Jun 25_19 Pronto, Mi Clamor será acallado, porque los buenos, los justos, los que viven y oran para Mí, con su amor acallarán Mis lamentos, Mis llantos.

Mensaje ÚNICO- Rosario

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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

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Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Sobre: Esto no puede seguir ya, Mis pequeños, muchos inocentes son afectados por vuestro mal, y lo digo así, por vuestro mal, porque no habéis aprovechado el Bien que os traje y os habéis acomodado, en vida, al mal que os ha dado satanás.

(Lenguas…) Hijitos Míos, ayer celebrasteis la Fiesta de Juan el Bautista, la Voz que clama en el desierto. Se repite ahora, este mismo clamor, Mis pequeños, hablo, grito, lloro alrededor del Mundo y no responden, os busco y os escondéis, os prevengo y no os importa. No buscáis, porque creéis haber encontrado todo y es lo que satanás os ha dado. No buscáis la santidad de vida, porque no os interesa, vivís muertos a la Gracia, porque no queréis buscar vuestra perfección.

Mis pequeños, ¡cómo Me duele veros!, ¡cómo Me duele ver a esta humanidad, a la que tanto amo, pero que tanto dolor Me causa!

Me he dado Todo por vosotros, Juan preparó el camino para que Me encontraran y les habló de Mí, y aun así, muchos Me negaron después. ¿Por qué sois tan ciegos?, ¿por qué sois tan sordos?, en aquél tiempo Me tuvieron, Me escucharon, gozaron de Mis Milagros, caminaron Conmigo, y todo terminó en la Cruz.

¡Qué Dolor Me causáis, Mis pequeños!, Me seguís atormentando, seguís alargando Mi Pasión, Mi Dolor lo seguís fomentando, no queréis llegar, la mayoría de vosotros, a acompañarMe en Mi Triunfo sobre el mal y en Mi Resurrección, que muestra Mi Triunfo sobre la Muerte, sobre satanás, sobre el Pecado que vosotros lleváis. ¡Me seguís causando tanto Dolor!, y la desgracia mayor es que ni os acordáis de Mí ni os importa el Dolor que Me causáis, ¿hasta cuándo entenderéis, Mis pequeños?

Grandes calamidades se están dando a vuestro alrededor, para que entendáis que vuestro pecado ha afectado todo, y la misma Naturaleza se está rebelando contra vosotros. Ciertamente, satanás está manipulando una buena parte de ello, pero os he dicho que Mi Naturaleza está viva y está reaccionando, ya, por tanto pecado del hombre, porque el hombre debía haber cuidado de Mi Naturaleza. Os la di para que, al cuidarla, ella misma os cuidara, os diera abrigo y alimento, os diera la vida, os acompañara durante el resto de vuestra existencia y, ahí también, habéis fallado.

Me causáis mucho dolor y, ahora, el dolor se va a volver contra vosotros. Pocos de vosotros sois los que reparáis, sois los que Me acompañáis, como Me acompañaron en aquellos momentos algunos de Mis Discípulos y Mi Madre, pero pocos, muy pocos de los que estaban Conmigo, y ahora es lo mismo, Mis pequeños, muy pocos sois los que estáis Conmigo.

¡Cuánto desamor hay en el Mundo!, a pesar de que Yo vine para enseñaros a amar y a amarse los unos a los otros. Os enseñé el Amor del Cielo, os traje las Bendiciones del Cielo en Mi Persona Misma, tuvieron el Cielo presente, porque Yo Soy el Cielo Mismo y ni aun así lo aprovechasteis.

Ha pasado el tiempo desde que Me di por vosotros, y a pesar de que os dejé Mis Enseñanzas, os dejé Mi Vida, os dejé Mi Sangre, os dejé Mi Amor, todo lo habéis hecho a un lado, y pocos, muy pocos, son los que han aprovechado Mi Donación para su propia salvación.

Poco os dais por los demás, pocos oráis por el Bien de vuestros hermanos, pocos sois los que Me acompañáis en Mi Dolor. Pocos sois los que reparáis para traerMe alegría, para quitarMe el peso de esta Cruz, que todavía llevo por vuestros pecados. En lugar de haber disminuido por Mi Donación, éstos crecen día a día.

Esto no puede seguir ya, Mis pequeños, muchos inocentes son afectados por vuestro mal, y lo digo así, por vuestro mal, porque no habéis aprovechado el Bien que os traje y os habéis acomodado, en vida, al mal que os ha dado satanás.

Habéis anidado con él, os sentís seguros en su maldad, pero viene el tiempo ya, en que Mi Luz Bendita arrasará todo aquello con un fuego abrasador, de todo aquello que está infectado por la maldad de satanás. Ahora os sentís seguros con esa maldad, porque os habéis acercado a él, y a todo lo que ha afectado en vuestra vida, en vuestra existencia. Os sentís seguros viviendo en el mal, porque los que viven en el mal, unos y otros se protegen con él. Pero esa no es la vida que Yo os vine a Enseñar, y todos aquellos que están seguros, al vivir en ese mal, serán arrasados por éste Fuego abrasador de Mi Santo Espíritu.

Los buenos, llevan, ya, Mi Fuego en su interior, y este Fuego abrasador, no les hará daño, al contrario, serán purificados y embellecidos, pero aquellos que no llevan este Fuego Divino, serán arrasados y eliminados.

Os he dado mucho tiempo para arrepentiros, para arrodillaros, pedir perdón y pedir perdón por vuestra maldad, por vuestro trato tan negativo hacia Mí, vuestro Dios y Salvador.

No respondéis a pesar de que os llamo, de que os grito, de que clamo, como Juan el Bautista. No os importa oír Mis lamentos, Mis gritos os llaman, para que os acerquéis como hijos, como hermanos, como Mis pequeñitos, a los que tanto amo. Me seguís dejando abandonado al dolor que Me causaron los verdugos de Mi Pasión.

Pronto, Mi Clamor será acallado, porque los buenos, los justos, los que viven y oran para Mí, con su amor acallarán Mis lamentos, Mis llantos.

Os pido, Mis pequeños, que seáis de ellos, de los que sí habéis escuchado Mi clamor y que, además, respondéis a Mi Llamado, arrepentidos y volviéndoos al bien que Yo os traje, que tanto Me costó, pero que di con todo gusto para las almas buenas, las almas que iban a responder en el futuro.

Gracias, Mis pequeños.