Ago 30_16 Vosotros debéis luchar contra ésa maldad que traéis en vuestro corazón.

Rosario vespertino

 

Temas:

 

  • Aprovechad, Mis pequeños esa Gracia tan grande que os doy, cuando os he dicho que tenéis un poder grande sobre Mí, que son la oración, vuestra donación y la humildad con que hagáis todo esto.
  • Pedidle, a David, que os dé ésa confianza plena, ésa Fe plena en Mí, para que vosotros podáis enfrentaros al mal sin ningún temor, sabiendo que vais a salvar a muchas almas para Mi Reino.
  • Vosotros sabéis que vuestra mente es muy traicionera. Os he hablado, alguna vez, de que cuidéis todo lo que veáis, lo que escuchéis, lo que leáis, porque eso se puede volver en vuestra contra.
  • Cuando vosotros intercedéis, hay un crecimiento espiritual en vosotros, no os dais cuenta, pero es Mi Amor el que está trabajando a través de vosotros y os va dejando, a vosotros mismos, una Gracia muy grande.
  • La lucha espiritual debe ser continua, Mis pequeños, no os deis tiempos libres sin que no estéis luchando, satanás os ataca continuamente. Os he dicho, que tiene una gran envidia sobre vosotros, porque vosotros sí podréis entrar al Reino de los Cielos.

 

 

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

 

 

Primer Misterio. Habla Dios Padre.

Sobre: Aprovechad, Mis pequeños esa Gracia tan grande que os doy, cuando os he dicho que tenéis un poder grande sobre Mí, que son la oración, vuestra donación y la humildad con que hagáis todo esto.

Hijitos Míos, todas estas Revelaciones que estoy dando alrededor del Mundo, os demuestran, Mis pequeños, que Yo, vuestro Padre y vuestro Dios, no Me aparto de vosotros en ningún momento. Os voy anunciando, con tiempo, con anterioridad de los sucesos, que Yo estoy con vosotros y esto, os lo digo, Mis pequeños, para que vosotros podáis cambiar, que mejoréis, espiritualmente hablando, y eso, os va a ayudar, a todos vosotros, a que, los acontecimientos que se van a venir, no sean tan fuertes, tan dolorosos.

Ciertamente, un grupo pequeño puede lograr cosas grandes para todos sus hermanos, por eso, voy preparando y he ido preparando, grupos alrededor del Mundo, en la oración, en la penitencia, en el ayuno y todo aquello que os pueda acercar a Mí, para que vosotros podáis invocarMe continuamente y pueda, Yo, estar salvando almas, para que no se pierdan.  

Vosotros no os imagináis, Mis pequeños, cómo os amo y cómo hago cosas sobrenaturales, para vosotros, con tal de ganar un alma de regreso al Reino de los Cielos.

Vosotros, os he dicho, tenéis un gran poder sobre Mí, que es la oración, que es la penitencia, el ayuno. Todo lo que hagáis por vuestros hermanos, y ofreciéndoMelo a Mí, vuestro Dios, en ése momento os volvéis otros Cristos y Yo, a Mi Hijo, Le di todo y ahora estáis en ésa posición, Mis pequeños, os he pedido ser otros Cristos y muchos de vosotros lo estáis logrando con vuestra donación.

Ciertamente, conozco que os distraéis mucho, que no dais lo suficiente, pero Yo lo tomo, Mis pequeños. Sé que tenéis obligaciones de estado y que debéis cumplir con vuestras familias, con el trabajo, etc., y Yo recibo lo que vosotros Me dais, y lo recibo con mucho cariño, como un niño pequeño que le ofrece a sus padres cositas pequeñas, sin valor, pero con todo su corazón, su corazón está en ésas cositas y sus padres lo reciben como algo grande. Así estoy Yo con vosotros, Mis pequeños, lo que deis, Yo lo recibo de todo Corazón, si podéis dar más, os lo agradeceré más.

Os he pedido mucha oración para salvar almas y os lo sigo pidiendo, necesito almas. Yo, vuestro Padre y vuestro Dios, os lo digo y Mi Hijo os lo pidió en la Cruz, salvad almas, que muchas almas puedan regresar a Mí, y por eso es vuestra donación. Para eso habéis sido preparados, por años, para que, en estos momentos de tribulación, vosotros, prácticamente, no os inmutéis con lo que esté sucediendo a vuestro alrededor, sino que tendréis una postura espiritual, muy especial, para que vosotros podáis manteneros en Sabiduría y en una donación muy grande, para ir eliminando el mal que hay alrededor de vuestros hermanos y podáis salvar a muchas, muchas almas, con lo que vosotros Me pidáis.

Aprovechad, Mis pequeños esa Gracia tan grande que os doy, cuando os he dicho que tenéis un poder grande sobre Mí, que son la oración, vuestra donación y la humildad con que hagáis todo esto.

Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.

Sobre: Pedidle, a David, que os dé ésa confianza plena, ésa Fe plena en Mí, para que vosotros podáis enfrentaros al mal sin ningún temor, sabiendo que vais a salvar a muchas almas para Mi Reino.

Hijitos Míos, ciertamente, con todo lo que os he enseñado, no debierais vosotros estar preocupados, ni por el presente ni por el futuro, sois Mis hijos y Yo os he dicho que velaré por vuestras necesidades materiales y espirituales. Además, está escrito esto en las Sagradas Escrituras, que ni los pajarillos, en los campos, se preocupan de su alimento, entonces, ¿vosotros por qué os preocupáis, si sois más que los pajarillos? Así os lo he dicho, escrito está y os lo vuelvo a repetir, ¿de qué os preocupáis, Mis pequeños? ¿No Soy, acaso, vuestro Padre y vuestro Dios? Os he pedido que hagáis lo que tenéis qué hacer para servirMe, que es la transmisión de Mi Amor y salvarMe almas.

Cuando vosotros ya, realmente, os llenáis de Mi Amor, Me tenéis dentro de vosotros, lo transmitís a vuestros hermanos, les transmitís Vida, Mi Vida, que ya os transformó a vosotros. Sé que sois débiles, que dudáis, que teméis, que os afectáis con lo que está a vuestro alrededor. PedidMe, con todo vuestro corazón, ésa transformación, ésa transfiguración, que os quitará todo aquello que os hace dudar, temer y quizá, hasta dejar de ser valientes por servirMe. La cobardía no es para los hijos de Dios, ciertamente, la valentía, es una Gracia que Yo os tengo que dar, para que defendáis, con coraje, pero con amor, todo lo que viene de Mí, y sobre todo, con coraje y lucha fuerte espiritual contra satanás, que es el que, ciertamente, está detrás de todo esto, tratando de quitarMe almas. Os enfrentaréis a su maldad y saldréis victoriosos.

No os dejéis atemorizar, como David ante Goliat, un muchacho que se enfrentó al gigante y no tuvo miedo, porque él, confiaba plenamente en Mí, vuestro Dios. Pedidle, a David, que os dé ésa confianza plena, ésa Fe plena en Mí, para que vosotros podáis enfrentaros al mal sin ningún temor, sabiendo que vais a salvar a muchas almas para Mi Reino.

Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio. Habla Dios Padre.

Sobre: Vosotros sabéis que vuestra mente es muy traicionera. Os he hablado, alguna vez, de que cuidéis todo lo que veáis, lo que escuchéis, lo que leáis, porque eso se puede volver en vuestra contra.

Hijitos Míos, vosotros sabéis que vuestra mente es muy traicionera. Os he hablado, alguna vez, de que cuidéis todo lo que veáis, lo que escuchéis, lo que leáis, porque eso se puede volver en vuestra contra. Satanás sabe lo que vosotros estáis haciendo exteriormente, y él os lo puede poner como tentación en algún momento, como debilidad vuestra.

Vosotros mismos, cuando estáis viendo, oyendo, hablando, cosas que a Mí no Me gustan, que son suciedad para el alma, para vuestra mente, para vuestro corazón, eso lo aprovecha satanás y hace que se vuelva vuestro enemigo todo lo que traéis dentro de vosotros.

Vosotros estáis cargando esa maldad que, tarde o temprano, se puede volver contra vosotros y, sobre todo, quitaros el estado de Gracia.

Satanás ataca al alma durante toda su vida y hasta los últimos momentos de su agonía, tened cuidado, Mis pequeños, y para eso os he pedido, la oración y el llenaros de Mi Palabra, de los pasajes de Mi Hijo en las Sagradas Escrituras. Cuando estéis leyéndolos, acompañadLe, no Lo dejéis Sólo, acompañadLe y todo esto se os quedará más grabado y viviréis más tranquilos.

Cuando tengáis la tentación, acudid a Mi Hijo y si vosotros Le acompañasteis en las lecturas que hicisteis, Él os acompañará en ésos momentos de tribulación y os ayudará a salir adelante.

Dejad, pues, todo aquello que pueda volverse en contra vuestra en lo futuro.

Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.

Sobre: Cuando vosotros intercedéis, hay un crecimiento espiritual en vosotros, no os dais cuenta, pero es Mi Amor el que está trabajando a través de vosotros y os va dejando, a vosotros mismos, una Gracia muy grande.

Hijitos Míos, cuando se vive la plena confianza en el hogar, en la familia, los problemas de los padres los conocen los hijos y viceversa y se ayudan. Los hijos van creciendo en madurez al conocer esto, y los padres en confianza hacia los hijos. Se vuelven más unidos y se ayudan mutuamente.

Vosotros sois Mi familia, Yo confío en vosotros, porque os he ido preparando, porque sois Mi familia y habéis respondido como buenos hijos. No os imagináis cuántos corazones voy  tocando alrededor del Mundo y cuan pocas las almas que Me dejan entrar en ellas, especialmente, para cambiarles su corazón de piedra en un corazón santo, limpio, bueno.

No os imagináis, Mis pequeños, la alegría que Me dais, cuando vosotros oráis por un hermano vuestro que necesita algo, ya sea recuperación de su salud, por su salvación, por su conversión, por algún problema particular.

Cuando vosotros intercedéis, hay un crecimiento espiritual en vosotros, no os dais cuenta, pero es Mi Amor el que está trabajando a través de vosotros y os va dejando, a vosotros mismos, una Gracia muy grande, no sabíais esto y ha pasado desapercibido para vosotros. Al pedir por vuestros hermanos Mi Amor os transforma, os va haciendo más humanos y, a la vez, más divinos, si se pudiera decir así, porque os vais acercando a Mi Divinidad.

Mi Amor es lo máximo que puede tener un alma, vosotros, sin Mi Amor, no podríais sobrevivir; inmediatamente, os toma satanás, os lleva a la muerte espiritual, os destruye. Mi Amor os defiende, os hace crecer, os hace madurar, os hace ser verdaderos hijos Míos y verdaderos hermanos con vuestros hermanos en la Tierra y en el Cielo.

El alma, que sabe pedir por sus hermanos, es un alma humilde, un alma sencilla, un alma caritativa, que aprende a darse por los demás. Deja a un lado sus propios problemas y ayuda a sus hermanos en los suyos. Vosotros habéis crecido, también, gracias a ello, porque os le he pedido desde siempre: que Me deis almas. Ahora, ¿os dais cuenta cómo os he ido dando regalos espirituales, sin que vosotros lo supierais? Mis caminos son diferentes a los vuestros; Mis Regalos, no los conocéis y os voy preparando, para que podáis ser verdaderos hijos Míos en la Tierra e hijos consentidos, por toda la eternidad, en el Reino de los Cielos.

Seguid, pues, ahora que sabéis, Mis pequeños, cómo he ido pagando vuestros favores de intercesión por vuestros hermanos, seguid creciendo, dándoMe almas y, sobre todo, conviviendo con vuestros hermanos, dándoles un ejemplo grande; ellos se darán cuenta de Quien es el que está actuando en vosotros.

Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio. Habla Dios Padre.

Sobre: La lucha espiritual debe ser continua, Mis pequeños, no os deis tiempos libres sin que no estéis luchando, satanás os ataca continuamente. Os he dicho, que tiene una gran envidia sobre vosotros, porque vosotros sí podréis entrar al Reino de los Cielos.

Hijitos Míos, os he hablado antes de aquellos que le quitan la inocencia a Mis pequeños. Ciertamente, son instrumentos de satanás, porque satanás sabe, perfectamente, el Dolor que Me causa el que un adulto pueda quitarle la inocencia a un pequeñito. Además, satanás sabe que, un pequeño que está Conmigo, que Me conoce, que Me ama, sus oraciones, sus sencillas oraciones, salen desde lo más profundo de su corazón y pueden hacer grandes milagros, porque ésas almitas, están muy cerca de Mí.

Os he dicho antes que, a muchos de ésos adultos, que se han metido con Mis pequeños, más les valiera no haber nacido. Ciertamente, a todo lo largo de la historia del hombre, ha sucedido esto, porque satanás sabe, os repito, el daño que le hace a Mi Corazón.

Todas las culturas antiguas, ofrecían a satanás, sangre, corazones y, muchas veces, eran de niños. Todo esto tiene que ser purificado y ya es el tiempo, Mis pequeños, de ésta Purificación. Os lo he venido repitiendo y pocas, muy pocas almas, han comprendido la situación en la que estáis viviendo, ésta inminencia de los tiempos que estáis viviendo, donde todo será un cambio, una Purificación, una limpieza Mundial, en todos sentidos, y Universal también, para dejar, todo lo Creado, muy cercano a lo que era el Paraíso Terrenal y, digo, muy cercano, porque Adán y Eva no fueron Creados con Pecado, lo cometieron posteriormente. Vosotros, los que quedéis todavía, vuestra carne estará afectada por el Pecado Original y tendréis que luchar o tendrán que luchar contra él, aquellos que queden, con la Gracia que se os concederá, como se os ha pedido siempre, en las Sagradas Escrituras.

Os he dicho, que ésta lucha es espiritual y vosotros debéis luchar contra ésa maldad que  traéis en vuestro corazón, que, ciertamente, satanás, primeramente os la enseñó y vosotros la tomasteis para vivirla. Por eso, os decía, en el primer Misterio, que os apartarais de aquellas ocasiones, en las cuales, queda en vuestra mente, en vuestro corazón, todo lo que veis, lo que tocáis, lo que vivís y se va a vuestro pensamiento y luego de ahí, también salen en palabras. En las Sagradas Escrituras se lee que, lo que traigáis en vuestra mente y en vuestro corazón, tarde o temprano saldrá. Si no lo lográis contener o evitar, saldrá de vosotros a través de palabras, de acciones, de pensamientos y eso estará ensuciando continuamente vuestra alma y no estaréis limpios ante Mí.

La lucha espiritual debe ser continua, Mis pequeños, no os deis tiempos libres sin que no estéis luchando, satanás os ataca continuamente. Os he dicho, que tiene una gran envidia sobre vosotros, porque vosotros sí podréis entrar al Reino de los Cielos, con un arrepentimiento profundo y con la Gracia de la Confesión, pero él ya no puede y, por eso, os ataca continuamente, para destruir la Gracia, que Yo os concedo, cuando perdono vuestros pecados.

Manteneos, pues, limpios, en oración, humildes, sencillos y, al ser humildes, en esta forma, Mis Gracias, Mis Bendiciones, os protegerán más fuertemente. Confiad, confiad en Mí, Mis pequeños, llamadMe, en cualquier momento de tribulación. Os he dicho, que sois débiles y sin Mí, no podréis salir adelante, satanás os engaña muy astutamente, os conoce muy bien y os puede hacer caer fácilmente, no lo subestiméis, es muy astuto, os puede destruir, si no estáis continuamente acompañados de Mi Gracia, de Mis Bendiciones y de Mi Amor.

Gracias, Mis pequeños.