Rosario.
Temas:
- AyudadMe, Mis pequeños a que Yo pueda Vivir plenamente entre vosotros.
- Os pido que Me acompañéis todo el día, que Me acompañéis a orar.
Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: AyudadMe, Mis pequeños a que Yo pueda Vivir plenamente entre vosotros.
(Lenguas…,) Hijitos Míos, ayer os decía que no os separarais de Mí en ningún momento. Que vosotros podéis ver a través de Mis Ojos, que podéis pensar a través de Mi Mente, que podéis oír a través de Mis oídos, que podéis actuar a través de Mí. Os dije que Me permitierais Vivir a través de vosotros.
DejadMe orar con vosotros, que Yo sea el que ore, que Yo sea el que pida, que Yo sea el que esté con vosotros.
Mis pequeños, esto es el vivir en la Divina Voluntad, es el vivir con vuestro Dios, es dejarMe a Mí, actuar.
AyudadMe, Mis pequeños a que Yo pueda Vivir plenamente entre vosotros.
DejadMe, dejadMe a Mí, vuestro Dios, caminar entre todos vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Os pido que Me acompañéis todo el día, que Me acompañéis a orar.
Hijitos Míos, Yo quisiera que os acercarais a Mí, a orar aquí en el Huerto.
Yo estoy tomando vuestra presencia, tomad la Mía. Pensad todo el sufrimiento del Amor, del Amor de Mi Corazón, del Amor de Mi Padre, del Amor del Espíritu Santo. Un Amor tremendo sobre todos vosotros. Sentir el odio, sentir la maldad, sentir la traición.
Mis pequeños, aquí en el Huerto, solo, sin apoyo de los Míos de la Tierra, orando a Mi Padre, viviendo cada uno de ésos momentos del pasado, del momento presente y del futuro.
Os he dicho que la sensibilidad de todo un Dios es infinita. Mi dolor por eso era infinito.
DarMe, darMe y dar el Amor de vuestro Dios, de Nuestro Padre, que no fuera aceptado, que fuera rechazado por el corazón del hombre.
Muchos a pesar de haber visto Mi Amor, Mi donación por todos ellos, aún así Me rechazaban y Me atacaban y lo hicieron en la Cruz, en Mi Pasión, en Mi Donación total por ellos.
AcompañadMe, Mis pequeños, en éstos momentos difíciles, tomadlos en vuestro corazón, profundizad en éstos momentos.
AcompañadMe, vividlos junto Conmigo. Estáis viviendo Mi Voluntad unida al Padre. Acepté el dolor, acepté ésta Misión por vosotros, di Mi Vida por cada uno de vosotros y la sigo dando, sigo sufriendo, pero el bálsamo que Me dan aquellos que Me aman, calma Mis dolores.
AcompañadMe siempre, Mis pequeños, como decís, en las buenas y en las malas. Sabed que cuando Me acompañáis y tomáis de Mí todo esto, Yo también lo elevo al Padre y salvamos muchas almas, porque para esto estáis Conmigo, para salvar a muchas almas.
Ved aquí en el Huerto de los Olivos Mi dolor, Mi pena, Mi abandono. Necesito de las almas que Me comprenden, que Me acompañan, que no se apartan de Mí, aún a pesar del peligro que esto pueda causarles y el dolor que puedan padecer por Mí, por su Dios.
Os pido que Me acompañéis todo el día, que Me acompañéis a orar. Así como en la escuela el maestro os deja tarea, que esto os lleve a una unión más perfecta Conmigo. No os separéis de Mí, Mis pequeños, todo el día. Orad Conmigo aquí en el Huerto.
Mis Apóstoles Me dejaron solo. Imploro vuestra compañía, Mis pequeños. Calmad Mi sed, calmad Mis dolores, enjugad Mis lágrimas. AcompañadMe, acompañadMe, Mis pequeños.
Gracias, gracias, Mis pequeños discípulos, Mis pequeños apóstoles.