Ago 25_06 No os dais cuenta del gran honor que es el ser ministro Mío sobre la Tierra.

Rosario.

 

Temas:

  • Yo sigo suscitando vocaciones sacerdotales y religiosas, pero el mundo os absorbe.
  • Si no os mostráis, ¿cómo sabrán vuestros hermanos que Existo en vuestro interior?
  • Estando Conmigo podremos caminar juntos y hacer tantas cosas buenas por vuestros  hermanos.

 

Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

 

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo sigo suscitando vocaciones sacerdotales y religiosas, pero el mundo os absorbe.
Ciertamente, Mis pequeños, Yo sigo suscitando vocaciones sacerdotales y religiosas, pero el mundo os absorbe, el mundo os ha materializado tanto, que ya no tenéis tiempo para pensar en Mis necesidades, más bien pensáis en las vuestras, a tal grado de que la duda en vuestra misión surge continuamente. Ya vuestra vocación sacerdotal o religiosa queda a un lado, preferís lo monetario, lo económico a lo espiritual, vivís en una eterna lucha. Vosotros, los que estáis llamados a la misión espiritual, no os sentís a gusto con lo que hacéis, porque escogisteis, al fin y al cabo, lo que os iba a redituar bienes materiales, pero Mi llamado persiste, sentís que Me traicionáis, porque la misión permanece ahí, en vuestro corazón, Mi llamado está ahí, pero vosotros lo habéis acallado con las cosas del mundo.

Yo sigo tocando corazones, pero el mundo los acalla, Yo sigo buscando quién pueda ser un nuevo Cristo sobre la Tierra, pero satanás os tapa los oídos, vuestra mente y vuestro corazón, el mundo se ha vuelto muy materialista. No os dais cuenta del gran honor que es el ser ministro Mío sobre la Tierra, son pocos los que tienen ésta Gracia especial y la desperdiciáis por las cosas del mundo.

Mis pequeños, estáis limitando Mi Gracia sobre la Tierra, tantos, tantos países que tienen éstos faltantes, algunos de vosotros tenéis Misa todos los días, podéis tomarMe continuamente, diario, si así lo queréis, pero hay en otros lugares en donde faltan sacerdotes, religiosas, laicos comprometidos, se ven lugares desérticos, espiritualmente hablando. Pero por otro lado, son países o lugares donde tienen abundancia económica, por eso Me hacen a un lado, porque no les falta lo económico, creen que lo espiritual se tiene que buscar cuando se tienen problemas, no Me comparten sus gustos, sino solamente se allegan a Mí con sus problemas, Me han vuelto solamente un Dios para resolverles problemas, ya no Soy el Padre o el Hermano, que podemos compartir una vida entera con vosotros, con vuestro gustos, con vuestras alegrías, con vuestros logros, solamente estamos para resolver vuestros problemas, eso no es justo, Mis pequeños, ni vosotros estaríais a gusto con ello si nada más os trataran así vuestros hermanos.

Compartid, compartid Conmigo, en Mi Santísima Trinidad de los bienes que recibís gratuitamente, tenéis todo, tenéis de todo, dejad que las vocaciones también se den entre vosotros, no las limitéis, no las neguéis, porque llegará el tiempo en que buscaréis y no hallaréis, lloraréis por la necesidad de un sacerdote junto a vosotros y os daréis cuenta que quizá vosotros mismos negasteis la vocación de alguien cercano a vosotros y por vuestra culpa quizá no recibiréis a tiempo el perdón de vuestros pecados y por ello, podréis condenaros.

Dejad que Mi Plan Divino se de entre vosotros, Yo Soy vuestro Dios y sé lo que necesitáis para que todo esté en equilibrio. No echéis a perder lo que Yo he planeado para vosotros, Mis hijos. Yo Soy el Sabio y el Perfecto y Yo sé lo que necesitáis en cada momento, dejadMe a Mí actuar por vosotros. Sed como niños, os pedía Mi Hijo y esto es, vivir en Mi confianza, vivir dejándoMe a Mí cuidaros, llevándoos de la mano, vosotros, trabajando para Mí, Yo, cuidándoos completamente, ¿acaso no sentís que esto sea más fácil y más llevadero en vuestra vida? Tratad, dejadMe y veréis que es así, tendréis una vida más llevadera, estaréis más contentos, viviréis más a gusto, Yo, vuestro Dios, vosotros Mi pueblo, Mis pequeños, Mis consentidos.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Si no os mostráis, ¿cómo sabrán vuestros hermanos que Existo en vuestro interior?
Hijitos Míos, la finalidad de Mi Presencia entre vosotros aquí en la Tierra, fue la de dar ejemplo. No es lo mismo dictar una conferencia muy bella, llena de palabras hermosas, pero que no tengan trascendencia con el ejemplo, que aquél que no dice ni una sola palabra, pero su ejemplo lo dice todo.

Sí, Mis pequeños, Yo, siendo Dios, vine a daros una forma de vida completa, fueron Mis Palabras hechas ejemplo, prediqué lo que vosotros debíais hacer, pero Yo Mismo tomé Mis Palabras y las llevé a cabo, para que vierais que sí se podía obrar de acuerdo a lo que Yo estaba predicando.

Muchos, muchos de vosotros tenéis buen corazón, habláis de cosas bellas, pero a la hora de dar ejemplo, todo lo bello que tenéis en vuestro corazón, queda guardado y es cuando no dais el ejemplo debido y de esa forma hacéis que vuestros hermanos queden confundidos, porque habláis de una forma y actuáis de otra, no sois congruentes, no lleváis una vida única, lleváis dos vidas, la interna y la externa.

No, Mis pequeños, si estáis viviéndoMe, en vuestro corazón, Me debéis vivir también en vuestro exterior, eso es lo difícil. Cuando el medio en el que estéis no quiera saber de Mí  es donde ya vosotros no queréis dar ejemplo, porque no os conviene, como os decía recientemente, vosotros mismos tenéis miedo de que se os ataque. No, Mis pequeños, si Yo estoy con vosotros, estoy con vosotros todo el tiempo, Yo os protegeré, Yo os guiaré. Si caéis, os levantaré, si estáis trabajando para Mí, Yo trabajaré para vosotros y no os dejaré caer en confusión ni dejaré que se burlen de vosotros, porque Yo estoy en vosotros, seré Presencia Viva en vosotros. Necesito en éstos tiempos Mi Presencia entre vuestros hermanos, ¿quién podrá salir a mostrarse ante los demás llevando Mi Presencia, su interior, que Soy Yo y mostrarse y mostrarMe a sus hermanos?

Estad Conmigo, Mis pequeños, que Yo estaré con vosotros, no os imagináis cuántos, cuántos de vuestros hermanos necesitan ver una Luz en el camino, están tan llenos de obscuridad, necesitan ésa mano amorosa, ése consejo que les ayude a seguir adelante, que les levante el ánimo, que les enseñe, que les quite la duda, que les dé comprensión. Si vosotros no os mostráis como debéis mostraros, mostrándoMe a Mí, ¿de qué os sirve un interior bello, si no estáis mostrando ése brillante Divino que tenéis en vuestro interior, que Soy Yo?

Para eso estáis sobre la Tierra, para mostrarMe a vuestros hermanos y ayudarles como Yo lo hacía cuando vivía entre vosotros. Si no os mostráis, ¿cómo sabrán vuestros hermanos que Existo en vuestro interior?, ayudadles, ayudándoMe a Mí.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio,  Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Estando Conmigo podremos caminar juntos y hacer tantas cosas buenas por vuestros  hermanos.
Hijitos Míos, quisiera invitaros a caminar Conmigo, que vinierais Conmigo por ésos caminos por los que caminé, que tomarais Mis Pies, Mis Brazos, Mis Manos, Mi Cuerpo, todo Mi Ser. Que vierais a todos aquellos pobres, necesitados, enfermos, endemoniados, leprosos que se acercaban a Mí. Que tuvierais ésa Caridad para con todos ellos, que vierais y sintierais junto Conmigo, su necesidad y que sintierais ése amor hacia ellos y Mi Poder para poderlos salvar, poderlos aliviar, poderles quitar ésos demonios y aún poderlos resucitar. Cómo quisiera que Me acompañarais y sintierais en vuestro corazón ésos agradecimientos de las madres atribuladas, cuando en su agradecimiento, sus lágrimas corrían abundantemente al ver al hijo sano, al hijo resucitado, al hijo inválido nuevamente caminando, al esposo sano de sus vicios, de sus tribulaciones, de su maldad. Las mujeres adúlteras, a las mujeres que fallaban en sus matrimonios, en su vida, que se acercaban avergonzadas, que regresaban a Mí, agradecidas. Como quisiera que vosotros sintierais esto, éstos agradecimientos, éstos cambios de vida que prometían y que muchos de ellos cumplieron.

Sí, Mis pequeños, esto es alentador y esto es lo que hace que el que está Conmigo siga adelante con su labor porque viven, viven los Milagros que Yo hice y que es Promesa Mía, que aquellos que estén Conmigo también los van a poder realizar.

Sí, Mis pequeños, estando Conmigo podremos caminar juntos y hacer tantas cosas buenas por vuestros  hermanos. Sí, Mis pequeños, lo único que necesito es vuestra voluntad donada a Mí vuestro Dios, vuestro Hermano.

¡Cuantas alegrías os están esperando!, ciertamente ataques también, tribulaciones del mismo satanás, que no quiere Mi Presencia en su reino, en su reino aquí en la Tierra, reino que tiene que cambiar, tiene que ser destruido por el Amor que vosotros mismos debéis producir al transmitirMe y llenar los corazones de vuestros hermanos, ¡cuánto bien podríais hacer!

¡Os estáis perdiendo de tanto, Mis pequeños!, al no convivir Conmigo os afanáis por cosas del mundo, ciertamente buenas y bellas muchas de ellas, porque también han sido creadas por vuestro Dios, pero os afanáis demasiado por obtenerlas y ponéis toda vuestra energía en ello y desperdiciáis los bienes mas grandes, los bienes espirituales los ponéis en segundo plano. Y así pasáis toda una vida, poniendo todo vuestro interés por las cosas del mundo y cuando el tiempo se acerca a su fin, os acordáis que existo Yo, vuestro Dios y queréis apurar vuestro caminar, queréis recuperar el tiempo perdido, porque Yo permito que vuestra conciencia os haga recapacitar sobre vuestra misión, y es cuando os dais cuenta de que desperdiciasteis toda una vida por buscar lo que no iba a servir, tanto para vosotros como para vuestros hermanos, quedasteis  bien ante el mundo, pero os presentaréis con las manos vacías ante vuestro Creador, ¿de que os sirvió haber ganado el mundo si perdisteis la Joya más bella que pudisteis haber ganado?
Gracias mis pequeños.