Abr 26_18 Hay almas que en la maldad responden con el Bien y ésos son Mis verdaderos hermanos.

Rosario vespertinoMENSAJE ÚNICO.

 

 

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Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

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Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.

Sobre: En el amor no hay obligación, ni siquiera se piensa en ello, en el amor actúa inmediatamente el alma, actúa Mi Amor que lleváis, los que estáis Conmigo, y lo dais a vuestros hermanos.

 

Hijitos Míos, cuando se ama de verdad, uno queda en segundo plano, en primer plano quedan aquellos por los que uno puede hasta dar su propia vida por su salvación, ya sea física o espiritual o ambas.

 

Ese es el verdadero amor, el olvidarse de sí mismos, el darse por el hermano, el ver en el hermano o en el hijo, en el prójimo, aquél al que se ama y al que se le tiene que ayudar por amor.

 

En el amor no hay obligación, ni siquiera se piensa en ello, en el amor actúa inmediatamente el alma, actúa Mi Amor que lleváis, los que estáis Conmigo, y lo dais a vuestros hermanos.

 

Esto os lo digo, Mis pequeños, por todo lo que tendréis que vivir, por todo lo que está sucediendo, por todo lo que están sufriendo vuestros hermanos, por los que conocéis, por los que no conocéis y aquellos a los que estáis viendo sufrir en alguna parte del mundo y por aquellos, por los que, quizá, os quisierais dar para ayudarles a sobrellevar las injusticias que el mismo hombre causa a sus hermanos.

 

Satanás ha hecho su obra y así como hay algunos hermanos Míos que se dan, como Yo Me di por vosotros, hay otros que se han vuelto instrumentos de satanás y son los que están causando tantos problemas alrededor del mundo, pero eso, Mis pequeños, Yo lo cambio en Amor; satanás destruye y Yo, reconstruyo, hago que muchas almas se salven, porque hay almas que en la maldad responden con el Bien y ésos son Mis verdaderos hermanos.

 

Os he pedido que en estos tiempos seáis como Yo, otros Cristos, que os daréis por la salvación de vuestros hermanos y os pido que no temáis, que Yo estaré con vosotros en todo momento.

 

Son situaciones difíciles, Mis pequeños, lo sé, porque Yo Mismo, en algún momento, quise que Mi Padre apartara el Cáliz del Dolor; Mi parte Humana, podría decirse, flaqueó, pero Mi parte Divina os siguió amando fuertemente, y ése es el Amor que debéis, todos vosotros, tener en vuestro corazón.

 

Muchos seréis apartados de la Tierra, unos para su salvación eterna, otros, para su perdición eterna.

 

Yo Me di por todos, pero las Bendiciones hacen diferente acción en un alma buena que en un alma mala. Mi Bendición es la misma, el alma buena le saca provecho pero el alma mala la rechaza. Ciertamente, hay muchas almas malas, como las que, también, había en el tiempo en que fui Crucificado.

 

En este tiempo, satanás, ha tomado a muchísimas almas y ellas no quieren estar Conmigo, pero recordad que el Amor produce Milagros, y os he dicho que este es el tiempo en que muchos milagros se llevarán a cabo y gozaréis viendo y viviendo esos milagros que se darán.

 

¡Es tanto el Amor que tengo por vosotros!, Mi Padre os creó y os ama infinitamente, Yo, Su Hijo y Hermano vuestro, Me di por vosotros, os conozco a cada uno de vosotros y os amo, en las buenas y en las malas, lucho y Le pido a Mi Padre por aquellos que no son almas buenas, que han despreciado el don de la vida, y la salvación que Yo obtuve para cada uno de vosotros. Desprecian todo lo que viene de Nuestra Santísima Trinidad, porque satanás os ha hecho negar Nuestro Amor, Nuestra Misericordia Infinita, Nuestro Perdón hacia cada uno de vosotros.

 

Mi Santo Espíritu, que Nos une a Mi Padre y a Mí, actúa, también, fuertemente, en el interior de cada uno de vosotros, pero ni aun así, muchas almas no responden. Por eso, estas pruebas que se han de venir será la última oportunidad para que cambien, para que al vivir fuertemente el dolor y sobre todo, el posible fin de su vida aquí en la Tierra, toda esa soberbia, toda esa maldad que traigan, puedan cortarla y así se puedan arrepentir, para su propia salvación.

 

Nosotros conoceMos cada alma y a cada una la tratamos según lo que han tomado de Nosotros. Hay almas buenas tan delicadas, como flores, que no se pueden ni tocar, porque si no, inmediatamente, sus pétalos pueden caer. Pero hay otras almas que están llenas de espinas, que no se dejan tocar, que ponen esas espinas a su alrededor, como para que nadie se acerque, su soberbia impide que alguien se acerque a tratar de convencerlas a que tienen que cambiar para su salvación, pero no lo aceptan, se tratan de defender. Eso es lo que representan las espinas pero, aun así, Yo sigo tratando de salvarlas.

 

Yo Llevé una Corona de Espinas, se burlaban los soldados, se burlaba el pueblo, pero todo se volvió Salvación para los que Me amaban y condenación para los que quisieron seguir viviendo con espinas, rechazando Mi Amor, Mis Milagros, Mis Enseñanzas.

 

¿De qué lado estáis, Mis pequeños?, ¿de aquellos que Me amáis, de aquellos que veis por el bien de vuestros hermanos y que daríais vuestra vida porque ellos, también, pudieran salvarse con vuestra ayuda?, o ¿los dejaréis sin importaros su futuro eterno y no les ayudaréis en absolutamente nada, ni siquiera intercediendo por ellos?

 

¿Estáis Conmigo o estáis en contra Mía?, y esto os lo digo, porque Yo Me di por todos. Si estáis Conmigo, seréis de aquellos que os daréis u os estáis dando por vuestros hermanos; o sois como los fariseos, incitando a la gente a vuestro alrededor, a que se sigan apartando de Mí, que rechacen todo el Bien que traje para los hombres, que rechacen Mi Presencia. No queréis cambiar vosotros mismos y atacáis a aquellos que quieren cambiar y no los ayudáis, así estaban los fariseos, ciertamente sabían que había algo especial en Mí, pero no querían dar su brazo a torcer.

 

Os pido, pues, que sigáis actuando en el Amor, que sigáis siendo ejemplo y vida para vuestros hermanos y, especialmente, para aquellos que necesitan de Mí, para su salvación eterna.

 

SoMos el Amor en Nuestra Santísima Trinidad, SoMos Vida, SoMos Salvación, SoMos Perdón, SoMos Resurrección de las almas. ¿Queréis vivir eternamente con Nosotros o Nos seguiréis atacando, apartándoos de Nosotros, viviendo como satanás os ha engañado, haciéndoos creer tantas cosas negativas, que os apartan de Mí y por ello, moriréis eternamente.

 

Mucho se os ha explicado de lo que ha de venir, y a dónde iréis si estáis o no estáis con Nosotros. Para vuestra salvación, tenéis que poner de vuestra parte; ciertamente, para ganar el Reino de los Cielos, se necesita luchar para ello.

 

Las Puertas del Cielo están abiertas para todos, pero tenéis que llegar con méritos para que os lo podáis ganar.

 

Os amo, Mis pequeños, os amaMos en Nuestra Santísima Trinidad, poco es el tiempo que os queda para un cambio verdadero.

 

Espero una respuesta positiva y sabia de parte de vosotros, para que podáis tener un premio eterno.

Gracias, Mis pequeños.