Ene 28_05 “Vuestra distracción causa dolor a Mi Corazón, muchas veces no os dais cuenta de…”

Mensaje.

Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo, a J. V.

Temas:

  • Lo que más Me importa, es que Me tengáis presente en lo que hagáis, al ofrecerMe cada acto de vuestra vida.
  • Vuestra distracción causa dolor a Mi Corazón, muchas veces no os dais cuenta de lo que estáis haciendo, estáis dañando a Mi Corazón.
  • Lo que viene de Mí, siempre es sencillo, se da a la luz del conocimiento de todos aquellos que quieren acercarse a Mí y lo que le doy a uno, se lo doy a otro.
  • Tened siempre presente a Mi Madre en vuestra vida, para que Ella os vaya llevando hacia esa perfección en el Amor.
  • Es la atención que ponéis a Mi Presencia en vosotros, lo que más importa porque Yo siempre habito en vuestro corazón.
Primer Misterio.
Habla Dios Padre,
Sobre: Lo que más Me importa, es que Me tengáis presente en lo que hagáis, al ofrecerMe cada acto de vuestra vida.

Hijitos Míos,  quiero que entandáis esto perfectamente: Cada uno de vosotros al venir a la Tierra a servir a vuestro Dios, se os han dado Dones, se os han dado capacidades espirituales para que vayáis transformando todo lo que está a vuestro alrededor. Ir transformando todo aquello que ha sido trastornado por el mal.

Vuestra propia transformación viene de vuestra libre voluntad en acercarse a Mí, en tomar de Mí todo lo que necesitáis.

Deis mucho ó deis poco, Yo os seguiré Amando. El pequeño niño es amado por sus padres, consentido por sus padres, y de igual forma Yo os consiento, os voy mimando. Cuando hacéis vuestra tarea de todo corazón, eso Me causa gran alegría. Ciertamente si dais más, si os comprometéis realmente con vuestra misión, Yo os premiaré grandemente, si dais menos, también tendréis vuestro premio, pero Mi Amor nunca se alejará de vosotros.

Os vuelvo a repetir, hayáis dado mucho hayáis dado poco, Yo estaré siempre con vosotros y agradeciéndoos de corazón lo que por Mi hacéis en vuestros hermanos y para engrandecer Mi Reino, llevando Mi Palabra, Mi Presencia, Mis Enseñanzas en vosotros mismos y dándola a vuestros hermanos.

Mi Amor es Infinito, y así os Amo, infinitamente.

Sed más constantes en la oración, en la donación, en el compromiso de llevar a cabo vuestra misión lo más perfecta posible. Yo purificaré y santificaré vuestros actos, pero lo que más Me importa, es que Me tengáis presente en lo que hagáis, al ofrecerMe cada acto de vuestra vida. AgradadMe, Mis pequeños, que Yo sé pagar grandemente.

Venid a Mí confiados, Yo no os voy a regañar, no os voy a golpear, simplemente venid a Mí y dadMe lo que tengáis en vuestro corazón, aunque sea una palabrita ó aunque Me mostréis las grandezas que hayáis hecho en vuestra misión.

Soy un  Dios Justo, pero Bondadosísimo. LlenadMe de vuestro amor, colmadMe de vuestro amor y esto lo lograréis cuando, de vuestro corazón, corazón sincero y honesto, Me entreguéis vuestras obras y vuestra vida.
Gracias, Mis pequeños.

 

Segundo Misterio.
Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Vuestra distracción causa dolor a Mi Corazón, muchas veces no os dais cuenta de lo que estáis haciendo, estáis dañando a Mi Corazón.

Hijitos Míos, al vivir en el mundo, vosotros por necesidad sufrís. Al estar todo afectado sufrís como Yo sufrí.

Ciertamente hay varios tipos de sufrimiento, pero hay sufrimientos mayores que son los del corazón. Cada uno de vosotros ya los habéis  padecido.

Este tipo de sufrimientos muchas veces bloquean al alma para con su Dios. Son sufrimientos grandes, es donde la prueba es mayor.

Debéis uniros Mis pequeños, Conmigo, porque Yo ya sufrí por vosotros, os levanté y de Mí ahora podéis tomar todo lo necesario para que podáis soportar vuestros dolores, para Yo santificar el dolor. Podéis hacer grandes cosas. Es difícil poder aceptar el dolor en la vida de una persona, pero vuestra naturaleza humana no puede prescindir de ello. Así que, ¿por qué sufrir cuando podéis vivir por el sufrimiento?.  Suena incongruente, es cierto, vivir con el sufrimiento, pero es cuando unís vosotros vuestros problemas, vuestros dolores, vuestras caídas a las Mías. Yo os doy Vida, Yo os Vivifico, porque Yo tomo ése dolor con los Míos y los uno a Mis méritos.

El sufrir no lo vais a poder separar nunca de vuestra vida, ni aún cuando amáis profusamente. El corazón se vuelve más sensible cuando se ama y por eso se sufre más cuando se ama, porque los pequeños detalles, ya no digamos los grandes, van a ser continuos. Esos detallitos de falta de atención, de grosería ó de maldad van a hacer sufrir grandemente al alma que ama.

Si vosotros sufrís así, tratad de imaginar Mi Corazón, que es todo Amor. Al ser la Perfección del Amor, sufre constantemente, debido a vuestros pequeños detalles negativos. Sí, muchas veces, vuestra distracción causa dolor a Mi Corazón, muchas veces no os dais cuenta de lo que estáis haciendo, estáis dañando a Mi Corazón.

Por eso os he pedido que constantemente estéis acercándoos a Mi Corazón, pidiendo disculpas por tanta distracción vuestra y de vuestros hermanos.

Yo os Amo Infinitamente y ¡Cómo desearía tener almas que Me amaran constantemente, que no se separaran de Mí, que Me amaran en todos momentos!. Tratad de entender Mi Amor.

Si así lo queréis, pedidle a Mi Santo Espíritu de Amor, que os enseñe, que os haga profundizar en éste Misterio de Amor, para que os haga entender, aunque sea un poco Mi sufrimiento Divino, que Me causáis vosotros, Mis pequeños.

Esto os digo para que cuidéis vuestros pasos, para que cuidéis vuestras palabras, para que cuidéis vuestra mente, para que estéis atentos con lo que hacéis a vuestros hermanos, porque eso repercute en Mi Corazón.
Yo puedo perdonar todo y de hecho lo hago cuando el alma viene arrepentida a Mí, pero necesito, Mis pequeños, que vuestro acto de contrición sea verdadero y que luchéis por lo que prometéis en vuestro acto de contrición.

PedidMe más amor, pedidMe más entendimiento para conocer Mi Amor en lo profundo, en donde las fibras más delicadas de Mi Corazón, son tocadas por las almas escogidas y allí es donde más Me duele, en aquellas almas en donde he puesto Mi Confianza, a las que he consentido más y Me dan la espalda y Me atacan.

Venid a Mí, para enseñaros a amar a vuestro Dios, para que aprendáis a consolarMe, para que aprendáis a convivir Conmigo, en ese cuartito, en donde invito solamente a los más íntimos. Sed de Mis íntimos, mis pequeños, os invito, sed Mis íntimos para que aprendáis a enjugar Mis lágrimas, para que aprendáis a dar alegría a vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños.

 

Tercer Misterio.
Habla Dios Padre,
Sobre: Lo que viene de Mí, siempre es sencillo, se da a la luz del conocimiento de todos aquellos que quieren acercarse a Mí y lo que le doy a uno, se lo doy a otro.

Hijitos Míos, los ardides del mal son numerosos, no os dejéis engañar por él, especialmente cuando os digan que os enseñarán cosas secretas, misterios divinos. Obviamente atraerán vuestra atención, porque el hombre fácilmente cae ante la soberbia del ser más ó del ser mejor ante sus hermanos, por presunción más que por servicio, siempre os van a presentar esa manzana de la tentación en donde estarán esperando que la mordáis y será el anzuelo que mata, como al pez.

Lo que es Mío, lo que viene de Mí, siempre es sencillo, se da a la luz del conocimiento de todos aquellos que quieren acercarse a Mí y lo que le doy a uno, se lo doy a otro.

Si en el mismo Cielo, en Mi Reino no hay misterios, es el conocimiento infinito que Yo le doy a las almas ¿Por qué Yo habría de hablar de misterios para vosotros y para vuestros hermanos aquí en la Tierra? Lo único que hace eso es atraer vuestra atención, jalaros, llevaros por sendas del mal, porque no solamente os van a atraer para daros ese supuesto misterio ó conocimiento de lo oculto, sino, vuestra soberbia os llevará a buscar más y más de esos misterios, que son realmente mentiras de satanás.

Sed sencillos, sed abiertos, amad de corazón, en lugar de buscar misterios que hará que os mantengáis en vosotros mismos porque, como serán vuestro tesoro, ya no trabajaréis para los demás, os envaneceréis y caeréis en pecado y eso os va a llevar a una destrucción espiritual profunda.

Os repito, los que es Mío, Yo lo di a luz pública, para que todos vosotros tomarais de ese Alimento de Vida. Lo que es del enemigo se vive en lo oscuro, lo aprenden unos cuantos, es un conocimiento egoísta, que os llevará a una falsa riqueza material, espiritual ó ambas y con eso perderéis las bondades de vuestro corazón, especialmente la Caridad para con los vuestros.

Os he dicho que Mis grandes Misterios de Amor se les da a los pequeños, a los que son como niños, porque esas grandes Revelaciones, esos grandes Misterios, como vosotros los nombráis, los entienden solamente los niños. Sed sencillos y Yo podré hacer grandes cosas en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

 

Cuarto Misterio.
Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Tened siempre presente a Mi Madre en vuestra vida, para que Ella os vaya llevando hacia esa perfección en el Amor.

Mis pequeños, éstos son tiempos de Mi Madre, la Siempre Virgen María. Ella conoce también vuestro corazón, el corazón, de los hombres. Ella también Amó y os sigue Amando. Ella, como creaturita escogida del Padre, Creada por la Trinidad de una forma Santísima, Perfecta, conoce las necesidades del hombre, todas sus necesidades. Éstos son Sus Tiempos, en los cuales buscará el bienestar para sus hijos.

El amor de una madre es muy generoso, se da en totalidad, al grado de que puede darse para que su hijo se salve, prefiere la muerte de ella, antes que la muerte de su hijo.

Tened alma de madre, Mis pequeños, para que os podáis dar como Ella se dio y se sigue dando, para que podáis ser comprensivos como ellas lo son, tratan de excusar todo, el comportamiento malo de sus hijos lo tratan de esconder para que no lo vean los demás. Una madre siempre va a querer lo mejor para sus hijos.

La mujer tiene una sensibilidad especial que Yo he puesto en su corazón, y esa sensibilidad la debéis pedir todos vosotros, varones, para que actuéis también para Mi Obra, para que tengáis esa sensibilidad para defender a vuestros hermanos en su juicio personal, ayudándoles a que comprendan su vida, el porqué de su vida, el porqué de su misión.

Mi Madre os trae a Mí, y Yo os llevo al Padre, Mi Madre conoce Mi Corazón y Me consiente, Me Ama y al saber perfectamente lo que quiero, atrae hacia Mí las almas ya educadas por Ella, para que Yo Me deleite.

Tened siempre presente a Mi Madre en vuestra vida, para que Ella os vaya llevando hacia esa perfección en el Amor, acudid constantemente a Ella.

Orad por aquellos que la desprecian porque han sido engañados por el maligno.

Orad por aquellos que la aman, para que Su Amor llene la Tierra.

Quitad de vuestro corazón la duda, éstos son los últimos momentos de la bestia, manteneos en la confianza que os da Mi Amor, que os da Mi Madre. No os separéis de Ella, que Ella podrá dar su Vida por defender a cada uno de vosotros. Dejaos acompañar por Ella en vuestra vida, porque Ella perfecciona las almas que en Ella confían. Os Amo Mis pequeños y os Amo también con el Corazón de Mi Madre.
Gracias, Mis pequeños.

 

Quinto Misterio.
Habla Dios Padre,
Sobre: Es la atención que ponéis a Mi Presencia en vosotros, lo que más importa porque Yo siempre habito en vuestro corazón.

Hijitos Míos, al hombre le encanta llenarse de cargas extras, de fardos pesados, que además de que no les permite caminar seguros caen, ó se preocupan de ésas cargas.

Ésas cargas vienen a ser todas las cosas de la Tierra, las riquezas, las preocupaciones por sus posesiones materiales, sus ahorros, lo que ellos han hecho en su vida.

Es más, la misma apariencia que dan a los demás, todas esas cargas que llevan una máscara enfrente, tarde ó temprano, vuestros hermanos verán vuestra realidad. Yo estoy viendo vuestra realidad desde mucho antes.

Aprended, Mis pequeños a desprenderos, de esas cargas inútiles, de esas apariencias que dais ante vuestros hermanos, porque eso quiere decir que vuestro corazón está vacío de lo que más vale, que es Mi Presencia en vosotros. Es la atención que ponéis a Mi Presencia en vosotros, lo que más importa porque Yo siempre habito en vuestro corazón, pero no Me atendéis a Mí, a quien deberíais mostrar a los demás.

Es mucha la carga del hombre y no os permite caminar seguros, no os permite servirMe en totalidad.

Traedme vuestras cargas, descansad ante Mí. A Mi no Me podéis engañar. DejadMe todo aquello que os está causando desasosiego. DejadMe aconsejaros y dejadMe aliviaros de toda esa necedad humana.

Una sola cosa es lo que necesitáis para manteneros seguros en el mundo, seguros y firmes y es Mi Amor.  Al vivir Mi Amor, que ésa es Mi Voluntad para el hombre, entonces tendréis todo y vuestra carga será ligera. No hay nada más ligero que el Amor y no hay nada más bello y más reconfortante, más valioso que tener ese tesoro de Mi Amor en vuestro corazón.

¿Por qué os llenáis de cosas inútiles, cuando podéis tener lo más grande y no lo buscáis? Meditad, meditad profundamente y con la verdad y así creceréis.
Gracias, Mis pequeños