Ene 07_05 “Tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior.”

Rosario.

Mensajes de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Temas:

  • Tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior.
  • Vosotros sois Mis soldados y en vosotros he puesto Mi Esperanza y Mi Confianza. 
Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior, porque polvo se volverá.

Hijitos Míos, las corrientes actuales, corrientes del enemigo os hablan de la superación personal, del mejoramiento de vuestra persona en el exterior, del tener más para que se os respete en la sociedad; eso, Mis pequeños, solamente os va vaciando de los verdaderos bienes, bienes espirituales que Yo os viene a enseñar.

Estáis embelleciendo solamente el exterior, el exterior de vuestro ser, que es lo que se va a quedar aquí tirado en el Mundo, que los gusanos comerán y polvo se volverá. El tiempo que estáis utilizando en ello, es tiempo desperdiciado, que debierais estar utilizando para el embellecimiento de vuestra alma y en la ayuda a vuestros hermanos para crecer también espiritualmente.

Es como en un coche, el exterior es bello, puede estar bien pulido y bien cuidado, pero si el motor no funciona, si no cuidáis de mantener el motor en buen estado y le dais los arreglos necesarios para que camine bien, ¿de qué sirve entonces el exterior si no os va a llevar a ningún lado?

Vuestra alma es la que mueve al cuerpo, vuestra alma es la que os da vida, vuestro cuerpo no os da vida, es pura apariencia. Cuidad, cuidad vuestro interior, es lo que os he dicho. Mi Evangelización sobre la Tierra fue hacia ello, hacer crecer vuestra alma a niveles infinitos, vuestro cuerpo no puede crecer a esos niveles.

Como vuestra alma tiene parte Divina en Nosotros, su crecimiento puede ser infinito cuando estáis con Nosotros, cuando os alimentáis de Mi Vida y así es como el hombre puede alcanzar esa grandeza que nunca va a alcanzar el cuerpo, que busca solo la vanagloria de éste Mundo.

El que es santo, al que se le considera santo, su alma está en niveles altísimos, mucho más grandes que los que el hombre podría alcanzar en el Mundo.

El Cielo, en comparación a la Tierra, es infinito, el hombre no puede comprender esas alturas. Así como Mi Omnipotencia es incomprensible para el hombre, cuando el hombre alcanza la santidad, ésta se vuelve incomprensible para el hombre común, el hombre que busca solamente lo mundano.

Así pues, Mis pequeños, os vuelvo a repetir, y a advertir, tened cuidado en solamente embellecer vuestro exterior, porque polvo se volverá.

En cambio si utilizáis el tiempo para embellecer vuestra alma, que ésta se da principalmente en la caridad, ayudando a vuestros hermanos, la belleza que alcanzaréis, será infinita.
Gracias, Mis pequeños.

 

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros sois Mis soldados y en vosotros he puesto Mi Esperanza y Mi Confianza. 

Hijitos Míos, estar en la Tierra, significa estar en el campo de batalla. Vosotros sois Mis soldados y en vosotros he puesto Mi Esperanza y Mi Confianza.  Os he equipado a cada uno de vosotros para que luchéis por lo que es Mi propiedad.

El enemigo Me quiere arrebatar Mis propiedades y entre ellas, principalmente, las almas de todos aquellos que Yo he creado con Amor y también quiere destruir toda la Creación que Yo también con Amor creé para vosotros.

Estar en el campo de batalla, significa estar continuamente bajo las órdenes del superior. El soldado que no está pendiente de las órdenes del general, se puede desviar, puede entrar en el campo enemigo y sucumbir.

El soldado que con sumisión, acepta las órdenes del general, porque en él está aceptando esa sabiduría para guiarlo, entonces tendrá segura la batalla y segura su vida.

Mis pequeños, Yo no Soy el general, Soy vuestro Padre y vuestro Dios. Vosotros sois Mis hijos, estáis en el campo de batalla y estáis vosotros recuperando lo que Yo os di, lo que no solamente Me pertenece a Mí, sino que es lo que os pertenece a vosotros. Yo os di de regalo Mi Creación, os di la Vida. El demonio os quiere arrebatar todo ello, Yo os he pedido luchar por Mis Bienes, que son los vuestros.

Yo os voy guiando con Amor, con Sabiduría, os protejo y aquel que está Conmigo no tropieza. Aquél que se aparta, se aparta de Mi Llamado, se aparta de Mis Leyes, se aparta de Mis deseos y el  que se aparta de Mis Consejos, necesariamente tropieza y sucumbe.

Así como al general le duele perder a sus soldados, a Mi también Me duele perder a Mis hijos.

Mis pequeños, haced entender esto a vuestros hermanos, hacedles entender que el único camino para poder vencer en la vida, es seguirMe, es seguir los Mandamientos, seguir Mis Consejos. Yo nunca Me separo de Mis hijos y menos en estos tiempos en que la lucha se está haciendo más grave.

El demonio está atacando con todas sus fuerzas, porque es poco el tiempo que le queda para atacar a la humanidad. Si vosotros no os equipáis mejor, si no utilizáis las armas necesarias para atacar su ejército, os va a vencer.

Mis pequeños, deberéis estrecharos más a Mi Corazón, para escuchar mejor Mi Voz y para poder dar valor a las almas. Os voy a aconsejar más directamente, os voy a dar más fuerzas, os voy a dar más Sabiduría, porque Yo tengo ese Poder y más para proteger a los Míos, pero deberéis estar atentos a lo que Yo os mande.

Podría actuar Yo fácilmente a través de vosotros si fuerais fieles a Mi Voz, pero la soberbia del hombre lo hace desviarse, se vuelve desobediente, se vuelve autosuficiente.

Venid a Mí, Mis pequeños, entrad en vuestro corazón y Me escucharéis más fácilmente. Confiad, confiad en que venceremos. La victoria es Mía y los que estén Conmigo. Mi ejército es poderosísimo, vosotros Me estáis ayudando. Quiero compartir la corona de la victoria con cada uno de vosotros, pero para ello os pido, no os apartéis, dadMe vuestra totalidad, dadMe vuestra voluntad, dadMe vuestra persona y venceremos. Mis pequeños, os lo prometo, venceremos y gozaréis, gozaréis de los gritos de victoria que se darán en el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.