Mzo 05_09(vesp) Tened cuidado con la serpiente antigua, que se manifestará en breve.

Rosario vespertino.

 

Temas:

  • Mi Palabra es como espada de dos filos a algunas almas las vivifica a otras almas las condena.
  • Yo podría ya haber hecho grandes cosas para la humanidad entera, pero no os ponéis de acuerdo los unos con los otros.
  • Entended que éste ayuno que tendréis, ayuno forzado, penitencia forzada, os dará la libertad, la libertad de donde el pecado os tiene ahora esclavizados.
  • El valor de las almas, os repito, es el abandono y el olvido, la donación que ellas Me hacen a Mí.
  • Pronto vendrá aquél que usurpará Mi Nombre, tened cuidado, Mis pequeños.

 

Mensaje de Dios Padre a J. V.

 

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Mi Palabra es como espada de dos filos a algunas almas las vivifica a otras almas las condena.
Hijitos Míos, Mi Palabra es como espada de dos filos a algunas almas las vivifica a otras almas las condena. ¿De qué lado estáis vosotros, Mis pequeños? ¿Mis Palabras os están dando vida ó Mis Palabras son para vosotros dolor de condenación porque no soportáis Mi Amor, Mis Mandamientos, Mis Leyes en vosotros? ¿De qué lado estáis?, queréis venir Conmigo para toda la eternidad, sirviéndoMe en el Amor u os queréis condenar y blasfemar Mi Santo Nombre por toda la eternidad. Mis pequeños, Yo Soy un Dios de Amor, ¿por qué Me atacáis tanto?

Si vosotros mismos buscáis en vuestro interior el Amor, al venir Conmigo Yo os puedo saciar, os puedo dar todo lo que necesitéis en el Amor, vuestras capacidades pueden ser multiplicadas hasta el infinito al estar Conmigo. El estar Conmigo, es solamente vida, ¿por qué preferís entonces la muerte?, ¿por qué preferís entonces la maldad, si eso os va a causar malestar temporal y una muerte eterna? Os privaréis de Mi Amor eternamente, cuando es Mi Amor el que vivifica y alimenta a las almas continuamente.

Os amo tanto, Mis pequeños, os he creado para el Amor, pero vosotros erráis el camino y, aunque Yo os doy Luz en algún momento ó en muchos momentos de vuestra vida, para que recapacitéis y entendáis el camino malo que habéis escogido, ni aún así cambiáis, Mis pequeños. Es incomprensible esto, es incomprensible al Amor, ¿por qué no buscáis la perfección?, ¿por qué no buscáis la Verdadera Vida?, ¿por qué no Me buscáis, Mis pequeños?, cuando de Mí tenéis todo lo más bello que un alma puede pedir y desear.

Vuestros deseos internos siempre son infinitos, cuando decís que soñáis con tener tal ó cual cosa y, a veces, incomprensibles para vosotros mismos, es Mi Santo Espíritu de Amor, en vuestro interior, que os está llevando a ello, a que pidáis, a veces, hasta lo no entendible para el ser humano, pero con Mis capacidades infinitas, algún día, las tendréis. Ojalá, Mis pequeños, escucharais Mis Palabras, os dejarais llevar por Mis Palabras y por Mis deseos de Amor.

Os quiero perfeccionar en el Amor, porque el Amor lo es todo. Mi Esencia es el Amor y vosotros estáis llamados a la perfección del Amor, para que podáis gozar todas las Bendiciones que un alma puede tener. Sois parte de Mí y Yo os consiento y os quiero llevar Conmigo eternamente. No Me falléis, Mis pequeños, mucho he invertido en vosotros, Mi Corazón está con vosotros, Mi Vida de Amor está con vosotros. No Me falléis, Mis pequeños, os amo infinitamente.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo podría ya haber hecho grandes cosas para la humanidad entera, pero no os ponéis de acuerdo los unos con los otros.
Hijitos Míos, es raro, muy raro cuando el hombre aprende por las buenas. Desgraciadamente, aprendéis por las malas desde que sois pequeñitos. La maldad, el pecado en el que vive la humanidad, por el Pecado Original, va afectando a vuestra espiritualidad, dejáis de ser sensibles al Amor, dejáis de ser sensibles a la Verdad y a la Sabiduría Divinas, que debierais pedir y cuidar como gran tesoro en vuestras vidas y a lo largo de vuestra existencia sobre la Tierra.

Ése es vuestro problema, Mis pequeños, no querer entender con los primeros llamados que se os dan. Tenéis las Sagradas Escrituras repletas de éstos ejemplos, cómo la dureza del  corazón del hombre hace que éste caiga en graves faltas y Yo lo tengo que reprender, cuando Yo no quisiera hacer esto con vosotros. Ahora sois Mis creaturas descarriadas por el Pecado de vuestros Primeros Padres.

Teníais derecho a grandes Bendiciones, por ser descendientes de ellos, pero éstas Bendiciones y Mi cúmulo de regalos espirituales y aún materiales para todos vosotros, han quedado detenidos, porque vosotros no apreciáis Mi Obra en vuestro interior y en vuestro exterior, Me limitáis a Mí, vuestro Dios, porque no estáis en comunicación continua Conmigo, queréis hacer vuestra voluntad y estáis en un error, vuestra voluntad nunca va a ser sabia, nunca va a ser humilde, nunca va a ser sencilla porque, cuando hacéis vuestra voluntad, ésta es imperfecta, solamente cuando acudís a Mí, para que Yo os guíe, es cuando vuestros actos se vuelven rectos y sabios.

Vosotros mismos os vais acarreando todos éstos males en vuestra vida, tanto para vosotros, como para los vuestros. Podríais tener tanto, Mis pequeños, podríais ya haber avanzado tanto y vosotros mismos detenéis vuestro paso y le detenéis a otros, también, su progreso espiritual.

Yo podría ya haber hecho grandes cosas para la humanidad entera, pero no os ponéis de acuerdo los unos con los otros, os causáis problemas los unos a los otros. Si lo veis palpablemente, poniéndoos como ejemplo a todos vosotros en el Cuerpo Místico de Mi Hijo, cada uno actuando como células, imaginad, cómo pueden las células de un cuerpo hacerlo funcionar correctamente, mantenerlo sano, si cada una de las células quiere hacer su voluntad. Los órganos, en donde se logra su funcionamiento correcto, se da porque todas las células, que forman el órgano, están caminando al mismo tiempo y llevando a cabo la misma función. No se lograría como estáis ahora, nos podríamos ir por todo el organismo y éste cuerpo no estaría caminando correctamente, si cada uno de vosotros quisiera tomar su propio camino, y ésta es la realidad de vuestra vida. No estáis Conmigo, estáis contra vuestros hermanos, vosotros mismos estáis a disgusto en vuestro interior, no os comprendéis perfectamente bien ni a vosotros mismos.

¿Cómo podéis estar estables emocional, física ó espiritualmente?, vosotros mismos sois un problema, y esto es porque no estáis perfectamente Conmigo, porque no queréis seguir Mi Voluntad. Y tanto os lo he pedido porque, cuando sigáis Mi Voluntad, Yo voy a reconstruir el Cuerpo Místico de Mi Hijo, voy a hacer que vosotros, como pequeñas celulitas individuales y soberbias, caminen al mismo tiempo, que se unan y den más fuerza en su caminar, que no se vayan unas por un camino y otras por otro, sino que unidas, y con un mismo deseo de mejora y superación, es como podréis lograr lo que Yo quiero que se logre ya sobre la Tierra, que os améis los unos a los otros y podáis caminar hacia la perfección en la que fuisteis creados, para que el pecado se destruya.

Meditad todo esto, Mis pequeños y veréis que estoy hablando con Sabiduría, pero si no os acercáis a Mí, y Me dais vuestra voluntad, imperfecta y malsana para vosotros mismos, si no os dejáis mover por Mí, para que os lleve a la unión fraterna entre todos los pueblos y a la perfección en Mí, vuestro Dios, si no entendéis todo esto, Mis pequeños, seguiréis errando el camino y no podréis reconstruir el Reino que Yo os he dado.

Entended esto, para que volváis a la humildad, a la sencillez, al ser como niños, para que Me digáis, “Padre, necesitamos de Ti, ayúdanos” y, entonces, en ése momento, tras ésa súplica sencilla y humilde, Yo os ayudaré y os elevaré. Mientras tanto, si no caéis de rodillas y no Me pedís con vuestro corazón Mi ayuda, vuestra mejora no se logrará.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Entended que éste ayuno que tendréis, ayuno forzado, penitencia forzada, os dará la libertad, la libertad de donde el pecado os tiene ahora esclavizados.
(Lenguas…) Hijitos Míos, en la Torre de Babel, vosotros perdisteis la capacidad de comunicación con la palabra entre unos y otros, Me retasteis y no está bien que el hombre rete a su Dios y Creador. Fuisteis dispersados por toda la faz de la Tierra, para que no os volvierais a unir en Mi contra y sobre todo, contra el Amor de Creación de donde salisteis.

Mi Santo Espíritu vendrá a unir al hombre, tendréis ya una sola palabra, nuevamente, pero lo más importante, un solo corazón. Seréis purificados, para que ya vuestra mente y vuestro corazón no se opongan a Mí ni a Mis Leyes, que no se opongan a Mi Amor. Por eso, ésta Purificación venidera os traerá bienestar y, para muchos de vosotros, ése bienestar será eterno.

Tendréis ése bienestar temporal, con los Nuevos Cielos y las Nuevas Tierras, pero ya viviendo bajo una sola palabra y el Amor Verdadero. Mucho perdéis, Mis pequeños, cuando os separáis de Mí, Soy un Dios celoso, Mi Palabra es Ley, porque es Palabra Verdadera, es Palabra de Amor.

Aquellos que aprenden a vivir por Mi Palabra y por Mi Amor, son exitosos en la Tierra y en el Cielo, han escogido sabiamente lo mejor, pero, ¿cuántos hay de vosotros que escogéis todavía las cosas del mundo, que lejos de llevaros a la perfección, os apartan de ella y de la Verdad, que fue creada también para vosotros? Sois Mis hijos y el padre también quiere lo mejor para los hijos, les da de lo mismo que él tiene y Yo os quiero dar de Mis riquezas, pero vuestra tontería y vuestra negligencia os aparta de ello. No queréis ver más allá de vuestras narices, estáis ciegos, miopes, os queréis mantener en vuestro “yo” y debéis despreciar vuestro “yo”, para que Yo, vuestro Dios, entre a vivificar todo vuestro ser y os lleve a ésas alturas de perfección, en las que ni vosotros mismos podríais comprender ni entender Mis capacidades. Os estáis perdiendo de tanto, Mis pequeños, por vuestra falta de Fe y confianza en Mí, vuestro Dios.

Estáis tan apegados al mundo, pensáis solamente en vuestro bienestar corporal, se os está quitando aquello en lo cual confiáis, que son los valores del mundo. Os estoy llevando a un ayuno mundial, ¡entendedlo! Cuántas veces no veis en las Sagradas Escrituras que, para alcanzar la perfección, Yo pedía ayuno y oración, penitencia, hermandad, fraternidad y ahora os estoy llevando a ello, porque no quisisteis entender por las buenas, no os quisisteis dar y, ahora, os daréis forzados por Mi Amor y entendedlo así, seréis forzados a ser purificados porque os amo. El Padre sigue amando a los hijos, aún cuando los castiga. Seréis castigados para que alcancéis la perfección.

Aceptad, pues, el castigo que se os vendrá, lo merecéis, ninguno de vosotros puede arrojar la primer piedra, aceptad pues, vuestras culpas, arrepentios de todo el mal que Me habéis causado a lo largo de vuestra vida.

Entrad en oración y en oración profunda, arrepintiéndoos, de corazón, de vuestra vida pasada, corrupta, malvada, negligente, cruel, mentirosa y regresad a Mí. Grandes regalos tendré posteriormente para vosotros, pero deberéis tener un verdadero corazón, contrito, con un deseo firme de no ofenderMe más y, así es como os ganaréis Mis Bendiciones, Mis pequeños.

Lloraréis, ciertamente, por éste dolor que vendrá, que se permitirá en vuestra vida, pero ésas lágrimas os lavarán de vuestros pecados. Estáis en tiempo de Cuaresma y seguís actuando como si nada pasara en vuestra vida, no hay contrición en vuestro corazón, estáis preparando, solamente, pasar días de vacaciones y nada seguro para enmendar vuestro pecado. Entended Mi dolor, entended Mi preocupación por vuestra alma.

¿Cómo os queréis ganar la vida eterna, si no estáis dando nada?

Os repito, entended que éste ayuno que tendréis, ayuno forzado, penitencia forzada, os dará la libertad, la libertad de donde el pecado os tiene ahora esclavizados. Regresaréis a Mí, vuestro dolor romperá las cadenas, con que os tiene detenidos satanás por vuestros pecados.

Sí, Mis pequeños, quiero ésa libertad para vosotros, quiero ésa libertad espiritual con crecimiento infinito. Apartad vuestro “yo”, enojaos con vosotros mismos y no Conmigo. Vosotros habéis causado el daño primeramente, os causasteis vosotros el daño con vuestros pecados y seguisteis. No quisisteis reparar el daño causado a vuestra alma y Yo os quiero puros y santos, os quiero bellos, como os concebí.

AgradecedMe, pues, ésta penitencia que estaréis pasando, porque luego os daré Mi Perdón y será todo bello, nuevamente, para las almas escogidas de éstos Nuevos Tiempos.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: El valor de las almas, os repito, es el abandono y el olvido, la donación que ellas Me hacen a Mí.
Hijitos Míos, la diferencia entre las almas santas y las almas que todavía no llegan a ése estado, es por la sensibilidad en el Amor. Las almas que han alcanzado la santidad, son muy sensibles al Amor, en cualquiera de sus facetas. Os he dicho que podéis llegar a Mí por muchos caminos, muchos caminos de Amor, pero debéis sensibilizaros y, ahí es donde entra la donación del hombre para el Amor.

Os debéis dejar amar por Mí, pero no debéis detener Mi Amor en vosotros, lo debéis dejar salir y mientras mejor lo dejéis salir, esto es lo que os va perfeccionando para que alcancéis la santidad.

Si vosotros dejáis salir solamente una pequeña parte de Mi Amor, el resto lo retenéis y ya con eso estáis contaminando Mi Amor, ya no son obras perfectas, porque no está fluyendo Mi Amor en totalidad. Las almas santas son aquellas que se hicieron a un lado, que ya no pusieron nada de ellas mismas, simplemente se abandonaron a Mi Voluntad, ése es el valor de las almas santas, el olvido a sí mismas, el dejarMe a Mí, que obre a través de ellas, como instrumentos perfectos. De ésta forma, Mi Amor sale en pleno, sale en el cien por ciento y, así, es como, no solamente, Mi Amor saldrá, sino todas las obras de Mi Amor, éstas almas santas, también realizan ésos milagros que vosotros veis, pero que realmente son Míos, veis a la persona, pero todo es Mío, el valor de éstas almas, os repito, es el abandono a Mi Voluntad.

Ellas Me llevan y Yo aparezco, dan su nombre, pero Yo estoy atrás, respaldando todo. Vosotros las habéis elevado a los altares, pero es por Mi Gracia. El valor de las almas, os repito, es el abandono y el olvido, la donación que ellas Me hacen a Mí, respetan Mi Presencia en ellas, pero ellas reconocen que es un honor ser movidas por Mi Voluntad, reconocen Mi Perfección, Mi Sabiduría, Mi Infinitud, Mi Omnipotencia y, al ver todo esto, ellas se abajan totalmente, porque saben que no son dignas de que Yo, vuestro Dios, les pida que sean instrumentos Míos.

En vuestra soberbia, Mis pequeños, no queréis entender todo esto. Si vosotros Me pedís una humildad a toda prueba, pero una humildad que viváis de corazón, que purifique todo vuestro ser, es cuando vais a entender lo que es Mi paso por las almas, es cuando entenderéis lo que éstas almas santas entendieron, el honor de servirMe verdaderamente a Mí, vuestro Dios y éstas almas, en su olvido, no están perdiendo, se están perdiendo ellas en el mar de Mi Omnipotencia, en el océano tremendo de Mi Amor. Éstas almas ganan infinitamente, no pierden. Entended esto, Mis pequeños, para que aprendáis de éstas almas santas, que os volváis como ellas y que recibáis Mis regalos infinitos de Mi Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Pronto vendrá aquél que usurpará Mi Nombre, tened cuidado, Mis pequeños.
(Lenguas…) Hijitos Míos, pronto vendrá aquél que usurpará Mi Nombre, tened cuidado, Mis pequeños, porque si os estoy llevando a una purificación con un ayuno, con una penitencia que todos padeceréis, aquél, el falso, el mentiroso, vendrá usurpando Mi Nombre y os llevará nuevamente al gozo material.

Tened cuidado, Mis pequeños, leed las Escrituras y veréis que es a través del camino de la Cruz como conseguís la vida eterna.

Estáis todavía en el mundo, y el mundo y los gozos del mundo y sus pecados, no os pueden llevar a la vida eterna, os llevan a la destrucción y a vuestra condenación.

Aquél que actúe en contra de los preceptos ya dados por Mi Hijo, no es el verdadero, pero es la conveniencia del hombre la que siempre va por aquello que es más fácil, más placentero, más cómodo y por eso tantas almas serán arrojadas de la faz de la Tierra.

Ciertamente ésta es una prueba de Fe y de amor hacia Mí, vuestro Dios, y que pocas almas la pasarán, las almas que aceptarán la Cruz, que aceptarán el dolor, que se unirán a Mi Hijo y que, por ellas, otras muchas se salvarán. Nuevamente será una donación de Amor, como la donación que tuvo Mi Hijo para vosotros.

Son tiempos difíciles, pero son tiempos de oración profunda, son tiempos de olvido de la carne, sus placeres y sus comodidades, para que volváis a la verdadera vida, que es la del espíritu, que engrandecerá vuestra alma, que la hará digna nuevamente a Mis Ojos.

Tened cuidado, pues, Mis pequeños, de aquél que os traicionará, de aquél que os prometerá bienestar, y que luego os traicionará. Estáis avisados, para que no caigáis en el error.

Pedid Sabiduría y Discernimiento Santos, para que podáis daros cuenta si estáis viviendo en la Verdad ó en el error a donde os lleva satanás. No aceptéis las conveniencias de vuestro cuerpo, si ellas os van a llevar a la condenación eterna de vuestras almas. No despreciéis el dolor que se os está dando para vuestra purificación, ya que el otro os engañará, para que no tengáis sufrimiento en vuestro ser. El dolor, cuando lo unís a los de Mi Hijo, os vivifica, os santifica, cuando despreciáis el dolor, cuando no lo permitís en vuestra vida, le dais vuelo a la carne y a sus pasiones, le dais vida a todo aquello que traiciona el bienestar de vuestra alma.

Tened cuidado, Mis pequeños, tened cuidado con la serpiente antigua, que se manifestará en breve.

Venid a Mí ante toda duda que tengáis. Yo os llevaré por caminos seguros. Soy vuestro Padre y vuestro Dios y, entended, que sois niños que necesitan la Guía Sabia de su Padre. No vivís solos, vivís para Mí, vuestro Dios y para el Bien de vuestros hermanos. Vivid en el Amor y entenderéis Mi Obra sobre la Tierra.
Gracias, Mis pequeños.