Ago 22_06 Todas las almas que bajan a la Tierra tienen derecho a la vida eterna.

Rosario.

Temas:

  • Es un premio que Yo le doy al alma poder bajar a la a Tierra a servirMe y a ser más grande, al llenarse de méritos.
  • Vosotros necesitáis de Mí, no de las cosas del mundo, éstas vienen por añadidura, al tenerMe a Mí, tenéis todo.
  • El Bien que tengo para cada uno de vosotros es inimaginablemente bello, gozaréis como ni siquiera os lo imagináis.

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Es un premio que Yo le doy al alma poder bajar a la a Tierra a servirMe y a ser más grande, al llenarse de méritos.
Hijitos Míos, Mis pequeños, vivís en un error y así os lo transmiten hermanos vuestros que viven en el error, que creéis que el paso por la Tierra es por un momento que termina en ése momento y que vuestra alma no tiene trascendencia.

Ciertamente venís a cumplir una misión, una misión muy grande para el Reino de los Cielos, vuestra vida es importantísima aquí sobre la Tierra, porque compartiréis la Vida de Mi Hijo, la Salvación por el género humano, seréis otros Cristos. Una misión muy grande para vosotros, Mis pequeños, poder ser considerados otros Cristos, porque estaréis salvando almas con vuestra misión.

Cuando termináis, cuando morís, como decís, no termina ahí vuestra vida, prosigue en la eternidad, con el premio o el castigo que vosotros os hayáis ganado con vuestra actuación aquí en la Tierra.

Sí, Mis pequeños, es un premio que Yo le doy al alma poder bajar a la a Tierra, a servirMe y a ser más grande, al llenarse de méritos, para ser glorificada en el Reino de los Cielos, una oportunidad que muy pocas almas, a lo largo de su vida, toman en cuenta, no agradecen y sobre todo, no aprovechan al máximo. Por otro lado, todas las almas que bajan a la Tierra tienen derecho a la vida eterna, ninguna, ninguna, Mis pequeños ha sido llamada para nacer y perderse, a todos vosotros, se os da la oportunidad de trabajar para Mí, para vuestro Dios, sirviendo a vuestros hermanos, ayudándoles a crecer espiritualmente.

El servicio a los demás, con lo que vosotros tenéis, con los dones que concedo a cada uno de vosotros, es lo que hace al alma grande, el servir, no el ser servido. Eso os lo enseñó Mi Hijo, cuando os dijo: “el que quiera ser grande en el Reino de los Cielos, que sea el más pequeñito, el servidor de los demás aquí en la Tierra” y también de eso muy pocos se dan cuenta aquí en la Tierra. Ciertamente es más fácil ser servido, es más cómodo, se aprovechan unos de los otros y no quieren ser ésos servidores que buscan el bien para sus hermanos.

Darse, Mis pequeños, es un acto de amor, es una acto de donación y esa fue la Vida de Mi Hijo, continuamente fueron actos de donación. Tenéis la Vida de Mi Hijo como ejemplo para vuestra vida, donación continua, desde el amanecer hasta el anochecer y aún, el anochecer, muchas noches, era donación en oración por vosotros. Sí, Mis pequeños, muchos, mientras descansáis, otros se mantienen en vela para vuestra salvación.

Manteneos pues, también vosotros en ésa ayuda, en ése servicio para salvar almas, ésa es vuestra vocación real, salvación, trabajo por los demás, vida que debéis vosotros donar, vuestra propia vida para la salvación por vuestros hermanos. Daos en totalidad aquí en la Tierra y Yo Me daré en totalidad por vosotros por toda la eternidad.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros necesitáis de Mí, no de las cosas del mundo, éstas vienen por añadidura, al tenerMe a Mí, tenéis todo.
Hijitos Míos, en las Escrituras leéis ¿qué acaso un padre da a su hijo un alimento malo cuando se acerca a pedírselo?, ¿acaso le dará una víbora cuando le pida un pan?, no Mis pequeños, el padre siempre dará lo mejor al hijo, por eso os he dicho tantas veces que os acerquéis a Mí, que Me pidáis y nunca, nunca dejaréis de tener Mi Alimento. Mi respuesta a vuestra petición será la ayuda a vuestra necesidad, pero deberéis venir a Mí, confiados en que recibiréis lo que pidáis, siempre y cuando sea para vuestro bien.

Estáis tan alejados de lo espiritual, Mis pequeños, que buscáis de lo material solamente. Satanás, ésa es la forma en como actúa, os quita lo material, permito que así sea, para que vosotros busquéis de lo espiritual, pero muchos de vosotros estáis tan allegados a las cosas materiales, que os encadenáis a ellas y no las soltáis, pedís y pedís y lloráis aún por ellas que no os acordáis de que la mejor forma de llegar a Mí, es precisamente a través de lo espiritual. “¿De qué os sirve ganar el mundo, tener el mundo entero, si vais a perder vuestra alma?”, también las Escrituras os lo dicen, y Yo como Padre amoroso, también tengo que ver por la salvación de vuestra alma, tengo que estar cuidándoos, Mis pequeños.

A veces una prueba difícil, que permito que os ponga satanás, que os quite de vuestra vida, aquél o aquellas cosas materiales en las cuales vosotros estáis tan arraigados, va a hacer que vosotros reaccionéis y volváis a lo que son los verdaderos valores para vuestra alma, pero muchas veces, no solamente no regresaréis, sino Me rechazaréis más, porque sentiréis que no cumplo con lo que prometo, que es daros lo material, siendo que si os lo concedo, os va a perjudicar más. Buscáis demasiado del mundo y muchas veces el mundo os ahoga y os lleva a la perdición y no os estáis dando cuenta, Mis pequeños, tenéis que reaccionar ¡ya!, antes de que sea demasiado tarde para vuestra alma.

Vosotros necesitáis de Mí, no de las cosas del mundo, éstas vienen por añadidura, al tenerMe a Mí, tenéis todo, Mis pequeños, os lo he repetido muchas veces, se os olvida, porque os preocupáis demasiado por las cosas del mundo y se os olvida que Yo Soy el Creador de todo y Yo os puedo dar en el momento que convenga más lo que necesitáis de lo material. No estáis buscando lo más importante para vuestra vida actual y futura. Os he dicho que vuestra misión es espiritual, ¿cómo vais a dar a vuestros hermanos lo que no tenéis, si no estáis llenos, llenos de vida espiritual, ¿qué vais a dar a vuestros hermanos?, un trabajador tiene que estar bien preparado en lo que va a trabajar, vosotros no estáis bien preparados, vuestra misión es espiritual y no estáis preparados en lo espiritual, entendedlo, Mis pequeños. A eso habéis venido y quiero que estéis preparados en lo espiritual, satanás os desvía y os lleva a vivir una vida material totalmente, vivís de lo material, habláis de lo material, presumís de lo material, todo, vuestra plática, vida, estancia, es de lo material, ¿vosotros creéis que con eso podréis  ayudar a vuestros hermanos a salvarse?, ¡no!, Mis pequeños. Poneos un momento en Mi lugar y ved a las almas, las almas necesitan alimento espiritual, necesitan amor, necesitan vida, necesitan virtud, ¿vosotros creéis que hablándoles de lo material, con eso les ayudaréis?, no, Mis pequeños, sed concientes de la realidad, estáis para trabajar para vuestro Dios, Yo Soy un Dios Espiritual, un Dios de Amor, un Dios de virtudes para las almas.

Os vuelvo a repetir, venid a Mí, buscadMe, llenaos de Mí, y dad Mi Alimento a vuestros hermanos y lo demás se os dará por añadidura.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: El Bien que tengo para cada uno de vosotros es inimaginablemente bello, gozaréis como ni siquiera os lo imagináis.
Hijitos Míos, cuando vosotros tenéis una meta en vuestra vida, cuando tenéis un ideal, lucháis por él, aunque se os interpongan infinidad de cosas, vosotros os mantenéis en ése ideal y pasáis por todos los obstáculos que se os atraviesen, lucháis, trabajáis y no importa lo que pase, pero lo lográis.

Recordad las palabras de San Pablo, cuando dice: “ni el ojo vio ni el oído oyó lo que Dios tiene preparado para nosotros” refiriéndose al Cielo, a ése regalo que le tengo a las almas.

Mis pequeños, no os podéis imaginar siquiera lo que tengo preparado para vosotros, no os podéis imaginar lo bello. Imaginad en la época antigua, primitiva, si de repente se pudiera tomar a una de ésas personas primitivas y ponerla en estos tiempos, que viera árboles frondosos, coches caminando, aviones volando, barcos en altamar, todo bien cuidado, televisiones, todo lo moderno, sería extremadamente bello para él, inimaginable. Para vosotros es normal, porque vivís en ello, pero para ésa gente primitiva sería extraordinario.

Ahora, para vosotros, el Reino de los Cielos es algo fuera de toda imaginación, es algo extremadamente bello, grande, vuestras capacidades todavía no alcanzan a comprender tanta belleza, porque no existe en vuestra mente, en vuestra inteligencia lo que Yo os voy a dar. Es la Fe la que debe haceros seguir adelante y buscar ése bien que Yo os tengo prometido. Tenéis el aliento que ya os dio San Pablo, de que Yo os voy a dar algo inmensamente grande, inimaginable.

Seguid adelante pues, Mis pequeños, buscando no solamente para vosotros ése bien, sino para vuestros hermanos

Yo Soy un Dios de Vida, Yo Soy un Dios que continuamente estoy dándole al alma, a la que amo, sentimientos bellos, grandes. El alma que ha sentido Mi Amor, a la que consiento, porque ella Me está siguiendo, porque hace lo que Yo le pido, porque ella vive en Mí, sabe de lo que hablo y sabe cómo pago cuando realmente estáis Conmigo.

Por eso, Mis pequeños, os pido que os mantengáis con Fe y con Amor buscando Mi Bien para vuestros hermanos y para vosotros mismos.

Os vuelvo a repetir, el Bien que tengo para cada uno de vosotros es inimaginablemente bello, gozaréis como ni siquiera os lo imagináis. Manteneos pues, en ése ideal, de que trabajando para Mí, para vuestro Dios, vais a obtener un regalo inmensamente grande, más allá de lo que vuestras capacidades puedan entender, os lo aseguro. Luchad Mis pequeños por ése ideal.
Gracias, Mis pequeños.