Mensaje – a media noche
Mensaje de Dios Padre a J. V.
Habla Dios Padre.
Sobre: ¿cómo concebiríais cada uno de vosotros un Mundo ideal?
Quisiera haceros una pregunta para que cada uno se la pueda contestar en lo personal, ¿cómo concebiríais cada uno de vosotros un Mundo ideal?
Lo primero en lo que pensáis, normalmente, va en la línea de la protección de vuestra persona, la de los vuestros y de vuestros intereses y por eso habláis del tener paz. Insistís y es verdad, que uno de los principales elementos para tener un mundo mejor es el que se viva en paz, no más guerras, no más asaltos, no más abusos de los poderosos contra los débiles, no más luchas fraternas, no más pleitos entre vecinos, no más problemas dentro del hogar, etc.
La falta de paz produce toda una serie de afectaciones, tanto emocionales como de relación entre vosotros, si no tenéis paz a vuestro alrededor no os podéis desenvolver perfectamente.
Un mundo ideal, podrías añadir, necesita una buena dosis de amor, también proclamáis. Si no hay amor en vuestras obras, si no hay un deseo bueno con ayudar al prójimo, si no hay una verdadera donación de uno mismo por ayudar a un semejante, no produce buenos frutos de amor. Sin amor no os desenvolvéis integralmente. Cuando tenéis amor desde el inicio de vuestra vida, contáis con una gran seguridad en el actuar y en el vivir, porque os sentís respaldados, os sentís seguros, porque sabéis que contáis con alguien que os ama y que quiere lo mejor para vosotros, esto no sucede con aquellos que no han sido amados verdaderamente desde bebés, crecen inseguros, con problemas emocionales y con muchos rencores, así no se puede desenvolver un alma perfectamente.
En un mundo ideal, al estar habitado por infinidad de seres semejantes a vosotros y de diferente manera de pensar, podríais decir que sería imposible unificar criterios para no pelear por cosas esenciales y así vivir en armonía.
La pauta a esto os la dio Mi Hijo Jesucristo y es la donación de uno mismo para el bien del prójimo. Os he dicho que si cada uno de vosotros, como células del Cuerpo Místico de Mi Hijo, vierais constantemente cómo ayudar a vuestro prójimo con el don que os tocó en lo personal, viviríais más tranquilos y más seguros porque estaríais dotando de la parte faltante a vuestros hermanos y ellos a cada uno de vosotros, de tal manera que todos os desarrollaríais al máximo y así, uniendo fuerzas, lograríais obtener capacidades inimaginables.
En resumen, para llegar a obtener un Mundo ideal no bastaría con que Yo, vuestro Dios os diera el lugar con grandes bellezas y con grandes riquezas, que de hecho es lo que os di ya en un Principio, os di un hogar Terrestre bellísimo y sabéis que dentro del Sistema Solar, la Tierra es el planeta más bello, el lugar lo tenéis, pero para mantenerlo bello, os pedía cuidarlo, pero no es solo la Naturaleza lo que cuenta para tener un lugar bello, sino el actuar y el vivir de cada uno de vosotros que habita en la Tierra. Podéis tener un lugar bello pero sin paz y amor de nada sirve el vivir ahí y eso solo se logra en lo personal.
Cada uno de vosotros es y debe ser, autor de un Mundo ideal, si no producís paz, afectáis la estabilidad emocional de todos los que os rodean. Si no producís amor, todos los que estén a vuestro alrededor no se desarrollarán satisfactoriamente, lo cual provocará una cadena de desastres y si no os dais a los demás para ayudarlos a crecer y a dar su máximo, estáis produciendo un mundo mediocre, sin vida real, todo ficticio, sin desarrollo a su máximo.
Ahora os pido que meditéis todo esto y realmente os contestéis honestamente, hasta dónde estáis contribuyendo a lograr un “Mundo Ideal”, ¿estáis cumpliendo, ya no satisfactoriamente, sino perfectamente, con el papel que os toca vivir en éste Mundo?, ¿Os estáis juzgando primeramente en lo personal antes de hacerlo con vuestro prójimo?, ¿Queréis realmente crear un Mundo Ideal ó queréis permanecer en la pocilga que habéis creado por vuestra irresponsabilidad?
Mis pequeños, Yo ya hice Mi parte, os di un Mundo bello, con todo lo necesario como para vivir como hijos del Rey, si vivís como mendigos es vuestra culpa, de vosotros depende regresar a la dignidad que os merecéis por ser hijos Míos, el Rey del Universo. Os amo, Mis pequeños.