Sep 25_06 Os pido que continuamente estéis orando por los recién nacidos.

Rosario.

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Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

 

Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Los que estéis en el Reino de los Cielos gozaréis, gozaréis al grado de lo que hayáis dado.
Hijitos Míos, aún a pesar de que sabéis que las tinieblas cubren ya la Tierra, tinieblas de maldad, tinieblas satánicas que os están llevando a la muerte espiritual, recordad que siempre habrá una Luz de Esperanza para aquellos que, arrepentidos, vengan hacia Mí. Recordad al buen ladrón en la Cruz, él tuvo ése rayo de esperanza, él creyó, él estaba junto a Mí, Me vio, se enamoró de Mi Amor, pidió perdón y él entró al Cielo inmediatamente.

No tenéis por qué pues, vosotros, dudar de ése rayo de Esperanza que moverá Mi Misericordia para vuestra salvación. Vosotros tenéis el tiempo para lograr vuestra conversión, él ya estaba en la Cruz Conmigo, le faltaban pocos minutos para morir, su vida había sido un desastre, pero alcanzó el premio eterno por venir a Mí.

Ciertamente, no es lo mismo tener una vida en la cual se hagan muchos méritos, que vivir toda una vida de desastre espiritual y alcanzar la salvación en los últimos minutos, ciertamente alcanzaréis el Reino de los Cielos, a diferente nivel. Yo os consentiré en el nivel al cual lleguéis, pero buscad, buscad, Mis pequeños, llevar a cabo vuestra misión a lo largo de vuestra vida, no esperéis los últimos minutos ó segundos de vuestra vida aquí en la Tierra para querer alcanzar Mi Misericordia a través de ése rayo de Esperanza. No os queráis pasar de listos, ya os he dicho, queriendo sacarle provecho al mundo y luego quererMe sacar provecho a Mí y gozar en los dos lados, en la Tierra darle gusto a vuestro cuerpo y en el Cielo darle gusto a vuestra alma. No, Mis pequeños, la espiritualidad no trabaja así, ¿por qué no entendéis la realidad de la espiritualidad?, si le dais gusto al cuerpo, quiere decir que vuestra alma está sufriendo, está en pecado grave y eso os está llevando a un castigo que, tarde o temprano tendréis que pagar. En cambio, aquél que se mantuvo en la línea recta, en el amor, la mortificación ofrecida a Mí, la cruz de cada día ofrecida a Mí, como Yo os la ofrecí también, ése alcanzará un premio más grande, vivirá eternamente más cerca de Mí. Sabéis de los niveles o grados celestiales que hay aquí en el Reino de los Cielos, sabéis que aquél que luchó más, deberá obtener, por consecuencia, un regalo mayor que aquel que no quiso luchar mucho, eso es Justicia y Yo Soy el Justo.

Así pues, Mis pequeños, luchad, luchad por obtener no solo el pase para el Cielo, sino estar en una posición más cercana a Mi Corazón.

Vosotros tenéis aquí en la Tierra cosas similares, si trabajáis bastante y obtenéis buen dinero, obtendréis mejores cosas con vuestro dinero, pero si no trabajáis lo suficiente, entonces no os alcanzará para poder comprar cosas muy buenas. Quizá sea una mala comparación, pero así podréis entender los niveles Celestiales.

Si trabajáis para Mí, que será en vuestros hermanos durante toda vuestra vida, vuestra paga será grande. Ciertamente está también el ejemplo que tenéis del vaso pequeño y el vaso grande, serán llenados hasta el tope, pero el vaso pequeño tendrá poco de Mi Amor, pero gozaréis y el vaso grande tendrá mucho de Mi Amor y gozaréis más.

Atended a Mi llamado, Mis pequeños, cómo quisiera Yo teneros a todos vosotros juntos en Mi Corazón ya desde ahora, trabajando para Mi Reino, trabajando para la salvación de las almas, viviendo unidos como una verdadera familia Celestial ya aquí en la Tierra, para que se os haga normal el paso al Reino de los Cielos. Si vivís en el Amor, no tendréis que pasar por tribulación alguna, no dudaréis de lo que tendréis al cabo de vuestra vida terrena. Ya que terminéis vuestra misión aquí y hayáis dado mucho amor, el paso será sencillo, vuestra Fe se encargará de ello, no dudéis, Mis pequeños, acudid a Mí, vivid en Mi Amor y Yo Mismo os presentaré a Mi Padre y entraréis triunfantes en el Reino del Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Os pido por vuestros hermanos que han sido abortados espiritualmente.
Hijitos Míos, os pido por vuestros hermanos que han sido abortados espiritualmente y esto es, aquellos hermanos vuestros a los cuales, en la familia en la cual nacieron, no se les dio ningún tipo de educación religiosa.

Ésas almitas, cuando van creciendo, necesitan alimentarse, es algo natural, Mis pequeños, así como el cuerpo tiende a ésa necesidad para alimentar su cuerpo, el alma también tiende a ésa necesidad, para crecer y puede caer en errores fatales para su alma. Desgraciadamente, satanás está muy atento a ello, vosotros no os dais cuenta, pero ésas almitas que pudieron hacer mucho para ayudaros, se van a volcar hacia la maldad.

Entended bien esto, Mis pequeños, toda alma que baja a la Tierra, trae dones, virtudes, bendiciones Mías, de vuestro Dios, para levantar a éste mundo de su maldad.

Así pues, cuando ésas almitas no han sido bien guiadas, todo eso se pierde, todo ése cúmulo de bendiciones, de Gracias, de Mi Amor, se pierde. Entonces satanás toma a ésas almas como instrumentos para su maldad. En vosotros está, Mis pequeños, proteger a ésas almitas, os pido que continuamente estéis orando por los recién nacidos, por todos los pequeñitos que Yo mando a la Tierra para renovarla, porque ése es vuestro gran tesoro, los bebés que llegan a la Tierra, que vienen a renovar al mundo en el amor.

Así como van pasando los años, los bebés van bajando con capacidades mayores, para que vayáis creciendo en virtudes, en Amor, para una renovación mundial, pero si vosotros no cuidáis de ésos tesoros que Yo voy mandando, vuestra renovación se va retrasando. Entended bien esto, Mis pequeños, porque deberéis poner más cuidado en vuestros pequeños hermanitos que llegan a la Tierra, cuidadlos con vuestra oración, protegedlos con vuestro ejemplo, con vuestras enseñanzas. Si la familia en la que llegaron no tienen ése alimento espiritual qué darles a ellos, de alguna forma Yo proveo. Si os toca a alguno de vosotros tener contacto con ellos, dadles ejemplo, dadles amor, dadles guía Celestial, para que la tengan desde pequeños, para que tenga bases con qué protegerse, desde pequeños, contra los ataques satánicos cuando vayan creciendo.

Que sea una tarea de ahora en adelante para vosotros, Mis pequeños, proteger ése tesoro que Yo continuamente os estoy enviando para vuestra renovación. Entended que esto os conviene a todos vosotros, si tenéis buena materia, podréis mejoraros y ésa buena materia, son éstos bebés que Yo os envío. Es Mi Amor a través de ellos, son Mis capacidades, virtudes, Mis Bendiciones a través de ellos, consentidlos en el Amor, guiadlos hacia la perfección, ved por ellos cuando sus padres no vean por ellos. Que vuestra oración sea poderosa para protegerlos, amadles como Yo os amo a todos vosotros.
Gracias, Mis pequeños.