivido de acuerdo a lo que Yo os pedí. No estáis viendo con Mis Ojos, no estáis sintiendo con Mi Corazón todos éstos desastres, Mis pequeños, veis con ojos humanos, sentís todavía con vuestros sentidos ya caídos.

    Mis pequeños, no estáis viendo la realidad por lo que sois, por la que fuisteis llamados a la vida. No estáis viendo el trabajo real que debéis hacer sobre la Tierra con el don de la vida que Yo os concedí.

    Son las almas las que Me interesan, son las almas las que vivirán eternamente, ya sea, con gozo ó con dolor. Centráos en esto, Mis pequeños y buscad reparar todo aquello que no habéis reparado en todo lo que lleváis viviendo. Es mucho el tiempo que desperdicia el hombre y es poca la acción y el trabajo que hacéis para el Cielo. Enmendad el camino, reponded vuestro tiempo y de aquí en adelante haced bien vuestra misión, llevadla a cabo con amor y sobre todo, con entrega total.

    Acudid a Mí, a Mi Santo Espíritu de Amor, para que Él os guíe y podáis reparar el tiempo que no habéis utilizado para Mi Bien y para el de vuestros hermanos.
    Gracias, Mis pequeños.

    Tercer Misterio.
    Habla Dios Padre,
    Sobre: No hagáis las cosas rápido, hacedlas bien y con gusto, porque Me las estaréis ofreciendo a Mí.

    Hijitos Míos, a todos vosotros os gusta tener artículos de calidad, os gusta tener buenas cosas y además, el buscar las cosas bien hechas, siempre os van a durar más, os van a dar mejor servicio, le sacaréis mucho jugo a lo que pagasteis por ellas. En lo espiritual también, Mis pequeños, cuando vosotros dais vuestro máximo, cuando realmente ponéis toda vuestra fuerza, todo vuestro entendimiento, todo vuestro amor en hacer las cosas que Yo os pido, eso va a dar mejor fruto y va a durar más. No es lo mismo hacer algo rápido y que quede aparentemente bien, sin haber buscado el detalle de calidad, que cuando se hace todo con ése gusto, con ésa dedicación, para que todo quede de acuerdo con lo que vosotros consideráis que es bello y que estuvo bien hecho.

    Que vuestra vida sea así, Mis pequeños, que hagáis las cosas que Yo os pido, y que os pido en vuestro corazón. Por eso debéis tener ésa oración profunda, para que Me escuchéis a Mí, hacedlas así, con amor, con gusto, dedicados a lo que estáis haciendo, no tratéis de abarcar demasiado, cuando realmente vuestro tiempo y vuestras capacidades, no lo den. Haced aunque sea poco en lo que podáis, pero que sea de calidad para que dure. Lo que enseñéis a vuestros hermanos, enseñadlo con vuestra propia vida, con vuestro propio ejemplo.

    Lo que deis a los demás, dadlo así, con amor, no aventéis las cosas, no hagáis las cosas rápido, hacedlas bien y con gusto, porque Me las estaréis ofreciendo a Mí. No estáis haciendo las cosas para los demás, las estáis haciendo para Mí, vuestro Dios, porque Yo primeramente os las pedí, cuando os dije: “Lo que hagáis a los demás, Me lo estaréis haciendo a Mí”.
    Gracias, Mis pequeños.