Mayo 08_99 MI AMOR.

Mensaje de Dios Padre a J. V., el 8 de Mayo de 1999.

Habla Dios Padre,
Sobre: MI AMOR.

Hijitos Míos hoy os quiero hablar de Mi Amor. Cuando entre vosotros os deseáis unos a otros: “Que el Amor de Dios esté contigo y con los tuyos”, no os imagináis de la grandiosidad de ése deseo. Estáis deseando lo más bello, lo más santo, lo más poderoso, lo más sublime, porque estáis pidiendo para los demás Mi Propia Vida, Mi Propia Esencia, estáis pidiendo Mi Omnipotencia entera, ya que todo lo que Yo Soy y todo lo que de Mi se crea, es siempre bajo Mi cuidado en el Amor. Nada se puede dar de Mí si no está revestido de Amor.

Pero os quiero explicar a vuestro pequeño entender, algo de lo que Mi Amor significa, ya que es tan grande, porque es la esencia de Mi Poder y de Mi Omnipotencia, que vosotros, Mis pequeñitos, no podríais comprender la totalidad de loque significa la palabra Amor en Mi Entender.

Yo, vuestro Dios, el Omnipotente, el Eterno, vivo en Mí, Me desarrollo en Mí y Mi Amor lo llena todo. Yo, en Mi Eterno Amor, decidí crear, primeramente a Mis Ángeles, para que ellos pudieran compartir las delicias de Mi Amor. Los creé, no porque los necesitara, sino porque deseaba compartir lo más bello de Mí. Como os lo dije antes, el amor, Mi Amor, llena todo, pero como consecuencia del mismo amor, el amor, al poseerlo, se siente la necesidad de darlo y al momento de darlo, se recibe más del que se tenía y al poseer más, uno vuelve a dar, pero ahora en mayor cantidad y así, mientras más se tiene, más se dá y más se recibe ocasionando una ascensión interminable, infinita, como Infinito Soy Yo.

Así pues, Mi Amor creaba los ángeles para compartir con ellos Mi Amor. Creaturas bellísimas, purísimas, recibiendo Mis Bendiciones de Amor, recibiendo una creación por Amor. Estas creaturas bellísimas fueron creadas en total libertad, porque el Amor, el verdadero Amor, no puede esclavizar, no puede obligar a amar a alguien. El amor debe ser espontáneo, sincero y agradecido al verse creado y envuelto por el Amor de los Amores.

Un autómata hace lo que se le ha programado, no tiene libertad para salirse de su programa preajustado y no tiene espontaneidad para responder a estímulos mayores o menores cuando éstos se presenten. El autómata no piensa, no razona, no sabe agradecer y menos “de corazón”, sino que sólo repite la información preestablecida, en fin, el autómata es una creación egoísta ya que va a repetir lo grabado por su mismo constructor y repetirá siempre lo mismo para vanagloria de su mismo constructor. Mi Creación no es de autómatas, Yo puse en Mis Ángeles, primero y en vosotros, después, el libre albedrío con el cuál os pudiérais dar plena cuenta de lo que Mi Amor os daba y que pudiérais ó agradecer ó rechazar lo que de Mí se derrama en Gracias y Bendiciones.

Mi Amor creó, además, los cielos con todos sus astros, cada uno de ellos es una joya, ¿el porqué?, una alabanza de Mi Amor para con vosotros. Con delicadeza suprema fui creando cosa por cosa para daros gusto, para que al admirar Mi Obra en los cielos vierais reflejada en ésa estrella, en ése planeta, en ésa nebulosa, en la belleza de todos los astros y galaxias, en su belleza sin fin, Mi Amor por vosotros. Los creé así para que cuando voltearais a ver a los cielos, en ésas noches apacibles y bellas, os dierais cuenta que esas piedras preciosas suspendidas en el espacio, fueron creadas para vosotros, para alegrar vuestros sueños, para compartir con el ser amado, para admirar Mi Obra Omnipotente y bella en la cuál Mi Amor se volcaba en cada uno de vosotros.

Luego creé la Tierra para beneplácito vuestro. Quise hacer una cuna de flores, de frutos, de animalitos para que acompañaran a la perfección de Mi Obra, el ser humano. Con delicadeza que no podéis comprender, pensé en cada uno de los detalles que rodearon Mi Primer Creación, afectada gravemente después por la maldad del Pecado. ¡Cuánta belleza de Mi Corazón amoroso nació para vosotros! ¡Con cuánta ternura fui creando cada cosa para daros gusto! Cada flor, distinta en color, en aroma, en hechura fue creada por Mí para daros gusto.

Cada fruto con su aroma, con su delicia al paladar fue creado para vuestro beneplácito. Yo pensaba en cada uno de vosotros y sabía lo que a cada uno le iba a gustar y como iba a reaccionar en agradecimiento de su corazón para Conmigo. Cada detalle fue pensado para consentir a Mi Creación Suprema y que es Mi regalo supremo, vosotros, Mis hijitos. El amanecer, con sus luces y sombras anunciando un nuevo día, para estar presentes con vuestro Dios, para compartir con vuestro Dios, para vivir, agradecer y alabar a vuestro Dios. El día se os dio para vivir conscientes y compartir conscientes lo que Yo, en Mi Delicadeza os preparo para cada día. El atardecer que os prepara con su belleza particular a entablar una comunicación de amor y agradecimiento con vuestro Dios, por las bendiciones recibidas, por las alegrías y tristezas, por todos los momentos vividos durante el día y el agradecimiento a Mi Providencia Divina al no faltaros nada, ni en lo material ni en lo afectivo. La noche, con sus lucecitas en el firmamento, con sus astros bellos, con su aroma nocturno, todo pensado para vosotros, para que fuera el descanso del alma en los brazos amorosos y reconfortantes de vuestro Dios, para daros una nueva vida en cada noche al permitirle a vuestro Dios que el alma, por entero, se ponga en contacto con su Dios mientras el cuerpo reposa con merecimiento ganado al trabajar para Mí, en bien de vuestros hermanos.

Cada detalle que Yo creé lo hice para agradaros. El rocío de lluvia sobre las flores y sobre la vegetación, ¡los pajarillos y las mariposas que alegran vuestro oído y vuestra vista! ¡El ir y venir de las olas del mar! ¡Las altas montañas con sus nieves perpetuas que les dan una belleza singular! ¡Los valles reposados¡ para que hagan sus delicias los hijos de Mis hijos! ¡Los pececillos multicolores con su variedad de tamaños y formas, los colores del cielo! ¡Los colores del mar! ¡Los multicolores de toda la Naturaleza! ¡Todo fue creado por Mi Amor, con Mi Delicadeza para ser ofrenda de vuestro Dios para todos vosotros! Mis hijitos.

Cada detalle, cada forma, cada comportamiento tanto animal, vegetal ó mineral, fue creado para vuestro servicio. Todo fue creado para daros alegría y vosotros, al daros cuenta de Mis cuidados amorosos con los que Yo os había consentido, Yo deseaba el reconocimiento y agradecimiento a Mi Amor por parte vuestra y en ése agradecimiento, nacido en vuestro corazón pequeñito y amoroso para con vuestro Dios y Creador, Yo lo iba a recompensar con mayores regalos, con mayor alegría, con mayor Amor. Ya os lo dije, Mi Amor es infinito y al ser agradecidos, al dar amor, se recibe más amor y así, Mi consentimiento de Amor, se vuelve infinito para con todos aquellos que saben agradecer a Su Dios y Creador Sus bondades. Lo que vosotros llamáis maravillas de la Naturaleza, no son sino una pequeña muestra de lo que Yo, vuestro Dios, os dejo gozar ahora de las maravillas infinitas que tendrán Mis verdaderos hijos por toda la Eternidad.

Vuestras decisiones y vuestros agradecimientos deben ser espontáneos y libres y en ello Me complazco, porque sale vuestro agradecimiento de un corazón sincero y amoroso. Es vuestra libertad amorosa la que Me subyuga y Me obliga a daros más. Yo Me derramo en bendiciones y regalos en aquellas almas que recapacitan en sus vidas y se dan cuenta de todas las bendiciones que han obtenido desde antes de su nacimiento y durante su vida, cuando se dan cuenta de los cuidados que he puesto en cada alma que vive sobre la Tierra y como a cada uno le doy en forma particular y privada lo que cada uno necesita. No he creado dos almas iguales y así, por lo tanto, cada agradecimiento a Mí, vuestro Dios, es diferente, como colores, formas, aromas puse en Mi Creación para alegraros.

Hijitos, os doy ésta pequeñísima semblanza de Mi Amor que he puesto en vosotros y he hecho para vosotros para que os deis cuenta que el ser agradecidos y consientes de mi Amor en vosotros y para vosotros, al agradecerMe con corazón sincero, recibiréis más, porque infinito es Mi Amor y así también es mi deseo de agradaros.

Acercaos más a Mí, íntimamente. ContádMe las confidencias de vuestro corazón, con la delicadeza que Yo puse al crear cada cosa para alegrar vuestra existencia en el Mundo que, primero, fue creado para vuestro recreo terreno, pero que el pecado destruyó. Aún se puede rehacer Mi Obra, Mi Primer Obra de Creación con la ayuda vuestra. Volved a ésos Primeros Tiempos en los cuáles el Paraíso Terrenal fue creado, agradeced ése Paraíso y pedidlo de nuevo. AgradecedMe y comportaos como verdaderos hijos Míos y pedídMe el Nuevo Reino, que Mi Reino venga pronto, porque será otro Paraíso para todos aquellos que con Fé y confianza plena Me pidan Mi Estancia, nuevamente, entre vosotros.

No os imagináis como Mi Corazón se derrite de Amor al escuchar de vuestros labios o de vuestro corazón, ésas palabritas sinceras y amorosas diciéndoMe, gracias Padre.

Yo os bendigo y os deseo de todo corazón, que Mi Amor, lo poquito que ahora entendéis y Mi Omnipotente Amor, esté con todos vosotros y con los vuestros.