Mayo 16_2024 ¡Benditas vosotras las almas, que vivís o tratáis de vivir en estado de Gracia, y aceptando Mi Divina Voluntad en vuestra vida!

Rosario – Mensaje ÚNICO

.

============================

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

============================

.

Habla Nuestro Señor Jesucristo

Visión: Veo a Dios Nuestro Señor sentado en un Trono, y nos dice:

Hijitos Míos, Soy vuestro Dios y Señor, estoy en Mi Trono de Gloria, espero a las almas que regresan, esperando que hayan cumplido sus deberes espirituales, las espero aquí, para ser juzgadas.

Estáis en momentos de cambio, en estos momentos de la historia que, ciertamente, son tristes, porque sois tantos. Esta generación, tan grande en hombres, almas creadas en Nuestra Santísima Trinidad, pero tan pocas que han respondido al llamado espiritual que se les encomendó.

Mis pequeños, sabéis, y se os ha estado anunciando de una forma u otra, que estáis a momentos de la gran purificación. Mi Santo Espíritu avisa a los hombres cuando algo va a suceder, como en la época de cuando Yo iba a nacer, la gente sentía, algo que venía, algo grande; y ahora es así, viene el momento para vosotros, para la gran mayoría de vosotros, que pasaréis a ser juzgados y se os preguntará ¿qué hicisteis con vuestra vida, con la vida que se os otorgó?

Los acontecimientos de la Purificación, ciertamente, serán tremendos para unos y aceptados por otros. Y quiero tomar este, este estado de vida. Cuando digo aceptados por otros, son aquellos que han vivido en Mi Divina Voluntad, que han aceptado la vida tal como viene, y no llega de casualidad, los acontecimientos que llegan, a cada uno de vosotros, en vuestra existencia, van guiados por Mí, vuestro Dios, pero vosotros no sabéis recibirlos, y menos agradecerlos.

Toda vuestra vida, está guiada para el Bien, aunque vosotros veáis momentos difíciles en vuestra existencia, todos llevan un porqué, y no podéis decir que son de maldad, porque de Mí, no puede salir nada de maldad, puesto que Soy la Bondad Absoluta. Si pasa algo de malo en vuestra existencia, y ya se os ha dicho, que satanás está actuando constantemente sobre vosotros, para impedir que llevéis a cabo vuestra misión lo mejor posible, y sobre todo, para impediros vuestro regreso al Reino de los Cielos.

Cuando vosotros aceptáis lo que llega a vuestra existencia, y Me lo agradecéis, eso es vivir en Mi Divina Voluntad, pero esto sólo se logra cuando el alma vive en estado de Gracia, vive unida a Mí, vive luchando contra la maldad que hay alrededor de cada uno de vosotros, impidiendo que esa maldad entre en vosotros.

Todos vosotros sois atacados por satanás; satanás, de alguna forma u otra, medianamente, os conoce, sabe cómo actuáis en determinados momentos y os trata de vencer con vuestras debilidades, pero cuando vosotros os dejáis mover por Mí y, a pesar de los ataques que os llegan, vosotros no los recibís, es porque tenéis ése escudo protector de Mi Gracia. No os asustéis por lo que venga a vosotros, asustaos de que toméis lo que satanás os proponga, porque entonces es donde podréis perder el estado de Gracia.

En cada acontecimiento que ha sucedido, y ahora vendrá para esta generación, es muy fácil reconocer a las almas que no están Conmigo, al ver su desesperación, al ver, el momento de la muerte en ellos y saben que no están preparados para estar Conmigo, éso lo intuye el alma. Ese es el temor más grande que tiene el alma, cuando, perdiendo su vida física, para poder llegar a Mí, al llegar a Mí, no saben esas almas, qué hacer, viene una gran desesperación porque se enfrentan a la Verdad, se enfrentan a Mí, Yo les muestro la Verdad de su existencia, pero ya no pueden hacer nada para reparar el daño que le hicieron a su alma, y el dolor que Me causaron a Mí.

Las almas que viven bajo Mi Voluntad toman la misma posición que tomé Yo a lo largo de Mi Existencia y, especialmente, en el último momento, el momento cumbre, el momento de la salvación para todos vosotros, Mi Pasión. Mi Pasión, que os da un gran Ejemplo de Vida en Mí: Yo acepté lo que Mi Padre Me pidió, acepté  Su Voluntad, y la llevé a cabo, a pesar de todo lo que Me iba a pasar, lo que sucedió y lo que vino después. Y vosotros deberéis tomar, también, esa posición de aceptación a Mi Divina Voluntad, que viene a ser la Voluntad de Mi Padre, vuestro Padre, vuestro Dios.

Pero, os repito nuevamente, no es lo mismo aceptar los acontecimientos en estado de Gracia, que estando en pecado grave, y muy distanciados de Mi Gracia, por eso mueren las almas en desesperación, porque saben que es el momento en que seréis juzgados y hay mucho dolor.

¡Benditas vosotras las almas, que vivís o tratáis de vivir en estado de Gracia, y aceptando Mi Divina Voluntad en vuestra vida!, aún en esos momentos difíciles, porque, ciertamente, aunque estéis Conmigo, son momentos difíciles. Los aceptaréis, Me los ofreceréis y con ello salvaréis infinidad de almas, como Yo lo hacía también, al padecer Mi Pasión tan dolorosa, donde Me di por cada uno de vosotros. Os agradezco, pequeñas almas Mías, las que Me recordáis y Me acompañáis en esos momentos difíciles para Mí, porque no hay tiempo lejano, ya que en el momento en que pensáis en Mí, estáis Conmigo, estáis en el preciso momento en que Yo sufría, y os lo agradezco, Mis pequeños, almas agradecidas, almas santas, almas que buscan su salvación eterna, que Me acompañáis, aunque sean unos momentos al día, recordándoMe y acompañándoMe, en esos momentos dolorosos, esos momentos de salvación de muchísimas almas. Fueron momentos que Yo ofrecía para que pudierais vosotros alejaros de la maldad de satanás.

Mi Sufrimiento os daba fuerzas para vencer los acontecimientos que estáis ahora viviendo. Tomad, pues, de Mi Pasión fuerzas para vuestra pasión, no desperdiciéis lo que Yo hice por vosotros, lo estoy haciendo en estos momentos por vosotros, porque ahora es vuestro turno para darMe almas, para salvarme almas, para darMe el amor que Yo di por vosotros, os volveréis otros Cristos. Ciertamente, los escogidos también sufriréis, pero no moriréis, estaréis escogidos para una nueva generación. Con ese sufrimiento amoroso, con el cual, vosotros Me adoraréis; Me agradeceréis que os haya salvado, van a ser momentos bellos en este tiempo de cambio, en este momento, también, Mesiánico, en donde Yo estaré con vosotros, los que Me estáis aceptando en Mi Divina Voluntad. Yo, en vosotros, en estos momentos, salvando almas.

Manteneos pues, en estado de Gracia, manteneos, pues, agradeciendo estos momentos en que estareMos unidos, en que, Mi Pasión se unirá a vuestra pasión y eso se da en el Amor, el Amor nos une, el Amor os salva, el Amor os abre la Puertas de la eternidad.

Gracias, Mis pequeños.