Nov 03_2021 Quiero Vivir nuevamente con vosotros, como se vivía en el Paraíso Terrenal, con vuestros Primeros Padres, Yo, con vosotros, sin temor, puro Amor.

Rosario – Mensaje ÚNICO.

.

====================

Mensaje de Dios Padre a J. V.

===================

.

Primer Misterio. Habla Dios Padre.

(Lenguas…) Pueblo Mío, ahora os llamo así, Mis pequeños, como a aquellos a los que, le pedí a Moisés que guaira, para que salieran de Egipto. Quiero que vosotros os deis cuenta de las similitudes que tendréis, también, en estos tiempos. Ya os he dicho que estoy reuniendo a Mi pueblo, el que será preservado en estos tiempos, que iniciará una nueva generación.

Recordad, Mis pequeños, cómo permití, a través de Milagros y Promesas, que saliera todo el pueblo. El mismo faraón, luego lo persiguió, pero no tocó a ninguno de aquél pueblo. Cuando Yo os prometo protección, cuidados, porque sois Mis hijos, os cuido así, como un Padre a sus hijos. Ciertamente, ellos estaban afectados por lo que vivían y veían entre los egipcios; tenían muchos dioses, y mantenían algunos de ellos, en las tradiciones judías, estaban contaminados por lo que habían vivido entre ese pueblo.

Fueron perseguidos por el faraón y su ejército; pasaron pruebas, pero no fueron tocados por los soldados del faraón; luego permito el gran Milagro del Mar Rojo, a través pasó todo el pueblo judío, pero atrás de ellos venían los soldados y el faraón, los cuales murieron al cerrarse nuevamente las aguas. Fueron guiados por Moisés a las nuevas tierras que, Yo prometí, les iba a dar.

Pero a lo que voy con todo esto, Mis pequeños, es que os deis cuenta la afectación que vosotros tenéis y que tomáis de vuestro alrededor. Quizá muchos de ellos no tenían una Fe firme, pero aun así los rescaté; como dije, estaban afectados por la cultura egipcia y por sus dioses. Eran testarudos, no aceptaban la purificación que tenían que tener, porque Yo quería formar un pueblo, verdaderamente Mío, limpio de otras culturas. Ya os he dicho que Soy un Dios Celoso, Yo no acepto ningún ídolo ni nada antes que a Mí.

La afectación de ese culto que tenían, hizo que adoraran, primeramente, a un buey, hecho de oro. Ahora podéis razonar, que ¿cómo es posible, que la imagen de un animal, aunque sea hecho con un metal noble, pueda ser más grande que Yo, vuestro Dios?, porque, actualmente, muchos de vosotros traéis, también, una afectación cultural de lo que veis por aquí o por allá. Ciertamente, ahora voy escogiendo a Mi pueblo, a Mi nuevo pueblo, para el tiempo que vendrá y quiero que aprendáis de lo que sucedió con el pueblo judío en Egipto, que por su testarudez, por su forma de pensar, que estaban afectados por las culturas egipcias, y también, por ser un pueblo que no cedía a Mi Amor, a Mis Leyes, tuvieron que pasar cuarenta años en el desierto, de un lado para el otro, hasta que esa generación testadura murió, y pude llevar después, a los hijos de ellos, a las nuevas tierras en donde vivirían y se guiarían por Mis Leyes, siguiendo Mi Voluntad.

Cuando el hombre se deja guiar por Mí, Soy Bondadoso, podría decirse que, hasta Soy Débil a sus oraciones, cuando aquellos son humildes, sencillos y os he dicho que lo que Me pidáis lo concederé, siempre y cuando, Me tengáis a Mí como lo primero en vuestra vida y en vuestro futuro; que no antepongáis a nada ni a nadie antes que a Mí, Yo Soy vuestro Dios, y así será en este tiempo, que voy escogiendo ya, el pueblo, el nuevo pueblo, donde se Me dará a Mí, ese lugar.

Soy vuestro Dios y no permito a nada ni a nadie que esté ante Mí, como ahora estáis viendo que anteponéis ídolos, hechos por el hombre, o anteponéis a personas antes que a Mí, vuestro Dios, o a animales, a cosas, que creéis que su valor es mayor que Mi Amor y Mi Poder.

Ese pueblo judío tuvo que sufrir una purificación fuerte, para que olvidaran todo aquello que no era bueno para sus fines religiosos y ceremoniales. Yo Me merezco todo, porque Soy vuestro Dios y vuestro Creador, Me merezco todo, porque es Mi Amor Infinito el que os cuida y os provee de todo.

Sed sensatos, Mis pequeños, ya no juguéis con Mi Amor, mucho ha perdido el hombre por su insensatez, por su traición, por su maldad, por su ignominia. ¿Por qué sois así, Mis pequeños, Conmigo, vuestro Dios?, cuando Yo os concedo todo, y vosotros, solamente, Me dais las sobras de vuestro tiempo, las sobras de vuestro amor, cuando debiera ser lo que Me dieras, las primicias de vuestras oraciones, las primicias de vuestros gustos, las primicias de vuestro trabajo, las primicias de un amor verdadero, que salga de lo más profundo de vuestro corazón. Yo Me lo merezco, porque si Yo, siendo Dios, os consiento más que cualquier ser humano hacia vosotros, ¿por qué Me dais a Mí las sobras? ¿Por qué os olvidáis de Mí, que Yo Soy Todo para vosotros?

Este nuevo pueblo que estoy formando, se dejará guiar plenamente por Mí, al menos al principio, porque, ciertamente, la afectación que traéis en vuestro ser, os traicionará después. La soberbia, la maldad, la codicia, os vencerán nuevamente, a pesar de que satanás no os estará atacando, porque él, encadenado estará.

Por eso, es tan importante que viváis esa unión íntima Conmigo, y que viváis ese amor, pequeñito que tenéis, unido al Mío, tan Grande y Poderoso, pero que Humilde es hacia vosotros. ¿Acaso tenéis en la Tierra, un padre más Poderoso que Yo? ¿Acaso tenéis en la Tierra, un hermano más poderoso que Yo? ¿Acaso tenéis en la Tierra un amigo más poderoso que Yo?, Yo Soy Todo para vosotros, Me hago Sencillo, Humilde, Me abajo a vosotros, para que hablemos con sencillez, sin que Me tengáis el miedo que se Me tenía en ese tiempo. Soy vuestro Padre, Soy vuestro Dios, y quiero que se Me trate así, con respeto, porque Soy vuestro Mayor, pero con sencillez, sin temor, como le habláis a vuestro padre, a vuestro hermano, a vuestro amigo. RespetadMe, amadMe, dejad que Mi Voluntad Viva en vosotros y todo será perfecto en vuestra vida.

Empezad, pues, Mis pequeños, a formar ya, ese Nuevo Mundo, ese nuevo Amor que habéis hecho a un lado, que habéis olvidado, que no habéis tratado de conocer. Que os pertenece, que gozaréis, como nunca habéis gozado un amor tan grande en el Mundo, y que solamente gozaréis Conmigo, vuestro Dios.

Dejad que Yo habite en vosotros, respetaré vuestras decisiones, pero no Me hagáis a un lado, compartidMe todos vuestros pensamientos, todos vuestros deseos, todas vuestras metas y Yo os daré Mi Opinión, con sencillez, con respeto, para que todo salga perfecto en vuestra vida.

Quiero Vivir nuevamente con vosotros, como se vivía en el Paraíso Terrenal, con vuestros Primeros Padres, Yo, con vosotros, sin temor puro Amor, con una familiaridad Divina.

Empezad, pues, Mis pequeños, a tratadMe así, como vuestro Padre más amoroso, como vuestro Hermano a quien tanto amáis, como vuestro Amigo, a quien tanto queréis.

AmadMe, amadMe, como Yo os amo.

Gracias, Mis pequeños.