Mzo 26_19 La Verdadera Felicidad.

Rosario vespertino-Mensaje ÚNICO

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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

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Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Sobre: La felicidad de la Tierra, afectada por satanás, no os va a llevar a esa felicidad que solamente Yo os puedo dar, en una forma inmensa, cuando estáis haciendo Mi Voluntad.

Hijitos Míos, vuestra vida en la Tierra os puede llevar a la felicidad, pero el estar en felicidad Conmigo, conlleva, también, sufrimiento. Algunos, aún dentro de la Iglesia, hablan de que sólo vinisteis a ser felices, el hacer Mi Voluntad, conlleva dolor y amor.

Cuando vosotros estáis actuando para Mí, y estáis conscientes de ello y lo estáis haciendo con gusto, aceptáis todo lo que Yo ponga en vuestra vida, porque sabéis que, aunque en momentos tendréis dolor, tristezas, angustias pero, aceptando Mi Voluntad, todo terminará en un bien y, es más, Yo os haré sentir esa felicidad íntima, espiritual, que Yo, solamente os puedo dar.

Buscar la felicidad con las cosas de la Tierra o con el pensamiento humano, no os va a llevar a la felicidad que vosotros y muchos, pretenden tener. La felicidad de la Tierra, afectada por satanás, no os va a llevar a esa felicidad que solamente Yo os puedo dar, en una forma inmensa, cuando estáis haciendo Mi Voluntad, como os dije antes.

A lo que llamáis “vuestra felicidad”, conlleva, también, dolor, angustias, preocupaciones, porque estáis actuando en el mal; la mayoría de las veces, estáis buscando vuestro propio bien y no estáis, en un momento dado, viendo por el bien de la otra persona con la que estáis buscando la felicidad.

La felicidad humana es egoísta, es mala, no veis por el bien de vuestro prójimo, buscáis vuestra propia felicidad, porque eso es lo que os indican aquellos que la pregonan: buscad vuestra felicidad. No están hablando de que busquéis la felicidad de los vuestros, con los que están con vosotros, con los que amáis, sino que os están hablando en singular: “busca tu felicidad”. Y así, el hombre se vuelve egoísta, malo y produce mucho dolor a su alrededor y, como os dije, van a tener angustias, dolores, preocupaciones, pero no van a tener Mi Apoyo, porque no Me están buscando, están viviendo en pecado, están viviendo en el mal y no se acercan a Mí por ayuda, porque no quieren estar Conmigo, quieren actuar en su egoísmo solos, y no encuentran la salida a sus problemas.

En cambio, aquellos que están Conmigo, aquellos que están buscando su felicidad, porque Yo os la doy, cuando actuáis en el Bien y cuando aceptáis Mi Voluntad en vuestra vida, Yo os dejo, realmente, vuestro corazón lleno de felicidad. Vuestra alma crece, vuestra alma se va santificando, vuestra alma va produciendo amor a vuestro alrededor, produce paz, produce alegría para los que están con vosotros.

Esa es la verdadera felicidad, porque, Yo os dije, aquél que quiera venir en pos de Mí, que tome su cruz y Me siga. La cruz produce dolor pero, también, produce alegría porque, en la Cruz, Yo Me di por vosotros y, vosotros, por Mí, llegaréis al Reino de los Cielos.

Cuando vosotros aceptáis Mi Voluntad a pesar de todas esas consecuencias que vosotros veis negativas, esto os lleva, después, a una felicidad inmensa. Esa es la verdadera felicidad que vosotros debéis buscar y Me lo agradeceréis después, porque estáis conociendo cómo actúo, estáis aceptando Mi Voluntad y esa os está llevando a vuestro perfeccionamiento.

En cambio, al actuar de la otra forma, egoísta y mala, no va a haber perfeccionamiento en vosotros, vais a dejar mucho dolor a vuestro alrededor, nadie crece, ni vosotros mismos creceréis espiritualmente.

Tened mucho cuidado, Mis pequeños, de lo que se os dice a vuestro alrededor ya que, lo que más Me duele, es que aún, dentro de la misma Iglesia se esté hablando de esto, de que busquéis vuestra felicidad como cuando no tenéis un buen esposo o una buena esposa, o cuando vuestros hijos os están dando problemas, en pocas palabras se os aconseja diciendo: deja todo eso y consigue una nueva pareja, para que con ella o con él, tengáis la felicidad que debéis tener aquí en la Tierra.

Yo no os vine a traer esa manera de pensar, Mis pequeños, Yo vine a traer Mi Amor, Yo os vine a traer sacrificio, Yo os vine a dar Sabiduría Santa y aquellos que ya han vivido todo esto, Mi Sabiduría, Mi Amor, siempre reciben un respaldo Mío, y siempre se sienten acompañados, aún a pesar del dolor, aún a pesar de las penas, aún a pesar de que se vuelva todo obscuro a su alrededor, pero si actuáis en confianza plena Conmigo, siempre os daré una salida y esa salida os llevará a la felicidad, la Verdadera Felicidad que debéis tener, porque estaréis actuando según Mi Voluntad y no de la voluntad del Mundo.

Gracias, Mis pequeños.