Mar 23_2021 ¿Por qué pasó la humanidad anterior el castigo del Diluvio? Porque estaban como vosotros. ¿Por qué Sodoma y Gomorra sufrieron su aniquilación? Porque estaban como vosotros.

Rosario matutino – Mensaje ÚNICO

.

=====================

Mensaje de Dios Padre a J. V.

=====================

.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.

(Lenguas…) Hijitos Míos, a Mí, como vuestro Padre y vuestro Dios, Me duele tanto ver lo que estáis padeciendo y lo que habéis padecido en estos poco más de dos mil años.

Ved, Mi pequeño, a Mi Hijo Jesucristo, desfigurado, lleno de Sangre, coronado de espinas, cuando debiera llevar una corona de Rey entre los hombres. Sus vestiduras rasgadas, también llenas de Sangre, cuando debiera llevar una túnica real, Su apariencia debiera ser de Rey entre vosotros, triunfante, pero Lo mandé para que fuera vuestro Siervo.

Todo un Dios vino a serviros, Se hizo pequeñito, toda Su Majestad Divina la hizo a un lado para convivir entre los hombres, para que se Le pudiera dejar convivir entre los hombres. No quiso venir como quien Es, todo un Rey, todo un Dios. Siguió Mis Instrucciones Divinas y pasó entre vosotros como uno, como vosotros, menos en el pecado, pero Su Realeza Divina se notaba, la notaban aquellos que se acercaban a Él porque irradiaba el Amor, el Amor Divino, para que vosotros lo tomarais y vivierais como Él os vino a enseñar; os dio toda una Evangelización para que crecierais en las Verdades Divinas, en las Verdades Celestiales.

Estuvo entre vosotros hace un poco más de dos mil años y, si vosotros hubierais aceptado de corazón, con respeto y agradecimiento infinito, el que vuestro Dios y Redentor haya estado entre vosotros, vuestra situación humana no sería lo que habéis padecido en estos poco más de dos mil años.

Que eso os lleve a aprender, Mis pequeños, que estáis faltos de Fe, estáis faltos de Amor, estáis faltos de agradecimiento, estáis faltos de Sabiduría, de inteligencia. Seguís siendo ese pueblo de cabeza dura, como lo fue en aquel tiempo el pueblo judío; seguís siendo gente difícil, gente tonta, porque os pudisteis haber zafado de tanta maldad con la que satanás os ha golpeado en estos más de dos mil años. Os ha convencido de hacer a un lado todo lo que Yo, vuestro Dios, a través de Mi Hijo, os di y también lo que os di en el Antiguo Testamento, dándoos los Mandamientos que debéis seguir; es Mi Ley, es vuestra Ley, pero vosotros, necios, habéis querido hacer vuestra voluntad y no respetasteis la Voluntad Divina, preferisteis vivir en la maldad, en el error, en la concupiscencia, e hicisteis a un lado y hasta olvidasteis lo que Mi Hijo hizo por vosotros y las Enseñanzas que os dio.

¡Cuántas guerras, cuánta maldad, cuántos errores humanos os hubierais ahorrado si hubierais tomado todo lo que Yo os di a través de Mi Hijo! ¡Cómo hubierais crecido en espiritualidad y todo lo que ella os hubiera acarreado para vuestro bien, pero no lo quisisteis tomar! Le hicisteis más caso a satanás que os golpea, que os destruye, que os mata, que os lleva a la condenación eterna, y no a lo que Yo os di a través de Mi Hijo que os daba vida espiritual, que os daba un crecimiento tan grande que muchos santos del Antiguo Testamento hubieran querido poseer y no lo pudieron tener.

Qué desperdicio de parte vuestra, generaciones pasadas y de este tiempo, de no haber querido crecer como Yo hubiera querido que crecierais y llegarais a ser esos hijos Míos, como lo fueron Adán y Eva antes del Pecado Original, hijos llenos de Mi Amor y una Sabiduría sin límites, aceptando Mi Voluntad en todo momento, lo cual les daba todavía más Gracias y Bendiciones de parte Mía, porque Me deleitaba Yo en su actuar humano-divino, y lo digo así porque cuando un alma se deja tomar por Mí, vuestro Dios, ya vuestro actuar y vuestro pensar ya no es humano porque Yo estoy en vosotros, os estoy ayudando a crecer espiritualmente y así vuestro actuar y vuestro pensar, que es Mío, os va divinizando, que ciertamente no llegaréis a ser un dios, pero seréis lo que eran vuestros Primeros Padres: Los Reyes de la Creación.

¡Cuánto habéis perdido! ¡Cuánto habéis desperdiciado, hijos Míos! ¿Por qué pasó la humanidad anterior el castigo del Diluvio? Porque estaban como vosotros. ¿Por qué Sodoma y Gomorra sufrieron su aniquilación? Porque estaban como vosotros.

Fuisteis creados para un bien y ese bien solamente se logra si Yo vivo en vuestro corazón y cuando Me dais vuestra voluntad para que Yo actúe en vosotros, pero Me habéis hecho a un lado a Mí, vuestro Dios, en Mi Santísima Trinidad, queréis actuar solos y no tenéis las capacidades para moveros en el mundo y esto lo aprovecha satanás para desviaros, porque cuando os llenáis de soberbia, vosotros mismos os aniquiláis.

La maldad ha crecido demasiado entre vosotros, ya no sois esos Reyes de la Creación que Yo deseé que fuerais, como lo eran vuestros Primeros Padres en el principio antes del Pecado Original, ahora sois ese pueblo terco, sordo, grosero, malo y alejado de Mí, vuestro Dios; os habéis creado tantos dioses que ya no merecéis Mi Presencia ni Mi Ayuda entre vosotros ni para vosotros.

Por eso vuestra purificación os la habéis ganado a pulso. Tanto que os he tratado de ayudar durante todos estos poco más de dos mil años para que regresarais a Mí, y no habéis respondido.

Mi Hija, la siempre Virgen María, con Sus Apariciones que os anunciaban futuros desastres si no regresabais a Mí, se dieron porque no La escuchasteis. Mi Hijo y Mi Hija se han aparecido en todas las regiones del mundo tratando de ayudaros, tratando de haceros reaccionar de vuestros errores y no habéis querido reaccionar, no habéis querido volver a Mí, no habéis luchado contra la maldad que tenéis ya en vuestro corazón, y no solamente eso, sino que esa maldad hasta la transmitís a vuestros hermanos. Ya no sale Virtud, ya no sale Amor ni Sabiduría Santa de vosotros, sale maldad, salen errores, salen equivocaciones, y ¿así queréis que os consienta y os lleve al Reino de los Cielos? No, Mis pequeños, no os lo habéis ganado, y por eso esta purificación será tremenda, porque mucho, mucho traté de ayudaros y mientras más trataba de ayudaros, más os olvidabais de Mí, vuestro Dios. Crecisteis buscando otros dioses, haciéndoMe a Mí a un lado que Soy el Verdadero Dios.

Haced un recuento de vuestra existencia y veréis cuánta falsedad hay en vuestra vida, en vuestros actos, en vuestro pensar, en vuestro ejemplo hacia vuestros hermanos. Mucho error, mucho error habéis transmitido cuando Yo esperaba de vosotros que fuerais ejemplo de vida entre vuestros hermanos.

Cada uno de vosotros tenéis una misión, os la di para que vosotros fuerais llevando Mi Presencia, Mi Palabra, Mi Amor, siendo otros Cristos alrededor de los vuestros, de todos aquellos que os rodean y que ellos mismos también lo fueran y que así Mi Reino se diera nuevamente sobre la Tierra, pero no, os quisisteis ver a vosotros mismos, quisisteis gozar de los bienes con que satanás os hacía gozar y llevaros al error, no quisisteis tomar la Sabiduría Divina, pero sí tomasteis los errores de satanás como forma de vida y ahora padeceréis vuestro error, y lo habéis venido padeciendo en estos más de dos mil años. Ahora os dais cuenta, Mis pequeños, de que no hubo Sabiduría en esta generación, en estos dos mil años de vida humana.

Mi Hijo lloró tanto en Su Agonía en el Huerto de los Olivos al ver estos poco más de dos mil años. Todo un Dios se estaba dando por el hombre para ayudarle a crecer espiritualmente, para crecer en espiritualidad y vencer las fuerzas de satanás. Lloró por vuestros errores porque, a pesar de que teníais acceso a la Sabiduría Divina y a la forma de alcanzar vuestra santidad y alegrarMe a Mí, vuestro Dios, con vuestros actos, con vuestras palabras, con vuestros agradecimientos, preferíais darle gusto al enemigo con vuestros actos deplorables, con vuestros errores y traiciones, con esa vida malvada que habéis llevado en todo este tiempo.

¿Ahora os dais cuenta por qué os merecéis esta purificación tan tremenda que se dará? Poneos en Mi lugar, Mis pequeños, y por un momento pensad como Yo, vuestro Dios, el Perfecto, el Santo, el Misericordioso, el que solamente quiere lo mejor para los hijos. Poneos en Mi lugar, ved el actuar del hombre, tomadlos ahora vosotros como vuestros hijos, como si fuera vuestra familia toda la humanidad de estos dos mil años, ¿estaríais vosotros mismos contentos con el actuar del hombre?

Si estuvierais conscientes de esta realidad, vosotros mismos ordenaríais que viniera ya esta purificación en la cual ya estáis viviendo y que se irá incrementando. Ciertamente, veo a algunos hijos Míos que han entendido lo que Yo quería de vosotros, que han hecho el esfuerzo para ser como otros Cristos en estos tiempos, que han permitido que Mi Palabra, Mi Amor, Mi Voluntad, vivan en ellos, y por eso Mi Misericordia se derramará sobre ellos y serán protegidos los que fueron fieles a Mi Amor, a Mis Enseñanzas, a Mi Voluntad, pero son tan pocos, y esto lo veía Mi Hijo en Su Agonía: Morir por todos vosotros y que fueran tan pocos los que se salvarían.

¡Cuánto dolor Me causáis, oh, generación malvada! ¡Cuánto dolor Me causáis!, y no Me reprochéis Mis Actos contra vosotros, vosotros mismos os los habéis ganado, es vuestro castigo. Os los ganasteis por traicionarMe, por tener otros ídolos antes que a Mí, vuestro Dios, por no haber seguido Mis Enseñanzas y no haber vivido Mi Amor entre los hombres.

Ciertamente, cuando estáis Conmigo vais contra corriente, porque la mayoría se mantuvo con el enemigo y vivió en el error, y eso en estos tiempos vale más, Mis pequeños. Por eso os he dicho que la santidad de las almas que se mantuvieron Conmigo es más alta en estos tiempos que antes, porque estos son los últimos tiempos de satanás y el ataque contra vosotros es más intenso, y sólo los que están Conmigo podrán detectar sus mentiras, sus errores.

Gozad pues, Mis pequeños, gozad los que estáis Conmigo, porque pronto veréis vuestro regalo, el regalo que le daré a las almas que Me aman.

Me duele tanto el error del hombre, su traición, pero vosotros, los que estáis Conmigo, Me traéis alegría, Me traéis paz a Mi Corazón, Me traéis gozo de saber que al menos, al menos algunas almas quieren vivir Conmigo y transmitirMe a sus hermanos. Sois Mi familia, sois Mi Reino sobre la Tierra, y seréis protegidos contra la maldad de satanás, os lo he prometido, no seréis tocados porque estáis Conmigo. Os tratará de destruir satanás porque no quisisteis tomarlo a él y preferisteis tomarMe a Mí, vuestro Dios. Vivisteis en la Verdad, sufristeis porque os perseguían por estar Conmigo y no seréis tocados por la maldad, os lo he prometido y así se dará.

Seguid adelante, Mis pequeños, y Mi Amor se engrandecerá en vosotros y muchas Bendiciones caerán sobre vosotros, porque ahora puedo confiar plenamente en vosotros, almas valientes, almas que habéis sufrido persecución, pero no os dejasteis caer en el error ni en la maldad de satanás.

Os amo, Mis pequeños, seguid adelante. Falta muy poco para que podáis ver nuevamente la Luz, la Primera Luz que vieron vuestros Primeros Padres.

Gracias, Mis pequeños.