Sep 01_06 Vuestra misión exacta nadie más la tendrá.

Rosario

Temas:

  • ¿Qué viviréis en el Banquete de Bodas Mis pequeños?
  • Cada uno de vosotros tenéis una misión particular, sois irrepetibles entendedlo, y vuestra misión es irrepetible.
  • Manteneos siempre Conmigo, buscad siempre el asesoramiento Divino y no fallareis.

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

 

Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: ¿Qué viviréis en el Banquete de Bodas Mis pequeños?
Hijitos Míos, si vosotros estáis invitados a una fiesta de disfraces, llevaréis un disfraz para que estéis a tono de los demás invitados, si estáis invitados a una boda, iréis bien arreglados, como irán todos los demás para que estéis a tono con los demás invitados y así, a donde seáis invitados estaréis arreglados de acuerdo a donde vayáis, para que no se os critique, para que os sintáis a gusto, para que estéis contentos.

Todos vosotros estáis invitados al Banquete de Bodas, pero ¿qué viviréis en el Banquete de Bodas, Mis pequeños? os lo he repetido muchas veces, el Amor, viviréis Amor, hablareis de Amor, os alimentareis de Amor, compartiréis Amor y todo ese Amor es el que Yo os he enseñado, es el que Yo he permitido que viva en vuestro corazón, el que habéis aceptado en vuestro corazón, es por el que habéis luchado en vuestra vida.

Así cuando llegáis al Banquete de Bodas, estaréis contentos, porque los que ahí estén hablarán de lo mismo, estarán arreglados de la misma forma, os sentiréis como verdaderos hermanos, pero para ello, para llegar a eso necesitareis prepararos antes, ¿cuánto tiempo necesitareis para estar preparados, para vivir sinceramente en el Amor? Y al amor es difícil querer suplantarlo, el Amor siempre sale desde lo más profundo del corazón, un amor falso es fácil descubrirlo. Al Amor verdadero se le descubre fácilmente, también los ojos brillan, la persona brilla, está contenta, sus palabras son de amor, sus movimientos son amables y amorosos, vive realmente el amor y para el Amor, esas son las almas que vivirán en el Banquete de Bodas, que vivirán también en ésta tercera fase de humanidad, en la era del Amor.

¿Estáis  preparados Mis pequeños?, ¿habéis llenado vuestro corazón de esto?, ¿estaréis a gusto en el Banquete de Bodas?, ¿vuestro corazón alegre estará de escuchar palabras de Amor?, ¿vivir en el Amor?, ¿no os aburriréis con lo que os cuenten vuestros hermanos? porque así sucede cuando realmente no estáis en sintonía con los temas de una reunión. Si realmente no estáis viviendo en el ambiente que se vive en una reunión y no os sentís a gusto mejor os vais, porque no os sentís bien y podríais echar a perder la reunión con vuestra presencia.

Si queréis realmente convivir con aquellos que viven el Amor, deberéis trabajar en él, deberéis llenar vuestro corazón de él, así pues Mis pequeños, entended estas Palabras porque ellas son para Mis verdaderos hijos, para los hijos del Amor, para aquellos que van  a poblar los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas, para aquellos que van a convivir en santidad y en Justicia que los llevará a la paz que tanto anhela vuestro corazón.

Ahora os dais cuenta a dónde os he querido llevar Mis pequeños, en la perfección del Amor tenéis todo.
Gracias, Mis pequeños y os bendigo con todo Mi Amor.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Cada uno de vosotros tenéis una misión particular, sois irrepetibles entendedlo, y vuestra misión es irrepetible.
Hijitos Míos, luchad por lo que es justo, pero ¿cómo sabréis que es justo algo? Pedid el espíritu de discernimiento, el espíritu de Sabiduría, el espíritu de Verdad. Todo aquello que vaya a producir un bien a vuestro hermano y aún a veces, con mucho de vuestro sacrificio, es cuando va a ser justo. Que veáis que vuestro hermano quede contento, vaya feliz con el bien que vosotros recuperasteis o ganasteis para él y vosotros también hayáis quedado en paz, es cuando sabréis que algo será justo y verdadero.

Mi Hijo os vino a enseñar la justicia, os vino a enseñar la verdad, Él os puede transmitir Sabiduría para que podáis entender entre la dificultad del mundo y ver dónde está la verdad dentro de tanta mentira que ya os rodea.

Mis pequeños, en la justicia veréis por los bienes verdaderos de vuestros hermanos, no por los bienes de unos cuantos, bienes egoístas, malsanos, destructivos, sino bienes que los van a llevar hacia la perfección, que los van a llevar hacia un crecimiento espiritual, que los van a llevar a crear vida en ellos, para que ellos a la vez luego puedan dar vida, que los van a transformar de una vida pecaminosa a una vida de virtud.

Cuando realmente busquéis la justicia y la verdad, luchareis fuertemente y os lo agradecerán vuestros hermanos, Mi Hijo luchó por ello y su premio fue la Cruz. Sí, luchó para levantaros a todos vosotros, primeramente a vuestros hermanos que vivieron en ése tiempo, pero que vosotros ganasteis por herencia, Su vida, Sus enseñanzas, Su Amor, Sus Milagros, tenéis todo lo que Él os dio y lo seguiréis teniendo hasta el fin del mundo.

Vosotros deberéis mantener la justicia en vuestro mundo, pero primero viviéndola, siendo sinceros con vosotros mismos, viviendo en la rectitud, viviendo en la verdad, transmitiéndola y exigiendo en cierta forma que vuestros hermanos también la vivan, porque en esa forma todos, todos podrán vivir en paz y en armonía, viviendo en salud espiritual, en donde vosotros mismos podréis dar lo que os ha tocado en bienes espirituales para vuestros hermanos.

¡Tanto, tanto que se ha perdido la humanidad! porque no se le ha permitido al hombre desarrollarse perfectamente. Una gran cantidad de vuestros hermanos han sido reprimidos espiritualmente y no han podido dar de los dones con los que fueron constituidos. Desde el principio, todos venís a la Tierra con dones específicos para hacer que éste mundo se vaya purificando y creciendo en valor espiritual, pero lo que tenían que hacer muchos de vuestros hermanos, no se pudo hacer, porque satanás, a través de sus instrumentos, impidieron que vuestros hermanos se desarrollaran espiritualmente y se perdió todo ése tesoro que tenían ésas almas.

Os digo todo esto, Mis pequeños, para que de ahora en adelante, vosotros estéis pendientes de los ataque del enemigo y para que sepáis cuál es su forma de atacar, que es el impediros que os desarrolléis espiritualmente y que desarrolléis a vuestros hermanos también espiritualmente, para  que cambiéis la maldad de éste mundo, las tinieblas de este mundo, en Luz, en sabiduría, en amor perfecto, en salvación para todos.

Estad atentos pues, en lo que Mi Santo Espíritu de Amor os pueda enseñar e inculcar en vuestro corazón y mente y seguidLe con confianza pidiéndoLe a Él Mismo que os proteja y os guíe contra los engaños. Para que os desarrolléis plenamente y no lleguéis de regreso a la Casa Paterna adoloridos, porque os sintáis afectados que no pudisteis desarrollaros completamente en vuestra misión en la Tierra. Es muy feo que se os pida algo, una tarea que se os encomiende y que no la podáis o no la queráis cumplir y luego se os tome cuenta de ello y especialmente, cuando ella es importante para muchas otras almas. No os dais cuenta Mis pequeños, la importancia que tenéis cada uno de vosotros, pero cumplir, son tan pocas las almas que cumplen perfectamente su misión, que se llegan a desarrollar perfectamente y por eso vais tan lento en vuestro desarrollo espiritual y aún tecnológico y en todos sentidos, porque no todos van caminando al mismo paso espiritual ni os dais perfectamente a Mí, vuestro Dios, en vuestros hermanos.

Así pues Mis pequeños, aplicaos en lo que sintáis en vuestro corazón, que es lo que el Santo Espíritu de Amor os va pidiendo. No os hagáis sordos a Sus Inspiraciones ni necios al trabajo que se os pide, se os ha confiado una misión grande, bella e importante, nadie mas cumplirá con vuestra misión. Cada uno de vosotros tenéis una misión particular, sois irrepetibles entendedlo, y vuestra misión es irrepetible, si no la hacéis vosotros alguien hará algo similar para reparar el daño que causáis al desarrollo de la humanidad, pero vuestra misión exacta nadie más la tendrá. Entendedlo bien, Mis pequeños, para que veáis lo importante de vuestra vida aquí en la Tierra.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Manteneos siempre Conmigo, buscad siempre el asesoramiento Divino y no fallareis.
Hijitos Míos, aún los grandes empresarios, la gente triunfadora, algunos presidentes o dirigentes de pueblos, gente importante que lleva negocios fuertes, que sabe la responsabilidad que le confiere su puesto o su posición, cuando tienen esa humildad de reconocer la importancia de su posición se saben asesorar, reconocen que no pueden ellos cubrir todas las necesidades para sacar adelante su puesto y poder mandar en todos los campos de su empresa para poder hacer perfecto su trabajo. Ellos reconocen que no pueden estar en dos lugares a la vez, reconocen que aun por cansancio o por dificultades de diferente índole no pueden cubrir las necesidades y obligaciones que su puesto requiere y por eso se asesoran, y por eso piden consejo para que todo salga correcto.

En lo espiritual, lo que os he repetido tantas veces, Mis pequeños, vuestra misión en la Tierra es importantísima, vosotros os tenéis que asesorar continuamente con Mi Sabiduría, debéis pedir continuamente Mi Protección que Yo os doy a través de Mi Hija la siempre Virgen María, de Mi Hijo Jesucristo, del Santo Espíritu de Amor, con los Arcángeles, con los Ángeles, con las almas que ya pasaron su misión por la Tierra. Vosotros tenéis múltiples formas de protección y de asesoramiento pero que las más de las veces las despreciáis para sacar adelante vuestra misión.

Cada alma en el mundo es importantísima por eso satanás os ataca tanto, porque si un alma triunfa en la misión que tiene sobre la Tierra, le hace mucho daño, salva muchas almas, le quita almas que iba a destruir y va acercando a la Tierra con el Cielo. Vosotros no os queréis dar cuenta de esto, que es tan importante y Yo he puesto Mi confianza en cada alma. Vosotros os dejáis engañar fácilmente por satanás y os hace creer que vuestra misión no es tan importante, os desvía hacia lo material y os hace creer que lo material sí es importante y que debéis poner todo vuestro esfuerzo para llenaros de cosas materiales y de esta forma el esfuerzo que debisteis haber puesto para lo espiritual lo desperdiciasteis para lo material.

Sí, fuisteis exitosos en lo material y ¿de qué os va a servir eso para la vida eterna? Ved vuestra vida, especialmente vosotros los que ya peináis canas, ved en retrospectiva vuestra vida, si os habéis llenado de cosas materiales, ved vuestra vaciedad interior, ¿de qué os ha servido tener tanto de lo material cuando estáis vacíos, aislados del mundo, temerosos de que os roben lo material, de que os ataquen, que os puedan plagiar, que puedan aún arrebataros la vida para quedaros con vuestros bienes materiales? no vivís en paz ¿sirvió de algo tener ahora tanto de lo material? No, Mis pequeños, no vivís en esa armonía Celestial, vivís en terror infernal.

Cuando realmente vivís para el Cielo, buscando los bienes del Cielo, pase lo que pase a vuestro alrededor, vivís una paz exquisita en un amor sincero, en un amor bello, en un amor que trasmitís y vuestros hermanos lo quieren tener también, aún se preguntan ellos mismos que cómo, a pesar de las adversidades, vosotros tenéis esa paz interior y es que vosotros habéis escogido la mejor parte, la espiritual. La buscasteis, la encontrasteis, la cultivasteis, la hicisteis crecer y dio fruto y no solamente en vosotros sino en algunos de vuestros hermanos que supieron también apreciar estos valores espirituales.

El mundo en nada os aprovechará, si os llenáis de los bienes del mundo, para fines egoístas ellos os destruirán. Ahora, si utilizáis los bienes del mundo para hacer Caridad, para cuidar a vuestros hermanos, para ayudarles a que se desarrollen ellos espiritualmente, entonces sí, esos bienes materiales os santificarán y así, lo que os pudo haber hundido, lo que os pudo haber llevado a la materialidad, os va a santificar. Lo creado, lo que Yo os he dado no es malo, el uso que le deis a las cosas es lo que hace bueno o malo algo, es vuestra intencionalidad lo que hace buena o mala a la cosa, vuestras obras serán juzgadas a Mis Ojos, no a los ojos humanos, Yo conozco la intención de vuestro corazón.

Así pues, si buscáis las cosas del mundo para ayudar a vuestros hermanos quizá algunos de vuestros hermanos vean que acumuláis bienes mundanos y os juzgarán por ello pero Yo estaré viendo vuestro corazón y viendo la Caridad que hagáis con ellos. Por eso, Mis pequeños, manteneos siempre Conmigo, buscad siempre el asesoramiento Divino y no fallareis, no fallareis en vuestros actos, en vuestras palabras y en vuestro pensamiento, porque Yo estaré con vosotros, seremos uno y así unidos tendréis el éxito seguro.
Gracias, Mis pequeños.