Mayo 11_05 Estáis en la batalla, pero estáis del lado vencedor si os mantenéis Conmigo.

Rosario.

Temas:

  • Al haberos escogido para que vinierais a servirMe a la Tierra, Mi Bendición es para transmitir Vida espiritual, Mis Leyes y Mandamientos, y sobre todo Mi Amor, para que éste tiempo fuera el escalón anterior de los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas.
  • ¿Qué hicisteis con las almitas que Yo puse en vuestro camino?
  • Las almas continuamente están recibiendo mensajes de Mi Corazón,  pero cuando un alma cierra su corazón y no quiere escuchar Mi Voz, no la puedo obligar al cambio.
  • Las almas sencillas que han aceptado el cambio, viven el éxtasis de Amor, viven el éxtasis del Cielo, aún aquí en la Tierra.
  • Esta sola vez en la que estáis aquí en la Tierra para servirMe, debe de dar mucho fruto. Y fuisteis escogidos porque así Me lo pedisteis.

 

Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo, a J. V.

Primer Misterio,  Habla Dios Padre.
Sobre: Al haberos escogido para que vinierais a servirMe a la Tierra, Mi Bendición es para transmitir Vida espiritual, Mis Leyes y Mandamientos, y sobre todo Mi Amor, para que éste tiempo fuera el escalón anterior de los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas.
Hijitos Míos, os he hablado tanto de la Humildad. Tenéis las Palabras de Mi Hija “He aquí la Esclava del Señor, hágase en Mí, según Tu Palabra”, tenéis las palabras del Profeta “He aquí a Tu siervo, Tu siervo escucha”.

Mis pequeños, ésa es la posición que debéis tener siempre con vuestro Dios. Estáis sirviendo a vuestro Dios, pero no como sirviente, no como asalariado, sino como hijo, con gusto, porque al servirMe, Me dais gusto. El asalariado hace las cosas porque le conviene, porque va a recibir un salario, va a recibir una remuneración monetaria al servicio que va a dar a su amo. Ciertamente hay sirvientes que aman al amo, pero de cualquier manera, la remuneración monetaria, al final contará también para ellos.

En cambio el hijo, que ya tiene asegurado su reino, que ya tiene asegurada la paga, por ser hijo del Rey, ya no va a necesitar mover vuestro corazón por la paga, sino su corazón se va a mover por el amor, por el servicio que va a hacer a su Padre, a su Dios, sabiendo que con ello le va a agradar y eso, para él cuenta mucho.

Mis pequeños, debéis manteneros en ésa ley de servicio, de servicio en el Amor, dejando que sea Yo, vuestro Dios el que mueva su corazón, el que os indique qué debéis hacer por Mí.

Sois Mis instrumentos en la Tierra, sois Mis apóstoles, Mis enviados de éste tiempo, daos cuenta de ésta dignidad tan grande que tenéis para Conmigo, no es cualquier cosa ser un apóstol ó un enviado en éste tiempo y todos vosotros, los que habéis aceptado, en la religión, ser bautizados, tenéis ésta obligación. Pero como os digo, más que obligación, debéis tomarlo como Gracia especial.

Al haberos escogido para que vinierais a servirMe a la Tierra, se os dio ésta Bendición, la de transmitir Vida espiritual, de transmitir Salvación, de transmitir Mis Leyes y Mandamientos, como también lo hizo Mi Hijo y sobre todo transmitir Mi Amor, para que éste tiempo fuera el escalón anterior de los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas.

Os vuelvo a repetir, daos cuenta de la dignidad tan grande que estoy permitiendo en vuestra alma, vais a preparar a las almas para que entren al Nuevo Reino del Amor.

AgradecedMe que os haya escogido para éste tiempo, porque tendréis un Premio especial, porque ciertamente el tiempo será muy difícil. El demonio, sabiendo todo esto, no querrá que muchas almas pasen a ése Nuevo Reino escogido para las almas buenas, para las almas escogidas, que serán el germen de éste Reino en la Tierra y sobre todo, también atacará a todas aquellas almas que lucharán contra las huestes del mal que tratarán de evitar la Salvación eterna de muchas almas.

Sí, estáis en la batalla, pero estáis del lado vencedor si os mantenéis Conmigo, con vuestro Dios, si os mantenéis en estado de  Gracia, si os mantenéis viviendo la Vida que Yo os he dado y las Enseñanzas que os dio Mi Hijo. Contáis con Nuestra ayuda, con el apoyo definitivo de Mi Hija, la Siempre Virgen María, de los Ángeles y de los Santos, de las Benditas ánimas del Purgatorio, toda ésta oración que se da por vosotros, va a hacer apoyo fuerte para éstos momentos de lucha, en donde no deberéis temer, sino os deberéis presentar valientemente ante el enemigo, para que con vuestra sola presencia, que será la Mía, podáis vencer y levantar a muchas almas a su salvación y a su vida eterna.

Agradeced, Mis pequeños, éstos mementos, momentos de cambio, momentos de Juicio, momentos de tribulación espiritual, pero que darán paso a las Promesas bellísimas que se os han dado desde antiguo.

Yo os Bendigo, Mis pequeños, y os pido que no solamente os mantengáis, sino que  mejoréis en vuestra vida interior y en el actuar en el Amor, en la unión fraterna, para que deis muchos frutos para el Reino de vuestro Dios, para Mi Reino, al cual pertenecéis todos vosotros y vuestros hermanos.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: ¿Qué hicisteis con las almitas que Yo puse en vuestro camino?
Hijitos Míos, al deciros, “sed como niños” Yo estoy buscando vuestro potencial.

El potencial que he puesto en vuestra alma es inmenso, es inconmensurable y el niño que apenas empieza a abrirse al mundo, si su alma se llena de buenas cosas, si las bases que se le dan a su alma, que todavía es limpia, que está empezando su comportamiento aquí en la Tierra, es soportado con buenas columnas en la Gracia, en amor, que son los cimientos que ponéis vosotros, darán una estructura fortísima a ésas almas, podrán lidiar contra la maldad, contra la duda, contra la desesperanza, contra todo pecado, porque ya la base que pusisteis en el corazón, en el alma, en la mente de Mis niños pequeñitos, les darán ése soporte fuerte contra las adversidades del mal durante toda su vida.

Por eso es importantísimo que los padres tengan éstos soportes espirituales, ésta vida en la Virtud, ésta vida en el amor, su vida en la Gracia, para que puedan ellos transmitir y hacer vivir en sus hijos todos éstos tesoros.

Ahorita no os dais cuenta de lo que vosotros hacéis en un alma buena, es una esponja que está absorbiendo todo lo que está a su alrededor. Las almas son buenas en un principio, porque Yo todo lo que creo es bueno y está en vosotros acrecentar la bondad, la virtud y el amor ó destruir a éstas pequeñas almitas.

Por eso el compromiso que tenéis al recibir a un niño, a un hijo, a un alma en vuestro hogar, es tremendo, es un compromiso Conmigo, vuestro Dios, un compromiso del cual seréis juzgados ¿Qué hicisteis con las almitas que Yo puse en vuestro camino? y no solamente hablo de los hijos que tengáis en familia, sino de todas aquellas almitas pequeñitas a las cuales daréis un buen ó mal ejemplo.

La misión que tenéis en la Tierra es muy delicada, vuestro ejemplo puede construir ó destruir para siempre. Por eso os he pedido tanto ésa vida en la Gracia, la oración continua Conmigo, que eso os asegurará vuestra correcta actuación en el mundo.

Vosotros fuisteis niños también y recordaréis malos momentos y buenos momentos de vuestra infancia, podréis tener veinte, cuarenta, sesenta, ochenta años, pero aún seguiréis recordando aquello que en vuestra infancia marcó toda vuestra vida. Y a eso Me refiero, Mis pequeños, cuando os digo que el compromiso que tenéis al recibir un almita en vuestro hogar, es muy delicado, porque el fruto que dará ésa alma será bueno ó será malo, según lo adquirido por vosotros y por los que los rodeen.

Debéis proteger a vuestros pequeños con la oración,  con el buen ejemplo, con la vida íntima que les deis. Enseñadles a platicar Conmigo, su Dios y así aseguraréis almas, almas buenas, almas santas, que cambiarán el mundo.

Si vivís en el amor y lo transmitís, aseguraréis Mi Reino sobre la Tierra. Contad Conmigo, vuestro Dios, implorad Mi ayuda para que podáis ser buenos educadores en la Fe y en el amor.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Las almas continuamente están recibiendo mensajes de Mi Corazón,  pero cuando un alma cierra su corazón y no quiere escuchar Mi Voz, no la puedo obligar al cambio.
Mis pequeños, al vivir en la virtud, al vivir en el amor, estáis asegurando el dar buen fruto.

Jesucristo, en Su Predicación os dijo que, el árbol bueno da buenos frutos, que el árbol malo da malos frutos. Y así, las almas que viven en la virtud y en el amor, son ésos árboles buenos, que serán frondosos, que serán bellos, que darán sombra y el fruto que darán será alimento fuerte para el alma.

Cuando vosotros os acercáis a almas escogidas, a almas que han entendido Mi Mensaje, a almas que se han alimentado bien con los bienes del Cielo, vosotros recogéis buenos frutos, llenáis vuestro corazón y vuestra alma con sus frutos. En una palabra, os sentís bien, os sentís reconfortados, vivís a gusto con ésas almas, porque estáis recibiendo vida, vida espiritual, que hace que todo vuestro ser se sienta bien. Todos vosotros, tenéis ésa obligación, porque ésa es la Santidad de las almas, llenarse de vida, para poderla transmitir después. Estáis llamados a la Santidad, para ir cambiando a éste mundo de maldad por un mundo de amor, por un mundo de Cielo.

Todos vosotros, que vivís ahora sobre la Tierra, los que han vivido y vivirán, fuisteis escogidos para ello. Desgraciadamente, es la concupiscencia, la maldad de la carne, vuestra debilidad en la oración y en vuestra donación, lo que hace que las almas desperdicien su misión sobre la Tierra.
Y os digo desperdicien, porque se os da ésta oportunidad para engrandeceros más en el Reino de los Cielos, para que vuestra Gloria eterna sea más agradable. Desperdiciáis el tiempo que se os da para servir a vuestro Dios y en cambio, servís al enemigo.

De cualquier manera, Mis pequeños, sabéis que os amo y buscaré la recuperación de vuestra alma hasta el último segundo de vuestra vida.

Las almas son débiles, las almas caen en el error cuando se apartan de la oración, cuando se apartan del estado de Gracia, cuando se apartan de ésa vida íntima Conmigo, de donde debéis tomar para guiar vuestra vida y la de vuestros hermanos, para normar vuestra existencia espiritual en el Tierra.

La debilidad viene de vosotros, no de Mí, Mis pequeños, Yo Soy Fuente de Amor, Yo Soy Fuente de Vida, Yo Soy Fuente de Luz y estáis en libertad total de venir a Mí ó de rechazarMe, el alma se pierde por su libre albedrío. Las almas continuamente están recibiendo mensajes de Mi Corazón, para que regresen a Mí, para que dejen el mal camino, pero cuando un alma cierra su corazón y no quiere escuchar Mi Voz, no la puedo obligar al cambio. Ciertamente, seguiré insistiendo, os pondré recordatorios en vuestro camino, haré lo imposible por regresaros al Reino al cuál pertenecéis, al Reino de los Cielos.

Para el alma que no quiere entender Mis ruegos y persiste en su error, destrozando, no solamente su alma, sino la de sus hermanos, no pueden tener premio eterno.

Sufro por ésas almas, porque Me dan la espalda,  no reconocen tanto Amor que he puesto en ellas, no reconocen la Sangre Salvadora de Mi Hijo que se derramó sobre ellas, no reconocen los esfuerzos del Cielo y Sus oraciones por su salvación. Son almas ingratas que no saben agradecer tanto bien que se derrama sobre ellas. La ingratitud es un error muy común en el hombre. Aquellos que no viven ésa intimidad Conmigo, con su Padre, con su Dios, con su Creador, las almas ingratas, generalmente, terminan mal, porque no reconocen todo éste Amor y éste trabajo, toda ésta donación que se da en ellas.

Orad por ellas, Mis pequeños, Mis hijos, Mis consentidos. Orad por ellas.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Las almas sencillas que han aceptado el cambio, viven el éxtasis de Amor, viven el éxtasis del Cielo, aún aquí en la Tierra.
Pequeños Míos, vuestra alma siempre debe estar deseosa de encontrar la Perfección. Cuando Yo os digo que vuestra alma debe ser perfecta, con ello estaréis buscando la Santidad. Al ser perfecta, al ser santa, daréis mucho fruto.

No es lo mismo el fruto que da un niño con conocimientos elementales, a aquél que ha estudiado maestrías ó doctorados.

Mis pequeños, la santidad, la perfección, os lleva a ello, a tener maestría ó doctorado en espiritualidad. Mientras más conocéis de Mi Amor, mientras más conocéis de Mis obras, mientras más conocéis de Mi Vida, vais a ser nuevos Cristos, almas que necesito que caminen ahora sobre la Tierra, almas en las cuales Yo Me pueda mover libremente, que pueda atraer fuertemente a su salvación y al Reino.

Mi sola Presencia ante vuestros hermanos de aquel tiempo, impactaba, cambiaba, modificaba su ser. Sus cuerpos y sus almas se transformaban, recibían curación de cuerpo y alma, aquellos que abriéndose a Mi Amor y a Mi Presencia, así lo aceptaban.
Eso es lo que Yo deseo ahora de vosotros, Mis pequeños, que al ser santos, Yo Me pueda manifestar perfectamente a través de vosotros e ir impactando almas hacia su conversión, hacia su salvación, hacia la preparación de los Nuevos Reinos que se os darán, el Nuevo Reino de Amor sobre la Tierra.

Dejaos, dejaos mover por el Santo Espíritu de Amor, para que os haga cambiar vuestra forma de pensar, vuestra forma de ser, vuestra forma de amar, son esencialmente humanas. Dejaos mover, para que podáis sentir lo que se siente al vivir y trabajar para los bienes del Cielo.

Mis pequeños, vuestra libre donación os hará gozar del cambio, gozaréis momentos, que ni os imaginabais que existieran, porque no vivíais abandonados a Mi querer, a la Voluntad Divina. A eso estáis llamados todos vosotros, Mis pequeños, a vivir en mi Voluntad y con ello, gozar de Mi Bien.

Las almas donadas, las almas sencillas, las almas que han aceptado el cambio, viven extasiadas, viven el éxtasis de Amor, viven el éxtasis del Cielo, aún aquí en la Tierra, son los regalos que se les da al unirse a la Divinidad, al dejar que Yo, las posea y que Yo logre el cambio total en su vida, Yo, vuestro Dios, pleno en vosotros. Es el regalo más grande para el alma, la unión y la fusión en el Amor, en el Amor Divino, en el Amor de vuestro Dios.

Al vivir así, Mis pequeños, se os da también el conocimiento, empezáis a conocer el Pensamiento de vuestro Dios y mucho, mucho de lo que era Misterio, que no se había revelado, se os revelará y así es como conoceréis algunas de Mis Bellezas y digo algunas, porque Soy Infinito y se os irá dando poco a poco, para que gocéis, para que os deleitéis, todo lo que vuestro Dios tiene para vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Esta sola vez en la que estáis aquí en la Tierra para servirMe, debe de dar mucho fruto. Y fuisteis escogidos porque así Me lo pedisteis.
Mis pequeños, una sola vez tenéis la oportunidad de bajar a la Tierra a servirMe. Una sola vez se os da ésta oportunidad para poder crecer en gozo y en santidad ante Mi Presencia. Una sola vez estaréis sirviéndoMe entre vuestros hermanos en la Tierra ayudándoles en su protección espiritual, en su crecimiento, en su vida. Una sola vez estaréis en el campo de batalla, luchando por Mi Reino y destruyendo con Mi Amor la maldad que Mi enemigo provocó antes del Principio de los Tiempos.

Esta sola vez en la que estáis aquí en la Tierra para servirMe, debe de dar mucho fruto.
Meditad, Mis pequeños ésta realidad de vuestra existencia, no es una obligación el que estéis aquí en la Tierra, fuisteis escogidos porque así Me lo pedisteis. Estáis en la Tierra, por vuestra propia libertad, Me pedisteis ésta oportunidad en el Amor para servir a vuestros hermanos, para reparar el daño de vuestros Primeros Padres.

Esta donación, libre y voluntaria de las almas se debe manifestar en gozo, en agradecimiento, en ayuda para la conversión de vuestros hermanos y para reparar lo perdido por el pecado. Yo podría reparar todo en un segundo, pero se debe de dar ésta reparación por línea de familia, por el daño de vuestros Padres.

Vosotros, tomando ésta responsabilidad, para agradarMe, para servirMe, por el daño que Me causaron vuestros Padres, Adán y Eva, así reparáis el dolor que ellos Me causaron, al darMe nuevamente, en reparación, libre y voluntaria, todos vuestros actos, toda vuestra vida y todo vuestro ser. Así volvéis a vivir en la Divina Voluntad, como os he dicho, ellos se salieron de Mi Divina Voluntad, cuando se vieron a sí mismos y quisieron hacer su vida fuera de Mis Leyes, fuera de Mi Amor, fuera de Mi Protección. Si ellos, a pesar de la Santidad en la que fueron Creados y de la Perfección que tuvieron en su hechura, tuvieron ésa tentación y la aceptaron ¿Qué será de vosotros, Mis pequeños? que ya afectados por el pecado, ya débiles, por el pecado, más fácilmente podéis caer. Debéis entender que sin vuestro Dios, vosotros, más fácilmente podéis caer en el error, en vuestra destrucción espiritual.

La soberbia, siempre os va a llevar a la destrucción, a la maldad. Si vivís Conmigo, con vuestro Dios, bajo Mi Sabia guía espiritual, nunca tropezaréis y si por apartaros un momento, tropezarais, Yo os levantaré rápidamente, porque vuestra Fe así lo permitirá. Vivid pues en santa alegría, sin preocupaciones, sintiéndoos consentidos por vuestro Dios, si os mantenéis Conmigo, vuestra única preocupación, es la de mantener el alma y la de vuestros hermanos, en íntima unión Conmigo, como os he dicho, viviendo el Amor y las Virtudes, el estado de Gracia, éste es el estado ideal, en el que fuisteis creados y que debéis mantener, el Amor y la Virtud, dando frutos, grandes y apetecibles, a Mí, vuestro Dios y a vuestros hermanos.
Gracias, Mis pequeños.